— Woa, tienen carne de cerdo aquí — Jimin leyó emocionado el menú.
— Vamos a desayunar solamente — Jungkook contestó de forma aburrida. No había ido a Daegu a comer, él quería encontrarse con el supuesto Taehyung.
— Animate, pequeño conejito, iremos más tarde. — dejó el menú sobre la mesa — Quiero hotcakes, ¿qué vas a beber?
— Leche cocholatada está bien.
— Okey, pediré, terminamos y vamos, ¿está bien? No te desanimes.
Jungkook asintió desganado y Jimin llamó a la mesera.
—♥️—
—Yo no digo que sea estúpido, pero Taehyung, ya es estúpido. Es probable que alguien más haya encontrado la carta y te haya jugado una broma. — el pelirrojo se alzó de hombros.
Taehyung le había contado todo, incluso los recuerdos que no le pertenecían realmente.
Para él, era imposible el asunto de la reencarnación. Se encargaría de regañar a su cuñada por meter esa idea en la mente de su amigo.
Taehyung bebía su té con un puchero en su boca.
Obviamente no estaba de acuerdo con Yoongi, pero sí estaba consiente de que todo esto era una locura.
— ¿Y crees que estoy loco?
— Yo no digo que estés loco.
— O me llamas loco o me llamas estúpido, ¿cuál es? — lo miró con enojo.
— ¿No hay una tercera opción? ¿Una en la que no te enojes o te ofendas?
— Ah, ok, ahora a demás de loco y tonto, me llamas irracional, ¿crees que no puedo mantener una conversación tranquila? — se levantó, sin cambiar de expresión. No estaba enojado ni nada, sólo quería bromear un poco con Min, haciéndose el histérico, a parte de que no quería pagar por el desayuno si podía evitarlo — ¿Sabes qué? No quiero seguir hablando contigo, me voy de aquí. — caminó a la salida.
— ¡Hey! Carajo — Yoongi sacó su billetera para pagar — ¡No te vayas! ¡Taehyung!
—♥️—
— Me gusta más cuando les ponen miel — comentó el rubio.
— ¿Y eso qué es? — señaló un recipiente al lado de sus panqueques.
— ¡Ah! No lo había visto. — Jungkook rió, su hermano era muy distraído. — No es grac-
— ¡Taehyung!
El grito lo hizo callar debido al nombre usado. Ambos hermanos se miraron con los ojos bien abiertos y luego el menor miró a su costado.
El chico de cabellos rubios pasaba a su lado. Sin ser consciente, estiró la mano hasta tomar la muñeca ajena, lo que hizo que Taehyung lo mirara por el susto.
Dos corazones latiendo al mismo ritmo, eso es lo que fueron en ese instante.
El brazo de Taehyung fue jalado hacia Jungkook, a la vez que éste se levantaba para ir directo hacia sus labios.
Con su mano en la nuca del otro, apretó el agarre para que no pudiera escapar, devorando sus labios con prisa y deseo.