Adrien veía con un aura oscura a un nervioso Nathaniel que fingia estar durmiendo.
Está vez, vio el futuro en donde la maestra pedían para que formen un equipo pero con alguien distinto y ése remedo de tomate le pedía a Marinette hacer equipo con él y cuando estaban en su casa, le robaba un besó en los labios a su futura mujer.
Oficialmente, Nathaniel estaría con el nombre escrito en su Adrien note.
Ya van tres; Plagg por pintarle el rostro mientras duerme, Marinette por serle infiel en la relación que no tenían y ahora Nathaniel.
Aunque a Plagg le perdonaba por dejarle ser Chat noir y a Marinette también por que era una buena amiga y la futura madre de sus hijos.
-Muy bien, hagan equipo de a dos, pero uno diferente al que suelen hacer.
Al fín la maestra habló.
Adrien se puso de pié y levantó la mano.
-¡Yo con...
El futuro donde hacía equipo con Marinette, vino a su mente.
Los dos sentados muy juntos, él con un lápiz en mano y Marinette robandole un beso.
Sus mejillas se sonrojaron y señaló a Alya.
-Yo con Alya y Marinette con Nino. He dicho, caso cerrado.
Y se volvió a sentar mientras imaginaba un futuro donde Alya le hacía un interrogatorio policial sobre sus sentimientos por Marinette y en el futuro de Nino y Marinette, haciendo el trabajo, Nino hablaba de Alya y Marinette preguntaba sobre él.
Que raro.
¿Por qué Marinette querría saber sobre él?
Será que quería saber sus horarios para evitarlo.
Se volteó y miró a la ojiazul con los ojos llorosos y un pequeño puchero, mientras ella que estaba mordiendo su bolígrafo, levantó una ceja confundida.
En ésos días, Adrien sí que estaba raro.