Lo siento linda...
Un chico se dirigía al centro comercial de la ciudad de Royal Woods, estaba muy nervioso como asustado, pues por querer ayudar a su hermana en recuperar su empleo, había generado un problema, el cual fue que hizo un desorden en la tienda donde trabajaba su hermana, cada vez tiraba algo y la amiga de su hermana, Fiona tenía que limpiar ese desorden.
Llegó a ayudar a su hermana pero sin querer generó un problema, Fiona se ganó regaños de la señora Carmichael, dado que dejaron un desorden grave Lincoln y Clyde al investigar la desaparición de las bufandas.
Entonces decidió preguntarle a Leni las horas de trabajo de Fiona, con gusto su hermana le dijo las horas en que se encontraba.
Lincoln decidió agarrar valor comprarle algo y pedirle disculpas.
Al entrar al centro comercial, entro al trabajo de Leni, cuando se da la sorpresa de ver solo a Miguel, uno de los amigos del trabajo de Leni.
Va donde él, lo saluda y le pregunta por Fiona, amablemente le dice que todavía es la hora de descanso que debe estar por ahí caminando o en la tienda de la competencia comprando a bajo precio.
Lincoln agradece y se va a buscarla ya que faltaba casi media hora para que termine su descanso de ella.
Se camina casi todo el lugar, y lo raro es que no la encontró adentro.
Salió afuera a suspirar por no haberla encontrado en ese rato, entonces escucha unos llantos.
Lincoln se dirige siguiendo esa triste melodía, al estar cerca se da cuenta y es Fiona la que liberando lágrimas y sollozos.
Se acerca a ella y está habla para sí misma pero en voz baja diciendo:
-Rayos, con todos eso problemas junto con la preparatoria no tendré tiempo para ayudar a mi madre, Dios por qué tuve que tener mala suerte estos días, la señorita Carmichael me ha dado horas extras para reponer todo el desorden que dejaron esos chicos...aunque es mi culpa, no fui cuidadosa, debo aceptar la responsabilidad.
En ese momento Lincoln se sintió peor, ya no sabía que hacer pero él es el chico del plan, él debe saber que hacer y sí, pensó en algo que era lo más lógico.
Fiona regresó a su trabajo, la señora Carmichael la llamó, ella se dirigió pensando que quizás la vaya a echar.
La señorita Carmichael le dijo que hiciera sus horas estipuladas por el contrato, se sorprendió por lo dicho, para quitarla del asombro le dijo que alguien iba a trabajar desde mañana acá en la tienda y que eso mejoraría el rendimiento de las ventas.
Fiona le agradece, la señorita Carmichael le dice que ella será la encargada de guiar por unos días al nuevo trabajador, para que sepa cómo funciona el negocio.
Fiona al terminar su turno se va a su casa a ayudar a su madre que también está como ella trabajando sino que tiene tres trabajos, ella es la que tiene que ordenar la casa y ayudar a sus hermanos.
Y llegó el otro día, al entrar a la tienda, noto a Leni y a Miguel alegres, les preguntó la razón de tal alegría, Leni le dijo que el nuevo trabajador era alguien genial y divertido, Miguel le dijo casi lo mismo.
Con lo que le decían formaba en su mente buenas expectativas, entonces procedió a dejar sus cosas en su casillero, al dejarlas y salir, la señora Carmichael la llamó a su oficina.
Ella tranquila, al llegar ahí su jefa le presentó al nuevo trabajador de la tienda, al ver quien era su mueca de alegría se volvió una que decía: "No había algo mejor".
Era Lincoln Loud, el hermano de su amiga Leni, el muchachito que junto con su amigo le generó desorden esos días anteriores.
La jefa le dijo que comenzará a guiarlo por tres días después ya iba a manejarse solo ahí.
Lincoln le quizo hablar pero ella solo lo ignoró y le dijo que la siguiera.
Lincoln entendía las razones de su ignoro, le había causado muchos problemas por jugar a los detectives, en fin.
Lo guió de mala gana, le mostraba cada lugar de la tienda, le decía que debía hacer y que no, indirectamente le decía que no debía hacer desorden, él sabía que era normal que este molesta.
Y así paso el primer día, persuadiendo a la gente para que le compre la ropa, gracias a la ayuda de Leni y Miguel, adulaba a la gente pero no tanto, a veces que tenía que ser sincero, otras veces una que otra mentira inocente.
Fiona solo lo veía con molestia, Leni y Miguel no entendían pero no le dieron tanta importancia, quizás sean problemas familiares de ella.
Ya pasaron tres días en los que Fiona tuvo que guiarlo, ahora debería darle más importancia a sus asuntos pero cuando ya no estuvo a su lado para guiarlo, se sintió...¿vacía? ¿Triste? ¿Sola?
Pues en esos días a pesar de que ella era algo adusta con él, se sentía alegre ya que tener a alguien que le pida consejos o este al tanto de ella, le parecía en el fondo algo tierno.
Rayos, recién se daba cuenta con el pasar de los días que Lincoln no era un chico que cause problemas, se dio cuenta que es un chico genial, atento y siempre dispuesto a ayudar a quien lo necesite.
Entonces comenzó a darle un poco de amistad a Lincoln, en otras palabras hablarle de buena manera, Lincoln se alegro de que ya no esté molesta con él.
Y sin querer y sin pensarlo, paso un mes y unos días, Leni estaba muy alegre de que su hermano trabaje con ella, ya que su hermanito era alguien que siempre le ha ayudado y es atento con ella, se alegraba de que sus amigos aprecien las cualidades de su hermanito.
Un día que la señora Carmichael les dijo que los descansos iban a variar que Leni y Miguel iban a trabajar de corrido hasta tal hora y de ahí Fiona y Lincoln.
Entonces al final quedaron en que Leni y Miguel tendrían el primer descanso.
Ya era el turno de Fiona y Lincoln, Lincoln le dijo para ir a comer un helado ahí, ella le dijo que está bien, Lincoln le dijo que la iba a esperar ahí.
Pasó no más de cinco minutos, ella vio a Linky sentado en una de las mesas de la heladería, cuando ella paso a sentarse, él le dio un ramo de flores.
Ella se quedó sorprendida, nunca nadie le había dado un ramo de rosas, ni el chico de los smoothies fue tan atento con ella.
Ella no podía decir ni una palabra, estaba sonrojada, como triste ya que ella al principio fue fría con él.
El procede a decirle que lo sentía por los problemas que le causó, que nunca fue de mala intención, que estas flores son de parte de él, el helado que le iba a invitar era de parte de Clyde y el smoothie era de parte del chico que estaba en ese stand; el chico de los smoothies estaba mirando apenado esa escena.
Fiona le dijo que era lo mínimo que esperaba, mirando a otro lado con los ojos cerrados, diciendo en su mente que era tan hermoso ese detalle.
Lincoln siguió diciendole que de veras lo sentía mucho, que pidió el empleo para poder disculparse con ella y saber que era esforzarse.
Fiona se quedó en shock, nunca pensó que Lincoln hiciera esa noble acción, pedir trabajo solo por ella.
Ella se sonrojó aún más por eso no miraba a Lincoln, él pensó que aún seguía molesta pero Fiona le dijo que lo perdonaba pero que al final ella también le quería pedir disculpas por su actitud cuando comenzó a trabajar.
Lincoln le dijo que es grandioso volver a personas como ella.
Fiona ya no podía más se levantó y le dio un abrazo a Lincoln, él se sorprendió por ello y le correspondió también aquello.
Luego de algunos segundos ella le dice que muchas gracias y le da un beso en su mejilla, ahora él era el sonrojado.
Fiona al fin entendió que Lincoln era un chico que solo aparecen cada cierto tiempo.
Desde ese entonces su amistad creció, pasaron los años; quien diría que de ser alguien molesto para ella sería alguien que le alegraba sus días....