Melany
No había podido negarme al ofrecimiento de Dylan, porque no quería ir andando a la escuela, cualquier cosa menos eso.
Yo sé y soy consciente de que podíamos ir en mi auto, pero hace días que estaba luchando con él y tenía que conseguir el dinero para llevarlo al taller, era imposible conseguirlo bastante rápido.
—Mine, muévete—Mi mejor amiga caminaba lentamente mientras estudiaba el auto de Dylan.
En secreto, yo había tenido esa misma impresión cuando lo vi, no conocía mucho de marcas y solo podía decir que era muy bonito.
—No deberías ser tan cruel—Dijo el a mi lado, sabía que debajo de esos lentes tipo aviador tenía una cara risueña.
—Pues es que debe moverse, llegamos tarde.
En realidad no era todo culpa de mi mejor amiga yo también había contribuido a ello, más que nada porque me había quedado fantaseando un par de minutos mas.
No podía sacarme el maldito sueño de la cabeza, preguntándome una y otra vez si realmente se sentirá así, si volver a besarlo realmente se sentiría así.
Si bueno estaba perdiendo la cabeza.
—Hola—Mine por fin entro al auto y deje escapar un suspiro.
La presencia de mi amiga ayudaba a que nocometiera una locura. —Hola—Respondió Dylan mientras yo me giraba en míhaciendo para hacerle una mala cara a mi mejor amiga.
—¿Porque te estuviste tanto?
—Sabes como es Tomy.
Tomy era el primo pequeño de Minerva, era un pequeño diablillo pero era adorable el chiquillo. Muchas veces había intentado hacernos travesuras, pero la mayoría de las veces se veían frustradas porque no era lo suficientemente astuto. Aunque según Mine estaba mejorando.
—Si, si un niño adorable.
Me gire hacia la ventana porque realmente no toleraba la pregunta en los ojos de Mine y es que ella me conocía mejor que nadie en este planeta, sabia que en su cabeza ya se estaban formando miles de preguntas y es que no había tenido el tiempo de platicarle mucho, en realidad creo que no le había platicado nada de Dylan, era mi secreto por ahora.
Pero ya sentía que en cualquier momento iba a explotar si no lo contaba al menos tenia que decirle a mine ella siempre tenia una solución para todo o al menos deseaba que tuviera una opinión para esto.
Cuando llegamos quise bajar lo más rápido posible, más que nada porque deseaba escapar de él y su aroma. No sabía cómo describirlo, pero definitivamente podría volverme adicta.
—Paso por ti a la hora de salia—Su tono no daba lugar a ninguna replica y aun asi lo hice.
—No es necesario—Baje del auto lista para salir corriendo y encontrar mi lugar seguro dentro de la escuela, donde esperaba Dylan Castle no me torturara.
La ventana del Lexus bajo a mi espalda y escuche de nuevo su voz.
—Bien, te veo a la hora de salida—Abrí mi boca para discutir mientras me giraba, pero el ya se estaba marchando.
—Dios, es un bombón—Mine se aferró a mi brazo con fuerza y sonreía enormemente.
—Minerva, es mi cuñado.
Yo sabía que era mi cuñado, como también sabía que era demasiado guapo para mi propio bien.
No pude despegar la mirada del auto hasta que desapareció y suspire.
—Y están solos, por unos días más—Agrego mi amiga cosa que me hizo cerrar los ojos, si bueno bienvenida a mi infierno.
—Estás loca, Mine. Entre él y yo no va a pasar nada.
No sé como actuaria mi mejor amiga si supiera los sueños que tengo con el y mas que nada que me había besado, claro y peor aun que quería volver a besarlo.
—Eso dices ahora, pero en realidad quiero saber todos los detalles cuando pase.
Mine se encamino hacia la escuela con una sonrisa en los labios a modo de triunfo.
—¡Estas loca!—Grite detrás de ella antes de también comenzar a caminar hacia la entrada.
Si buscaba en mi amiga una opción o ayuda, definitivamente estaba perdida con esta mujer. Al parecer el atractivo de Dylan también le había afectado un poco de la cabeza y no le interesaba que fuera el novio de mi hermana, no ella estaba totalmente confiada de que algo pasaría entre nosotros.
Me pare en mi casillero para dejar mis cosas y tomar los libros que necesitaba y Mine no se hizo esperar apoyándose en el casillero continuo al mío.
—Yo solo digo. Lo tienes para ti sola y no debes desaprovechar.
—Claro, Mine. Solo que se te olvida que es el novio de mi hermana—Cerré el casillero y negué con la cabeza antes de alejarme de ella, pero Mine era insistente.
—No es por venganza primero que nada—Aclara antes de seguir con su idea—Creo que tu también le gustas.
—¿Qué te hace pensar en ello?
—No viste la forma en que apretaba sus manos en el volante, es como si le costara todo no ponerte una mano encima, él quería tocarte.
—Estas perdiendo la cabeza—Descarte de inmediato su idea. Aunque en el fondo deseaba que fuera verdad.
Habíamos compartido un beso y el día anterior había sido increíble, pero eso era todo.
—Mel, confía en mí y no te detengas por Ashley esa mujer es un arpía.
Minerva me dejo con una sonrisa en los labios mientras se iba a su clase.
Joder.
De todas las ideas más alocadas que había tenido mi amiga, esta se llevaba las palmas como se le ocurría que Dylan y yo pudiéramos tener algo.
Aunque de nada sirvió que le negara las cosas a ella, durante todo el día la idea rondo mi cabeza.
¿Qué tan malo sería tomar algo de felicidad para mi?