Lo que un día fue » Justin Bi...

By hope-less

848K 27.3K 2.6K

❝Las promesas están para cumplirse, a pesar de lo que un día fue❞ Créditos tráiler: @/bieberfanficsof y @/pr... More

Sinopsis.
1. Invitación
2. Fiesta
3. Un baile caliente
4. Recuerdos dolorosos
5. Llamada telefónica
6. Viaje a California
7. Dejarlo con las ganas
8. Asientos compartidos
9. Los Ángeles, California
10. Aléjate de ella
11. ¡Vamos a surfear!
✖012.
✖13.
✖14.
✖15.
✖16.
✖17.
✖18.
✖19.
✖20. Maratón 1/5
✖21. Maratón 2/5
✖22. Maratón 3/5
✖23. Maratón 4/5
✖24. Maratón 5/5
✖25.
✖26.
✖27.
✖28.
✖29.
✖30.
✖31.
✖32.
✖33.
✖34.
✖35.
✖36.
✖37.
✖38.
✖39.
✖Capítulo final.
Epílogo
Aviso segunda temporada
Promesas (Segunda temporada)
Prefacio
1. De vuelta en donde todo empezó
2. Sospechas
✖3. ''Todo me recuerda a él''
✖4. "Despedida de soltero"
✖5. ''El reencuentro"
✖5. {Parte dos}
✖7. "¿Qué haces aquí?"
✖8. ''Cena para tres''
✖9. "Las palabras pueden abrir viejas heridas"
✖10. "Mis brazos siempre te abrigarán"
✖11. "Aléjate de mí"
✖12. "Seducirla"
✖13. "Muévete así para mí, nena"
✖14. "Niña de mis ojos"
✖15. "Dulce o truco"
✖16. "Labios tentativos"
✖17. ''Celos"
✖18. "Juego de seducción"
✖19. "Lo que siento por ti"
✖20. "Descubriendo verdades"
✖ 21. "Fue bueno mientras duró"
✖22. "Quédate conmigo esta noche"
✖ 23. "El corazón nunca se equivoca"
✖24. "No está en mis planes dejarla ir"
✖25. "Mi corazón no puede con tanto"
✖26. "Estoy aquí contigo, ángel"
✖26. Segunda parte.
✖27. "Pero te amo a ti"
✖28."Hasta nunca, Justin"
¿ELIMINADA?
✖29. "Mi futura esposa"

✖6. "Nuestra canción"

8.2K 322 34
By hope-less

{Kelsey}

Un gran salón se sitúa enfrente de mis ojos, y mis oídos captan la música desde afuera, la decoración que hay en la entrada le favorece a todo lo temático de la boda. Logan se encuentra hablando por teléfono con uno de sus colegas sobre un trabajo que no logré entender, ya que no estaba concentrada en eso.

Estoy parada en la acera mirando un punto invisible, tratando de no pensar demasiado y concentrarme en una sola cosa, que es pasarla bien en la celebración de boda de mi mejor amiga.

Solté un suspiro frustrante, quería no pensar, ignorar todo esto que está torturando la cabeza, pero extrañamente no puedo hacerlo, algo en mí no quiere hacerlo. En la ceremonia hice hasta lo imposible por no mirarlo y fue inútil, de forma disimulada le miraba. ¿Algo descarado, no? Claro que lo es, está muy mal de mi parte, terriblemente mal.

Tengo novio y ése es Logan, no entiendo el porqué pensar en Justin, sinceramente no entiendo o mejor dicho, ni yo misma me entiendo. Quizás es el hecho de no haberlo visto durante tanto tiempo ó por lo que pasó cuando nos volvimos a encontrar, una de esas dos opciones. Aunque mi cabeza está vuelta un nudo con todo éste rollo de encontrarme tan casualmente con Justin —nótese mi sarcasmo—, y todas sus preguntas desconcertantes.

Ni siquiera noté cuando Logan se había posado a mi lado y me miraba con el ceño fruncido, notablemente preocupado por mi estado fuera de lugar, pues estoy demasiada ida desde hace un buen rato.

—¿Te encuentras bien, amor? —tomó delicadamente mi rostro entre sus manos. Miré sus profundos ojos azules y volví a perderme en ellos, son realmente hermosos.

—Estoy bien —fingí una sonrisa. Para mi mala suerte Logan me conoce bastante bien como para no darse cuenta de que algo no andaba bien.

—Kelsey —dijo con un tono severo. —¿Por qué me mientes? Te conozco demasiado bien y algo te pasa. Quiero saberlo ahora —demandó.

«Pasa que tienes en mente a tu ex novio», sacudí mi cabeza despacio y maldiciendo interiormente. Maldito subconsciente.

—No estoy mintiendo —intenté sonar convincente. —¿Por qué no me quieres creer? —pregunto intentando cambiar de tema.

—Porque te conozco desde hace tiempo y tus ojos te delatan. ¿Estás así por haber visto a Justin? ¿Es eso que te tiene de esa manera? —arqueó una ceja, esperando impaciente una respuesta.

Negué efusivamente con la cabeza y tomé una bocanada de aire para hablar calmadamente, sin hacerle sospechar.

—¡Por supuesto que no! —exclamé, algo alterada. —Enserio estoy bien, perfectamente bien y solo es conmoción por Cami, nada más. No te hagas conclusiones que son totalmente falsas Logan.

Él inhala profundamente y no despega su mirada de la mía, odio cuando sabe cómo intimidarme para sacarme las cosas.

—Bien, haré que te creo —dijo con suspicacia. —Ya mejor entremos, parecemos desubicados aquí en medio de la entrada —carcajeó, sacándome una sonrisa. Estiró su mano hacia mí para que la tomase.

—De acuerdo —sonreí, aceptando su mano y entrelazando nuestros dedos.

Quedé embobada cuando nos adentramos en el inmenso salón, examiné detalladamente cada cosa que se encontraba allí, los colores son en blanco y azul, así como el invierno. En el techo hay luces de distintos colores y una gran araña en el medio de éste, las mesas son lo suficientemente grandes para siete personas o más, todo está perfecto y no parece nada extravagante.

Hay un pequeño escenario que está ocupado por los músicos que tocan un suave jazz y el DJ está por otro lado. En una esquina está una inmensa y larga mesa repleta de diferentes aperitivos y bebidas alcohólicas, exceptuando algunas que no lo son y el pastel de boda se encuentra en otra mesa.

Busqué con la mirada la mesa que nos toca sentarnos —claramente es la de los novios y los chicos—, la encontré en el fondo cerca del escenario, además de que es la más grande de todas.

Tiré del brazo de Logan apresurando nuestros pasos, no puedo ocultar la emoción de volver a ver a mis chicos, los extrañé demasiado.

Cuando me acerqué lo suficiente centré mi mirada en Justin y en una chica desconocida, un revoltijo inundó mi estómago al ver cómo la está besando y no pude apartar la vista, abrazó su cintura y murmuró cosas en su oído que no pude escuchar.

Y antes de que alguien se diese cuenta que estoy mirando como estúpida aquella escena, salté hacia la mesa —literalmente— captando la atención de toda, especialmente la de Justin.

—¡Hola chicos! —saludé entusiasmada. Ellos solo se quedaron viéndome con una sonrisa colgada en sus labios. —¿Qué les pasa? ¿Acaso no me darán un abrazo? —pregunto alzando ambas cejas.

El primero en acercarse es Chris, quien se aparta lentamente de una chica bastante bonita que está sentada a su lado. Rápidamente envuelve sus brazos a mi alrededor y toma mis manos dándome una vuelta completa, dejo escapar una pequeña risita.

—Kelsey —besa mi mejilla. Su sonrisa no se borra en ningún momento y me inspecciona de arriba abajo. —¡Haz crecido bastante, eh! —bromea. Rodeo los ojos con diversión y le pego juguetonamente en el brazo.

—Y tú sigues haciendo chistes de cualquier tontería —carcajeo suavemente.

—Te extrañamos mucho —sonríe abiertamente. Voltea su rostro para mirar a Logan y le sonríe con simpatía. —Hey Logan, ¿qué tal? —hacen un saludo con las manos, de esos típicos saludos de hombres.

—Christian —asiente con la cabeza sonriendo de costado. —Muy bien, todo bien, gracias.

Chris vuelve a su asiento con la chica pelinegra, y en un abrir de ojos Ryan está posicionado enfrente mío, con su típica sonrisa blanca y reluciente.

—Hiciste bastante falta por éstos lados Cassey —dice con un tono serio. No tarda ni dos minutos cuando ya está riendo junto conmigo, los demás también ríen. A excepción de Justin.

—Pensé que me habían olvidado —hice un pequeño puchero. —A mí también me hicieron mucha falta todos ustedes —suspiré algo conmocionada. —Pero estoy aquí y no volveré a irme —dije completamente segura. No volvería a irme otra vez, ya huí bastante del pasado.

—Ojalá que sí eh, porque nos haz hecho sufrir mucho. Enserio te echabámos de menos —se acercó más y me abrazó frotando mi espalda con sus manos. —Especialmente él —susurra en mi oído. Mi cuerpo se estremece porque sé a quien se refiere.

Por el rabillo del ojo veo sus ojos mieles mirándome fijamente a mí y a nadie más, intento no parecer intimidada, pero soy demasiado cobarde como para sostenerle la mirada, así que me limito a mirar el suelo y separarme lentamente de Ryan.

—Lo prometo, lo prometo —repetí sonriendo sin mostrar los dientes. Ryan y Logan se saludan sin tensión alguna, eso me alegra, ya que no quiero que lo hagan sentir fuera de lugar.

Cami me hace unas señas para que me sentase a su lado, camino hacia ella y antes de que pudiese correr la silla hacia atrás, Logan se adelanta y yo le sonrío tímidamente, él toma asiento después de mí. Levanto la vista y encuentro a Justin justo enfrente mío, puedo notar su mandíbula tensada y sus nudillos están blancos gracias a la fuerza que ejerce en ellos. No está muy contento al parecer.

—¿Por qué ustedes dos no se han saludado? —preguntó una chica completamente desconocida para mí. Ni siquiera la había notado llegar, en ningún momento noté su presencia.

—Amelie no seas metida y cierra la boca —espetó Camila, mientras la mira amenazante. —No es asunto tuyo niña.

—Solo he hecho una pregunta —se defiende rápidamente. —Como vi que todos la abrazaron y le dijeron cosas cariñosas, pero el rubio no lo hizo. Me quedé en duda, pensé que todos eran amigos —se encogió en hombros restándole importancia.

Todos dirigen la mirada hacia ella y Amelie no se intimida por las miradas fulminantes de Camila y Chaz, quienes obviamente esperan que cierre la boca antes de que hable de más. Empieza a jugar con sus cabellos teñidos de un color azul y rubio, sus ojos verdes examinan cada rostro y puedo percibir que no pasa de los dieciséis años.

Recuerdo que Cami había hablado sobre una prima que vivía en New Jersey y la había descrito como; irritable, metida y fastidiosa como el demonio, supuse que es Amelie.

—¿Se quedarán mirándome como retrasados? —arqueó una ceja. —Dejen de hacerse los misteriosos y contesten, ni que fuese la gran cosa.

La tensión se acumula en el ambiente... bueno así lo siento yo en éstos instantes. Dirijo inconscientemente la mirada hacia Justin y él inmediatamente hace lo mismo, nuestras miradas vuelven a conectarse por milésima vez en el día, incluso vuelvo a estremecerme y odio que cause esta maldita sensación. 

Me obligo a contestar la pregunta de Amelie, sé que los otros no querrán contestar así que no queda otra opción más que hacerlo yo misma.

—Amelie —llamo su atención. Rápidamente dirige toda su atención a mí, esperando ansiosa mi respuesta. —Ya nos hemos saludado en la ceremonia, somos... amigos también —finalizo, tratando de no ahogarme con esa palabra. Ni siquiera parecemos conocidos, mucho menos "amigos".

Chris, Ryan, Chaz y Camila se desconciertan por lo que he dicho, pues no se esperaban que Justin y yo nos hubiésemos encontrado casualmente antes de estar todos juntos, porque cuando llegué le dieron una mirada rápida a Justin a ver cúal sería su reacción y la mía.

—Ella no merece explicaciones —dijo exasperada. —Por favor, Amelie, vete con mis padres, aquí estamos entre amigos y esta no es tu mesa. Retírate, hazlo rápido —escupe con un tono severo. Camila puede, fácilmente, perder toda la paciencia.

—Pero que humor primita —rodea los ojos con cierto fastidio. —Agth, bien, me voy. Por lo que veo nadie me quiere aquí —bufa levantándose de la silla. Agradezco a Dios que se haya ido, no puedo tolerar otra pregunta personal, en lo absoluto.

—Los adolescentes se comportan así, hay que entenderla. Alguna vez nosotros fuimos así —ríe suavemente la chica que está acompañando a Justin. Los demás ríen con ella, excepto yo... ¿Debería reírme? Porque sinceramente no me causó ninguna gracia.

—Todos fuimos así, amor —le sigue la corriente Justin, con una sonrisa divertida en sus labios. Rodeo los ojos sin poder evitarlo, así que tomo un gran sorbo de mi champán ignorando el besuqueo que está enfrente de mí.

«A eso se les llaman celos, Kelsey», se burla mi subconsciente. Detesto cuando mi propia mente se burla de mí por ser tan tonta.

—Kelsey, ¿me acompañarías al baño? —pregunta Cami a mi lado. Dejo la copa de champán a un lado y asiento con la cabeza, por como me está mirando sé que quiere hablar del tema.

—Ya regreso —le susurro al oído a Logan. Dejo un casto beso en la comisura de sus labios y me levanto despacio del asiento, al mismo tiempo que Camila.

Cami toma mi brazo para empezar a caminar con rapidez hacia el baño más cercano, cuando entramos al baño de mujeres inspecciona que no haya absolutamente nadie y cierra la puerta con pestillo. Recargo mi espalda en el lavamanos cruzándome de brazos y esperando las miles de preguntas que deberé contestarle.

—¡¿Cómo es eso de que ya se han encontrado antes?! —exclama, colocando cada mano en su cintura moviéndose de un lado a otro. —¿Qué hiciste? ¿Cúal fue la reacción de Justin? ¿Cuándo exactamente pasó y cómo? ¡Oh Dios mío, Kelsey! —cierra sus ojos tocándose los sienes. —¿Te besó? ¿Qué demonios hizo? ¡Habla ya! —insiste desesperadamente. Frunzo el ceño tratando de meditar todas sus preguntas. Cami está jodidamente ansiosa por saber qué pasó.

Lleno de aire mis pulmones y expulso éste por la boca, cerrando unos segundos mis ojos, preparándome mentalmente para expresar todo lo que sentí cuando volví a ver a Justin.

—Pues había llegado sola, ya sabes, Logan tenía cosas pendientes en el trabajo. Cuando estaba subiendo las escaleras, los tacones me hicieron una mala jugada y tropecé torpemente hacia atrás, pero alguien detuvo mi caída —mordí mi labio, recordando como sus fuertes brazos me rodearon con fuerza. —Ése fue Justin... pero yo no me había dado cuenta hasta que levanté la vista y lo miré, para mí todo el alrededor se congeló. No podía creérmelo, estaba sintiendo mil millones de emociones justo en ése momento. Justin me abrazó, yo le devolví el brazo... a ti no puedo mentirte porque me conoces jodidamente bien... ¡Lo extrañé muchísimo! —admití nostálgica.

Terminé de contarle absolutamente todo y ella quedó tan sorprendida como yo.

Se me entraron unas inmensas ganas de llorar, mis ojos picaban y no podía ocultar mis sentimientos, soy pésima actriz en cuanto a eso. Cami me miró detenidamente y sin pensarlo dos veces tenía mi cabeza en su hombro y ella frotaba mi espalda de arriba abajo, haciéndome sentir mejor.

—Tranquila Kels —susurró en mi oído. —Es natural que te sientas así, han pasado dos años y no tuvieron un final feliz. Por eso te sientes así, cálmate, no empieces a llorar por favor —trató de consolarme.

Tiene razón, no tengo porqué sentirme mal o dejar que me afecte, ya los años pasaron, nuestro final no terminó feliz y así se suponía que debía terminar, ¿no? Porque nada es para siempre, eso siempre lo he tenido en cuenta. Y debí suponer que Justin y yo no estaríamos siempre juntos, aunque él fue quien tomó la decisión de no cumplir todas las promesas que hicimos.

—Gracias Cami —me separé lentamente de su cuerpo, inhalé profundamente y le regalé una sonrisa sincera. —Siempre encuentras la forma de hacerme sentir bien.

—No tienes nada que agradecerme nana —carcajeó. —Y debes sentirte perfectamente, tu querida mejor amiga acaba de casarse y tienes un novio que cada día está más bueno —bromeó guiñándome el ojo juguetonamente.

—A veces pienso que le tienes ganas a Logan —arqueé una ceja soltando una pequeña carcajada. —Créeme que estoy muy feliz por ti, mucho realmente.

—Lo sé, lo sé —sonrió mostrando sus perfectos y delineados dientes blancos. —Ahora debemos salir para tomarnos las fotos, quiero llenar los tres álbumes que compré.

—¿Tres álbumes? —fruncí el ceño. —¿Por qué tantos?

Se encogió en hombros y respondió: —Quiero tener muchos recuerdos de éste día. Además quiero presumirle a todas las perras solteras de yoga que me he casado y que mi esposo es jodidamente caliente.

Solté una gran carcajada echando mi cabeza hacia atrás y mordí mi labio inferior para detener el ataque de risa.

—Eres increíble —negué con la cabeza. —Ya mejor salgamos de aquí.

Cuando salí del baño caminamos por varias partes del salón, incluso me encontré a unas viejas amigas que no veía desde la secundaria y unos conocidos. Desde que había llegado a Canadá ansiaba ver a una persona muy especial para mí, que nos habíamos distanciado desde que me fui y ése es Liam. Ni siquiera lo he visto desde que llegué aquí, eso es extraño ya que él nunca faltaría a la boda de una de sus mejores amigas.

Estuve a punto de preguntarle a Camila en dónde diablos se encontraba Liam pero ella inmediatamente me jaló por el brazo y les hizo señas a los demás para que fuesen a tomarse las fotos. Y para mi mala suerte, Justin se acercaba directamente hacia mí, colocándose a mi costado.

{Justin}

Es tan jodidamente incómodo actuar como si nada pasara y se me hace difícil no mirar a Kelsey, lo peor es que ambos estamos frente a frente. Desde que llegó al salón junto con el idiota de Logan —siempre lo consideraré así—, no he podido dejarla de mirar, aún siendo consciente de que Nati se encuentra a mi lado.

Pero gracias al cielo Natalie no ha sospechado nada de la incómoda situación.

La pregunta que hizo Amelie nos impresionó a todos, ya que nadie —los que sabemos del tema—, mencionó nada del tema o de lo que pasó. Sobretodo que para nadie es fácil hablar sobre aquello, por varias razones y es mejor quedarse callado, pues evitamos la tensión en el ambiente.

Algo en mí ansia con muchas ganas hablar con Kelsey, necesito dejar todo perfectamente claro y no quedarme con ninguna duda, no me gusta dejar las cosas a media. De alguna manera u otra encontraré la forma de hablar a solas con Kelsey, tarde o temprano éste momento debe llegar.

Agradecía infinitamente que Natalie no hiciese ninguna pregunta incómoda, nunca le he hablado sobre la pasada relación de Kelsey y yo, de todo lo que pasó y no estoy listo para hablarle sobre eso. Y dudo mucho que le vaya decir, quizás algún día. Ni siquiera le he mencionado a Kelsey, porque no quiero involucrarla en mi pasado, en lo mierda que fui de adolescente.

Me levanté del asiento avisándole a Nati que buscaría un trago, ella simplemente asintió con la cabeza y siguió conversando con Sarah, la futura novia de Chris.

Fui hacia la mesa de bebidas y pedí al barman un vaso de vodka puro, no me percaté de que alguien repetía mi nombre una y otra vez.

—¡Justin! —sacudí mi cabeza rápidamente, frunciendo el ceño. —¿En qué mundo estás, hombre? —carcajeó.

—Lo siento Chaz —hice una mueca. —¿Qué pasa?

—Nos tomaremos las fotos —rió mirándome con diversión. —Desde hace rato te he notado fuera de lugar.

—Creo que debes imaginarte porqué —rodé los ojos. —Estoy distrayendo mis absurdos pensamientos. El vodka ayuda a olvidar todo lo que no quiero recordar —me encogí en hombros, sonriendo con amargura.

—Sé que no es nada fácil para ti y que te haz controlado, pero debes llevarlo despacio Justin. No empieces a desesperarte, porque no quiero que la noche se arruine —advirtió con un tono serio.

Sé a qué se refiere con desesperarme, porque cuando me desespero todo sale de control y hago cosas que luego me arrepiento, es mucho mejor evitarlo. Tampoco quiero arruinarle la celebración a mi mejor amigo, no se lo merece por todo lo que ha hecho por mí a lo largo de nuestra amistad.

—Te prometo que no arruinaré nada —afirmé con una pequeña sonrisa colgada en mis labios. —He estado bastante pacífico desde un buen rato, desde que la vi —lamiendo mis labios. —Y créeme que no es nada fácil tenerla tan cerca y no poder hacer absolutamente nada.

—Lo sé, tío —palmeó mi espalda. —Ya tendrás tiempo para hablar con ella, incluso podría ayudarte con eso.

—¿Me ayudarías? —arqueé una ceja. —¿Estás hablando enserio?

—Claro —se encogió en hombros. —¿Por qué no? Ustedes definitivamente tienen mucho de qué hablar. Tienes que decirle todo, Justin.

—No creo poder hacer eso —suspiré pesadamente. —Se decepcionaría de mí y le produciría lástima. Yo realmente no quiero eso.

—¡Eso no es cierto! —exclamó, negando con la cabeza. —Ella lo entendería y lo sabes muy bien.

—Las personas cambian con el tiempo —hice una mueca. —Dudo mucho que Kelsey no lo haya hecho en éstos dos años.

—Terco Bieber —bufó, negando nuevamente con el la cabeza. —Sigue siendo la misma chica, la cual aún te mueve el piso —dice con una sonrisa torcida, llena de diversión y picardía.

Rodé los ojos y me tomé el último sorbo del vodka, cerrando los ojos por el ardor que bajaba por mi garganta hasta mi estómago.

—Como digas —murmuré. —Estamos perdiendo el tiempo aquí, de seguro están ansiosas de tomarse miles y miles de fotos. 

Caminé hacia la parte en donde se encontraba el pastel, ya que allí se tomarían las fotos. Y me dirigí hacia Kelsey quien está parada al lado de Camila, la miré directamente a los ojos y ella esquivó la mirada, como era de esperarse.

Suspiré profundamente y cuando estuve a su costado, no mantuve ninguna distancia, porque siento la necesidad de tenerla muy cerca.

—Quédense quietos para poder tomar las fotos —dijo en voz alta el fotógrafo. Ryan aún no terminaba de arreglar su cabello y Chris no sabía en dónde encajar.

Hasta que al fin todos nos decidimos acomodarnos en perfecto orden —luego de unos cuantos empujones por parte de Ryan—, estábamos listos para las fotos. El fotógrafo se acomodó inclinándose ligeramente hacia delante tomando la cámara con cuidado entre sus manos y el ruido del flash empezó a resonar en nuestros oídos.

Inconscientemente llevé mi brazo alrededor de la cintura de Kelsey y me pegué aún más a su cuerpo, no escuché ninguna queja de su parte, ni siquiera un movimiento en desaprobación por lo que acabo de hacer. Y eso me hace sentir muy bien.

Todos quedamos más pegados, los chicos con los brazos encima de los hombros y las chicas rodeando sus cinturas, en cada foto salíamos sonrientes o haciendo alguna mueca. Chaz y Camila quisieron tomarse fotos por separado, algunas fueron conmigo y con Natalie, las demás fueron con Kelsey y el modelito de revista, claramente me refiero a Logan.

Observo como Kelsey deja de saludar a todas las personas que se le acercan —amigos y conocidos—, la veo sonreír y por inercia, lo hago yo también.

Ella tiene la sonrisa de un ángel, mi ángel. El ángel que descuidé y dejé ir por ser un egoísta e imbécil, ése ángel ahora está siendo querido por otra persona, la cual no soy yo, porque lo he descuidado. Y cuando descuidas las personas que amas y te importan... ellas se alejan y no regresan al mismo lugar.

Los novios están en el centro del salón bailando al compás de la canción A Thousand Years de Christina Perri, esa canción me trae muchos recuerdos que, siendo sincero, no es bueno recordarlos en éstos momentos. Dirijo la mirada hacia Kelsey que mira fascinada a Chaz y Camila, los demás invitados también observan la tierna escena de los recién casados.

Al terminar la canción todos los presentes aplauden con una sonrisa en sus labios —incluyéndome— e inmediatamente suena Iris de GooGoo Dolls, cierro mis ojos y en cámara lenta, se vienen a la cabeza todos los recuerdos de cuando Kelsey y yo estábamos locos uno por el otro, compartiendo el mismo sentimiento, un sentimiento mutuo.

Todas esas veces que nos escapamos de clases para ir a nuestro lugar secreto —el último rincón del instituto, por el jardín—, ambos con nuestros reproductores de música y audífonos. Cada uno ponía una canción para que la escuchara el otro y casi siempre escuchábamos esa canción.

Nos comíamos a besos hasta que nos dolían los labios por tanto contacto, para los dos se fue convirtiendo en una adicción incontrolable y se volvió una necesidad con el tiempo, nunca teníamos suficiente uno del otro.

Mis pies se están moviendo en su dirección y no puedo detenerlos, siento que no tengo control de mí mismo, solo estoy dejándome llevar y ciertamente, eso no me parece malo, ni siquiera me preocupa estar en público. Simplemente estoy caminando hacia ella sin importar qué, porque esta es nuestra canción y no pienso desperdiciar un baile íntimo con Kelsey.

—¿Bailas conmigo? —susurré en su oído, posicionándome a su costado.

Se sobresaltó al escuchar mi voz, pero me mantuve firme de todas formas, solo será un baile, nada más. Ni siquiera le mencionaría sobre cuánto la extrañé y la necesité, entre otras cosas.

—Es nuestra canción, ¿recuerdas? —tomé su mano despacio. Sentí como se tensó ante mi tacto, demonios, extrañé tomarla de la mano.

—Es-tá... Está bien —balbuceó, asintiendo con la cabeza. —Bailemos —se mordió el labio inferior. Sonreí de oreja a oreja, estirando mi mano por su cintura y atrayendo su cuerpo al mío.

Tenía la cabeza agachada pero pude ver una pequeña sonrisa en sus labios, eso me hizo sonreír a más no poder y con más confianza nos encaminamos hacia una pequeña esquina, apartados de todo el mundo.

Rodeé su cintura y la atraje a mi cuerpo sin ningún centímetro de distancia, ella tímidamente posicionó sus pequeñas y delicadas manos en mis anchos hombros.

—¿Y cómo haz estado? —rompí el silencio. Levantó el mentón para mirarme mejor y me regaló una pequeña sonrisa. Amo su maldita sonrisa angelical, nunca me cansaré de decirlo.

—Muy bien, siéndote sincera —se encogió en hombros restándole importancia. —¿Y tú? ¿Qué de tu vida?

—Fue difícil al principio, muy, muy difícil. Pero lo he conllevado —lamí mis labios. —Bien, hasta ahora... creo que estoy bien —reí suavemente. Asintió con la cabeza volviendo a quedarse en silencio.

—Esto es extraño —frunció el entrecejo. La canción avanzaba cada vez más y las letras se hacían más profundas. —Me hace recordar a... —se calló inmediatamente, bajando la mirada.

—¿Los viejos tiempos? —alcé una ceja y levanté su mentón haciendo que me mirara. —No somos extraños, puedes hablar confiadamente.

—Sí Justin, a los viejos tiempos —suspiró. —Aunque esa canción no está ayudando a alejar ésos viejos tiempos —rió sin muchas ganas.

—No, para nada —reí mordiendo mi labio inferior. —Uhmm, ¿tú crees en las casualidades? —susurré en su oído. —Porque éste día han pasado demasiadas casualidades.

—No, no creo en las casualidades —respondió unos segundos después, algo dudosa. —Las casualidades no existen... pero yo sí creo en el destino.

—Ambos estamos de acuerdo —carcajeé. Ella soltó una pequeña risita, una hermosa risa.

Lentamente fue apoyando su cabeza en mi hombro y cerró sus ojos, cantando en voz baja la canción.

—Nuestra canción —susurró bajo, pero lo suficientemente alto para escucharla perfectamente. Incliné mi barbilla rozando mis labios por su mejilla y comencé a cantarle en el oído mientras acariciaba su cintura.

Y así nos quedamos hasta que terminó la canción, ninguno de los dos habló sobre ningún otro tema, simplemente cantamos al unísono la canción. Nuestra canción, la cual tiene un gran e importante significado que solo nosotros dos entendemos y conocemos, otro de los tantos inolvidables momentos.

****

✖Voten y comenten si les está gustando✖

↓Contáctame↓ 

{twitter}☞ @biebsxbangerz

{ask}☞ @CarooCyrus

Continue Reading

You'll Also Like

385K 25.3K 97
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.
190K 16.1K 35
|𝐀𝐑𝐓𝐈𝐒𝐓𝐒 𝐋𝐎𝐕𝐄| «El amor es el arte de crear por la sensación misma, sin esperar nada a cambio,más allá del placer mismo del acto creativo...
628K 58.2K 45
"ADAPTACIÓN" Me ví obligado a casarme con el hombre más frío, cruel, orgulloso, prepotente y multimillonario de todo el país solo por un contrato que...
79.1K 8.3K 54
☆ y me pueden decir diez mil cosa' de ti pero yo pongo mi alma en el fuego por ti nadie sabe, lo que yo haría no saben que ni con cien mencione' van...