Fuera del chat
-Haber si entendí chaval, ¿Queréis que le prohíba mi crío ir al hospital?- España miraba totalmente extrañado a USA.
-Básicamente sí-no entendía nada, en un segundo estas practicando con tu espada de diamante a rescatar a las mascotas de tus hijos y al otro eres arrastrado a una cafetería.
-¿Y por que aria tal cosa?- España trataba de cubrirse los ojos, pasar mucho tiempo en tu cuarto jugando al Minecraft le había afectado un poco.
-Créame señor España, es lo mejor para su hijo- USA comía su cuarto queque, arrugo un poco la mirada, los queques que preparaba Perú eran mucho más ricos.
-Joder chaval, ¿me podrías dar una buena explicación?- España quería volver a su Minecraft-cueva, estar en el mundo real le afectaba, estaba casi seguro de haber visto a un criper arder.
-Vera señor España, hay un chico en la escuela que le tira papelitos a su hijo y...- España hizo un gesto con la mano para evitar que continuase hablando, ya había escuchado suficiente.
-Nadie se mete con mi crío y vivirá para contarlo- España saco su espada de diamante mientras se ponía su casco que igual era de diamante, quería sangre y la tendría, Perú era su menor hijo y ni de coña dejaría que alguien jodiera su existencia.
-¿¡Encerio?!- USA se levanto con una enorme sonrisa, si tenía apoyo de España podría cuidar perfectamente bien de su hermoso bebesito Perú.
-¡Joder con todo el puto gusto!- España era seguido por USA a quien le había dado una espada de hierro. Se agarrarían a coñazos con aquel "molesta niños bonitos" como le decían Malvinas y Soledad.
-¡Espera!- ambos pararon en seco, España empezó a rebuscar su teléfono por sus ropas, hasta que lo encontró- Te daré un consejo de vida chaval, nunca valláis a una guerra sin un Italiano.
-No se preocupe por eso, mi papá ya lo llamo y nos están esperando en el hospital- hablo USA con rapidez, su papá también le había dado ese consejo.
-¡Entonces matémoslo a coñazos!- ahora si ambos se dirigían al hospital, nadie los detendría, amos se sentían imparables-