—Espera Bael —Liam sujeto el hombro de su primo—. Tenemos que hablar en privado.
—Qué tal si vamos adelantándonos —dijo Theo a Odette y a Joon—. Si tomamos el camino del lago, llegaremos más rápido a la casa de mi tío Jaime.
—¿Qué es tan importante que no podemos escucharlo? —Estefan bufo—. Igual nos vamos a enterar.
—No seas metiche —Theo sujetó del brazo a Estefan y lo arrastró—. Ellos tienen que hablar.
Se fueron discutiendo y adentrándose más al bosque, cuando Liam ya no pudo escucharlo miro a Bael al rostro.
—¿Desde cuándo eres tan serio? —Bael se metió las manos a los bolsillos—. Dime rápido que quieres...
—Estoy saliendo con Leia —Liam se llevó una mano detrás de su cabeza—. No somos novios aun, pero quiero que lo seamos, yo sé que tienes una deuda con ella y por eso la proteges, pero te digo que ya no es necesario...
Bael derribo a Liam con un golpe rápido en el estómago.
—¡Idiota! —puso su pecho, poniendo presión—. ¡Te dije que te alejaras de ella!
Liam pudo zafarse de su pie y rodar para alejarse de él.
—¡¿Cuál es tu maldito problema?! —dijo Liam mientras se levantaba y sujetaba su estómago por el dolor—. Ella no es nada tuyo...
—No dejaré que la utilices para que después la votes como si fuera cualquier cosa —Bael miro amenazante a su primo.
Liam sonrió.
—Eres tan tierno —soltó una carcajada—. Ya se dé donde ella saco esas cosas.
—No te hagas el gracioso Liam —gruñó Bael—. No estoy jugando esta vez.
—Ni yo —Liam de pronto se puso serio—. Ella me gusta de verdad, no sé exactamente lo que está pasando, pero quiero que sea mía.
Bael lo miró con los ojos entrecerrados.
—¿Tuya? —bufo—. ¿Acaso es un objeto para que digas eso?
Liam suspiro.
—Sabes a qué me refiero —se acercó a su primo—. Sé que ella te importa, por eso te lo estoy contando, ella me dijo que le prometiste protegerla y no pido que dejes de hacerlo, pero yo no soy alguien que debas temer que le haré daño, es la primera vez que me gusta alguien de ese modo, es como una cosa extraña que me atrae a ella.
Bael observó detenidamente a Liam cruzando los brazos y buscando en su rostro algún signo de mentira.
—¿Tienes problemas con lo que pasó entre ella y yo? —le preguntó Bael.
—Solo fue un beso, que tú le diste a la fuerza —gruñó Liam—, y lo hiciste porque estabas poseído, fue algo fuera de control.
Bael alzó una ceja y no pudo evitar sonreír un poco.
Esa pequeña pilla le había ocultado a Liam que estuvieron besándose por una hora en el almacén de la escuela.
—Si tan solo veo una maldita lágrima por su rostro—Bael lo miró fijamente—. Lo lamentarás.
—¡Vamos viejo! —Liam pasó su brazo por su hombro dándole un abrazo cariñoso—. Eres como mi hermano, no dañaría a alguien importante para ti, además tu y yo casi nunca habíamos peleado, no me gusta este ambiente tenso que tenemos desde que la conocimos.
Liam le sonrió y Bael lo apartó también brindándole una sonrisa.
—Eres un idiota —le dijo superficialmente—. No me toques.
—¡Te doy mi cariño y te quejas!
—Que esté saliendo con ella, no significa que me aleje.
—No me preocupa —el alzó los hombros, restándole importancia—. Ya que va a hacer mi novia, está bien que se lleve bien con las personas que más cerca están a mí.
—Como que estás muy seguro de ti mismo —Bael empezó a caminar y Liam lo siguió.
—Siento que tenemos una conexión —dijo firme—. Además, mi única amenaza eres tú, pero tu solo tienes a Bonnie en la cabeza y sé que no ves a Leia de ese modo.
Bael se mordió la mejilla internamente para no reír. Si bien era cierto que el solo amaba a Bonnie, Bael también sentía una especie de atracción por Leia, si no fuera así no la habría besado y tocado como lo hizo. Los observaría, si lo de ellos iba en serio, se apartaría, pero algo le decía que la pequeña Leia solo estaba un poco deslumbrada por su primo.
***
—¿Qué ganaría yo? —Liana se acomodó los lentes—. Me piden que abuse la confianza que mi padre ha depositado en mí, necesito una buena razón para hacerlo.
—¿De verdad tiene 10 años? —Joon miró a los demás—. Habla mejor que yo.
—Cualquiera habla mejor que tú, idiota —gruño Estefan.
—Liana —Liam le brindo la mejor de sus sonrisas—. Ya te mostramos el video y te explicamos nuestras razones...
—Deberían decirle a mi padre —Liana le cortó—. Esto es demasiado para ustedes.
Bael se acercó a Liana.
—¿Cuál es tu precio?
—¿Discúlpame? —Liana miro seriamente a Bael—. Creo que no te entiendo.
—¿Qué podemos hacer para que nos des lo que queremos? —Bael suspiro—. Déjate de rodeos, dinos que quieres para acelerar esto, tu padre llegará en una hora y si nos encuentra aquí, estaremos fritos.
—Le podemos decir que vinimos a visitarla —habló Joon.
—Mi tío sabría que mientes sin que termines la oración —Odette sonrió—. Mi tío Jaime es cosa seria.
—Habla —Bael miró directamente a ella—. ¿Cuál es tu precio?
Liana cruzó los brazos y torció sus labios, un gesto que hacía cuando pensaba.
—La próxima semana hay un concurso de disfraces en la escuela, voy a presentarme como princesa, quiero que Odette vaya disfrazada de mi hada madrina que me llevara volando hasta la escuela, me lanzara del cielo, después me atrapara Liam que irá vestido con su uniforme de gala de príncipe y con una corona, los demás irán con sus uniformes de gala para que sean nuestras escoltas.
—¿Qué? —Liam aspiro un poco de aire y cerró los ojos—. Creo que decirles a nuestros padres es la mejor decisión.
—Lanzarte del aire podría ser peligroso —Theo negó con la cabeza—. No creo que esté bien.
—Yo no me voy a vestir de hada —habló Odette.
—No voy a ponerme el estúpido traje de gala —gruño Estefan.
—Hecho —Bael afirmó—. Vamos a hacerlo.
—¡¿Qué?! —gritaron todos.
—No se preocupen chicos —Joon reía a carcajadas—. No duden que los voy a grabar.
***
—Ya pasando todos los informes a mi usb —hablo Joon—. Tu tío tiene el mejor sistema, sin el acceso de Liana nunca podríamos entrar, esto es demasiado para mi ingenio de hacker.
—¿Tiene los informes de todos los de la escuela verdad? —preguntó Theo.
—¿De la escuela? —Joon miró a Theo—. Tiene los informes de todos los malditos hombres lobos del mundo, tu pide y te lo doy.
—¡Ustedes solo dijeron que serían los chicos extraños del video! —exclamó Liana.
—¿También están los nuestros? —pregunto Liam.
—Si —Joon sonrió—. Hasta el mío y tienen varias páginas.
—También descarga eso —hablo Bael—. Conociendo a mi tío, debe tener cosas que ni nosotros conocemos.
—Estoy descargando a toda la escuela, no se preocupen —hablo Joon.
—Apúrense—Liana miro su celular—. Mi papa no tardará mucho.
—Justo a tiempo —Joon desconecto el usb—. Voy a apagar el ordenador sin dejar rastros.
—Mierda —Odette se levantó—. Siento el aura de mi tío Jaime y de mi tío Oliver acercarse.
—¡Apúrate Joon! —grito Liam histérico.
Joon hizo lo más rápido posible su tarea, pero cuando apago el ordenador y salieron del despacho. Pero cuando apenas salieron de ahí, escucharon la puerta principal abrirse ,con un par de voces acompañándola.
—¿Liana? —escuchó a su padre.
—A mi habitación todos —susurró Liana.
Todos corrieron a la habitación e intentaron actuar lo más natural posible. Escucharon pasos apresurados.
—¿Liana? —su padre está en la puerta mirando a todos.
—¡Papi! —Liana corrió a abrazarlo bajando de su cama.
—¿Qué demonios está pasando aquí? —el rey miró a todos divertido—. ¿Están haciendo una junta en la habitación de Liana?
—Liana nos llamó —habló Liam—. Quiere que le ayudemos con su concurso de disfraces.
Liam se acercó a su padre, que acostumbraba a saludarlo con un beso en la frente, de pequeño amaba que lo hiciera, pero ahora era algo un poco vergonzoso.
Nada comparado como el tío Matt cargaba a Theo.
Todos saludaron a los mayores, explicando un poco lo que Liana les había explicado que dirían cuando preguntaran.
—Tu mamá ya viene con Timothee —Jaime acaricio el cabello de su hija—. Tu hermano se pondrá feliz al ver quienes cenaran con nosotros hoy.
Liana sonrió tranquilizada de que su padre no daba signos de sospecha.
Y tenía toda la razón, su padre no sospechaba nada porque sabía todo lo que había pasado, ya que tenía cámaras y micrófonos en toda la casa.