Un aviso:
1. Capítulo muy largo.
Dos recomendaciones:
1. Tener insulina cerca. Capítulo sumamente fluff y lleno de amorcito. uwu
2. Darle una re-leída al capítulo "Tan, tan dulce". Les facilitará el entender las menciones que se harán a continuación sobre la primera cita de YoungJae y JB (en caso de que ya no la recuerden muy bien).
Millones de gracias por las 400K lecturas. Jamás pensé que la historia llegaría a tanto y sé que sin ustedes no hubiese sido posible. L@s amo infinitamente.
☀️
Bebé Jae ☀️❤️
(Activo (a) por última vez ayer a las 10:47 PM)
Buenos días, bebé. ❤️
9:34 AM
¡Has enviado una imagen!
Extraño mucho dormir contigo, Jae. Ha pasado mucho desde la última vez.
9:36 AM
¿Te gustaría venir a pasar la noche conmigo? Aprovechando que es sábado.
9:36 AM
Antes de eso podemos ir a algún lado a pasear, la semana pasada cumplimos 6 meses y no hicimos nada especial...
9:37 AM
Aún ni te despiertas y yo ya estoy molestando 😅 pero bueno, piénsalo.
9:38 AM
Buenos días, mi amor. ❤️ Ya estoy despierto.
9:39 AM
Nunca eres una molestia, te amo. (｡•́︿•̀｡)
9:39 AM
¡Sí quiero ir a una cita contigo, Bumie! 🐻
9:40 AM
¿A dónde te gustaría ir, bebé?
9:41 AM
¡Espera, espera! ❤️
9:41 AM
¡Videollamada entrante de Bebé Jae ☀️❤️!
— Hola, mi amor. Justo como pensé, te ves muy lindo recién despertando. — dijo YoungJae en cuanto el rostro adormilado de JaeBum se hizo visible en la pantalla de su celular. Le encantaba ver los ojitos y mejillas hinchadas de su novio.
— Tú eres el lindo aquí, pareces un bebé.
— Soy el bebé de Bumie.
La reacción de JaeBum hizo sonreír ampliamente a YoungJae. Eran apenas las 9 A.M y su corazón ya revoloteaba en su interior a causa de la preciosa sonrisa de JaeBum y lo adorable de sus ojos avergonzados.
— ¡Deja de ser tan lindo en videollamada! Me pongo ansioso porque no te puedo abrazar. — puchereó YoungJae, sacándole una suave risa a JB, quien cubrió avergonzado su rostro con la cobija.
— Entonces, ¿a dónde quieres ir? — JB cambió de tema. Tenía que hacerlo o su corazón no soportaría el coqueteo del menor.
— Mmm... ¿Qué tal al Río Han?
— Oh, ¿quieres revivir nuestra primera cita? — dijo JB subiendo y bajando sus cejas con una sonrisa. YoungJae no tardó mucho en esconderse detrás de uno de los tantos osos de peluche que JB le había obsequiado. — Me parece una muy buena idea, no hemos vuelto solos desde aquella vez.
YoungJae asintió entusiasmado con la idea. — Será muy lindo ir después de seis meses juntos como pareja.
— Seis meses... el tiempo se ha ido volando. — dijo JB con una suave sonrisa. — Pero esta vez no tendré que contenerme cada que quiera abrazarte y besarte, porque ya eres mi bebé.
— Y tú mi Osito. — dijo YoungJae, devolviéndole la sonrisa coqueta. Se estaba haciendo muy bueno en ello, JB y su corazón no estaban listos para eso aún. — ¿Pero esta vez sí serán besos reales? — dijo YoungJae con una ceja alzada. — No quiero los 2x1 de la tienda.
JaeBum estalló en carcajadas ante el recuerdo, contagiando a YoungJae.
— ¡No te rías, Bumie! Yo sí quería besos de verdad.
JaeBum dejó de reír de golpe, ahogando un dramático grito en el momento haciendo reír al menor.
— ¿Te hubiese gustado que te besara ese día?
— Sí me besaste. ¿Lo olvidaste? — puchereó.
— Lo recuerdo perfectamente, Jae. Sabías a chocolate. — dijo haciendo que YoungJae volviera a ocultarse detrás del peluche. — Planteé mal la pregunta. Era: si te hubiera besado durante la cita ¿te habría gustado?
YoungJae asintió asomando un poco su carita detrás del peluche. La imagen y confesión del menor juntas fueron directo al corazón de JaeBum, quien tuvo que morder su labio para suprimir la boba sonrisa que se asomaba.
— No quise asustarte en nuestra primera cita. — explicó JaeBum. — Pero hoy no te salvarás, YoungJae-ssi. Te daré unos... mil besos. ¿Qué tal?
— ¡Wow! ¿Tantos? Es mi día de suerte... — la adorable risilla de YoungJae detonó el bobo suspiro que JB solía soltar cuando YoungJae lo abatía continuamente con su ternura.
— Pasaré por ti a las 5:00 PM. ¿Te parece?
— Sí, mi amor. — sonrió Jae. — Te tendré una sorpresa.
Los labios de JB formaron una "o". YoungJae le dedicó una sonrisa traviesa.
— Dame una pista.
— Nop. Tendrás que esperar.
— Aún falta un buen rato, bebé...
— Estaré feliz de que tus ansias de verme aumenten. — YoungJae le guiñó un ojo, dejando en completo K.O a JB. — Te veo a las 5:00 PM, Bumie. Te amo.
YoungJae colgó la llamada y se escogió debajo de su cobija.
¡Le guiñó un ojo a su novio! Se sentía tan atrevido y apenado al mismo tiempo. Pero sin duda la reacción de JB había válido la pena.
Su plan comenzaba bien.
☀️
BamBam movió la cabeza de un lado a otro, analizando el conjunto de ropa que YoungJae se probaba: unos pantalones a cuadros rojos, azul marino y otras tonalidades oscuras junto a una camiseta negra con el nombre de la marca de estampado.
— Con esos pantalones JB hyung pensará "necesito darle una nalgada". — dijo BamBam orgulloso de la elección de YoungJae, se levantó de su asiento y lo hizo dar vueltas hasta que visualizó los pantalones desde todos los ángulos.
— No quiero que me dé una nalgada.
— ¿Por qué no?
— Duelen.
BamBam se llevó una mano a la frente antes de reír.
— De todas formas, están perfectos. No muy ajustados pero tampoco flojos. Justo ahora te quiero dar una nalgada.
— Si lo haces te la devolveré con el doble de fuerza.
— Y por eso digo que no te la voy a dar. — dijo haciendo reír a YoungJae. — En cuanto a la parte de arriba...
YuGyeom estornudó, captando la atención de los dos jóvenes que creían estar a solas.
— Oye, te dije que le hicieras compañía a Jackson hyung. — dijo BamBam. YuGyeom se miró las manos.
— Quiero estar contigo, Bamie. — dijo YuGyeom casi en un murmuro, actuando de forma linda para que BamBam cediera. Lo logró, claro. BamBam le extendió su mano, la tomó y se asomó al probador donde YoungJae se encontraba. — Wow, Jae. Luces muy-...
— Al primer comentario vulgar te voy a sacar a patadas. — advirtió BamBam apuntándolo con su dedo y volvió su vista a YoungJae. — La camiseta te sienta bien, pero creo que algo falta... — dijo analizando el atuendo del rubio.
— ¿Qué tal una chaqueta? — sugirió YuGyeom. A BamBam de le iluminó el rostro.
— ¡Sí! — aplaudió leve. — Excelente observación, amorcito. Vamos a buscar una.
YoungJae rió un poco viendo a sus amigos marcharse a buscar la prenda que mencionaron.
Dejó escapar un suspiro, sentándose en el pequeño asiento del probador. Se miró en el espejo y sonrió suavemente.
— Aún me sorprende gustarle a un chico como JaeBum. — murmuró para sí mismo, pasándose los dedos por la mejilla con la vista en su reflejo. Pronto su sonriente hyung se vio reflejado donde mismo. — Seunie hyung.
— "Un chico como JaeBum", eh. — dijo entre una suave risa. YoungJae bajó la mirada avergonzado. — No tienes idea de lo afortunado que JB se siente de que "un chico como tú" se haya fijado en él y lo estará todavía más cuando te vea esta tarde.
— ¿Crees que le guste?
— Es un hecho, confía en mí.
— Mejor confía en mí, con esta chaqueta a JB hyung le dará un embolia en cuanto te vea. — dijo BamBam entrando a los probadores, se abrió camino entre Jackson y le colocó dicha chaqueta a YoungJae. Era una prenda completamente negra, lo único que resaltaba era el zíper rojo.
Los tres presentes se quedaron en silencio debido al impacto de la imagen de un YoungJae más oscuro que de costumbre, si bien sí acostumbraba a usar el negro no lo hacía en tanta cantidad como en ese atuendo.
— Wow. — YuGyeom y BamBam hablaron al mismo tiempo.
Jackson silbó.
— Si a JB no le da una embolia, lo mejor es que consigamos una silla de ruedas de emergencia.
YuGyeom rió, sosteniéndose del hombro de su novio. — ¡Oh, no! La colita de Jae... — dijo antes de volver a reír, ganándose un zape del tailandés.
YoungJae no los escuchaba, estaba sumergido en su propia imagen proyectada en el espejo. Aún con el gran impacto que provocó su propia imagen en él, sonrió. Sus amigos también estaban felices de que estuviera satisfecho.
— Ahora sí, Jae. ¡Vamos por la cereza del pastel! — exclamó Jackson emocionado.
☀️
— Algo están tramando, puedo jurarlo.
JinYoung puso una taza de café frente a su amigo, quien devoraba sus panqueques como si nunca antes hubiese sido alimentado.
— No seas paranoico. Mark hyung tampoco fue con ellos, no es obligación que siempre vayamos todos. — dijo JinYoung intentando persuadir a JB. Éste era el único de los siete que no sabía lo que YoungJae junto a los demás tramaban. — ¿O qué? ¿Eres un novio tóxico que se enoja si tu chico sale con sus amigos sin ti?
— ¡¿Qué?! Por supuesto que no. — dijo JB ofendido de tal acusación. — Por cierto ¿por qué tú no fuiste?
— Me dormí tarde ayer adelantando unas cosas para la presentación del club en el Festival de Año Nuevo. Siento como si fuese el líder aunque soy el "sub".
— ¿Quieres que le dé una lección a JongDae por darte tanto trabajo? Todo por ti, Bro.
JinYoung rió antes de darle un trajo a su café.
— ¿Por mí o por el rencor que aún le guardas?
— ¿Rencor? ¡Pf, no! Claro que no.
Ambos se miraron antes de estallar en carcajadas.
JinYoung suspiró algo aliviado; JaeBum había dejado de cuestionar sobre el asunto de YoungJae junto a los demás chicos. JinYoung sabía evadir, más no mentir. Por lo que le tenía los pelos de punta tanto cuestionamiento que terminaría haciéndolo responder algo incorrecto.
Se creía salvado hasta que la voz de su novio llamándolo en un tono cántico desde la sala de estar cayó en su cabeza como un balde de agua fría.
Si JinYoung no sabía mentir, Jackson menos. El coreano sabía que al primer cuestionamiento que JB le hiciera a Jackson, todo se iría por el caño.
— ¡Príncipe! ¿Dónde estas?
— En la cocina. — respondió JinYoung, levantándose de su asiento para ir en busca de Jackson. No tuvo tiempo de dar siquiera un paso cuando Jackson entró a la cocina.
JB tosió su trago de café y JinYoung cayó sentando de nuevo a la silla.
— Lo sé, soy fabuloso. Nací para ser rubio. — dijo peinándose su cabello recién teñido, el cual estaba peinado de forma que su frente quedaba totalmente al descubierto. — ¿Te gusta como me veo, JinYoung-ah?
JinYoung estaba por responder cuando la exclamación de JB resonó en la cocina.
— ¡¡YoungJae se ha teñido!! — dijo apuntando a Jackson. — La última vez que salieron juntos sin mí, Jae volvió rubio y tú castaño. Si tú estás rubio entonces... ¡¿YoungJae está castaño?!
— ¿Cómo es que su cerebro funciona tanto para unas cosas y para otras parece que tiene una nuez en su lugar? — bufó JinYoung, llevándose las manos a la cabeza.
JB chilló emocionado, con sus manos en el pecho.
— Mi bebé ha vuelto al castaño ¿no es así? Aw, justo como cuando lo conocí. Ya quiero verlo... ¡Ya quiero verlo!
JinYoung y Jackson compartieron miradas, ambos sin saber qué hacer o decir. La emoción de JB era inigualable.
— Bueno, iré a limpiar mi habitación. Gracias por el desayuno, Nyeong. — sonrió JB, dando brincos hasta la salida. — ¡Ah, Jackson! Luces bien, hermano. — dicho esto, salió del departamento.
Antes de que Jackson dijera algo, JinYoung habló.
— Se supone que no volverías hasta que JB se fuera. Arruinamos el plan.
Jackson bajó triste la mirada, comenzando a jugar con el zíper de su chamarra.
— ¿Te importa más eso que el hecho de que yo también quise sorprenderte? ¿No... no te gusta como me veo?
JinYoung se acercó de inmediato al chino, sintiendo su corazón encogerse al ver sus ojos de cachorro triste. Lo besó cortamente en los labios antes de sonreírle suavemente.
— No es eso, Seunie. — JinYoung lo tomó de las mejillas, acariciándoselas. — Claro que me gusta, me dejaste embobado. ¿No me viste? — Jackson suprimió una sonrisa. — Te ves precioso y... muy sexy.
Jackson terminó por sonreír, abrazando con fuerza a su chico por la cintura.
— Siento mi reacción, es que YoungJae calculó todo con tanto cuidado que me sentí mal por él...
— JB cree que YoungJae está castaño así que la sorpresa sigue en pie. — dijo Jackson con una suave sonrisa. — ¿Quieres ver la ropa que se compró Jae para hoy?
— ¿Se compró ropa también?
— Sí, BamBam se lo sugirió y aceptó. YoungJae en verdad lucía emocionado por su cita con JB, pareciera que fuese a ser la primera. — Jackson buscó en su teléfono la imagen que le tomó a YoungJae y se la mostró a JinYoung.
— ¡Wow! Se ve muy bien. — sonrió JinYoung tomando el celular de Jackson. — La ropa la eligió BamBam ¿cierto?
— Sólo la chaqueta, lo demás fue elección de YoungJae.
JinYoung sonrió.
— Ojalá alguien capture el momento en que JaeBum lo vea. Su corazón no va a soportar semejante imagen. — dijo haciendo reír levemente a Jackson
Jackson dejó un casto beso en el cuello de JinYoung antes de mirarlo a los ojos.
— ¿Qué tal si tenemos una de nuestras maravillosas citas en casa hoy? Mucha comida, películas y mucho más. ¿Qué tal?
— Eso de "películas" nunca tiene un final decente. — dijo JinYoung cruzándose de brazos. — Mejor otra cosa, podemos ponernos a estudiar para nuestro examen de admisión ¿sabes? No falta mucho.
Jackson fingió roncar contra el hombro de JinYoung, haciendo reír a éste.
— Anda, JinYoungie... sabes que te gusta ese final poco decente de nuestras tardes de películas. — dijo Jackson, colocando con poca vergüenza una de sus manos en el trasero de JinYoung. No tardó en recibir un golpe en ella.
— Dije que no.
Jackson lloriqueó.
— ¡JinYoung-ah!
☀️
JaeBum sentía que flotaba en una nube de azúcar mientras se dirigía al apartamento de YoungJae en el ascensor del edificio.
Una cita con su bebé... le emocionaba tener una después de tanto tiempo y después de todo lo sucedido.
De su mente no había podido sacar a un YoungJae castaño, luciendo como un adorable rollito de canela. A JaeBum le encantaba. Claro que con su cabello rubio también, pero había algo en el YoungJae "natural" que volvía polvillo mágico el corazón de JB.
Tocó la puerta con su corazón latiendo emocionado.
— ¡Voy! — exclamó YoungJae desde adentro.
Bebé rollito de canela. ¡De canela! JaeBum estaba por derrumbar la puerta o si no su corazón saldría de su lugar. Pero no fue necesario tal salvajismo; la puerta fue abierta y el corazón de JaeBum dulce y rápidamente arrancado de su pecho.
Oh, joder. Oh, mierda. Oh, Dios. Oh, cielos.
YoungJae rió tímidamente ante la forma en que JB subía y bajaba la mirada por toda su anatomía, con su boca entreabierta y sus ojos luciendo mucho más grandes que de costumbre.
— Choi YoungJae, bebé, mi cielo.
El menor volvió a reír, abrazando a JB por los hombros luego de que este lo tomara de la cintura.
— Justo cuando empiezo a creer que no puedes ser más hermoso, me abofeteas con tu perfección y me recuerdas que tú eres un ser superior.
— No exageres... — murmuró avergonzado, pero con una amplia sonrisa en el rostro.
— ¡¿Exagerar?! Bebé, te ves tan... Dios, no eres real.
YoungJae sonrió suavemente contra los labios de JaeBum, éste lo había besado con algo de torpeza antes de pasar sus manos por su cabello y después por sus mejillas.
— Tomaré todo esto como un "me gusta tu nuevo tinte".
JaeBum le besó la frente, acariciándole la cabeza. Su piel resaltaba de una forma preciosa con el azul de sus sedosos cabellos, haciéndola lucir más lechosa que de costumbre.
Eso combinado con su oscuro atuendo habían dejado a JB en el limbo.
— Ya no soy un pastelito.
— Aún lo eres, sólo que ahora eres un pastelito de... ¿moras?
YoungJae sonrió mientras entrelazaba su mano con la de JaeBum, justo cuando abrió la puerta una voz los hizo detenerse.
— ¡Hey! ¿A dónde van sin hablar antes con la autoridad? — BamBam apareció de la nada con crema de afeitar en el rostro.
— Ash, BamBam...
YoungJae fue interrumpido.
— Mañana a la una en punto en casa de Mark hyung. Si mi hijo llega con signos de invalidez, anciano, probarás mis dos meses en clases de Karate.
YoungJae lucía confundido mientras veía a JB reír junto a BamBam.
— ¡Diviértanse! — dijo BamBam antes de volver a su habitación.
YoungJae miró a JaeBum luego de que éste le besara la mejilla.
— ¿Nos vamos, BlueJae?
El menor rió alegre, asintiendo mientras tomaba la mano de JB para salir a su cita.
☀️
JB frunció el ceño, mirando en todas direcciones al igual que YoungJae.
— ¿Dónde estarán las casas de acampar?
— Quizá ya no las rentan. — supuso YoungJae, encogiéndose de hombros. — Podemos hacer otra cosa.
— Pero yo quería usar de nuevo una casa...
YoungJae sonrió enternecido por el leve puchero de JB, quien cruzado de brazos seguía buscando con la mirada la renta de las casitas de campaña.
— Yo tengo una en mi departamento, otro día podemos volver y la ponemos en el campo. ¿Te parece?
Resignado, JB asintió. Tomó la mano de YoungJae y dejó que éste lo guiara.
— ¡Mira! Podemos sentarnos debajo de ese árbol a comer. — dijo YoungJae señalando un inmenso árbol que conectaba sus ramas con otro, creando así un gran espacio con sombra donde podrían cómodamente pasar la tarde. — Pero primero vamos a la tienda.
YoungJae y JaeBum se dirigieron sin prisa hacia una de las tantas tiendas de conveniencia alrededor del emblemático río, mientras lo hacían el menor notó a varias parejas disfrutando al igual que ellos de una cita en el lugar. Sonrió un poco al recordar lo tímido que se había sentido en su primera cita al estar entre tantas parejas mientras él soñaba con formar parte de una junto a su hyung.
Miró su mano entrelazada con la de JaeBum y su sonrisa se hizo más amplia. JB lo notó y sonrió también al ver a su novio tan alegre.
— ¿Qué ocurre, cielo?
— Nada, es sólo que me parece increíble pensar en cuánto hemos cambiado desde la última vez que vinimos aquí solos, tú y yo. — dijo YoungJae, abrazando a JB del brazo. — Aquella vez no sólo era mi primera cita contigo, era mi primera cita en general. No sabía cómo debía comportarme, pero en cuanto empezamos a caminar a la estación de autobuses todo mi nerviosismo desapareció. Me sentía tan cómodo a tu lado que paré de pensar demasiado las cosas y me dejé llevar por ti. Fue sin duda uno de los días más lindos de mi vida.
Menos de 10 minutos en la cita y JB ya estaba agonizando de ternura.
Antes de entrar en la tienda, JaeBum lo sujetó de los hombros y besó su frente. La bonita sonrisa que YoungJae le dedicó lo llevó a besarle la punta de la nariz y después ambas mejillas.
— Te amo. — dijo JaeBum, apachurrando las coloradas mejillas de su novio. — Te acabas de ganar una ración triple de besos, aunque casi me haces llorar.
— ¡Wow! — dijo YoungJae entre risas, tomando de nuevo la mano de JB para entrar en la tienda.
En una canastita fueron echando dulces y demás botanas, junto a bebidas y las tazones de ramen que comerían.
— ¡Mira, Bumie! — lo llamó YoungJae desde otro pasillo. JB se dirigió a él, dejando salir al instante una carcajada al ver los bombones que YoungJae le mostraba. — Sólo que hoy no están al 2x1.
JaeBum se acercó a YoungJae y tomó el bombón que tenía en la mano, luego lo miró coqueto.
— ¿Y tus besos, bebé? ¿No hay oferta?
YoungJae le dio un leve empujón mientras reía avergonzado y huyó a otro pasillo, dejando a JaeBum riendo solo.
— ¿Quieres una de estas? — YoungJae tomó del refrigerador la malteada de fresa que a JB le gustaba, éste asintió mientras caminaba a él. — Se me antojó una de manzana, Markie hyung me dijo que están ricas.
Mientras YoungJae tomaba la bebida de la que hablaba, JB lo sujetó de la cintura. Los ojitos sorprendidos del menor le hicieron sonreír.
— ¿No se te antoja un besito?
— Estás muy coqueto hoy, Bumie.
— Es culpa tuya, tu cambio de look te hace ver muy... irresistible.
— ¡¿Qué?!
JB rió, soltando a YoungJae antes de que su rostro hirviera de lo rojo que estaba.
— Perdón, bebé. La verdad es que me he estado tragando un "te ves muy sexy" desde que me abriste la puerta.
Los circuitos en la cabeza de YoungJae explotaron. Se esperaba muchas cosas de JB, menos una confesión así.
— ¿Cre- crees que me veo... sexy? — dijo casi en un murmuro, atravesando por completo el corazón de JaeBum con su pequeño puchero tímido.
— Demasiado. — respondió JaeBum, quitando un mechón de cabello que cubría el ojo de YoungJae. — Pero aún sigues luciendo adorable, eso no se te quitará a menos que te cambies de rostro y eso sería la causa de mi suicidio.
— ¡¿Qué cosas dices?! — YoungJae se cubrió el rostro con suma vergüenza. Se sentía pequeñito ante los elogios de JaeBum, muy distintos a los que solía recibir.
JaeBum besó su cabeza. — Perdona, cielo. ¿Te hice sentir incómodo?
YoungJae negó, refugiándose en el pecho de JB.
Si es que había un Dios mirándolo, JB se encargaría de agradecerle antes de ir a dormir porque, joder, si su nivel de felicidad en ese momento pudiese ser representado en una cifra sería una muy larga.
— Bebé...
— Los noviecitos de allá atrás, ¿van a pagar o qué? — dijo el anciano, dueño de la tienda, mirándolos con el ceño fruncido y golpeando su bastón contra el suelo.
— ¡Papá! No molestes a los clientes. — se quejó la chica junto a él. — No se preocupen, tómense su tiempo. — les sonrió avergonzada.
Entre risas, YoungJae y JB se dirigieron a la caja y pusieron la canasta sobre la mesa. YoungJae se inclinó levemente en forma de respeto al mayor, quien lo miraba con los ojos entrecerrados.
— ¡Gracias por su compra! — dijo la chica, extendiéndoles las bolsas de papel con sus meriendas. — Que disfruten su cita, jovencitos.
— En mis tiempos no se usaba estar tan juntos, ¡sólo nos tomábamos de la mano!
— Ya, ya, papá.
YoungJae y JaeBum se inclinaron a los mayores con sonrisas divertidas antes de salir a la cocineta de la tienda para preparar sus sopas instantáneas.
— Chef Choi, dejo en sus manos mi ramen.
— No lo defraudaré, señor.
Como tenían por costumbre, YoungJae preparó las sopas de ambos con el sazón que al mayor le encantaba: picante y salado. Se sentaron uno frente al otro en una de las mesas y comenzaron a comer.
— Oye, bebé. JinYoung me contó que en su club harán algo especial para el festival de Año Nuevo de la próxima semana, ¿qué es?
— Es sorpresa, Bumie. No podemos decirle a nadie.
JB hizo un puchero que derritió por completo a YoungJae.
— Bueno, te daré una pista pero no le digas a nadie. — JaeBum asintió. — Además de cantar, vamos a bailar.
— ¡Genial! ¿Qué canción?
— Suficiente información.
JB volvió a pucherear pero YoungJae ya no cayó, en cambio le dio un besito en la mejilla.
— Bailaré para ti, Bumie.
— Estaré ansioso entonces, mi cielo. — dijo JaeBum con una sonrisa antes de besarle los labios. — Tengo entendido que también anunciarán al nuevo vocalista principal. ¿No es así?
YoungJae asintió. — Muero de nervios...
— Serás seleccionado, bebé. Eres el mejor, tu voz no merece menos que ser la principal.
— ¿Tú crees eso?
— Por supuesto.
YoungJae sonrió feliz antes de abrazar cortamente a su novio para seguir comiendo.
Al terminar sus respectivos tazones de fideos, volvieron a la zona del campo que habían elegido para pasar la tarde. JaeBum se recostó usando como soporte las piernas de YoungJae mientras que éste se recargó en el tronco de un árbol.
— ¿Recuerdas el karaoke al que fuimos aquel día?
— ¡Sí! Fue muy divertido. — respondió YoungJae, abriendo una bolsa de gomitas. — Ibas a confesarte antes de que se fuera la luz ¿verdad?
— Ni me lo recuerdes, me vuelve a dar coraje. — dijo haciendo reír a YoungJae. — Tenía la inspiración a tope y el valor ni se diga, ya te hacía entre mis brazos cuando... ¡Boom! A la mierda la luz.
YoungJae volvió a reír a carcajadas, contagiando a JaeBum.
— Aunque no pasó mucho tiempo más para que te confesaras. Fuiste tan dulce.
— Fui penoso. ¡Lloré! ¿Quién llora cuando se confiesa? Sólo yo.
— Pero fue adorable, me mostraste una parte muy sensible y abierta de ti mientras me decías lo que sentías.
JaeBum mordió su pan de chocolate avergonzado. YoungJae sonrió al ver sus mejillas llenitas y rosadas.
— Lo mejor fue cuando le dijimos a los chicos que ya éramos novios. — dijo YoungJae, recordando el momento.
— Lo dices porque no fuiste tú el amenazado por tres bestias a las que les arrebaté su cría.
YoungJae rió con ganas una vez más, ya basta le dolía el estómago.
— JinYoung hyung me preguntó "¿Estás seguro de esto?" — dijo YoungJae antes de volver a reír por el sonido de indignación de JaeBum. — Pero sólo estaba bromeando, se notó muy feliz con la noticia.
— Sí, significaba que dejaría de joderlo a él y a Jackson con mis llantos porque no me hacías caso.
— ¡Sí te hacía caso! Tú eras el que se hacía el "no me gustas, vete".
JaeBum se sentó, acercándose peligrosamente a la cara de YoungJae.
— Me fascinabas, me tenías como loco... me arrebatabas la calma sólo con mirarme. ¿Acaso nunca lo notaste o sospechaste?
YoungJae sonrió tímido, tomando a JB de las mejillas.
— Lo sospeché... pero no podía creer que alguien tan genial como tú estuviera interesado en mí.
— ¿Qué dices? Bebé, eres maravilloso. ¿Cómo no iba a fijarme en ti, mh? — dijo contra la mejilla de YoungJae antes de besarla.
YoungJae volvió a sonreír más ampliamente, dirigiendo el rostro de JB hasta chocar sus labios con los suyos. Dejó varios besos en la boca del mayor antes de besarle la nariz.
— Te amo. — dijo en un susurro.
— Y yo te amo a ti, mi cielo.
Volvieron a besarse, esta vez más profundo e intenso. JaeBum se sostuvo del tronco del árbol detrás de YoungJae mientras que su mano libre se perdió en el sedoso cabello del menor. En cambio éste aún lo sostenía de las mejillas, acariciándoselas a la par que movía sus labios al ritmo que él imponía.
JaeBum no tardó mucho en subir la intensidad del beso, un acto involuntario de hacer a su lengua actuar sobre los carnosos labios de su novio. YoungJae aceptó gustoso al intruso, dándole la bienvenida con su propia lengua.
El sonido de un claxon los hizo separarse, ambos se miraron con sorpresa antes de tomar distancia uno del otro.
Nunca se habían besado de esa manera fuera de la intimidad de la cama de alguno de los dos, por lo que estaban sorprendidos de haberlo hecho en el lugar donde estaban.
Pero ambos sabían el porqué lo habían hecho.
— Bumie...
— ¿Quieres ir a mi casa?
— Sí.
JaeBum se levantó con la misma prisa que YoungJae, después de tomar sus cosas tomó también la mano de YoungJae para empezar a caminar al auto del mayor.
YoungJae mordía su labio inferior suprimiendo una sonrisa, sentía su corazón latir a mil por hora mientras JaeBum conducía a casa, con un ritmo cardíaco muy similar al de YoungJae.
Ambos estaban ansiosos, expectantes de lo que pasaría en cuanto llegaran a casa. Aunque seguían sorprendidos de sus formas de actuar tan inusuales y desconocidas, también las sentían emocionantes.
Después de un corto trayecto llegaron a casa de JaeBum. Mientras éste bajaba las bolsas de snacks que ni siquiera probaron, YoungJae sacaba de la cajuela su pequeña mochila con su pijama y ropa limpia para el día siguiente.
JaeBum fue el primero en entrar a la casa, caminando con prisa a dejar las bolsas en la cocina. Al volver a la entrada, sintió su sangre calentarse de inmediato al ver a YoungJae quitarse su chaqueta para colgarla junto a la puerta.
YoungJae se veía increíble, joder, JaeBum estaba volviéndose loco. Aún más de lo que ya estaba por su precioso novio, quien lo dejó totalmente fuera de combate con su cabellera azul.
— Bumie, tu casa se siente más calientita que antes.
— Sí, mamá llamó a alguien para que arreglara la calefacción de la sala.
YoungJae asintió, con sus ojos inquietos por todo el lugar evitando a JaeBum.
Se sentía avergonzado, incluso más que en su primera vez junto a JB. Tenía la sensación de que había sido atrevido en el río y que había cruzado un poco la línea.
Lo que no sabía es que había encendido en JaeBum el mismo interruptor que encendió hace tiempo atrás en la rueda de la fortuna. Ese botón de querer hacerlo suyo con urgencia y un deseo desbordante.
— Bumie...
El poco control de JaeBum se esfumó ante el llamado de YoungJae, el cual sonó más como un jadeo.
Se acercó al menor y sin esperar ninguna respuesta, lo besó. YoungJae enroscó sus brazos en el cuello de JaeBum dejando que éste lo tomara de la cintura, pegándolo a la puerta.
Se besaron como nunca antes, con hambre y desenfreno, sin cuidado, simplemente dejando sus sentimientos y deseos fluir.
JaeBum sujetó a su novio por los muslos, alzándolo para empezar a caminar con él sobre su cuerpo a la habitación. La cama les dio la bienvenida con cálidas sábanas y con ese aroma que a YoungJae le nublaba el pensamiento, el perfume de JB.
— Eres tan... joder, bebé. Me arrebatas todo el control en un segundo, a este paso acabaré devorándote. — dijo JB entre una pesada risa reposando su frente en el pecho YoungJae, el cual subía y bajaba al ritmo de su agitada respiración.
— Y... ¿y por qué no lo haces?
YoungJae cerró sus ojos, totalmente avergonzado de lo que acababa de decir. JaeBum lo miró con sus ojos bien abiertos; no esperaba una respuesta así de YoungJae.
Pero le había encantado.
— ¿Me das tu permiso, bebé? — dijo acariciando el cuello del menor con su nariz. — No sé qué tanto haría si me dices que "sí".
— Descubrámoslo juntos entonces.
JaeBum estaba por colapsar. No estaba listo para esa nueva faceta de YoungJae pero, demonios, estaba encantado y a muy poco de arrancarle esa ropa que le habían dejado sin aliento en cuanto lo vio horas antes.
— Me gustas tanto, YoungJae. No puedes imaginarte cuanto, ni siquiera yo sé hasta qué grado he llegado. — confesó JaeBum, comenzando un paseo con sus manos por los muslos de YoungJae por encima de su ajustado pantalón.
YoungJae jadeó ante la peligrosa cercanía de la mano de JaeBum a su entrepierna, sujetó con algo de fuerza el cabello de éste a la par que lo besaba.
— Bumie... ¿te confieso algo y no piensas que soy raro?
— Dime, Jae.
YoungJae se cubrió los ojos con las manos, avergonzado de lo que estaba por decir.
— Te de- deseo mucho.
Su boca no tardó en ser atacada de nuevo por la de JaeBum; besos apasionados pero con ese toque lleno de dulzura que jamás faltaban en los labios de JB.
— Me hace feliz saberlo, YoungJae. Porque yo también te deseo mucho.
Ambos se sonrieron antes de besarse de nuevo. Sus manos inquietas comenzaron a despojar al otro de sus prendas hasta que la ropa interior era lo único que cubría sus ansiosos cuerpos.
JaeBum se alejó un poco, arrodillándose en su cama para poder apreciar el cuerpo semi desnudo de YoungJae.
— Mi pancita se fue. — dijo YoungJae, pinchando su abdomen. JaeBum dejó varios besos en él, provocándole cosquillas al menor.
— Con o sin ella eres precioso, mi cielo.
Los dientes de JB dejaron un camino de suaves mordidas desde el ombligo de YoungJae hasta su cuello, donde se entretuvo lamiendo y succionando la piel de aquella zona sensible.
YoungJae no podía dejar de pensar en todo lo que BamBam y YuGyeom le habían aconsejado, en si debía o no intentar tan siquiera una de todas las cosas que le fueron mencionadas.
Quería dejar una buena impresión en su novio, hacerle ver que él también podía darle placer. El problema era el miedo que YoungJae tenía a hacerlo mal y sentirse avergonzado de ello para siempre, aunque podía apostar que JB jamás se atrevería a hacerlo sentir mal por ello.
Se le escapó un gemido entre pensamientos innecesarios; JB había colado las manos entre su ropa interior, dándole suaves caricias a sus glúteos.
— Bebé, ¿en qué tanto estás pensan-...? — el cuestionamiento de JB se vio interrumpido por el repentino empujón que le dio YoungJae, haciéndolo caer de espaldas en la cama. Antes de que pudiera hacer o decir algo, YoungJae se colocó a horcajadas sobre él.
JaeBum sintió su cuerpo entero estremecerse ante la vista que su precioso novio le regalaba; el cabello de YoungJae se encontraba un tanto desordenado, sus mejillas y labios rojizos al igual que varias porciones de su torso a causa de los besos que JB se había encargado de repartir instantes antes. Todo eso sumado a la notable excitación debajo de sus bóxers blancos.
— Si te soy sincero no sé que rayos estoy haciendo, pe- pero... sólo quiero hacerte sentir bien, Bumie.
— YoungJae, podrías simplemente quedarte en esa posición mirándome como lo estás haciendo y yo sería el hombre más satisfecho de la Tierra. — dijo JaeBum, con una enternecida sonrisa. Llevó sus manos a los muslos que le apretaban los costados y los acarició con lentitud, disfrutando de la sensación de la piel del propietario erizarse. — Pero te dejaré hacer lo que quieras conmigo, cielo. Porque soy tuyo ¿no es cierto?
YoungJae asintió mordiéndose el labio inferior. Su vista viajó de los ojos al abdomen de JaeBum, el cual acarició con suavidad y timidez. Paseó sus dedos por el fornido torso de JB a la par que le besaba los labios; JB mantuvo sus ojos cerrados, sumergido en la placentera sensación que le otorgaban los anchos y húmedos labios de YoungJae en su cuello y posteriormente por su pecho.
Los suaves suspiros que JaeBum dejaba salir sirvieron como motivante para que YoungJae siguiera con su camino de besos por cada porción de piel al descubierto que iba encontrando. Sonrió un poco al sentir la mano de su novio acariciarle el cabello; lo miró y sonrió en automático al ver que él también sonreía, respirando agitado y con esa mirada dulce que era imborrable en JaeBum.
— Veo que te tomaste muy en serio que soy tuyo, mi cielo. — dijo JB con una traviesa sonrisa al notar varias marcas de succiones en su pecho. — Me gusta, me gusta.
YoungJae sonrió avergonzado, dejando que JaeBum tomara posición de nuevo sobre su cuerpo. Jadeó un poco alto cuando los dientes del mayor se clavaron sobre su clavícula seguido de una leve succión. Las manos de JaeBum ya estaban trabajando en quitar la ropa interior de YoungJae, quien cerró por instinto sus piernas al sentirse desnudo. JB sonrió.
— ¿Avergonzado? — dijo en un ronco murmuro, acariciándole los muslos para relajarlo un poco. — ¿Por qué? No es la primera vez que veo tu bonito cuerpo, bebé.
Quizá era lo diferente que lucia la mirada de JB bajo la cual YoungJae se sentía un poco intimidado, ya que los ojos del mayor lucían más penetrantes de lo usual debido a que el deseo comenzaba a desbordarse de su impaciente cuerpo.
— Me... me descubriré si tú también lo haces.
Joder, YoungJae era demasiado para JB.
— Trato hecho. — dijo JaeBum antes de quitarse a sí mismo la ropa interior. Sonrió al ver el rostro sumamente rosado del menor, quien tenía su vista fija en la pared. — Hey, ¿cómo debo tomar que no me mires? ¿No te gusto?
Como siempre, YoungJae cayó redondito en la trampa de JaeBum. Lo miró de inmediato a la cara, casi por inercia bajó la mirada.
Wow.
— ¡A- ay, Bumie! No puedo... — YoungJae se cubrió el rostro con las manos, haciendo reír a JaeBum. Pero éste no estaba burlándose, sino sumamente enternecido.
JaeBum no podía aplazar más el momento, por lo que con delicadeza fue separando de a poco las piernas de YoungJae sin recibir quejas. Se posicionó entre ellas al mismo tiempo que capturaba en un dulce beso los labios del menor.
— Bumie te hará el amor toda la noche, ¿estás de acuerdo con eso, bebé?
YoungJae se sujetó de los hombros de JaeBum, asintiendo lentamente con sus ojos perdidos en los de JaeBum. Era increíble el poder que éstos tenían sobre él.
— Sí, Bumie... quiero hacer el amor contigo toda la noche.
Dada la aprobación, JB no tardó en preparar con sumo amor y cuidado el cuerpo de su chico, besándolo y acariciándolo son suavidad para relajarlo y hacerlo disfrutar al máximo de la noche.
Sin duda así fue, perdieron la cuenta entre vueltas y vueltas en la cálida cama de cuántas veces lo hicieron. Ambos estaban agotados, pero con una inmensa felicidad latiendo en sus pechos.
Había sido una experiencia nueva para ambos, ya que nunca se habían entregado con tanta pasión y desenfreno como aquella noche. Pero eso sí, los mimos no se hicieron esperar al terminar. Eran de suma importancia para que el pequeño peliazul pudiera conciliar el sueño después de los consecutivos estímulos.
Todo se resumía a una increíble noche, donde una vez más quedaba en claro que la intensidad de su amor era como la de un rayo de Sol.
☀️
Hola, bellezas. 💖 ¿Cómo están hoy?
Espero que el capítulo les haya gustado, lo hice con muchísimo amor.
Una disculpa si esperaban algo más explícito que eso, pero creo que eso es lo más que puedo darles en esta historia u.u no me inspira a hacer algo más fuerte. Espero su comprensión. 💚
Muchísisisisisisimas gracias por las 400K lecturas, sigo en shock. No puedo creer que la historia haya llegado a tanto, no tengo idea de si lo merezca pero muchas, muchas gracias.
Para celebrarlo... ¿les gustaría una tercera parte de "ASK IN A SUNSHINE"? Estuve leyendo las partes anteriores y parece gustarles, además de que han pasado varias cosas desde la última vez así que quizá hay cosas que quieran preguntarle a estos nenes jejejeje
Cambiaremos las reglas para hacer esto un poco más rápido de hacer y con más oportunidades para más usuarios, k tal?
1. Una pregunta por usuario. Puedes comentar en la casilla de los 7 miembros, pero únicamente 1 vez.
2. Su servidora seleccionara las mejores 15 preguntas para cada miembro. Esto será para evitar preguntas repetidas o similares a las de las dos versiones anteriores e intentar responder aquellas que puedan aportar más al hilo de la historia.
A continuación las casillas, comenten en el nombre de cada miembro. (El como lucen en la multimedia es como lucen actualmente en la historia).
☀️ Bebé Jae ☀️
(ES PRECIOSO, DIOS MÍO. ERA JUSTO Y NECESARIO PONERLO AZULITO EN LA HISTORIA. ES LO MEJOR QUE ME PUDO PASAR EN LA VIDA, LO MEJOR DE MI AÑO)
☀️ Osito Bumie ☀️
(AY, con su icónico mullet. Aunque en la historia aún no está totalmente crecido, está en proceso y uf, me encanta demasiado y a bebé Jae también)
☀️ Markie Pooh ☀️
(Mark sigue con su cabello rojo. ❤ Precioso ¿verdad?)
☀️ Seunie ☀️
(Ay, papantla. Tus hijos vuelaaaan. Amo y extraño a Jackson rubio así que lo traje de vuelta aquí en mi historia u.u)
☀️ JinYoungie ☀️
(Pelinegro porque pues no hay de otra, veda? JKASKJA bueno, castaño. Pero personalmente me encanta con el cabello negro)
☀️ BamBamie ☀️
(c limpia la baba. P R E C I O S O)
☀️ YuGyeomie ☀️
(Desde los inicios lo ha tenido negro y aún lo tiene así, sólo que crecido de la manera que muestra en la foto. ES TAN LINDO)
Lo publicaré tan pronto me sea posible. Espero que les emocione la idea tanto como a mí, adoro hacer esta dinámica. <3
¡No olviden usar el "#" para el cumpleaños de YoungJae! Nuestro solecito se merece todo nuestro amor en este día tan especial. Hagámoslo feliz como él nos hace felices a nosotros. ¿Sale y vale? 💚
☀️ Gracias por leer ☀️