Adam
Podrían pasar los minutos, horas, días e incluso meses y no superaría la noticia de David, por eso Cassandra estuvo visitándonos muy seguido, no la culpo ella no quería sentirse sola o deprimida, sé que la noticia nos golpeó muy duro e hicimos lo que él nos pidió y le estamos dando su tiempo, no es recomendable alterarlo, sin embargo mientras hacíamos eso también nos fuimos uniendo más, una relación es algo nuevo para mí, después de seis años vaya que sí es difícil.
A ella y a mí nos ha tocado ser pacientes y hablar mucho, hay veces que la llevamos a su departamento muy tarde, porque nos es difícil dejarla ir, mis campeones y yo hemos aprendido mucho de ella y mentiría si no acepto que nos salvó de hacer todo este proceso solos, hay noches en que mis chicos se van a dormir y solo nos quedamos hablando en la cocina, mientras recogemos todo el desastre que quedó del día. Es usual que discutamos un poco respecto a que todo lo quiere hacer sola cuando en realidad ahora me tienen para apoyarla, sin embargo, estos momentos son lo que hacen que todo valga la pena.
Veo como los cuatro juegan a algo muy estilo pictionary en la nueva sala que Cassandra se encargó de personalizar, debo admitir que lo que hizo en estas semanas con la casa ha sido maravilloso, los colores que eligió hacían que luciera justo como yo quería, como un hogar y no como el viejo lugar de soltero, eso calienta mi corazón, darme cuenta que se ha integrado con nosotros.
— ¿Pedro Páramo? —le pregunta Jace a Jake que está dibujando en la pequeña pizarra.
— ¡La comunidad del anillo! —grita Cassandra completamente animada.
— ¡Sí! ¿Cómo Pedro Páramo? ¿no ves el anillo aquí? —reclama el pequeño Jake señalando su deforme circulo, quizás dibujar es un talento que solo Jace posee al parecer.
— Bueno, yo creí que era Narnia—se mofa Jared.
Reviso mi celular que ha marcado el mensaje de mi hermano Nico, raramente me manda mensajes fuera del trabajo siempre llama para asegurarse de molestar lo suficiente.
NICO:
La familia COMPLETA se dirige a tu lugar, prepara a la princesa Mérida si está contigo, que seguramente así es.
Me reí un poco, desde que mi sobrina Lía la llamó princesa Mérida mis hermanos la llaman así para molestar, ahora Nico también sabe de mi relación con Cassandra, solo no se la he presentado como mi novia personalmente y entonces lo entendí ¡Mi familia venía aquí! Justo donde está Cass, una Cassandra que ellos no saben que es mi pareja. Lo mejor es dejarle decidir si quiere que esto se sepa así que me acerco a ellos aun con la sonrisa en mi rostro.
— Bien chicos, es un anillo y ahora vamos empatados ¿Cómo se arregla esto? —interrumpo a Cassandra antes de que comiencen otra ronda.
— Campeones ¿Podemos hablar? —los cuatro me ven extrañados cuando me uno a ellos dejando a cada uno su vaso de bebidas, Cassandra y yo tenemos una taza de café mientras que los chicos escogieron un jugo de sandía.
— No es que no queramos hablar, pero estábamos a punto de ir a muerte súbita—se queja Jace.
— ¿Qué tal después de esta ronda? —lo apoya Jake.
— Piensa que nos puedes tener más concentrados si terminamos esto—me trata de convencer Jared, niego mientras me siento a lado de Cass.
— ¿No puede esperar un poco? —es la pregunta de la misma Cassandra la que me sorprende.
— Lo que pasa es que...—no pude terminar de hablar cuando el timbre de la puerta sonó— Bueno, intenté advertírtelo cariño—beso los labios de Cass antes de levantarme para abrirle a mi familia.
— ¿De que estás hablando? —parece confundida hasta que abro y los veo a todos ahí parados.
— ¡Oh! ¡Adam! Como hace tanto que no vas a nuestros viernes familiares decidimos darte esta sorpresa en tu nuevo hogar—dice mi madre que entra sin dudar un poco, me agacho para que bese mi mejilla y acomode mi cabello solo se detiene cuando ve a la hermosa pelirroja que está en la sala con mis campeones— ¿Cassandra?
— Hola señora Miller—mi madre no se hace de esperar para ir y agarrarla en un enorme abrazo.
— Lo bueno es que solo la ayudabas a bajar del auto—se burla mi hermana Azul pasando a la casa.
— Bueno, ¿No son adorables? Ya soy fan de ustedes dos ¿Cómo debería llamar a su ship? ¿Adassy? ¿Cadam? Bueno, tal vez sus nombres no vayan bien juntos, pero ustedes sí—dice una muy emocionada Brooke, a diferencia de la ultima vez ahora sí se le nota su muy, pero muy embarazado vientre, así que se une a las demás sin perder un segundo más.
— No digas que no te advertí—pasa Nico con el celular en la mano, aun me sorprende que todavía esté con nosotros, no suele pasar de un mes en casa. Le susurro un leve "gracias" para que no lo alcance a escuchar.
— ¡Brooke! Te dije que me esperaras, no puedes correr en ese estado—llega Will gritando con mis dos sobrinos en brazos, la pequeña Lía no para de reír mientras que Liam parece verdaderamente enojado con su mamá— Intente convencerlos hermano, lo siento, pero ya sabes cómo es mamá.
A diferencia de mi hermano mi padre solo entra en silencio mientras me da un abrazo, después de eso comienza a caminar por toda la casa para examinarla, veo como todos se han acomodado perfectamente, papá ahora está ayudando a mamá para desempacar algunos comestibles.
— ¡Sorpresa Zio Adam! —el pequeño Kian, hijo mi hermana Azul y Jayden llega bajando una cesta de muchas frutas.
— ¿Cómo estuvo la mudanza? —me pregunta a modo de saludo Jayden, lo veo y luce más cansado de lo usual.
— Pues fue pesado, pero no puedo quejarme porque tuve la mejor ayuda de todas—me sonríe levemente y eso solo me preocupa— ¿Te encuentras bien Jayden?
— Sí, es la empresa de mis padres, todo estaba hecho un caos. Cuesta trabajo volver a levantarla, sabes al principio no vi lo complicado que esto es, además eso molesta a princesa—antes me parecía ridículo que le llamara a mi hermana "princesa" solo ahora comprendo el sentimiento.
— ¡No me importa! Habla con ese proveedor ahora mismo no quiero tener que ir a decirte como hacer tu trabajo—Llega Marcos pasándonos de largo mientras habla por el celular.
— ¿Sigue enojado? —le pregunto a Jayden con un tono preocupado.
— No solo eso, también dejó de ver a Ada cuando se dio cuenta de la boda. Ese chico es un caos ¿Te das cuenta de lo que podría hacer si ella realmente se casa? —pregunta mientras pasamos a la casa y le ayudo con las miles de bolsas que anda cargando.
— Tampoco lo veo haciendo algo para detenerla entonces no tiene mucho derecho a comportarse como un idiota.
— Bueno, es el amor de su vida, pero mientras no lo quiera aceptar no podemos ayudarlo en mucho—responde Jayden acoplándose fácilmente a la conversación.
Los niños se han ido a jugar en el enorme jardín mientras que mamá se encarga de acomodar las mesas plegables en el patio y papá comienza a sacar unas sillas. Volteo a todos lados y me tranquilizo cuando veo a Cassy hablando animadamente con Azul y Brooke.
— Si necesitas que te ayude, puedo asesorarte de como funcionan ciertos aspectos contables de la empresa—me sonríe en forma de agradecimiento.
— Princesa me contó que eligió contabilidad por ti, que veía tu amor por los números.
— Es mi hermana pequeña, pero eligió contabilidad no por mí, sino por su brillante cabecita. Desde muy chica me ayudaba en mis tareas—comenzamos a sacar las cosas cuando las ponemos en la mesa, Cass me voltea a ver y parece un poco asustada así que me acerco a ella.
— Tranquila cariño, todo saldrá bien—le susurro llevándola a la lavandería.
— Adam, esto es diferente ¡Es toda tu familia! Y no tienes una familia para nada pequeña.
— Es también tu familia Cassandra y no lo digo por presionarte o algo más, ellos ya te tomaron cariño así que independientemente de lo que pase con nosotros ellos te amaran.
— Me han visto solo una vez, dos con esta ¿Cómo me pueden tomar cariño? —se ve estresada y no me gusta, quiero aliviar esa expresión de miedo.
— Cariño, ¿Quieres que no les diga de nuestra relación? —sin quererlo mi tono de voz parece herido, quiero que no quiera.
— Adam... no es eso—toma un largo suspiro antes de estirarse para besarme, la ayudo un poco tomándola de la cintura para levantarla y sentarla en la lavadora, el beso comienza a intensificarse hasta que escucho la voz de mi hermana.
— ¡Mamá! ¡Adam encerró en la lavandería a la princesa Mérida! —Cass se aleja de mí lo más rápido que puede y yo no paro de reír, parece que lo lista no le quita lo entrometida.
— No sé como le planeas decir esto a toda tu familia—se ríe un poco conmigo Cass.
— Cariño, eres perfecta y ellos solo te amaran más—le ayudo a bajar, una vez que su cabello está ordenado y mi camisa no tan desarreglada salimos tomados de la mano, no ayuda que todos estén parados afuera de la puerta y nos vean como animales en exposición.
— ¿Tienes algo que decirnos Adam? —la voz de papá suena divertida, mamá parece muy emocionada antes de que siquiera diga algo.
— En realidad sí, Cassandra es mi novia desde hace algunas semanas—y con eso estallan, hay muchos ¡sí!, aplausos y todos me quitan a Cassy para abrazarla.
— Gané, me debes doscientos—escucho que le dice papá a mamá, voy con ellos cruzándome de brazos.
— ¿Volvieron a apostar?
— Sí, tu madre dijo que esto era de máximo cuatro días, yo le dije que eran unas cuantas semanas
— ¿Ustedes sabían que esto pasaría? —pregunto sorprendido.
— Hijo—mamá atrapa el pequeño cuerpo de Cassandra y toma su mano para ponerla sobre la mía— Creo que hablo en nombre de todos cuando digo que esto nos hace felices, mi chico grande merece ser feliz y no podría pedir mejor mujer que tu Cassandra.
— Cariño no llores—le pido a Cassy atrayéndola a mi pecho.
— No estaba llorando, me entró una basurita en el ojo—ella y su complejo de ser una chica dura.
— Bueno, ya tengo dos hijas con Azul y Brooke, pero estaré feliz de recibirte en nuestra familia—me siento orgulloso cuando es el turno de papá para abrazarla y sus palabras le hacen mucho bien a Cass— Te diré un secreto Cassandra, todos estos fueron mis pequeños un día y eso hace que mi esposa y yo los conozcamos muy bien por eso sabemos que cuando ellos nos presentan a alguien es porque es la indicada, en el caso de Azul Jayden fue el indicado, con Will fue Brooke la indicada, no dudo que ahora tú y Adam son buenos juntos y cuando a esos dos barbajanes les llegue su hora será la indicada—señala a un Marcos embobado en el celular y a Nico negando con la cabeza.
— Déjalos respirar, ya caerán. Bueno uno de ellos ya lo hizo solo no lo acepta—asegura mi mamá.
Toda la tarde fue perfecta, con mis campeones jugando a lado de sus primos y prima, yo viendo lo mucho que Cassandra encajaba con nosotros y la libertad de por fin poder abrazarla.
— Tuviste suerte—le dice Brooke a Cassandra cuando estamos todos en la mesa comiendo por fin— Adam es el más sensato de todos los hermanos hombres Miller, porque Azul es otro asunto—todos se ríen y solo a mis hermanos nos les parece gracioso.
— Tú tuviste también mucha suerte conmigo—se queja William besando levemente a Brooke.
— Claro que sí cariño, pero nosotros fuimos un poco diferentes.
— ¿Ya sabe David de ustedes dos? —pregunta de golpe Marcos haciendo que Cassy se tense a mi lado. Mi amigo no quiso que nadie más supiera de su enfermedad y hasta el momento hemos respetado eso.
— No, fue hecho una furia a mi oficina—se ríe Will— ¿Cómo terminó eso? —iba a responder para que Cassandra no se molestara, pero como siempre me sorprendió con su fortaleza.
— Llevó tiempo, pero al final podría decirse que nos dio su bendición—sus palabras son suaves y es obvio que no está cómoda, por eso agradezco cuando interrumpe mi madre. Pude sentir a mi hermosa chica pelirroja tranquilizarse otra vez.
— Ya basta chicos, yo también tengo noticias, Allison y su familia vendrán en estos días y aceptaron quedarse en la casa, por fin habrá gente otra vez—dice mamá muy feliz, me gusta verla de esta forma en lugar de estar triste porque ya casi no vamos a su casa, de ahí nacieron los viernes en familia.
— ¿Quién es Allison? —pregunta Marcos.
— No la conociste hijo, pero su familia nos ayudo mucho en cuando estuvimos en Italia, Adam, Will y Azul fueron buenos amigos de ella.
— Está bien, mientras no les causen problemas—dijo mi hermano volviendo su atención al celular. Sé que mamá lo estaba dejando distraerse de la comida familiar porque él estaba pasando un proceso difícil solo que tarde o temprano lo pondría en su lugar.
— Como sea, mientras no toquen mis cosas—sonríe Nico con la boca llena de comida.
Recuerdo brevemente a Allison, pasaron tantos años que no sé como era físicamente, pero sí sé que estaba feliz cuando vio a mi hermana Azul, ya que según sus palabras a mi familia le hacía falta más chicas.
— Yo necesito ver si mi amado hermano Nico puede cuidar de Liam y Lía —dice inocentemente Will.
— No, ese día estaré ocupado.
— Ni siquiera te he dicho qué día es.
— Ya te dije, ocupado.
— Oh, si ya sabes como es este chico no deberías insistir—le advierte papá a Will.
Siento como Cassandra aprieta mi mano y cuando me giro para verla está sonriendo. Beso su frente entendiendo el sentimiento. La vida es muy buena con la familia y personas correctas.