- Pero...
¿Lo quieres?
- ¿A quién? ¿A Daniel?
- Sí.
- Yo no quiero a nadie.
- Pero leí en tus mensajes,
otra cosa.
- Un "Hola, ¿Qué tal?"
No tiene nada de malo.
- Pero eso no era...
- Bueno, ya.
Es mi vida ¿No?
- No deberías jugar con las personas.
.
Se fue dando un portazo.
Giré la manija.
El agua cayó.
Disfruté del agua
Con los ojos cerrados.
Dije quedo:
- Yo también voy por ese camino.