Dormí un par de horas, si que me hacían falta, cuando desperté ya me sentía mejor, no tan débil como hace un rato.
Seguía pensando en todo lo que pudo pasar durante esos 123 días, fue demasiado tiempo, pudo ser peor, ciertamente, pero si Bill logró enamorar a mi Pines en menos de un mes, ¿qué puedo pensar?
—Hey—levante la vista, era mi copia amarilla.
—¿S-Si?
—¿Cómo te sientes?
—Pues, mejor. Ayer hablé con Dipper, me contó todo y sigo un poco confundido.
—Lo sé, Phill si que sabía actuar... Pero ve el lado positivo, ya no estará cerca nuestro, todo volverá a la normalidad.—cuando te mate si que veré el lado positivo, hermano.
—Si, tienes razón—sonreí de la forma más leve y linda—Hasta me siento más tranquilo, es relajante saber que la persona que te usaba como títere ya no lo hará nunca más.
—En verdad me alegró mucho por ti Will, de hecho, te tengo una sorpresa.—lo miré fingiendo emoción, sinceramente tenía miedo de lo que fuera a decirme—Dipper y yo, nos casamos.—¡¿QUÉ?! MALDITO MISERABLE.
—¿Enserio? ¿Hace cuanto? ¡Qué emoción! ¿Hay fotos?—debo controlarme, debo controlarme, debo controlarme, debo controlarme...
—Claro, ahora vuelvo con ellas.
—¡No me hagas esperar demasiado!—le bromeé intentado tragarme la irá que se estaba desbordando.
Se fue riendo, vi como se desvanecía entre las personas y los pasillos. Miré mis brazos, tenía que golpear algo, no puedo contener tantos sentimientos así, ¿QUÉ SE SUPONE QUE HAGA AHORA? Matar a Bill es un hecho pero, ¿cómo convenceré a Mason? ¿Tendré que obligarlo? No quiero hacerle daño pero, si el no es mío, no será de nadie.
Cuando estaba dispuesto a levantarme para ir a golpear algo al baño, un niño pequeño entró a mi habitación, lo miré confundido y me extendió las manos con unas fotos.
—Dijo papá que te las diera, tío Will—tomé las fotos aún estando en shock por eso de "tío Will".
—¿Quién eres tú?—le cuestioné poniendo las fotos sobre la mesa de un lado.
—Soy Tyrone, Tyrone Cipher Pines, es la primera vez que hablo contigo tío Will, aunque he venido a visitarte mucho cuando estabas durmiendo.—lo miré con asco, aún estaba en shock.
—¡Tyrone! Te dije que no vinieras—entró mi Dip y jalo de la mano al niño.
—Papá Bill me dijo que viniera a darle las fotos a mi tío.—pude notar los nervios de mi castaño.
—¿Es tu hijo?—pregunté a secas, sin dejar de mirar al niñato.
—Si, Bill y yo lo... Emm... Ya sabes.
—Oh ya... ¡Soy tío!—necesito salir ya de este hospital, necesito salir para poder matar a mi maldito hermano.
—Si, pero tu sobrino no debería estar aquí. Te lo iba a decir ayer pero, veo que Bill se me adelantó, que cosas, ¿no?—fingir no te sirve de nada, es un hecho que me tienes miedo, cariño.
—Vaya, duermo durante 4 meses y ya soy tío, que nueva vida llena de maravillas.
Claramente soy mejor actuando que cualquiera, se creyó enserio que ya soy normal. Ví su sonrisa tan amplia, su tranquilidad regresaba de nuevo, que iluso eres, mi amor.
—Vamonos Ty, tu tío debe descansar aún.—el pequeño asentía con la cabeza y me dijo adiós con la mano—nos vemos en un rato, Will.
—Claro, adiós a los dos—y se fueron.
Mordí mi labio con irá, sentí la sangre en mi garganta, que dulce sensación y sabor. Di un suspiro pesado, me calme un poco para poder levantarme sin que las máquinas detectarán demasiado mi pulso.
Cuando estaba en el baño, quería golpear la pared, no podía con tanta furia en mi venas, pero debía contenerla, cualquier rastro de moretón es jugar a la cuerda floja por mi plan en mente.
Aquí es donde me preguntó, ¿qué haría Phill?