Regresó al sofá donde estaba antes, y la misma chica se acercó, lista para volver a su regazo.
"He terminado por hoy" dijo mirándola fríamente, con su voz sin emociones. La chica parecía molesta pero se alejó, y tan pronto se perdió en la multitud, Freddie apareció y se sentó junto a él.
"Eres un idiota cariño" dijo agitando el vaso que sostenía. "Brian la invitó aquí porque tienes que dejar de hacer toda la mierda que estás haciendo para olvidarla" señaló Freddie. "Y eso es porque tienes miedo de lo que sientes por ella. Si tienes miedo de que ella no se sienta igual, eres ciego porque nadie en el mundo te quiere más que la chica que Deaky está tratando de consolar en este momento ".
"No estoy de humor para hablar de ella Fred" dijo Roger con impaciencia. "Y eso no es de tu incumbencia, ella es mi amiga, no la tuya ".
"Ahí es donde te engañas, querido. Todos tenemos un gran afecto por ella, se convirtió en nuestra amiga, pero para ti, ella es mucho más que eso, y lo sabes. Así que sé un hombre y persigue a la única mujer que realmente te ha amado antes de que sea demasiado tarde y la pierdas para siempre" sugirió Freddie.
Roger odiaba estar de acuerdo con Freddie, odiaba la forma en que lo dominaba cuando tenía razón en algo. Hacía que Roger quisiera golpearlo en la cara.
"¿Alguna vez has pensado en ella con alguien más?" comenzó Freddie. "Tu dulce chica respirando con dificultad, sudando por el peso de otro hombre, volviéndose loca al tocar a otro".
"Freddie" dijo en un tono de advertencia. Roger apretó los puños cuando Freddie habló, su sangre estaba hirviendo.
"Imagina que ella gime el nombre de otro mientras él está dentro de ella" continuó Freddie, y esa fue la gota que derramó el vaso.
Roger se levantó y agarró el cuello de la camisa de Fred, su cara estaba roja de lo furioso que estaba. Solo pensar en esas cosas lo volvía loco. Había sido estúpido pensar que alejarse sería lo mejor que podía hacer. Él te amaba, te quería como nunca quiso a nadie, no iba a dejar pasar el deseo, solo empeoraba la situación. Tuvo que ir tras de ti y decirte la verdad, si no sintieras lo mismo, al menos él obtendría una respuesta.