☀︎ Capítulo Quince ☀︎
❝The monsters turned out to be
just trees, and when the sun came
up you were looking at me...❞
Hartley ☀️
El sol se asoma por el horizonte y lo observo con melancolía.
En estos últimos días, todo ha cambiado para mí. Finalmente pude aceptar mi problema, y Cole me ayudó a entender que esa no era la manera de hacer las cosas, de sentirme bien conmigo misma.
Sin embargo, va a llevar más tiempo que eso. Sigo sin quererme, sigo mirándome al espejo y viendo a esa persona que aborrezco con todo mi ser... pero ahora tengo algo que antes no tenía. Ahora tengo esperanza.
Y debo dejar los pensamientos negativos de lado. En estos últimos días, he estado comiendo un poco. Me ha costado, pero lo he hecho.
Y sé que no es mucho, pero es un comienzo. Es algo. Y como dice Julio, vayamos despacio. Él me ha apoyado tanto... y no puedo creer como nunca lo valoré. Él siempre estuvo ahí, pero yo había estado tan concentrada en mí misma que ni siquiera pude notar su esfuerzo.
Y ahora ya es demasiado tarde. Porque el verano ya ha llegado a su fin para mí, y me toca volver con mi madre. Eso significa que no podré volver a verlo hasta el año que viene. Sí podremos hablar por teléfono, pero no es lo mismo.
Estas vacaciones fueron mucho mejores de lo que yo había esperado. Era agradable despertarse y tener a Julio allí para iluminar mi día. En casa de mi madre me siento tan sola...
Lo único que me reconforta es que Cole estará allí. Sé que él estará allí.
-No quiero irme...- digo. Tomo un puño de arena y la dejo deslizarse entre mis dedos. -No quiero ver a mi madre, me odia.
-Lo sé, Solcito. Yo tampoco quiero que te vayas...- Cole toma mi mano y le sonrío.
Esta tarde debo tomar un autobús devuelta a Buenos Aires, porque tengo una cita en el hospital para que remuevan el yeso de la pierna. Eso significa irse dos días antes que Cole, y eso serán dos días sin él.
Sé que no son nada pero me acostumbré a estar con él todos los días, y será algo extraño tener un cambio completo de rutina.
-Iré a visitarte a tu casa, ¿sabes?
-Ni siquiera sabes donde es, -río.
-Pero me dirás, ¿no es así?
-Mm claro.- Le dicto la dirección de mi casa para que la anote en su teléfono y no la olvide.
-Wow, ¡vives en el mismo barrio que Matías!- exclama.
-¿Matías?- pregunto confundida.
-Sip, Matías, es mi mejor amigo. También están Elías y Manuel.
-Ah, claro...- balbuceo recordando aquel día en que Cole y yo nos conocimos, de una manera tan peculiar.
-Ellos son muy divertidos, aunque raros. A veces son como un dolor en el culo, pero se hacen querer.
-Debería irme...- digo cambiando de tema.
-Claro, Hart. Cuídate, ¿sí? Y no olvides comer.
-Lo haré.
Cole se pone de pie para ayudarme, y una vez que me encuentro estabilizada en el suelo me encamino hacia la salida del balneario.
-Espera, ¿a dónde crees que vas?
-¿Qué...?
-¿A dónde crees que vas sin darme un beso?- dice y de un momento a otro nos encontramos frente a frente.
Sonrío fascinada por lo fácil que este chico puede acelerar mi corazón y lo beso dulcemente, fundiéndome en la sensación de sus brazos rodeándome y su aroma masculino envolviéndome.
Nos separamos y Cole apoya su frente en la mía, mientras nos miramos fijamente a los ojos.
-Nos vemos en dos días,- dice.
-Nos vemos en dos días.
☀︎ ☀︎ ☀︎
❝The rest of the world
was black and white... but we
were in screaming color❞
-Hartley, pequeña.- Me habla Julio.
Nos encontramos en la estación de autobús; por más que él se ofreció varias veces a llevarme él, quise ahorrarle la molestia y viajar en el mugroso transporte público. Mi padre no pudo venir porque su trabajo como escribano lo mantiene demasiado ocupado, pero eso ya es costumbre para mí.
-Fue un grandioso verano. Corto, pero grandioso. Me encantó que vinieras aquí, y sabes que siempre eres bienvenida. Te quiero, ¿lo sabes Hartley? Te quiero como si fueras mi propia hija.- me abraza y las lágrimas pican en mis ojos.
-Yo también te quiero...- susurro.
-Te me cuidas, ¿sí?
Asiento con la cabeza. -Adiós.
-Adiós, pequeña.
Me subo al vehículo mostrando mi boleto mientras Julio carga mi maleta en la parte de atrás. Dejo las muletas en el asiento a mi lado y me pongo los auriculares con el nuevo álbum de 5sos, CALM sonando para que nadie me moleste.
A mitad del viaje, tomo una barra de cereales que Julio me dio y, como le prometí, logro comer la mitad.
Luego cierro mis ojos y el viaje pasa volando, mucho más rápido de lo que esperaba, y de un momento a otro ya me encuentro en mi ciudad natal.
Me bajo del autobús lentamente y lo primero que mis ojos ven es a... Salvador, el chofer de mi madre. ¿Cómo se me ocurrió que ella vendría a buscarme?
-Buenos días Hartley.
-Hola...- él me abre la puerta y me subo a la parte trasera coche esperando a que Salvador vaya a buscar mi equipaje; luego partimos rumbo a mi casa.
No estoy lista para ver a mi madre, simplemente no quiero enfrentarla. En mi mente ya puedo oír cómo me gritará y me hará sentirme como basura.
Una vez que me encuentro de pie frente a la puerta de mi casa, Salvador sube las escaleras para dejar mi valija en mi cuarto y luego irse. Yo, sin embargo, soy incapaz de moverme.
-¿Hartley?- escucho que mi madre dice desde alguna habitación de la casa. Su voz se escucha lejana, pero hay algo más, algo raro en la forma en que habla.
Finalmente entro en la casa y cierro la puerta detrás de mí. Lentamente avanzo hasta la sala de estar y me quedo estática allí al escuchar lo que Laura dice.
-¿Cariño? ¡Al fin llegas! No tienes idea de cuánto te extrañe, amor.- Sale de la cocina y viene hacia mí con una enorme sonrisa en el rostro.
Me da un beso en la frente y la miro como si se hubiera vuelto loca...
-Laura... ¿te sientes bien...?
-Oh, no me llames Laura, hija.- Ríe y mi corazón comienza a latir rápidamente y mis manos a temblar. No entiendo qué diablos está pasando pero no puede ser nada bueno.
-Amor, ¿tu hija ya está aquí?- escucho la voz de un hombre y desvío la mirada de mi madre al señor que se encuentra tras ella.
-¿Qué...?- comienzo a hablar, la desesperación clara en mi voz, pero me veo interrumpida por Laura.
-Oh, hija, él es mi pareja, Diano. - ¿Diano? ¿Qué clase de nombre es ese?- Es un modelo en la compañía.- Me explica.
Y finalmente lo entiendo todo. Mi madre, diseñadora de Bianco's, se consiguió un nuevo novio que modela para aquella marca; de hecho, no es la primera vez que pasa. Pretende ser la típica madre que ama a su hija sólo para quedar bien ante su novio.
Un fuerte sentimiento de malestar se instala en mi estómago cuando veo al hombre parado en medio de mi sala de estar; este me sonríe mirándome de arriba a abajo y lamiéndose los labios y los recuerdos me invaden, junto con las ganas de llorar.
Esto no puede estar pasando otra vez, no puedo vivir esto nuevamente.
Diano se acerca a mí y me quedo paralizada en mi lugar. Abre sus brazos en un intento de darme un abrazo, y es entonces cuando mi ansiedad me gana.
Con el corazón latiéndome en la garganta, esquivo al hombre y me voy a mi habitación lo más rápido que puedo, asustada como la mierda.
Me tiro en mi cama y entierro la cara en la almohada para luego comenzar a llorar.
No puedo quedarme en esta casa, simplemente no puedo. No puedo arriesgarme a que eso vuelva a ocurrirme.
Continúo llorando, cuando un mensaje de Cole ilumina la pantalla de mi teléfono.
<Hola Hart, ¿llegaste bien? ¿comiste algo?> dice. Niego con la cabeza, temblando, y hago el teléfono a un lado.
No puedo más, no puedo seguir.
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¡Holis!
Para el personaje de Hartley, me inspiré en mi actriz favorita de la serie Skins. Su personaje, Cassie, sufría de anorexia al igual que Hart. Eso es algo que realmente me sorprendió, así que quise usarla como inspiración.
En la multimedia hay un gif de la chica, que es quien imagino como Hartley.
Así que el actor de Cole es Timothée Chalamet y la actriz de Hartley es Hannah Murray.
¡Besos!❤️
PD. ¿Quién es su personaje favorito?
-V ☀️