Las venas de Felix quemaban, su pecho ardiendo y sentía que el corazón le explotaría en cualquier momento. Tal vez debería de cancelar la salida, tal vez... pero no, necesitaba ver a C, saber que es real, sentir su carne contra su carne, entrelazar sus dedos y bailar una canción cursi de las que ponían en los bailes escolares. Felix quería eso, quería hacer casa una de esas con C.
Se preguntaba cómo sería verlo por primera vez ¿le gustaría besarlo? ¿lo besaría en la primera cita? tal vez solo lo abrazaría ¿a qué olería? ¿su cabello de que color sería? ¿y si C descubría que Felix no era tan interesante en la vida real? Eran muchas de las preguntas que invadían la mente de Felix.
Se observó en el espejo antes de irse, vestía un traje azul oscuro y debajo una camisa abotonada hasta el cuello,se había decidido por una máscara de media cara, parecida a la del fantasma de la ópera, sin embargo la suya era blanca con toques azules rey de la parte superior derecha, la máscara solo le cubría el ojo izquierdo. Pensaba que si C ya lo había visto en persona, no tenía caso de ocultar su identidad con una máscara completa. Se había teñido el cabello de rubio, probando algo nuevo, al igual que lo que haría esta noche. Esperaba realmente impresionar a C, esperaba que realmente le gustara, porque estaría totalmente expuesto a él.
Muchas personas caminaban agarradas de la mano, pequeños grupos de tres enlazados de los brazos y riendo por el baile de otoño. Felix siempre había querido un pequeño grupo de amigos, alguien con quien ir a estas tonterías, pero solo tenía a Jeongin y Jeongin no solo era de él, tenía más amigos. Por más que Jeongin lo invitaba a a las salidas, el se sentía fuera de lugar, tan ajeno a los demás, tan cerca y a la vez tan distante, teniendo tantas cosas por decir pero con una voz silenciada y temerosa. Lamentaba que toda su preparatoria se hubiese basado en burlas y empujones de Felix contra los lockers. Una pequeña gota de sal se resbaló por la mejilla de Felix, por estas razones no le gustaba venir a eventos escolares. Porque nuevamente como C se lo había dicho "él era espectador, pero no parte de la historia".
Caminaba apresurado, un poco cabizbajo, con miedo, con ansias, con esperanza y un sin fin de emociones que no podía explicar. El baile sería en el gimnasio, no sabía porque C lo había citado afuera del laboratorio de química, pensaba que era porque necesitaban platicar y conocerse más antes de exponerse frente a la mayoría de sus compañeros.
El interior de la escuela estaba en penumbras, la luz que alcanzaba a llegar del gimnasio era muy poca, los pasillos estaban vacíos y muy pocos caminaban por los salones. Felix estaba a dos salones de llegar al laboratorio de química, tenía ganas de devolver el estómago. Trataba de ver más allá de la oscuridad que lo invadía, pero solo podía divisar una silueta cerca de los lockers «¿Acaso era C». Dio zancadas, los pequeños pasos se habían quedado atrás, el chico que estaba afuera del laboratorio de química estaba viendo hacia su teléfono, totalmente distraído. Estaba casi de su misma altura, tenía el cabello castaño, no podía ver bien su cara debido al antifaz y también a la poca luz, pero sus facciones se veían suaves, parecía alguien muy despreocupado. Su antifaz era dorado y portaba un traje completamente negro.
—¿C?— preguntó Felix con voz temblorosa.
{De aquí en adelante la mayor parte será en narración (por obvias razones) no me odien TT }