Y no pude evitar soltar un grito que fue acallado por una mano, me alejo de la puerta y me puso contra la pared, pero rápidamente me soltó y me volteo, era cristina, estaba feliz, me quede confundida pero estaba feliz de verla así que me puse de puntitas, porque ella era más alta y la bese
Te tengo que decir algo.....- vi que ella puso cara de preocupación así que la acaricie la mejilla, vi que eso la relajo un poco- me gusta estar contigo
Cristina se quedó perpleja
Enserio... -dijo cuando al fin pudo reaccionar-
Claro que si cariño –dije tratando de imitar su voz y haciéndola reír- vamos a la sala- dije estirando mi mano-
Vamos –dijo Cristina tomando mi mano.
Al llegar nos sentamos juntas y recargue mi cabeza en su hombro, no podía creer que tuviera un momento tan romántico con una mujer, digo, años de decir que me gusta la verga, y ahora donde quedaron esas palabras...
Me siento extraña con esto pero no la pienso rechazar ahora. No solo le dolería a ella, también a mí. Porque ya me encariñe.
Que mamada, es como en la bella y la bestia, me enamoro de mi secuestrador, es medio pendejo, no.