Valentina: Es Alonso.
Gabriela: y para que te escribe?
Valentina: quiere venir a pasar unos días en la hacienda , parece que por asuntos de la inmobiliaria con la que trabaja vienen por asuntos de trabajo y por comodidad no quiere quedarse en un hotel.
Gabriela: te está pidiendo hospedaje en la hacienda?
Valentina: si
Gabriela: y que le vas a decir?
Valentina: no lo sé, tengo que consultarlo con José Miguel.
Gabriela: José Miguel lo tolera pero no creo que le parezca buena idea, después de todo es tu ex novio y aún está enamorado de ti.
Valentina: pero Alonso es sólo un amigo.
Gabriela: pero él no te ve así.
Valentina: de todos modos lo consultaré.
Después de que todos se fueron y sólo quedaron José Miguel y valentina con sus hijos y resto de familia, Valentina le habló del mensaje de Alonso.
José Miguel: No creo que sea buena idea, además en San Pedro hay buenos Hoteles.
Valentina: y si se siente mejor con nosotros? Recuerda que Alonso no tiene muchas amistades; es muy solitario.
José Miguel: si ya tomaste una decisión no entiendo para que me preguntas?
Valentina: no lo he hecho, todavía; está bien, le diré que no, después de todo sigues viéndolo como una amenaza.
José Miguel respiró hondo...
José Miguel: bien, dile que sí, pero si intenta pasarse de listo contigo, olvidaré mis modales, y se irá de la hacienda.
Valentina se acercó y le dijo al oído : "tú eres el único en mi vida" y lo empujó hacía la cama, luego ella cayó sobre él, empezaron a rodar y a besarse, los dos rieron a carcajadas, los gemelos llegaron y se tiraron sobre ellos, todos no paraban de reír, por suerte la cama era muy grande para todos.
Al llegar la hora de dormir los pequeños no quería ir a la cama, fue una osadía convencerlos, pero terminaron por leerles un cuento.
Al día siguiente los gemelos disfrutaban de su clase de inglés cuando la directora entró de sorpresa a presentarles quién sería la miss de artes, venía del DF y durante años anteriores había sido parte de una congregación para ayudar a personas de bajos recursos económicos, su nombre era Martina, que al presentarse ante los pequeños le llamó la atención José Federico.
Valentina atendía la empacadora, dio su aprobación para la nueva imagen de sus productos, tenía un pequeño ayudante, se trataba de Chuy su gran amigo, ahora todo un hombrecito listo para entrar a la universidad, le encantaba estar con ella y con José Miguel, era tan trabajador como su papá Juan, que ahora era el capataz de la hacienda "El Milagro", Teresa, su esposa trabajaba en la procesadora de lácteos como asistente de Valentina y su hija Teresita de 12 años se la pasaba jugando con sus gemelos ya que los quería como si fuera de su familia.
Sabino a quién José Miguel quería como un padre estaba retirado, pero lo apoyaba en la hacienda todo el tiempo, eso sí, disfrutaba ir a la escuelita de "Los cascabeles" a contarle historias a los niños, era como el abuelo de todos los pequeños.
Mientras tanto en el DF Alonso se despedía de su Hijo Santiago que iría a pasar unos días con su abuela a Monterrey.
Antiago: por favor dale muchos saludos a Valentina, y dile que quisiera pasar las próximas vacaciones en la hacienda, entrégale esto .
Alonso recibió de las manos de su hijo unos pendientes que él jovencito quería darle de regalo, pues por años ella lo había ayudado mucho y la ausencia de su madre había sido soportable.
Al terminar el horario escolar José Miguel pasó por sus hijos.
Martina: eres muy guapo José Federico, sabes que te pareces a alguien a quien quiero mucho.
José Federico: tu papá?
Martina: No! Un amigo.
Cecilia Benita: y como se llama tu amigo?
Cuando Martina iba a responder Cecilia Benita corrió a los brazos de su padre, que venia entrando.
Cecilia Benita: papá!!!
José Miguel levanto con sus brazos a su pequeña y detrás de ella a José Federico
Martina dio la vuelta y su corazón se aceleró al ver a José Miguel quien asombrado no daba crédito a tenerla en frente.