𝐅𝐄𝐀𝐑𝐋𝐄𝐒𝐒 || Alec Ligh...

By _shadxw_girl

346K 20.4K 4.1K

[Primer Libro] - ¿Estás jugando conmigo? - No lo sé. - respondió rozando su nariz con la del chico - ¿Quieres... More

𝐀𝐜𝐥𝐚𝐫𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬
𝐂𝐚𝐬𝐭
𝐏𝐥𝐚𝐲𝐥𝐢𝐬𝐭
Capítulo I
Capítulo II
Capítulo III
Capítulo IV
Capítulo V
Capítulo VI
Capítulo VII
Capítulo VIII
Capítulo X
Capítulo XI
Capítulo XII
Capítulo XIII
𝐀𝐧𝐞𝐱𝐨
𝐒𝐞𝐠𝐮𝐧𝐝𝐚 𝐓𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚

Capítulo IX

14.6K 1K 276
By _shadxw_girl

|La Sublevación|
¤

— No te muevas.

Robert Lightwood curaba las heridas que el repudidado le había causado a su hijo. Isabelle salió a contestar el teléfono de su hermano.

— ¿Cómo estás?

Isaac y Thalia aparecieron en la puerta.
Robert saludó con un movimiento de cabeza al chico Branwell y abrazó con cuidado a la castaña; cuando los vio, Alec no pudo evitar recordar la confesión de Lydia en el Jade Wolf. Isaac notó la mirada del chico, pero no era a él sino al abdomen vendado de su amiga, y puesto que no contestaba lo informó del motivo de su interrupción.

— Alec, Magnus ha venido. Dice que lo llamásteis para reforzar las salvaguardas.

— Lo llamó mi padre. — el azabache se levantó para abandonar la sala. Antes de salir paró junto al rubio — Sólo mis amigos me llaman Alec.

Thalia alzó una ceja ante su reacción.
En la planta de abajo, el Gran Brujo de Brooklyn dibujaba una especie de runas azules sobre las pantallas. Llevaba un traje turquesa oscuro con motivos florales y sus llamativos ojos de gato maquillados en tonos morados y azules.

— ¿Es sólida? — Robert preguntó llegando a su lado — ¿Nada la cruzará?

— Mi magia tiene límites. La barrera no detendrá ese ataque de repudidado, pero mis defensas lo retrasarán.

— El tiempo extra no tiene precio.

— Dilo después de ver mi factura.

— Lydia se encargará.

Robert se alejó del brujo, dejándolo los tres restantes. Isaac observaba con curisidad a Magnus, tenía una actitud coqueta e irónica independientemente de con quién hablara y también parecía haberle cogido un gran cariño a su mejor amiga.

— Una herida de repudiado requiere algo de cariño de brujo, ¿puedo? Oh, sin coste.

— No hace falta, estoy bien.

— Si alguna vez te ocurre algo...

— Magnus, estoy bien. Tengo que...

— ¿Irme? Lo entiendo, eres un hombre ocupado. Me quedaré con Thalia y su nuevo amigo. — dijo la última palabra con un tono que molestó a Alec — Además, tengo que encontrar a esa tal Lydia. El pago por adelantado es muy práctico, ¿dónde puedo encontrarla?

— No la he visto. Seguro que su hermano sabe dónde está.

Magnus alzó una ceja e Isaac levantó la mano indicando que hablaba de él. Alec abandonó la sala sin mirar a la castaña.

— ¿Todo bien entre vosotros?

Thalia asintió sin entender la actitud del mayor de los Lightwood. Magnus indicó a la castaña que fuera tras Alec y al chico Branwell que lo guiara hasta su hermana.
Alec había huído a la sala de entrenamiento. Golpeaba un saco de boxeo a pesar de estar herido, como siempre que necesitaba despejarse.

— Llama a Meliorn, lo detiene y hace ver que está fuera de control. — Isabelle hablaba tras su hermano — Te vas a hacer daño, Alec.

Thalia entró acompañando a su parabatai. El azabache golpeaba con rabia el saco hasta que un mal movimiento lo hizo detenerse. Su herida aún no estaba curada completamente.

— Estoy bien. La Clave dió la orden, no Lydia.

— ¿Estás seguro de eso?

Isabelle fulminó con la mirada a su hermano. La castaña sabía que su mala relación con la emisaria de la Clave influiría en sus palabras así que decidió no pronunciarse.
Jace entró en la sala de entrenamiento y corrió a abrazarla, no la había visto desde la misión para recuperar la Copa de comisaría. Desafortunadamente, traía malas noticias: mandaban a Robert y Maryse de vuelta a Idris.

— ¿Otra orden de Lydia? — Thalia preguntó a Alec con ironía.

— ¿Quién es Lydia?

— Está a cargo del Instituto. — Jace se quedó atónito ante las palabras de la castaña — ¿Ha convencido a la Clave de que no hacen su trabajo?

— Es temporal. Pero tal vez sea lo mejor, estaban al mando cuando entró el repudiado.

Thalia rió sin gracia, Alec estaba mostrando al lado de quién se posicionaba y no le estaba gustando por el camino que iba. Jace intervino antes de que la discusión entre los dos fuera a más:

— ¿A qué te refieres?

— Mamá y papá formaban parte del Círculo. Hicieron un trato con la Clave antes del Alzamiento, a cambio de su cooperación les perdonaron.

— Pues tienes su lealtad.

— Valentine ha vuelto, el Círculo sigue en pie. Son sospechosos.

— Ni hablar. — Jace los defendió — Robert y Maryse me acogieron, me han criado como si fuese su hijo. Sé cómo son.

— ¿Seguro? Nos mintieron. Tú deberías estar de mi lado, Thalia, tus padres...

— Mis padres confiaron en ellos para que me cuidaran; Alec, no sabes ni la mitad de lo que pasó. Mi padre le pidió a Robert que pasara lo que pasara no permitiera que los actos pasados definieran mi punto de vista. — la chica Blackwood se cruzó de brazos para enfrentarlo — La gente comete errores, pero no por eso son malas personas. Se trata de aprender de ellos para cambiar a ser alguien mejor.

— Nos dicen como actuar, que defendamos el apellido Lightwood pues ellos mismos lo han mancillado. Son unos hipócritas.

Jace miró a su parabatai sin poder creer lo que estaba escuchando. Thalia negó ante la actitud del mayor de los Lightwood y se giró, dispuesta a irse.

— Thalia, no te vayas. Es una orden. — Lydia entró en la habitación y ambas se desafiaron con la mirada — Tú debes de ser Jace Wayland, Lydia Branwell. Eres toda una leyenda en Idris.

La emisaria de la Clave estiró una mano para que la estrechara; pero el rubio se limitó a abrazar por la cintura a la castaña, que miraba a la chica con mala cara.

— No creas todo lo que dicen.

— ¿No se lo has dicho? — la rubia le preguntó a Alec.

— ¿Dicho el qué?

— Que estamos comprometidos.

Isabelle abrió los ojos como platos y Jace apretó su agarre al notar como Thalia se tensaba aún más. Había desaparecido con Clary y Simon durante unas horas y todo parecía haberse descontrolado: no sabía quién era esa chica, en qué momento Alec se había comprometido o por qué Isabelle vestía como su madre.

— Nos casamos. — afirmó Lydia.

— Es una broma.

— Tendrías que haberte negado. Vas a arruinarte la vida. — Isabelle salió muy enfadada.

— No sé qué decir.

Lydia sonreía con altanería mientras Jace y Alec parecían competir a ver quién apartaba la mirada antes. Finalmente el rubio rompió el gesto y dejó un pequeño beso en el hombro de la castaña, que tenía la vista en un punto fijo de la habitación.

— Qué tal: nada de esto importa. Hay que detener a Valentine. — Alec habló después de un rato.

— Por fin coincidimos en algo.

El chico Wayland se fue acompañado de Thalia, quien no había soltado una palabra desde que la emisaria de la Clave había entrado.

En la sala de control, Robert Lightwood hablaba con una Isabelle muy alterada. Al enterarse del compromiso de su hijo, esperó a que se acercará para preguntarle sobre ello.
Isaac vió a Thalia y a Jace junto a una de las pantallas y decidió ir con ellos. Ella le contaba algo mientras él la sujetaba por la cintura y descansaba su mentón en uno de sus hombros, como si intentara tranquilizarla. Al darse cuenta de su presencia, la chica interrumpió su relato y lo saludó con una media sonrisa.

— ¿Y este quién es?

— Isaac Branwell, emisario de la Clave.

— Genial, son dos.

— Hazme caso que no tienen nada que ver. — la castaña dejó de revisar las pantallas — Isaac este es Jace Wayland, Jace él es mi mejor amigo, Isaac. Es el hermano de Lydia, pero son como el blanco y el negro.

— Eso espero, porque tu hermana no es que sea la persona más agradable.

Los tres rieron ante el comentario.
Isabelle se sentó con el grupo y observó las imágenes de la pantalla. Varios shadowhunters interrogaban a Meliorn y Lydia apareció en la escena.

— Debemos pararle los pies.

— Bueno, pues disfruta el viaje a Idris con mamá y papá. — Alec habló a espaldas de los cuatro y tomó asiento junto a su hermana.

— Alec, lleva razón. Nosotros no podemos parar el interrogatorio.

— ¿Ahora estás de su parte, Jace?

— Juramos protegernos, claro que está de mi parte.

— No he escogido bandos, soy como Suiza. Tenemos que encontrar a Valentine, por ahora veamos cómo va.

Isabelle asintió y dirigió su vista a la pantalla. Isaac observó a Alec por unos instantes y pudo ver como éste frunció el ceño al ver que Jace seguía agarrando a Thalia por la cintura.
En la pantalla, Lydia acusaba a Meliorn de vender secretos a Valentine. El seelie le recomendó vigilar a los suyos, desconcertando a la rubia, y explicó que la hija de Valentine tenía la Copa.

— ¿Aún quieres ver cómo va esto?

***

— Seguro que eso no es la copa que buscas.

Jace cerró el cajón donde buscaban. Lydia había dado la orden de registrar el cuarto de Clary y todas sus pertenencias para encontrar la Copa Mortal.

— Alec, déjalo, ya.

— ¿La habitación de Clary no forma parte de Suiza?

— No podemos dejarlo, hemos de encontrar la Copa.

Thalia entró en el dormitorio al mismo tiempo que Lydia y los demás shadowhunters salían. No se podía creer que Alec estuviera permitiendo esto, su actitud había cambiado por completo y no le gustaba nada.

— ¿Se puede saber que pasa contigo?

— Oídme los dos, hay que entregar la Copa.

— Lo sacrificó todo para encontrarla.

— Y nosotros por ella. O le entrega la Copa a Lydia, o lo haré yo mismo.

— Iré a buscarla. — Jace accedió — Alec, deja que sea ella quien entregue la Copa. Se lo debemos.

— Es lo correcto, ya lo verás. — el mayor de los Lightwood se fue dejando a Jace y a Thalia solos.

— Llama a Clary, hay que poner la Copa a salvo. Yo iré a por Isaac, necesitamos que nos cubran las espaldas.

El rubio accedió y ella salió corriendo escaleras abajo. En la sala de control, el chico Branwell revisaba las grabaciones del interrogatorio intentando buscar algún signo de evasión de la verdad por parte del seelie.
Al ver a su mejor amiga, le indicó que entrara y cerrara la puerta.

— Necesito tu ayuda con algo.

— Claro, sabes que estoy para lo que sea.

— Isaac, es muy serio. Te juegas tu puesto como emisario de la Clave. — el semblante del chico cambió por completo — ¿Puedo seguir contando contigo?

Ambos quedaron en silencio durante unos minutos. Thalia sabía que si se negaba toda la idea se pondría en peligro y podrían ser reportados, pero necesitaba arriesgarse. Finalmente, Isaac habló:

— Hasta el final. ¿Qué hay que hacer?

La castaña sonrió y le explicó el plan para que la Copa no cayera en manos de la Clave. Se reunieron en una de las habitaciones vacías con Jace, Isabelle y Magnus. El brujo debía distraer a Alec y robarle la estela sin que se diera cuenta para poder abrir la losa donde estaba oculta, mientras, Isaac distraería a Lydia para que no estuviera delante cuando Jace la sacara. En la salida del Instituto Thalia cubriría las espaldas a Izzy, que la llevaría afuera.

***

Clary y Simon usaron la salida trasera del hotel DuMort, abajo los esperaban el resto del equipo.
Jace corrió a abrazar a la pelirroja y las parabatai fueron con Simon mientras Luke e Isaac se presentaban mutuamente.

— ¿Nos centramos en lo que tenemos entre manos? — Isabelle interrumpió el momento de Jace y Clary —Salvo que a nadie le importe que la Clave esté planeando matar a Meliorn.

Los recién llegados se quedaron atónitos.

— Creen que tienen más información de la que cuentan.

— Lo llevarán a los Hermanos Silenciosos.

— ¡Debemos detenerlos! — Jace le pidió a la pelirroja que se tranquilizara.

El plan era simple: enfrentarse a los guardias, los Hermanos Silenciosos y un equipo de shadowhunters, sin refuerzos. Luke los miró como si estuvieran planeando su muerte y Clary preguntó si Alec los ayudaría, a lo que todos respondieron bajando la cabeza.

— Mi manada puede rastrearlos, veré lo que puedo hacer.

— Los vampiros no suelen trabajar en equipo.

— Déjame eso a mí. Voy a hablar con Raphael.

La chica Blackwood entró al hotel DuMort seguida del resto. En la planta superior, todos los vampiros se reunieron para escuchar el trato de la castaña:

— Una alianza con las seelies — miró a Luke ganándose su aprobación — Y los hombres lobo.

— ¿Por qué debemos creeros? No tengo nada contra ti Thalia, pero matasteis a los nuestros, violasteis nuestro hogar...

— Secuestrasteis a un mundano, ¿recuerdas? — Simon levantó la mano con una sonrisa — Oye, sólo seguías órdenes de Camille y ella violó los acuerdos. Tú eres un líder diferente. Ayúdanos a evitar que la Clave cometa más errores, ¿qué dices?

— Me gusta tu razonamiento, pero esa decisión debe ser unánime.

— Yo voto que sí.

— Vaya, vaya... Sus primeras palabras. — Raphael se mofó — Si el nuevo jura lealtad y se une al clan, dalo por hecho.

— Simon no es un peón.

— No, pero acepto el trato. — le sonrió agradeciendo que se preocupara por él — Protegeré al mundo subterráneo, ahora también es mi mundo.

Raphael sonrió. En el sótano del hotel DuMort, hombres lobo y vampiros se mezclaron con los shadowhunter dispuestos a iniciar una nueva alianza.

La entrada a la Ciudad de Huesos era distinta para los subterráneos, parecida a un entrada de servicio. Durante unos instantes, la tensión entre los dos bandos fue visible para el grupo de shadowhunters.

— Luke, Raphael. Suficiente. — Thalia finalizó la discusión — Ya sabéis lo que debéis hacer, avisad si notáis algo extraño.

— Lo estamos arriesgando todo, al ir en contra de la Clave, de otros shadowhunters...

— No lo olvides, Clary. Valentine intenta destruir el mundo y nosotros salvarlo.

Jace chocó el puño con Isaac, estaba completamente de acuerdo con sus palabras. Además, le había caído bien y no le quedó otra que darle la razón a la castaña: no era para nada como su hermana.
El rubio le devolvió la carta con la Copa y el colgante mientras el chico Branwell alcanzaba a los hombres lobo. Junto a Isabelle, Thalia recordó a los vampiros que no quería ni un herido.

— ¿Ese es Alec? — Simon habló al lado de las chicas.

Isabelle miró a su parabatai dando a entender que no iban a echarse atrás y ella asintió. La castaña trazó una runa en la bomba de humo para lanzarla al otro lado mientras Isabelle sacaba su látigo y atrapaba a los shadowhunters que acompañaban a su hermano, los vampiros se encargaron de llevarlos lejos una vez que estuvieron donde ellos.
Isabelle vio como la pelirroja volvía con Meliorn.

— Clary, ¿dónde está Jace?

— Dentro, peleando con Alec. Ha dicho que había que salir de aquí.

Thalia indicó a Raphael que se retiraran. Ya en el hotel DuMort, Jace les explicó lo que había pasado con Alec y cómo ahora él y Clary debían huir de la Clave.

— Supongo que ahora somos fugitivos.

— Sólo ellos dos, a los demás no nos han visto. Gracias por todo, todo esto...

— Tranquila, a mi hermana se le estaba subiendo el poder a la cabeza. Además, tanto cumplir la ley me ponía de los nervios y veo que Meliorn es bien recibido por todos.

Isaac y Thalia rieron ante el apasionado beso entre el seelie y la menor de los Lightwood.

Continue Reading

You'll Also Like

1.8K 237 4
Just come in and enjoy reading 🤍
30.4K 2.2K 49
"Tal vez nunca nada volverá a ser como antes, ya no dormirás como lo solía hacer y ya no no soñarás en colores, solo lo harás en blanco y negro". Y t...
719 56 6
un grupo llamado BLACKPINK que está conformado por,jisoo,jennie,rose,lisa,están en su gira por Europa y fueron invitadas a uno de los eventos más imp...
16.5K 1.2K 19
Hace mil años todos conocieron los nombres de Amara y Silas siendo los primero inmortales y los creadores de los rostros de los Doppleganger pero nad...