Por favor leed esto.
Sinceramente no sé cómo haya salido el cap, no es muy largo y me hubiese gustado meter el partido de quidditch, pero no tenía energías. Ya sé que este libro casi no tiene visitas comparado con "Amor entre especies". No sé por qué es ni me importa.
Hay gente que me escribe en los comentarios de ambos libros diciendo que pause éste y escriba únicamente el M-preg porque tiene más vistas. Chicos os quiero mucho a todos, en serio, me hacéis muy feliz comentando y votando, pero no me digáis por favor tantas veces que deje de escribir este libro. Harry Potter es demasiado especial para mi, me ha ayudado infinidad de veces cuando me he sentido sola, y me hace mucha ilusión escribir esto, podría decir que más que el otro libro por el sentido que ha tenido esta saga en mi vida personal.
Nunca me ha importado que lo lea menos gente o que tenga menos apoyo, no me interesa tener millones de vistas y votos. Hay gente que dice "dejad estrellita" y se enfada cuando no tiene muchas, a mi me da igual. Sí digo lo de que dejéis una estrellita en el tablón de anuncios, pero si os gusta el capítulo y tal, y si no tengo ninguna pues nada, qué se le va a hacer. Hay gente que no es de votar y ya, y no me importa que no voten porque nadie debe sentirse obligado a ello. Si bien es cierto que es como decirle al autor que su historia le gusta, a lo mejor no quiere, o se le olvida, o algo. Por eso me guío por las vistas y no por los votos.
Es solo que me harta que muchos lectores me escriban vía mensaje privado o en comentarios pidiendo que termine Amor entre especies y pause esta historia si es que no tengo tiempo de hacer los dos. Y lo lamento por aquellas persona porque si tengo que pausar una de las dos historias será esa antes que mi saga de bnha en Hogwarts.
Siento si sueno borde, pero me deprime mucho que me digan estas cosas. Elimino los comentarios pero vuelven a aparecer y en serio me siento muy mal por ello, porque esta historia la hago con todo el cariño del mundo.
Por favor, lo pido por favor, dejad los mensajes los que lo hacéis, porque si sigue así, eliminaré mis historias, todas. Y me dará mucha pena por la gente que solo lee y las disfruta, pero por ciertas personas me veré obligada a hacerlo si la situación continúa.
Sin más que decir, lamento si el capítulo os decepciona, pero quería traer algo al menos, sobretodo porque se que hay gente de España y aquí estamos en cuarentena total sin poder salir de casa.
Las fiestas pasaron rápido, y pronto estaban en el tren camino de Hogwarts. Iban en el mismo vagón todo el grupo de tercero, bueno, casi todos, con un hechizo aumentador.
-Nicky y Tsuki sé que iban a estar en otro compartimento, pero... Faltan Tetsu, Shoto y Kaminari.-Momo estaba sentada junto a Jirou, mientras la pelimorada comía una barrita de chocolate.
-Creo que vi al Pikachu antes, pero no me dio tiempo a saludarle. De Sho y la copia de Kirishima ni idea.-Explicó Uraraka, mientras leía un libro de Adivinación.
Se quedó ahí la conversación, y siguieron bromeando un rato antes de que la puerta se abriese y los tres faltantes entrasen.
-¡He perdido a Pika!-El rubio estaba al borde de la histeria, queriendo seguramente saltar fuera del tren en marcha por no encontrar a su preciada rata.
-Lo hemos estado buscando. Al parecer cierto gato lo estaba persiguiendo.-Todoroki sostenía a Sansa en sus brazos. El gato tenía una carita inocente, pero Kaminari lo asesinaba con la mirada.
-Seguro ha asustado a mi podre Pika, es una ratita, ¡¿por qué solo va contra ella?!
-Te lo estarás imaginando idiota. Los gatos comen ratas, es algo normal.-Jirou le miró, con una sonrisa burlona.
-Os digo que no. Hay más ratas en el castillo y nunca las persigue a ellas. Pero siempre intenta matar a mi pequeño Pika.
El chico se sentó enfurruñado en una esquina del compartimento, a un lado de Mina, que le dio un dulce como si se tratase de un niño pequeño. Todoroki le dio su gato a Sero, que comenzó a mimarlo, y él y Tetsu se sentaron frente a Iida, hablando del mundial de quidditch de ese verano.
El trayecto fue relativamente corto, y llegaron al castillo, yendo cada uno directamente a su habitación. Kirishima fue todo el rato consolando a Denki porque el chico seguía sin encontrar a su rata y estaba desesperado.
No tardaron en dormirse, con las cosas preparadas para las clases del día siguiente.
***
Llegaron por los pelos a la clase de Aizawa, y se sentaron en su sitio. Kirishima estaba totalmente exhausto por haber tenido que correr por todos los pasillos, así que tenía su cabeza apoyada en la mesa, mientras que la poción se cocía en el caldero.
-Kirishima, cinco puntos menos para Gryffindor por dormir en clase.-El pelinegro le dio un golpe en la cabeza con su volumen de preparación de pociones.
El pelirrojo se quejó sentándose mejor en la mesa, mientras escuchaba a Monoma y a los de Slytherin reír, y les fulminó con la mirada.
-Pasa de ellos Kiri, no merecen la pena.-Mina le sonrió y después se giró a ver al rubio y le sacó el dedo medio, cabreada con ese idiota.
Pasaron la clase en lo suyo, y salieron tranquilamente hacia la clase de Defensa Contra las Artes Oscuras. Vieron que los de Slytherin iban por el mismo camino así que por desgracia tendrían que soportarles otra clase.
Entraron en el aula viendo a Hakamata ya allí, junto algunos alumnos que habían llegado antes que ellos. Se sentaron al final de la clase, ya que por mucho que les gustase ir delante para poder disfrutar mejor la clase Mina y Kaminari tenían sueño, y les obligaron a ir hasta los últimos asientos.
Por suerte estaban lejos de grupo de Slytherin así que no tendrían que aguantar las estupideces de Monoma.
El tiempo pasó rápido, y cuando menos quisieron darse cuenta ya había terminado la clase de Defensa. Comenzaron a recoger sus cosas, algunos más rápido porque tenían otra clase y los demás con tranquilidad porque tendrían hora libre antes del almuerzo.
En este último grupo estaban Kirishima, Mina, Bakugo y Kaminari. Sero había tenido que irse porque tenía otra clase extra a la que se había apuntado.
-No sé para qué tiene tantas clases, ni que tuviese que darlas todas.-Denki salió junto a Mina de la clase, dejando a los otros dos atrás.
Kirishima quería ver si ya podía empezar las lecciones contra los dementores. No quería esperar demasiado, porque en poco tiempo sería el siguiente partido, y si la situación seguía así estaba perdido.
-Blasty, adelántate tú. Tengo que hablar con el profe.
-¿Para qué?-El cenizo le miró interrogante, mientras se colgaba la mochila al hombro.
-Es por un tema que le comenté hace tiempo. No es nada malo, así que no te preocupes.
Bakugo asintió, saliendo finalmente del aula, y Eijirou se encaminó al despacho de Hakamata. Tocó suavemente la puerta y se escuchó un "pase", así que la abrió y se asomó al interior.
Su profesor estaba tranquilamente corrigiendo unos exámenes, y al verle pasar levantó la mirada sonriendo levemente. El adulto se puso de pie, dejando de lado totalmente lo que estaba haciendo.
-Hola Kirishima, ¿qué puedo hacer por ti?
-Esto... Verá, usted me dijo que podríamos empezar las lecciones en Enero, y me gustaría saber si puedo comenzar ya.
-Claro, de hecho iba a buscarte después. Ya tengo todo preparado así que vamos.
Le indicó que le siguiese a través de los pasillos del castillo. Kirishima no sabía a dónde iban, y tampoco se molestó en preguntarle a su profesor. Salieron del castillo y fueron cerca del bosque.
-Encontré un Boggart y lo retuve. Lo usaremos para practicar. Un dementor real sería mucho más peligroso, por eso comenzaremos poco a poco.-Kirishima asintió y vio que Hakamata le guiaba a un árbol que tenía un hueco.-Bien, lo primero que debes saber es que esto es magia muy avanzada Kirishima. El hechizo se llama encantamiento patronus. Es... Como un escudo que te protege del dementor, y no le permite acercarse a ti, porque está hecho de un recuerdo positivo. Al estar lleno de los sentimientos contrarios a lo que representa, el dementor no puede acercarse al mago que lo invoca. Por eso se utiliza el recuerdo más feliz que se posee.
Eijirou atendía, algo confundido. No tenía ni idea de qué recuerdo podía llegar a utilizar contra un dementor, porque no es que tuviese muchos recuerdos felices en su vida, pero si quería vencerlos debía esforzarse.
-¿Y cómo es un patronus profesor?
-Bueno, eso depende. Un patronus de cuerpo completo es el más difícil de formar, y para cada persona tiene un significado diferente. El mío por ejemplo es un perrito con el pelo en forma de pinchos. Agresivo pero bastante adorable.-Lo demostró haciendo la forma del animal, y el pelirrojo no pudo evitar pensar en Bakugo al ver a ese pequeño cachorrito con el ceño fruncido.-Bien Kirishima, cuando tengas el recuerdo, di Expecto Patronum. Practicaremos un poco antes de usar al Boggart.
El chico asintió, buscando algo que le trajese alegría, y pensó en su primer partido de quidditch. Ese día se había sentido muy bien, sobre todo al capturar la snitch y ver que todos le alababan por primera vez en su vida. Se concentró todo lo que pudo, dejando que el recuerdo llenase su mente, y gritó el hechizo, pero no pasó nada.
-No te desanimes, inténtalo un par de veces. Recuerda que no todo sale a la primera.
Cerró los ojos, y siguió diciendo las palabras mágicas hasta que escuchó a Hakamata a aplaudir ligeramente.
-Muy bien, has conseguido que brote una pequeña chispa. Para ser un novato no está nada mal chico. Probemos con el dementor.
Hizo un movimiento de varita, y del hueco del árbol fue saliendo lentamente la figura del ser al que tanto terror le tenía Kirishima. El dementor se alzaba imponente ante el pelirrojo, y el chico por poco sentía que se hacía pis encima.
Notaba como todos sus recuerdos alegres, los pocos que tenía, se esfumaban de su mente, y entonces recordó el quidditch. Intentó pensar en ello mientras gritaba nuevamente, pero ni si quiera pudo lograr quedarse de pie unos segundos antes de desmayarse y escuchar una profunda voz: ¡Llévate a Ei, él está aquí! ¡Huye Emi!
-¡Papá!-Se levantó sobresaltado, y vio que estaba en el bosque. El Boggart parecía haber sido llevado al hueco y encerrado ahí por el adulto, que se encontraba a su lado.
-Tranquilo, son recuerdos Kirishima, no te preocupes. Mugen no... No está aquí.
-Yo... Es la primera vez que escucho su voz...-El pelirrojo se extrañó un poco por el tono que había usado su profesor. Parecía decirlo realmente entristecido.
Se limpió algunas lágrimas que tenía en sus ojos, y se puso de pie cuando notó que tenía fuerzas.
-No te preocupes, necesitarás mucha más práctica si es que quieres llegar a conjurar un patronus, pero es algo normal. Inténtalo con otro recuerdo, algo que sea más fuerte.
Cerró los ojos, relajando su respiración. Podía probar con el día en el que Taishiro le dijo que era un mago, el día en que supo que podría escapar de sus tíos y de su primo durante un tiempo al año.
Cuando lo tuvo mentalizado, le hizo una señal y Hakamata permitió al Boggart salir de nuevo.
Le miró a los ojos, bueno, no exactamente porque el monstruo estaba cubierto por una capa, pero más o menos, y gritó con fuerza.
-¡Expecto Patronum!-Algo salió, una pequeña chispa, antes de que el dementor le regresase las voces en su cabeza, los gritos de su madre y la espantosa risa de All For One.
-Creo que es mejor dejarlo por hoy. Lo hiciste my bien, en serio.-El rubio se agachó a su lado, sonriéndole con confianza.-Créeme, no conozco ningún mago que a tu edad pueda hacer esto Kirishima. Siéntete orgulloso, y no te preocupes, seguiremos practicando.
-Profesor, antes, cuando le dije lo de mi padre, usted dijo su nombre. ¿Se... Se conocían?-Le vio suspirar, y cómo en su rostro aparecía una triste sonrisa mientras guardaba su varita.
-Fuimos amigos en nuestra época de Hogwarts. Tu padre fue sin duda un gran hombre, Eijirou. Le debo tanto que jamás se lo podré pagar.
-Y... Entonces, conocería también a Yamada.
Sintió que la había fastidiado completamente. E rostro de Hakamata cambió por completo a uno de total enfado. Era entendible, dado lo que su padrino le había hecho a sus padres, pero no debían saber que él lo sabía.
-No sé por qué intuyes eso, Eijirou, pero sí. También fui amigo de él. Hasta ese día. Ahora será mejor que volvamos, no debes perder el almuerzo.
Kirishima asintió, saliendo de allí rápido tras despedirse de su profesor. Ahora sabía que había conocido a Yamada, tal vez podría sacarle información relevante sobre él.
-¿Dónde estabas? Casi no consigo guardarte pudding Kiri.-Mina le habló molesta, viendo que su amigo llegaba al comedor bastante pálido, y le miró preocupada.
-Lo siento, estaba hablando con el profesor Hakamata.
La chica no quiso indagar más, y todo estaba bastante tranquilo hasta que obviamente alguien lo arruinó.
-¡Pero me prometiste venir conmigo Hanta!
-Ya te dije que tengo que hacer los deberes o suspenderé, no puedo.
Kirishima vio a Kaminari haciéndole pucheros a Sero, pero el pelinegro ignoraba a su amigo, concentrándose en sus pergaminos. La verdad es que esa situación era bastante común esas últimas semanas. Después de todo, Sero era el que tenía más deberes, y nadie sabía cómo lo hacía para llegar a tiempo a todas y cada una de sus clases.
Esa misma tarde mientras hacían un trabajo de Adivinación, el chico rayo comenzó a quejarse.
-Nunca falta a clase pero siempre se va muy rápido. Y me prometió que esta tarde tomaríamos helado, pero de pronto me dice que tiene que hacer cosas de Runas antiguas, y eso es a la misma hora que Cuidado de Criaturas Mágicas... Hanta seguro que se encontró una novia linda y me ha abandonado...
-Dios Denki, no seas melodramático, seguro que tiene que hacer cosas importantes y ya. Pareces novia celosa.
-¡Hanta no es mi novio!
-¡Callaos ya maldita sea!-Bakugo le tiró a su primo un libro, y los miró furioso.-A la siguiente que vosotros, par de cotillas, no me dejéis estudiar os lanzaré una explosión.
Ambos se callaron asustados por las palabras del cenizo, y cada uno siguió a lo suyo para no morir en sus manos.
***
Faltaba una semana para el partido contra Ravenclaw, y Kirishima decidió por fin probar su Saeta de Fuego nueva. En cuanto la llevó por la sala común todos comenzaron a gritar emocionados, rodeando al pelirrojo.
Eijirou logró librarse de ellos al poco y se fue a entrenar al campo, donde no le sorprendió ver a Bakugo.
-¡Blasty, hola!
El cenizo paró un momento de entrenar y miró desde lo alto del campo a su amigo, agitando su mano y regresando a golpear a la Bludger. Kirishima Voló hacia él, notando como Katsuki miraba también su escoba, pero no mencionaba nada. La verdad es que ellos funcionaban así, con una mirada silenciosa Eijirou supo lo que su amigo quería, y ambos comenzaron un partido de uno contra uno.
Estuvieron de esa manera hasta que el sol se puso, bajando al suelo y caminando hacia los dormitorios para cambiarse de ropa antes de la cena.
-Blasty, deberías hacer la prueba del equipo, seguro estarías genial en cualquier puesto.
-No quiero estar genial, quiero ser el mejor. Me gustaría ser cazador, pero los que hay son mejores que yo, así que tenía que seguir entrenando. Pero me presentaré el año que viene.
-¡Genial, así estaremos en el mismo equipo!
Sonrió alegre, viendo que su amigo también lo hacía levemente. Llegaron a la puerta de los dormitorios viendo a Koda estresado frente al cuadro.
-¿Otra vez te olvidaste las contraseñas Koda?-Kirishima se acercó al cuadro también y dijo la que tocaba.
Los tres pasaron y el chico tímidamente le dio las gracias a Kirishima, yendo a su habitación.
-Deberíamos cambiarnos antes de que-
-¡SERO HANTA ESTÁS MÁS QUE MUERTO!
Todos los alumnos de Gryffindor vieron como Kaminari bajaba a la Sala Común con los ojos llenos de lágrimas y con su almohada. El objetivo del chico estaba temblando en una esquina, frente a algunos libros.
-H-hey Denki, ¿qué tal?
-¡De qué tal nada, mira!-Le mostró la almohada. Encima de la misma había restos de sangre, y a Hanta se le fue el color de la cara.- ¡Y había pelos de gato, el único que ha podido ser en Sansa, maldita sea se ha comido a Pika!
Seguramente Sero se hubiese llevado una madriza de no ser porque Bakugo cogió a Kaminari a tiempo, llevándoselo como un saco de patatas mientras el rubio soltaba maldiciones hacia el gato.
-Eso fue intenso, ¿no Sero?-Kirishima se sentó junto a su amigo, que seguía algo en shock por lo que acababa de pasar.
-Y-yo, ahora me siento mal por Denki...
-No te preocupes, a esa rata no le quedaba mucho tiempo. Pika lleva toda la vida en la familia después de todo.-Shoto se sentó a su lado bostezando.
-Aun así, era su mascota, ahora debe de sentirse mal.
***
En ese momento Sero había tenido toda la razón. Durante esa semana Kaminari dejó de bajar a desayunar con los demás, estaba de mal humor y no le dirigía la palabra a Sero, por mucho que él intentó acercarse a su amigo, lo que hizo que Hanta también se pusiese mal.
-O dios, es que son un matrimonio.-Mina estaba desesperada por la situación, porque ahora a ella le tocaba sentarse con Sero en pociones porque Denki ya no quería estar con ellos, y comenzó a quejarse el viernes, mientras cenaban.
-¿Me lo dices a mí? Ya no puedo pasar tiempo con Nicky porque Kami aparece siempre y me separa de él.-Tsuki dejó caer un libro sobre la mesa de Gryffindor mientras arrastraba a su novio detrás suya.
-Ahora que está dormido es el único momento que podemos estar juntos.
-Es cierto, me cae muy bien Den, pero tenemos pocos ratos libres.-El chico suspiró abrazándose a su novia mientras ella le acariciaba el pelo.
-Bueno, se le pasará en algún momento, no puede estar así de por vida.
Terminaron de cenar y se despidieron de la pareja, subiendo las escaleras para llegar a la torre. Cuando llegaron, dijeron la contraseña y pasaron tranquilamente. Los chicos se separaron de Mina al llegar a los cuartos de las chicas, y pasaron al suyo, donde vieron a su amigo ya dormido y babeando la almohada.
No quisieron despertarle así que se cambiaron rápido y se metieron cada uno en su cama, durmiéndose también rápidamente, ya que al día siguiente se levantarían temprano para asistir al partido.
Sin embargo, en mitad de la noche se escuchó un grito de terror, seguido de un golpe que parecía ser de un cuchillo clavándose en la pared.
Kirishima se despertó susurrando un hechizo de luz, y lo que vio en la cama de Kaminari le dejó totalmente pálido por el miedo.