No me pegues lo joto.
México se encontraba nervioso mientras preparaba la mesa junto a Rusia, hoy era una cena super importante y México deseaba que saliera lo mejor posible. Habían estado organizando esa cena durante todo aquel mes pues sabían que una cena donde juntaran a todos sus hijos seria prácticamente imposible, así que habían optado por invitar solo algunos de ellos... los mejor portados por así decirlo; pero México temía el como iban a reaccionar luego de la cena.
Querían que sus dos familias congeniaran; pero en ambas casa sabían que había la posibilidad de que no aceptaran su relación y hasta en el peor de los casos, podrían generar hasta una revolución. Varias veces ambos habían presenciado hasta que extremo los caminos del odio podrían conducir a las personas.
Linchamientos
Violaciones
E incluso... hasta asesinatos ...
Todo por el pecado de amar.
México sentía tanto miedo de que a Rusia le pudiera pasar algo así; que varias veces había desistido de la idea de hacer publica su relación; pero luego de tanto tiempo viviendo con el miedo al "que dirán" y soportar por tantas bromas despectivas en las cuales tenían que reír para no llorar. Ambos habían tenido suficiente.
Con miedo o sin el, esta cena se llevaría a cabo y luego de esta... ambos afrontarían las consecuencias.
Ni un paso atrás... ni siquiera para tomar impulso. (Pinche viejito)
Finalmente el sonido del timbre interrumpe los pensamientos de México. Los invitados han empezado a llegar; y tras comprobar la hora en el reloj de la sala, México solo puede creer que se tratan de alguno los hijos de Rusia, pues faltan solo diez minutos para la hora. Pinches europeos con su puntualidad perfecta. Pero el timbre vuelve a sonar, como para anunciarle que la batalla más grande por el amor de su vida ya esta tocando a la puerta.
México da un ultimo suspiro, se quita el mandil que se había puesto para no ensuciar su ropa y finalmente se dirige a la puerta, pues sus invitados esperan.
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Mientras tanto entre las calle de la ciudad de México...
Un olor fétido llena repentinamente en callejones por el que dos states andan pasando.
-No mames wey, parece que te moriste con ese pedo que te echaste- menciona todo asqueado el más alto de los states que anda como siempre con ropa informal, mientras trata de dejar atrás a su hermano mayor (pero no por eso el más alto) tratando de alejarse del olor que despide.
-Pinche fresa, como si tus pedos olieran a flores- dijo con humor el mas pequeño de los states, él cual viste ropa mas casual y más cara que la de su hermano menor; el cual no parece nada ofendido por las palabras de su hermano y mucho menos avergonzado, cuando ahora con intensión se tira otro pedo.
-No mames CDMX, si vas a estar así durante la cena mejor ni vamos carnal- dijo el ahora más asqueado state mientras trataba con todas sus fuerzas el no vomitar inducido por el tremendo hedor de su hermano.
-Hay si aja ya te creo pinches florecitas-dijo en tono burlón CDMX a la vez que intentaba pasar desapercibida la tos que amenazaba por brotarle del pecho -Si te morías de ganas por ver a tu piche edificio europeo que va a estar en la casa, pinche joto.-dijo de manera divertida mientras con sus manos hacia el juego del hoyo y el palo.
CDMX sabia que desde hacia muchos años que había invitado a su hermano a ver el Ballet Folclórico de Moscú, su hermanito había tenido un flechazo al ver bailar también a la capital durante el expectaculo. Y esa noche CDMX tenia todas las intenciones de molestar al extremo a su hermano.
-Me lo dice el wey que le da a todos por igual-dijo Edo mientras daba una vuelta rápida y le mostraba el dedo.
-¿Que puedo decir hermano? Ser la capital tiene sus ventajas- dijo CDMX al mismo tiempo que inflaba su pecho con orgullo.
-Relaja la raja que en una de esas te quito el puesto, pendejo-dijo ahora Edo mientras esperaba que su hermano llegara más cerca de él y así evitar esta gritando esa clase de cosas en plena vía publica.
-Ya te crees mucho pinche prole, solo por andar diciendo esas mamadas te voy a seguir dejando sin metro, a ver si así aprendes tu lugar, pendejo- aunque solo lo dijera de broma, claramente vio el disgusto en la cara de su hermano Edo.
Edo ya no le contesto; sabia de lo que el cabrón de su hermano era capaz y aunque le doliera siempre ese trato que le tenia su hermano sabia que era muy dependiente de él; así que para no empeorar la situación Edo simplemente se quedo callado.
-Asi me gusta; y ahora deja tus pulgas en la calle que ya llegamos- dijo triunfante CDMX mientras empujaba a su hermano fuera del camino hasta llegar a la puerta del elevador. Como le encantaba ser la capital.
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-Rusia, están tocando a la puerta han de ser mis chicos, por favor ábreles ¿si?- dijo tranquilamente México mientras terminaba de servir las tazas de té a sus otros invitados. Ya habían llegado los tres hijos de Rusia y también se encontraba Nuevo León; los únicos que faltaban a la cena eran Junior y CDMX. Con una hora de retraso, pero al fin habían llegado.
-Hola Jefe ya llegamos y perdona la tardanza pero el pinche de tu hijo se andaba echando unos pedotes en el camino- dijo en voz alta CDMX lo suficientemente fuerte y claro para que todos en el apartamento pudieran oírlo.
-JA JA Te quemo- es lo único que se le ocurrió decir a NL al oír eso.
Pero Edo parecía a punto de sacarle la madriza de su vida a su hermano. Edo quería llevar el asunto a golpes con todas las ganas del mundo, pero recordó donde se encontraba y ante quien estaba. Así que solo pudo apretar los puños lo mas fuerte que pudo y trato de tragar toda la bilis que tenia acumulándose en su boca. Todo esto en cuestión de segundos, para así poder aparentar que le había hecho gracia las palabras de su hermano.
-Ja ja ja que cosas dices hermanito- mientras le daba unos pequeños pero fuertes golpes a la calva rosada de su hermano -dejando las bromas aun lado lamentamos mucho la tardanza.
Y México queriendo evitar que escalara mas la tensión en la sala procedió a llamar a todos a la mesa.
-Bien eso ya no importa, lo bueno es que ya están aquí todos. Ya podemos sentarnos todos a la mesa, para iniciar la cena. Hice una rica sopa roja de primer tiempo y como plato principal unos ricos tacos de arrachera con cebollitas y nopales; y como postre tenemos un delicioso pastel de manzanas que hizo Rusia. Por favor dejemos todas las tensiones atrás y en su lugar comamos antes de que esta cena se enfrié.
Todos se habían quedado tensos por un momento, como si no pudieran cree que la bandera blanca que había alzado México tuviera un verdadero peso en aquella tensa situación. Pero México al ver esta falta de confianza sobre la autoridad que representaba sobre sus hijos, solo tuvo que decir:
-Chicos... ¿acaso tengo que quitarme el zapato y castigarles como cuando eran chamacos? -Todos los hijos del país latino se tensaron al escuchar esto e inmediatamente obedecieron a su padre y se dirigieron en orden a la mesa. Que se encontraba en la misma habitación que la sala, en aquel acogedor pero pequeño apartamento.
La reacción de los hijos del país latino, sorprendió en mucho a los hijos de Rusia, quienes en su mayoría había llegado con la idea de que los hijos de México eran criminales y bárbaros los cuales no obediencia ninguna ley que no fuese suya. Pero el pequeño país había demostrado que aun hoy en día sus hijos le tenían miedo a ser castigados por su padre.
Luego de que México les indicara a sus hijos de que lado de la mesa iban a sentarse, los hijos de Rusia siguieron su ejemplo y se sentaron al lado opuesto de la mesa. Todo conflicto anterior parecía haber sido erradicado de la mesa. Y mientras Rusia y México iban a servir los platos en la cocina, la curiosidad de los hijos presentes empezó a brotar. Iniciando por el mas pequeño de la mesa.
-Y pus entons se van a presentar o prefieren que les llame Cosa roja 1; Cosa Roja 2 y La momia- dijo en tono de burla CDMX mientras relamía sus labios y luego mostraba descaradamente su sonrisa que era adornada con un diente de oro.
Moscú fue el primer ofendido.
-Solo si me dejas llamarte розовая шлюха (puta rosa)- Dijo Moscú, que a pesar de ser el mas pequeño de entre sus hermanos, aun así superaba por mucho a la pequeña capital. Su hermano San Petersburgo trato de esconder la sonrisa que se quería asomar por su rostro; y en su lugar le dio un pequeño codazo a su hermano.
-Ну тогда ты будешь шлюхой этой розовой шлюхи (Bueno entonces tú serás la puta de esta puta rosa)- Dijo CDMX con suma fluidez y sin que su burlona sonrisa abandonara nunca su cara.
Al principio parecía ser que Moscú se levantaría y iniciaría una pelea, pero una navaja que había aparecido sorpresivamente frente a la cara de Moscú, le hizo cambiar de opinión.
-Todos quietos mis compas- Dejo Edo a salir en la defensa de su hermano y señalando a los otros dos hermanos del soviético que si era necesario tenia navajas de sobra para repartir a cada uno de ellos- Se que este pendejo es un cabrón y presumido bisexual, pero es mi hermano así que немного больше уважения (un poco más de respeto) no queremos arruinar la cena con un conflicto internacional- Dijo Edo a la vez que regresaba a su lugar y guardaba las navajas al mismo tiempo que Rusia y México nuevamente regresaban la mesa con varios platos de sopa y una canasta llena de complementos para la misma.
-¿Qué paso muchachos por que tan tensos?-Dijo México al captar nuevamente el cambio de ambiente.
-Nada apa, solo nos presentábamos- Dijo con toda calma Edo.
-Eso mero, como iba diciendo yo soy CDMX mayor de mis 32 hermanos, el de la boina negra y flores es mi mero compa Estado de México y la mole que tiene a su lado de 1.80 con 90 kilos de carne asada y musculo es mi hermanito Nuevo León, un placer conocerlos-Dijo CDMX adueñándose de las presentaciones.
Al principio los soviéticos parecían reacios a presentarse; pero una sola mirada de reproche por parte de Rusia fue todo el incentivo que necesitaron.
-Moscú.
-San Petersburgo.
-Siberia, un placer igualmente.
-Bueno siquiera la momia no nos tiene asco- Dijo nuevamente CDMX mientras señalaba con el dedo al mas alto de los soviéticos el cual se encontraba cubierto de pies a cabeza con vendajes. Y habría dicho más si no fuera por que Edo le había interrumpido.
-Me disculpo por mi hermano mayor, Siberia lamento ver mucho tu estado actual, oí lo que recién había pasado en tus tierras, pero no pensé que fuese así de grave tu condición-Dijo Edo tratando de prestar verdadero interés en la condición del state que se encontraba frente a él.
-Agradezco su preocupación, pero descuida ya estoy acostumbrado, cada año pasa un incidente similar y como todo en Rusia yo prevalezco; así que solo queda la recuperación-Dijo amablemente Siberia mientras empezaba a mostrar un gran interés por la sopa que ahora tenia ante él.
-Espero que pronto te recuperes-Dijo cortesmente Edo a la vez que CDMX volvía a captar la atención de la mesa.
-Son pololos, son polos- Dijo CDMX burlonamente aunque por suerte el significado de esas palabras pasaban desapercibidas por los soviéticos.
-¿Padre sabes el significado de esa palabra?-Pregunto con un toque de curiosidad San Petersburgo.
A lo que Rusia rápidamente contesto.
-Significa amigo San.
Y cuando parecía que CDMX intervendría nuevamente Edo supo como reaccionar al meterle un bolillo en la boca de su hermano mayor.
-Oye San, ¿puedo decirte San? esta sopa es tradicional de tu hogar, ¿verdad? Oye me podrías enseñar como que ponerle compa, es que nuca la he comido- Esta vez intervino Nuevo León el state que hasta ese momento se había encontrado callado y lo decía mientras una cálida sonrisa adornaba su rostro.
Y gracias a su intervención poco a poco la cena fue dando lugar sin ningún otro percance; todos los invitados parecían disfrutar de la nueva experiencia con la comida y poco a poco pequeñas platicas dentro de la mesa fueron dando lugar. Todo parecía fluir con facilidad a medida que pasaba el tiempo. Lo cual significaba un gran alivio para Rusia y México.
A lo mejor, esto podría funcionar.
FIN
NOTA DE LA AUTORA: Pues igual que las anteriores, me imaginaba que esto podría alargarse más y hasta convertirse en fic. Pero sinceramente esta escena de la cena se me resistió por varios días para que tuviera la voluntad de continuar, pero finalmente se logro.
Para aclarar un poco se que ambos países tienen varios sino es que graves problemas con la homofobia pero lo que ellos pretendían es que a partir de entonces una cena cada mes se llevara a cabo para que así ambas familias estrecharan lazos. Lo debido antes de dar el golpazo de "somos novios" y por favor no organicen un golpe de estado por ello.
Los states aquí presentes pertenecen a: CDMX y NL , Edo .
Esta indecisa con respecto a que CDMX Y Moscú fuesen novios, por que me acorde que Edo de bianquinyart le gusta mucho la danza y el ballet y Moscú tiene una de las mas famosas compañías de ballet de todo el mundo, pero creo que prefiero emparejar a Edo con Siberia por que ambos son estados industriales y ambos tienen su "pueblos mágicos" y bosques. Pero díganme con toda confianza que opinan al respecto.