Rec° .- JIHAN.

By Lia852

24.3K 3.5K 620

Un amor adolescente que al volverse adultos caen en la cuenta de que necesitan otro métodos para preservar su... More

Introducción.
REC 01
REC 02
Rec 03
REC 04
REC 05
REC 06
REC 07
REC 08
REC 09
REC 10
REC 11
REC 12
REC 13
REC 14
REC 15
REC 16
REC 17
REC 18
REC 19
REC 20
Capitulo 1.-
Capitulo 2.-
Capitulo 3.-
Capitulo 04.-
Capitulo 05.-
Capitulo 06.-
Capitulo 07.-
Capitulo 08.-
Capitulo 09.-
Capitulo 10.-
Capitulo 11.-
Capitulo 12.-
Capitulo 13.-
Capitulo 14.-
Capitulo 15.-
capitulo 16.-
17.-
18.-
19.-
20.-
21.-
23.-
24 1/2.-
24 2/2.-
25.- Fin.
Playlist.-

22.-

351 48 17
By Lia852




Jeonghan no apareció durante toda la semana. Seungkwan lo tranquilizó diciéndole que estaba bien, vivo, que hablan casi a diario y volvería pronto.

Como prometió, una vez más.

Joshua pudo respirar al fin.

Le creía o quería creerle.

Todo es un poco mas mierda cuando él está lejos, pensó.

- Mañana tengo que ir por mi tía a la clínica, perdón si se me pasó contarte. Han sido dos semanas muy ajetreadas, lo siento – Jun le había estado pidiendo ir a cenar con su madre pronto, mientras él se la había pasado ignorándolo un poco.

- La mamá de Jeonghan ¿es tu tía? – preguntó el chino, casi inocente. Joshua sintió sus huesos congelarse. Le había estado mintiendo un poco acerca de sus ocupados sábados ''tengo una tía, ella está un poco enferma y necesita de mis cuidados'' contó a los cinco meses de estar saliendo.

- E-eh si, larga historia – pasó su mano derecha por la nunca, peinando y tirando algunos cabellos. Tomo una larga pausa ¿Cómo se suponía que debía explicar todo esto? – tú sabes que soy cercano a Seokmin y a la familia en general, entonces yo...

- No necesitas gastar más energía mintiéndome – su voz era grave, pero suave - ya lo sé todo, siempre lo supe – mientras el pánico se apoderaba del castaño, en el rostro de jun había una extraña expresión, más cerca de la compasión que del enojo.

- Jun y-yo lo siento, lo siento tanto, soy un... ¿Quién te lo ha dicho? – preguntó antes de continuar arruinándolo todo.

Estaba en shock, había subestimado a su actual novio, no tenía perdón. Aceptaría todo lo que viniese, lo merecía. Lamentablemente, nada que hiciera disminuiría lo mierda de persona que había sido.

- Te lo he dicho – dijo seco - siempre lo supe – encogió sus hombros. Definitivamente era es gran chico, pensó el mayor, el indicado para hacer feliz a cualquiera, solo que no a él. ÉL tenía un extraño imán con lo complicado y desastroso - no es tan fácil pasar de alguien como Jeonghan – rio irónico – lo vi entre tus fotos, en las fotos en casa de tus amigos, en tu casa, en una pequeña caja que tienes escondida dentro del armario, por cierto, horrible lugar para esconder algo – la voz de jun se quebró, pero no lloró, se le veía compuesto - pero algo me lo confirmó, tus ojos al mirarlo.

-Jun – quiso hablar, pero el menor continuó.

- Pensé que era alguien importante, pero nunca llegué a imaginar cuánto. Lo ratifiqué el día en que entraste a la cafetería, era él, la persona que te mantenía con una actitud mezquina al mundo y siempre intentando controlarte, siempre rígido y desconfiado. Tu mirada se volvió diferente – suspiró - Jeonghan llegó y otro Joshua apareció, me di cuenta que estabas enojado con él porque cada vez que estaba cerca era como si quisieras saltarle encima y golpearlo – Joshua se mantuvo mirando sus pies, no tenía cara para verlo a los ojos – nunca confié en Jeonghan, el tiene una mirada que da miedo – rio casi sin aire - así que preferí acercarme a él de buena manera antes de ganarme un enemigo e iniciar una guerra en tu nombre – miró sus pies por un momento, viendo lo que veía él mayor y continuó - No sé si hice bien, pero los dejé, sabía cuándo me estabas mintiendo y estabas con él, te conozco muy bien, aunque no se note – el mayor se acercó tomando sus manos, obligándolo a que lo mirara. Le hablaba con una voz suave, queriendo que todo fuese mentira – No voy a negar que me duele mucho esta situación, pero Bebé sé que lo nuestro es amor y lo vamos a superar, lo siento aquí – tocó su corazón - ha sido un año maravilloso – se acercó un poco más acariciando el rostro de castaño - Ahora quieres estar cerca de él porque lo ves frágil, su madre está muriendo no es para menos y te entiendo puedes hacerlo, pero luego el se irá, se irá y solo quedaremos tu y yo – Jun unió sus labios en apenas un roce, dos veces, haciéndolo sentir más mierda. El mayor guardó silencio por unos minutos.

-Jun, yo hice todo mal, te hice daño gratuitamente, tu no lo merecías. Estaba muy confundido y tienes razón, quería golpearlo y más – más – soy humano y fallé, algo que creí que jamás en mi vida haría, yo te engañé y-y no solo una vez – esperaba no dañarlo más de lo que lo había echo hasta entonces, pero no encontraba otras palabras.Pasó ambas manos por su cabeza y suspiró, se sentía asfixiado. Sin embargo, la expresión sombría en el rostro de Jun no cambió - nada que pueda decirte, me libera de culpa. Cuanto desearía volver y hacer... las cosas diferente - tristemente, se refería a iniciar una relación teniendo sentimientos por otro.

- Lo vamos a superar mi amor, te perdono – definitivamente eso no lo esperaba. Jun era mucho para él y para el mundo – él se irá ¿me escuchas? Al final solo quedaremos tu y yo.

- Yo, necesito un tiempo, pensar. Tu necesitas algo mucho mejor que esto– el castaño se alejó, intentando procesar todo – no puedo continuar como si no hubiese hecho nada, no es justo para ti. Creo que lo mejor es...

- Un tiempo – habló rápido el chico de veintidós años – está bien, un tiempo, el que quieras. Bebé mírame – volvió a tomar su rostro, esta vez con una mano y con un miedo terrible a ser echado en cualquier momento – te amo, te amo como a nadie y no existe nada el mundo que pueda destruir lo que siento por ti, yo puedo y quiero hacerte feliz, lo mereces.

El castaño no se negó, decirle adiós a jun también le aterraba. Tanta confusión le producía nauseas.

Mientras Joshua intentaba entender lo que pasaba con su ''actual novio'' en su estado desesperado por mantenerlo a su lado. No podía dejar de pensar que necesitaba a Jeonghan de vuelta, estaba reapareciendo esa horrible sensación cuando este estaba lejos y la odiaba, pero no había rastro alguno y estaba empezando a preocuparse. Sus días básicamente se trataban de estar la mayor parte del tiempo con su ex suegra, la mujer era igual de demandante que su hijo, de tal palo tal astilla. Ella por su parte lo estaba llevando bien, tenía días y días, pero sin importar el diagnostico, se le veía en la cara lo agradecida que se sentía de poder pasar su ultimo tiempo junto a su familia a quienes estaba llenando de peticiones, desde las más extrañas a las más simples. Pero se le notaba que también necesitaba a su hijo cerca.

''No fui la mejor madre, ni existe una gran herencia que pueda dejarte antes de partir. De seguro en los mejores momentos de tu vida, no existen muchas historias en mi compañía, pero si de algo estoy segura, es que nunca es tarde para hacer las cosas mejor''

Esa era la introducción a los cientos de cartas a mano, que su madre había escrito para él, todas con una letra hermosa y redonda. Cientos de cartas que se encerró a leer durante días. Algunas las repasó hasta el cansancio.

Lloró y rio.

Una vez terminadas se sintió diferente, un poco más liviano, quizás. Un poco menos resentido. Guardó las carpetas dentro de la mochila, donde no tenía más más que un par de ropa interior. Se la colgó en la espalda, finalmente estaba listo para volver.

Cuando Joshua lo vio atravesar la puerta tenía en la garganta un montó de palabras que soltar ''te extrañé'' ''no vuelvas a irte, por favor'' ''no hay momento en que no pensé en ti'' ''idiota'' ''te necesito'' ''te amo''. Sin embargo, como si una mano invisible le apretara con fuerza la quijada no pudo hablar, así que simplemente se lazó a sus brazos y lo abrazó con fuerza. Deseando que su cuerpo hablase por él.

El mayor luego de dos años, finalmente se reencontró con su madre. La mujer se lanzó sobre él, como si no lo hubiese visto desde que era un niño, con sus ojos llenos de lagrimas lo acariciaba a cada momento ''Estas tan hermoso. Uno siempre cree que sus hijos no pueden ser más hermosos de lo que son, pero tú, mi hannie has crecido tanto. Eres todo un hombre'' lo llenó de besos, mientras Jeonghan los recibía con una divertida mueca en su rostro, el afecto nunca ha sido lo de él a excepción de sus parejas. Es asfixiante y pegajoso.

Decidieron hacer un viaje ambos, junto a Hye. Lo necesitaban, más bien se lo debían como familia. Luego de la muerte de su padre o incluso antes de ello, cada uno vivía su lucha como podía, cada uno sobrellevó el duelo a su manera. Pero había algo inconcluso, palabras sin decir, un perdón o un te quiero a medio camino.

Con la llegada de Seokmin, Joshua y Chan a sus vidas, la situación mejoró, los hermanos lograron acercarse y su madre volvió a sonreír. Sin embargo, cuando las cicatrices del alma no se curan y se dejan en el olvido, elegimos dos caminos, llenar el vacío con lo equivocado o permitimos que la herida se haga más y más grande.

Jeonghan necesitaba enfrentarse a su madre de una vez.

- No esperes que la vida te persiga los pasos para hacer todo mejor hijo – el sol de invierno a penas les abrigaba la punta de la nariz. Con la cabeza entre las piernas de su madre, se dejaba acariciar por sus suaves manos – nunca es tarde para salir y hacer las cosas diferentes, perdonar y pedir perdón. Tarde, muy tarde entendí que esta es una experiencia y tenemos dos elecciones, evolucionar o morir sufriendo como tu padre y yo, pero está bien – dijo con pensar – a nosotros nadie nos enseñó otra forma de vivir, porque antes todo era más crudo y no había otra manera de ver la vida. Ustedes son otra generación, tu lo harás mejor que nosotros. Tu puedes elegir se feliz, cuidarte y mantener cerca a la gente que te ama, que es mucha.

Esa fue la ultima conversación que tuvo con su madre mientras ella se encontraba saludable a simple vista. Aprovecharon de tener un fin de semana de sanación, el mayor se atrevió a darle respuesta a muchas de sus preguntas que continuaban en incógnita, la mayoría de ellas relacionadas con su Padre ¿Por qué lo hizo? ¿Por qué no luchó? ¿Alguna vez lo quiso? ¿Pensó en el mientras lo hacía? ¿Por qué no fue él y su hermana una razón suficiente para continuar viviendo? Muchas preguntas que nunca tendrían respuesta. Su madre le contó acerca de su infancia, historias que él ya sabía, pero no escuchaba hace mucho tiempo. Su Padre fue criado en una granja, rodeado de pobreza, el único hombre de la familia, después de la muerte de su hermano tres años menor de quien era responsable. Desde ese día no volvió a ser el mismo. El padre de su padre no fue una buena persona, iba y venía. Su madre sola y con mucho esfuerzo lo crió.

Además de sufrir de una depresión, estar desempleado y ser un bebedor habitual, el padre de Jeonghan tenía un resentimiento justificado, para sus ojos, por los homosexuales. Su mejor amigo murió con el VIH en las venas producto de su afán por tener relaciones con travestis que ejercían la prostitución, en una época donde escaseaba la cura y sobraban los prejuicios. A Jeonghan le daba una punzada en el corazón de solo pensar como hubiese sido su vida si nacía en esos tiempos. Sabía que si su padre estuviese vivo, hubiese luchado porque el fingiera ser hetero y esa era la parte más difícil del duelo, no tenía una imagen muy buena a la cual aferrarse y soltar. Necesitaba perdonarlo ¿pero cómo?

Finalizando la sexta semana desde que tenían conocimiento del diagnóstico, la madre de Jeonghan empeoró de un día para el otro. A pesar de la insistencia de los médicos de que permaneciera en casa, ya que, no había forma de mejorar su situación, ambos hermanos insistieron. La vida ya les había demostrado que peor era no intentarlo.

- Quizás deba ir a la capilla a rezar para que algún milagro ocurra, como cuando ella rezó por mi el día que supo que soy gay – los exnovios se encontraban sentados en la sala de estar de la clínica, mientras los médicos intentaban estabilizarla de una crisis llena de dolor. Jeonghan fue el único que rio ante su comentario – era un chiste – miró al castaño entornando los ojos. Joshua sabía a la perfección que uno de hábitos era hablar estupideces para rellenar los silencios, así que lo ignoró.

- Jun sabe de nosotros – habló de la nada, haciendo que Jeonghan dejase de quejarse mentalmente por el terrible frio que sentía en sus manos temblorosas, las sacó desde su abrigo y se las frotó cerca de la boca, proporcionándoles calor. No había rastro de emoción en su rostro.

- Ya lo sé – quizás no había emoción, por esa respuesta que no esperaba.

- ¿Cómo? – Joshua se estaba replanteando cual de todas las malas decisiones que había tomado, le estaba regresando tanto karma.

- Me imagino que me lo comunicó a mi antes que a ti – se encogió de hombros como si el tema no tuviese relevancia – el día antes de las vacaciones mi auto no pinchó ninguna piedrita en la calle – rio - sino que alguien reventó mi neumático y dejó una notita con algo así como ''zorra'' dos puntos – remarcó con manos invisibles – señor Jeonghan con esto no alcanzamos a estar ni a mano, pero me lo debes. Atentamente, la perra de Joshua – la cara de Joshua parecía algún monumento de piedra - muy de su onda, infantil.

- ¿escribió eso ultimo? ¿Estas seguro de que fue él? Jun... el no es así – dijo con sus ojos saliendo de su órbita.

- No, esa parte la inventé, pero bueno, ya ni recuerdo, ni me interesa – posó ambas manos detrás de su nunca estirando su cuerpo – Obvio que fue el ¿quién más sino? tu noviesito no es la santa paloma que vende – le dio una mirada acusatoria, incomodando al castaño - eso fue en la hora de almuerzo y en la tarde teníamos que hablar obviamente, necesitábamos una explicación ambos. Así que así fue.

- Así que te vas – Jun se encontraba guardando sus cosas en una caja, no quería verlo, ese día ni ninguno más. Jeonghan se alivió, creyendo que renunciaría.

- No te daré tal placer querido – dijo seco – volveré a la cocina. Jeonghan – dijo luego de una pausa, ganándose toda la atención – será mejor que olvidemos la formalidad – aclaró - ¿al menos fue divertido reírte de mí? – esas palabras lo sorprendieron, el chico que el había conocido tenía un aura dócil y extremadamente dulce, no lo creía capaz de enfrentarlo, pero lo estaba haciendo.

- No sé de qué hablas – dijo con el tono más natural posible – lo nuestro no es algo que debería preocuparte, fue algo de adolescentes. No vine hasta aquí por mi propia voluntad, pero si esperando hacer las cosas bien.

- ¿Y eso lo sabe su pareja? ¿sabe que le gusta verse a escondidas con su exnovio y jugar a ser amigo del novio actual?

- No jugué a ser tu amigo, estoy muy lejos de querer ser algo para ti, simplemente llamémoslo amabilidad y lo hice porque el me lo pidió – sabía que al chico le dolería escuchar como Joshua se preocupa de él aún.

- Claro – soltó una carcajada llena de ironía – No ha respondido mi pregunta ¿Qué pasaría si su pareja se entera de todo esto? - Jun tenía demasiada información, gracias a minghao que inocentemente habló demás, si seungkwan supiera, lo mandaba de vuelta a su país.

- Eso no es asunto tuyo, pero si piensas chantajearme, él lo sabe – eso no era cierto, pero estaba seguro de que tampoco le importaría, lo más probable es que en ese mismo instante estuviese acostándose con algún americano veinteañero, hacía mucho tiempo que no tenían la misma relación que un comienzo.

El menor pensó por mucho tiempo quédecir. A sus ojos, Jeonghan era irrompible, pero no podía estar más lejos de la realidad.

- No creas que no veo como lo manipulas y gran poder que tienes sobre él, pero debes tener claro algo, está conmigo ahora. Y yo también puedo darle drama y una historia lo suficientemente conmovedora hasta que sienta que no puede abandonarme. Pero no, esa es la forma más básica de mantener a alguien en tu vida, la compasión. Y eso en algún momento cansa ¿Qué se siente que haya estado a tu lado por compasión? – guiñó un ojo como victoria.

-Ne sé, cuéntame ¿no es lo que está haciendo contigo ahora?

- Das pena Jeonghan, eres tú el que se está arrastrando por un poco de atención, no yo - Ninguno mostraba intenciones de afectarse por el otro , no se lo iban a permitir.

Jeonghan tomó su teléfono entre las manos.

- Toma - estiró el aparato - llámalo y comprueba por ti mismo cuanto tengo que rogarle por un poquito de atención - Jun ignorándolo, continuo guardando sus pertenencias en la caja.

-Me retracto, da pena y asco lo poco digno que eres. Si tanto te quiere ¿por qué crees que no corrió a tus brazos a penas te vio llegar? ¿no te sientes tú muy seguro? Porque en el fondo le cansas, ya se hartó de ti y tu papel de víctima. Porque sin una triste historia, no tienes nada mas que entregarle para mantenerlo a tu lado . El sabe muy bien que nosotros tenemos un futuro, el que ustedes jamás van a tener o ¿no te has dado cuenta que sigue conmigo? Me imagino que sin te diste cuenta, pero estas tan acostumbrando a acostarte en camas ajenas que mucho no te importó.

- Buena suerte con el cuento que estas armándote bonito – se dio media vuelta para salir de ahí antes de hacerle caso a la picazón en sus dedos por golpearlo – pero se te olvida un detalle. Siempre seré un fantasma en esta historia pequeño junie, en tu historia y en tu cama ¿no será hora de que me des el protagónico? – dicho esto, se fue.

- Perra.

Le contó la situación a su ex novio, omitiendo algunos detalles importantes, como sus últimas palabras, prefería evitar otra pelea.

Desde ese día Jun ha dejado de llamar insistentemente a Joshua, el mayor se ha dado cuenta, lo llama cada una hora por lo menos. Jeonghan ya se estaba preparando para ver ese celular bajo la gran rueda de un camión "si no lo lanza él, lo hago yo" se repetía.

- ¿Por qué él? ¿qué te gusto? – esa era pregunta que le rondaba en el cerebro, incluso antes de conocerlo en persona, desde el día que Seungkwan se lo gritó por el teléfono.

- Jeonghan – soltó en tono de reto. 

- No, hablo en serio – elevó sus manos en son de paz.

- No lo sé, es educado, dulce, amable, tranquilo, pero a la vez tiene un humor ácido, es despistado – para - inocente – super – yo creo que me hizo sentir en paz y me interesó – fue sincero. Cuando miró a Jeonghan, este tenía una expresión cansada.

- ¿Lo amas? – Joshua guardó silencio, deseaba que le preguntara si lo amaba a él,tal vez así se aclaraba de una vez – no lo amas.

- Lo quiero, lo quiero mucho, en serio– A Jeonghan le tranquilizaba que Joshua no tuviese un sentimiento amoroso por Jun, el tema iba por otro lado. No lo miraba como a él, a él si lo amaba o eso quería creer - pero no lo hubiese engañado si lo amase.

- Y estas con el porque necesita ser guiado – Afirmó. El castaño no entendió que quería decirle.

- No sé de que hablas.

- Tu mamá era tu persona favorita porque ella de todos ustedes, eras el único que estaba ahí para ayudarla. Te gustaba que se peleara conmigo por tu atención llamándote y diciendo con su voz más vulnerable ''hijo te necesito'' – la imitó con la peor voz que pudo - te gusté yo, un poco por lo mismo. Y con él más de lo mismo, te necesita porque no es más que adolescente tonto, solo con una madre en un país extranjero. Y te gusta eso, de que estemos en medio de ti rogando tu atención. Amas ser deseado – sonrió, pero no era una sonrisa sincera.

- Y esto me lo dice alguien con un trastorno psicológico ¿Ahora eres psicólogo? – bufó – no me hagas reír, bastante ridículo tu análisis.

- Da igual Joshua, todos somos débiles en algún momento, tenemos nuestro talón de Aquiles. Que no te aterre – se levantó del asiento - Y para que te quede claro ser bipolar, no es sinónimo de ser estúpido – camino hasta encontrarse frente a la máquina de dulces a un costado, dándole la espalda habló – el tampoco te ama. Te quiere, si y también te ve como el padre que nunca tuvo y tiene miedo a que lo abandones como él lo hizo, puedes continuar fomentándole la fantasía - se silenció un momento, esperando una respuesta quizás - Pero bueno a mi ya me da igual – sacó el envoltorio que acababa de caer – necesito un cigarrillo – Joshua lo miró sin decir una palabra, hasta que su silueta desapareció.

Joshua estaba terriblemente confundido, este Jeonghan, más maduro y menos impulsivo, le gustaba mucho más que del antes y eso lo creía casi imposible. A sus veintiséis nadie ha podido provocarle, lo que Yoon Jeonghan produce en él, pero precisamente eso es lo que no le dejaba tranquilo, porque su ex  no es exactamente el mejor partido para nadie. Pero ¿Y si cambia y se transforma en una mejor versión de si mismo? Quizás finalmente podrían ser felices. Para su pesar el riesgo era demasiado, no estaba seguro de soportar perderlo otra vez. 

Lamentablemente todas esas sensaciones pasaron a segundo plano cuando aquella madrugada, el frágil corazón de la madre de Jeonghan dejó de latir.


Continue Reading

You'll Also Like

85.1K 4.6K 16
Me contacte directa mente con el para pedirle su permiso para traducir su historia ya que yo la leí y me encanto, espero que a ustedes también les g...
7.2K 865 9
Pero a diferencia de aquella rosa, tú puedes volver a la vida. Hazlo por todas aquellas rosas a quienes les arrebataron la vida sólo por su belleza. ...
177K 10.1K 25
Chiara se muda a Madrid en busca de nuevas oportunidades para lanzar su carrera como artista. Violeta se dedica al periodismo musical, trabajando en...
15.2K 1.8K 17
Seungkwan hyung es alguien hermoso en cada sentido, es una pena que la gente no lo vea así.