🌸Hace tres años🌸
- ¡Qué bien!
- ¡Mi nombre está ahí!
- ¡El mío también!
Los gritos de los niños se escuchaban por toda la sala. Estaban todos reunidos revisando la lista de los finalistas de la competición.
Algunos lloraban por no lograr pasar, otros lloraban porque no creyeron pasar, pero lo hicieron, algunos en particular no se molestaban en revisarla, y no porque no les interesara; sino porque sabían que estaban ahí sin siquiera revisar.
- ¿Cómo ha estado tu hijo, Kenta?- preguntó con preocupación una mujer a otra.
- Lo han vuelto a descalificar. Estoy un poco decepcionada, pero esos dos niños eran demasiado espectaculares.- respondió la segunda mujer, algo avergonzada.
- Lo sé. Kim Yugyeom y Min Yoongi, esos dos chicos coreanos están muy por delante del resto, se nota lo mucho que practican.
- Las clases para mi hijo valieron la pena, pero eso es una razón aún mayor para que esté tan frustrado.
- Me imagino que sí. Y ese otro chiquillo coreano, Jeon Jungkook, tiene el primer lugar, ¿no? Los demás niños solo hacen que él se vea aún más grandioso.
Lista de Finalistas
Primer lugar ㅡ Jeon Jungkook
Segundo lugar ㅡ Min Yoongi
Tercer lugar ㅡ Kim Yugyeom
- Todos los participantes usan a Jeon como contrapunto. Solo buscan ganarle.- suspiró la mujer.
En una banca dentro del edificio de la competición, estaba un pequeño niño rubio de piel pálida con cara de fastidio y sus manos empuñadas con fuerza, al lado tenía a otro niño peliplateado un poco más alto comiendo un helado con una cara en blanco, completamente inexpresivo.
- ¡No soporto a ese mocoso de Jeon!- susurró el rubio, golpeando la palma de su mano con su puño.
- ¿Porque hemos perdido contra él?- le respondió su compañero de asiento, sin ninguna expresión en su cara y con un tono de poco interés.
- ¡Claro que no! ¡Solo estoy preparando el terreno para aplastarlo en la final!- gritó muy enfadado aún el más pequeño- Pero eso no le quita que sea un cretino.- susurró, haciendo un puchero bastante adorable- Ni siquiera mira el resultado antes de irse a casa, como si ya asumiera que ha ganado, es decir, ya sabes, ¿no podría al menos fingir estar contento? Hasta eso me molesta.- esta vez se levantó de su asiento y empezó a caminar en círculos, rojo por la ira.
- Él no muestra interés en la gente que lo rodea, ni siquiera en nosotros, que somos lo más cercano a ser su competencia.- respondió con voz calmada el más alto, comiendo aún su helado- Aunque, ahora que lo pienso, creo que tampoco muestra interés en sí mismo.
- Sí que te lo tomas con calma.- ahora más calmado.
"- Si claro, con calma. ¡Jamás me habían humillado tanto en mi vida!" pensó, pero obviamente no lo diría en voz alta.
Tratando de disimular su enfado, agregó: - Si no está interesando en nosotros, tendré que hacer que se interese, algún día haré que le importe, lo juro.
"- Voy a destruirte, Jeon Jungkook."
🌸
Antes de darme cuenta, mi aliento blanco desaparece en el cielo. Si alzo la mirada, las flores de cerezo tienen unos brotes rosas. Doy vueltas y vueltas en círculos, cargando con alegría y dolor la primavera que me está esperando.
🌸En la actualidad🌸
Dos chicos, uno rubio y otro peliplateado, este último más alto, ambos observaban con desagrado al chico de lentes que venía subiendo las escaleras de la enorme sala con una sonrisa tímida en su rostro, la cual desaparece al por fin sentir las pesadas miradas sobre él.
"- Parece que ha crecido en altura, pero en realidad no ha cambiado nada. Aún lleva esas irritantes gafas de grueso marco negro, aún camina con la cabeza baja, aún tiene esa cara de abatido que deseo golpear. Definitivamente eres Jeon."- pensó el rubio.
- Cuánto tiempo sin vernos.- dijo en voz alta para ser escuchado por el pelinegro, con un tono relajado para no intimidarlo ni incomodarlo.- ¿No crees, Jeon?
Jungkook solo veía con una disimulada extrañeza al chico pálido con camiseta de Iron Maiden, detuvo su caminar y pensó unos segundos, tratando de aclarar esta extraña situación.
- Este...- rascó su nuca, acomodó sus lentes nervioso y con un tono de voz bajo y tímido preguntó- ¿Quién eres tú?
🌸
- Esto está bastante vacío.- comentó Taehyung, entrado a la sala donde sería la preliminar de su amigo.
- Al contrario, está bastante concurrente para ser solo una ronda preliminar.- corrigió Jimin- Supongo que ese es el "Efecto Jeon".
En eso apareció Taemin, quien acababa de venir del baño.
- Todo el mundo estaba hablando sobre Jungkook en el baño, parece que es bastante importante, ¿no?- Taehyung asiente con orgullo y con sus mejillas sonrojadas- Por cierto, el ambiente de aquí es muy raro.
Ambos chicos presentes lo ven con un pronunciado ceño fruncido en sus cejas.
- ¿A qué te refieres?- pregunta el menor de todos.
- Bueno, escuché a unos chicos en el baño hablando sobre él, uno de ellos dijo "¿Jeon volverá a mostrar sus increíbles habilidades?" y el otro le respondió "Exactamente, como dice la partitura, bajo el control de su madre". Me pareció muy extraño.
- Bueno, es normal, todos saben sobre el asunto de Jungkook y su madre.- respondió Taehyung.
- Sí, pero eso no es todo.- ambos chicos lo ven extrañado- Escuché a uno de ellos decir que Jungkook tenía algo a lo que ellos llaman "La Técnica de la Marioneta".
- ¿¡Qué?!- grita el pelirrojo enfadado y aturdido a la vez.
Obviamente Taehyung, al no estar dentro de este duro mundo de la música juvenil, no estaba enterado al respecto; pero por suerte, alguien en el grupo sí lo estaba.
- La Técnica de la Marioneta.- apremia Jimin- No es ninguna técnica, ni siquiera es algo especial. Es una forma despectiva de referirse a la relación de Jungkook con su madre y cómo esta afectaba en su forma de ser. Era su marioneta, lo controlaba a su gusto y antojo.
Los otros dos jóvenes están impactados por la gran tira de información que Jimin acaba de soltar, se quedan sin palabras unos minutos.
- ¿La gente odia a Jungkook o algo?- pregunta con preocupación el mayor del grupo.
El rubio lo piensa un momento. ¿Realmente todos odian a Jungkook?
- Seguir la partitura y tocar exactamente lo que el compositor quiere que toques, eso es una proeza impresionante, y eso es todo lo que juzgan en una competición. Si puedes serle fiel a la partitura, solo con eso ya ganaste, sin embargo, el hecho de que pongan el premio tan imposiblemente alto no parece sentarle bien a los demás... especialmente a aquellos que buscan algo más que sólo perfección en su música.
Taemin y Taehyung no tenían palabras. No tenían ni idea de que algo que para ellos era tan vano y aburrido, realmente fuera un infierno en la tierra para los músicos que quieren salir adelante.
>> Claro que no hace falta decir que muchos de ellos simplemente están celosos- continúa Jimin, soltando una risilla amarga y sin ganas.- Ya saben, Jungkook arrasó en las competiciones por las que pasó, en cada una de ellas.
- Sí, supongo que su madre le debió hacer entrar en muchas.- asintió el pelirrojo.- "Creo que esto fue sobre la época en que su madre estaba hospitalizada."- se dijo a sí mismo.
Un silencio bañó al trío de amigos, hasta que Jimin decidió hablar nuevamente al ver la mezcla de confusión y tristeza en el rostro de sus mayores.
- Como un reloj digital, sin retrasarse ni un solo segundo. Sin personalidad en su interpretación. Es simplemente un metrónomo humano.
>>Un ser hecho solo para competir.
>> La marioneta de su madre.
>> El esclavo de la partitura.
El nombre de Jeon Jungkook tiene mala fama.
Tae al cuadrado (como solía llamar Jungkook a Taemin y Taehyung cuando se refería a ambos, ya que le daba mucha flojera decir ambos nombres) estaban en shock. Solían pensar que conocían perfectamente a su amigo, tanto a él como a todos sus demonios, esos que le atormentaban hasta en sueños. ¿Cómo es que jamás supieron de esto? Podrían deducir que es porque ellos no son parte de este mundo lleno de perfección y orden, pero también de soberbia y discriminación.
Aunque por otro lado, Jungkook jamás les contó. Lo cual dejaba dudas en la mente de ambos, y la mayor de todas era:
¿Jungkook no es consciente de todo el odio que recibe?
Taemin y Taehyung estaban acostumbrados a defender a Jungkook de todo mal, ser su pared, sus guardias, sus hermanos mayores. Y ahora que sabían de esta situación, podrían estar de cualquier forma menos tranquilos.
- ¡¿CÓMO DEMONIOS SE ATREVEN!? ¡¿QUIÉN EMPEZÓ TODA ESTA MIERDA!? ¡QUE SE LAS VEA CONMIGO!- gritaba Taemin a lo loco.
- ¡Y CONMIGO TAMBIÉN! ¡PATEARÉ SUS MISERABLES CULOS!- le continuó Taehyung.
- ¡YA SIÉNTENSE! ¡NO ES PARA QUE SE PONGAN ASÍ!- gritó el rubio apenado, tratando de calmarlos.
El trío de ruidosos casi fueron echados de la sala.
🌸
- ¡AAAAAAAARRRRRRGGGGGGG!- los gritos no paraban ni siquiera en el interior del edificio, en donde estaban los participantes- ¡Maldito Jeon! ¡Se ha olvidado por completo de nosotros!
- Ya cálmate, Yoongi, te ves ridículo.
- ¡¿Que me calme!? ¡No tiene ni una pizca de interés en absolutamente nada, Yugyeom!- reprochaba el rubio.
Yoongi y Yugyeom participarían en la competición de este año. Y no, no era por intereses propios, era por "asuntos pendientes".
- No pierdas la cabeza, pronto sales al escenario, ¿no?- el peliplateado trataba de calmarlo sosteniendo sus hombros y viéndole a los ojos fijamente- Ve a cambiarte.- le ordenó, soltó su agarre en él y lo empujó hacia los vestidores.
"- Además, no es que Jeon nos haya olvidado, idiota.- pensó, viendo su reflejo en la ventana- Más bien es que nunca llegó a saber quiénes éramos."
Comenzó a caminar en círculos por toda la habitación, con sus brazos cruzados y en su rostro no existía expresión alguna.
"- Dos años y no has cambiado nada, Jeon. No me gusta, conseguiste todo ese trato especial solo porque tu madre estudió con un famoso instructor."
Por mucho que su rostro no cambiara, por dentro ardía de furia más que el infierno.
"- A pesar de que tienes habilidades, todo lo que sabes tocar es música monótona y aburrida, justamente como tú."
Tomó asiento en una silla antes de que derramara la última gota de su paciencia y dio un leve saltito al escuchar la voz en los parlantes.
- La competición está a punto de comenzar. Por favor, todos tomen asiento.
En el público, todos aplaudieron al finalizar el anuncio, pocos minutos después, apareció la primera participante.
Yoongi y Yugyeom veían juntos desde una pequeña pantalla las presentaciones de cada uno de sus rivales (aunque no los veían como tal), sin embargo, no estaban realmente poniendo atención. Solo les importaba una persona.
- Lo conocí por primera vez en tercero de curso.- dijo Yoongi casi susurrando, rompiendo así el silencio entre ambos- Cada vez que lo veía, decía que la siguiente vez sí lo vencería. Seguí y seguí diciéndome lo mismo, y justo cuando pensaba que había logrado alcanzarlo, con mis brazos extendidos tan lejos como podía, se desvaneció en la distancia, como si fuera un espejismo.
El contrario no mencionó palabra, veía fijamente el perfil de Yoongi mientras trataba de tragar el nudo en su garganta, esperando a que continuara.
>> Fue como un conejo en el sombrero de un mago: "¡Puff!" y desapareció.- bajó su mirada a sus manos con sus palmas abiertas, como si leyera algo en ellas- Hoy al fin volvió al lugar al que pertenece.
- He estado esperando durante dos años a que llegara este día.- respondió Yugyeom, sonando algo tétrico.
- Al fin...
- La competición va a comenzar.- ambos dijeron al mismo tiempo, con miradas cargadas de decisión y poder.
🌸
- Ser juez es agotador- susurró en un suspiro uno de los jueces, con la cabeza apoyada en el asiento. Se notaba a kilómetros lo aburrido que estaba.
La competición llevaba apenas unos minutos de haber comenzado, pero entre el público ya se podían escuchar los ronquidos de cierto chico castaño.
- ¡¿Eh!? ¡¿Ya se quedó dormido!?- Taehyung trató de hablar los más bajito que pudo, sin embargo recibió siseos de la gente a su alrededor.
- ¡¿Otra vez!? ¡Cada vez se duerme más rápido!- y lo mismo pasó con Jimin. Probablemente ya no los dejen pasar al lugar otra vez.
Ahora ya estaba en el escenario la segunda competidora, todo el público escuchando en silencio. Bueno, casi todo el público.
Detrás del escenario, era algo completamente distinto.
En el lugar la tensión era tan tensa que podría cortarse con una navaja. La mayoría de los participantes temblaban, lloraban, se estremecían, estaban todos teniendo colapsos mentales.
¿Por qué?
Por la presencia de ciertos tres individuos en la competición.
- Participante número tres, señorita Yūko Tachibana, prepárese por favor.
La chica nombrada entró en pánico, comenzó a caminar hacia la salida al escenario, tropesando con todo torpemente.
Jeon la veía a lo lejos y sencillamente en su cabeza no cabía cómo esa chica podía estar así de nerviosa. Es decir, si está aquí, es porque practicó mucho y ya está lista, ¿no? Eso era lo que Jeon pensaba.
Él se había sentido nervioso al tocar con Jimin, pero eso era porque: 1. No había practicado, y 2. Porque, vamos, tocar con Jimin es como tratar de domar a un león. Podríamos agregar una tercera razón la cual sería que cualquier cosa que involucre a Jimin, ponía a Jungkook con los nervios a flor de piel.
En fin, no solamente por ese motivo le parecía ridículo que todos tuvieran miedo, también estaba el hecho más importante de todos, o al menos así lo era para el pelinegro:
Los demás sí pueden escuchar el piano.
Escuchar el piano.
Escuchar el piano.
¿Podría hacerlo esta vez? La verdad, lo dudaba mucho, no confiaba en sí mismo para nada. Tenía miedo, sus manos sudaban, su estómago dolía, pero se negaba a entrar en pánico y mostrar debilidad, no hacia los demás, sino hacia sí mismo.
Se preguntaba si el malestar se debía a los años que habían pasado, dos años fuera de las competencias son una eternidad para un músico.
Pero, en el momento en que menos lo deseaba, los recuerdos vuelven a su mente como escenas de la peor película de terror que pueda existir.
La ristra de frases que el público susurró en aquel entonces se repetía en su mente. Podía escuchar su propia voz, él hace dos años repitiendo una y otra vez en su cabeza "Tengo miedo, tengo miedo, tengo miedo..." Lo tortura continuaba, solo que ya no era su voz de hace dos años.
Ahora era él, el Jungkook de la actualidad que se decía incontables veces "Tengo miedo" y no podía pararlo.
Pero no era el único.
En el baño, un chico bajito de piel pálida estaba aterrado, tensionado, confuso, y de todas las formas en que NO debería estar en este momento.
Mojó con agua su cara una diez veces, tratando de refrescarse y relajarse, pero era en vano. Su cuerpo temblada, su cara estaba más pálida aún, sus manos sudaban.
Sin embargo, al contrario de cierto pelinegro, Yoongi tenía distintos pensamientos.
- "Todo va a ir bien. Puedes hacerlo. ¡Debes tocar!"- eran las cosas que pasaban por la mente del rubio.
- Participante número cuatro- dijo en voz alta el que anunciaba al siguiente en pasar, Yoongi lo escuchó e inmediatamente se tensó, su piel picaba- Señor Min Yoongi, prepárese por favor.- y entonces supo que ya no había vuelta atrás.
Se vio al espejo una última vez, tomó agua del grifo y salió, no sin antes acomodar rápidamente su cabello.
Caminó por ese pasillo dando fuertes y firmes pisadas, sin titubear, con la cabeza en alto y su espalda erguida. Daba cada paso con decisión, llamando por completo la atención del pelinegro que estaba a punto de ahogarse en miedo.
Al ver a ese extraño chico rubio que antes le saludó, caminando con tanta elegancia y seguridad, solamente le hizo recordar a una persona en específico.
"- Todos tenemos miedo de subir al escenario, ¿sabes? Quizás lo arruines, quizás el público te rechace, pero aún así, debes apretar los dientes y salir a escena."- recordó con claridad las palabras de Jimin, recordando también su lindo rostro al decirlas.
Jeon se levantó de su lugar y fue a cambiarse, tal vez y solo tal vez, ese tal Yoongi le recordaba a Jimin, y al recordar a Jimin, sus miedos se iban.
En el público, todos esperaban con ansias al siguiente participante.
- ¿Es cosa mía, o el ambiente ha cambiado un poco?- preguntó Taehyung, viendo a todos a su alrededor.
- Pues claro.- afirmó Jimin- Es Min Yoongi, el indiscutible favorito y ganador de muchísimas competiciones importantes, incluyendo esta en años anteriores. Estando Yoongi en el escenario, sería raro que no cambiase el ambiente.
El joven pianista se paró en el centro del escenario para hacer una reverencia a manera de saludo, recibiendo inmediatamente una ola de aplausos.
- Aquí está, al fin podré ver la parte buena.- dijo uno de los jueces.
- Tocará Estudio Op.10, n°4 de Chopin.- menciono otro.
Se sentó en el banquillo frente al piano, ajustándolo para quedar a la altura correcta para que sus pies toquen los pedales, desabrocha los últimos botones de su saco para estar más cómodo y dirige su miraba al piano sin apartar su vista ni un segundo de lo que está haciendo.
"- Me gusta esa mirada en tus ojos, pero no dejes que te arrastre demasiado, Yoongi."- pensaba su instructor.
[flashback]
- No iré a Alemania. Voy a participar en la Competición de Música Maihou.
- ¡¿Qué dices!? ¡Si te han invitado!- reclama sorprendido el instructor- ¡Es una oportunidad de oro para conseguir publicidad antes de la competición de Chopin! ¡Ya ganaste Maihou el año pasado, así que no hay razón para que sea tu prioridad!
- No, sí la hay.- responde con su voz firme.
[fin del flashback]
Coloca sus manos sobre el piano, y toma una profunda respiración.
- ¡Debo superarte, Jeon Jungkook!
🌸四月は君の嘘🌸
no excusas mediocres, no justificaciones. no actualizaba porque soy una irresponsable.
[fin del comunicado]