The end of the world party
La tierra se volvió a sacudir por enésima vez ese día. La lámpara que colgaba en el techo del bar se movió de un lado a otro y parpadeó por breves instantes. Los vasos que reposaban sobre las mesas, también se tambalearon, pero las pocas personas que se encontraban dentro del lugar, no le tomaron importancia al temblor. Parecían estar acostumbrados.
Los hologramas volvieron a encenderse, llenando el bar de música a volumen medio. Una antigua canción sonaba de fondo, dejando ver el gusto musical del dueño del lugar.
Star, tomó su vaso y le dio un sorbo a la cerveza que le quedaba, volvió a dejar el vaso ya vacío sobre la mesa, limpiándose los labios. La botella de cerveza que se encontraba a su lado, también estaba vacía. Resopló, antes de dirigirse al bar-tender.
—Oye, dame otra cerveza —el robot se dio la vuelta. De la nevera, tomó con sus manos biónicas otra botella del líquido. Unas manos que recordaban a una antigua criatura, el dragón de komodo.
—¿No crees que ya es suficiente, Star? —la muchacha, abrió la botella y le dio un sorbo. Los ojos del robot que despedían una luz azul brillante, parpadearon, simulando los ojos humanos. —Has estado bebiendo todo el día...
—Y sigo sobria —respondió Star, quitándose un mechón de su ya crecido cabello de la cara. El robot resopló.
—Como sea, no soy tu jefe —dijo y volvió a limpiar vasos.
Las puertas del bar se abrieron, haciendo sonar los adornos de la entrada. Algunas miradas se posaron en el chico que se dirigía a la barra, pero por escasos segundos. La gente no parecía darle demasiada importancia a quien entraba o quien se iba.
—Dame un whisky Goliat, amigo —el muchacho se sentó al lado de Star, que no puso atención a su compañero, seguía bebiendo plácidamente su cerveza —y ponle una pizca de polvo de meteorito.
—Ya sale —con rapidez, el robot tomó un vaso y comenzó a llenarlo de un líquido de color azul turquesa, casi brillante. Colocó una tapa y comenzó a agitarlo hasta que el líquido, tomó un color azul intenso. Luego espolvoreó un poco de polvo color negro que, al tocar el líquido, lo volvió del color de la lava. El robot se lo tendió al chico y este, lo tomó, alzando un poco el vaso en señal de agradecimiento.
—Es raro verte aquí, Ambrose —la voz de Star, hizo que el chico de cabello rizado, volteara su vista hacia ella —tu reputación te precede —la muchacha, fijó sus ojos en el color violeta de los de Ambrose. El chico, dejó de lado su bebida y sonrió con los labios juntos. Sacó un cigarrillo de una cajetilla, lo encendió y le ofreció uno a Star, quien lo rechazó. Ambrose expulsó el humo antes de decir:
—Es extraño ¿no lo crees? Después de tantos siglos, aún guardamos ciertos hábitos de nuestros ancestros —Ambrose analizaba el cigarrillo que tenía entre sus dedos. El bar- tender, le ofreció un cenicero, antes de que los restos, cayeran sobre la barra. El muchacho, dejó caer la ceniza en el recipiente y continuó fumando.
—Al menos nos quedamos con la cerveza —Star se encogió de hombros sin darle importancia a las palabras de Ambrose y dio otro sorbo a la cerveza. El muchacho soltó una risita y tomó nuevamente su bebida.
—Esa cosa no te pondrá ebria, lo sabes ¿verdad?
—Por eso la bebo —el tono de voz de Star fue sarcástico. Instintivamente, la muchacha se llevó la mano derecha hacia la cicatriz que le atravesaba la mejilla. —Aunque admito que, no estaría mal olvidarse por un momento del mundo.
—Pero, ¿por qué olvidarse del mundo? —Ambrose, extendió los brazos haciendo referencia a lo que los rodeaba —tenemos un montón de cosas a nuestro alrededor que hacen nuestra vida llevadera.
—Una existencia que está por terminar... otra vez — Star volteó su cabeza en dirección a una de las ventanas del bar. El brillo naranja que iluminaba la noche, producto de la lluvia de meteoritos que había comenzado a caer. —Al menos Varity diseñó este lugar a prueba de catástrofes.
Tan pronto dijo esto, el bar volvió a sacudirse, esta vez, con un poco más de violencia.
—Varity nos mantiene a salvo —Ambrose, levantó su vaso una vez más y, antes de dar otro sorbo dijo en tono pomposo —¡Larga vida a Varity!
Star enarcó una ceja y miró como Ambrose, se terminaba su bebida.
—En verdad no puedo creer que aun haya robots que te consideren serio para el trabajo de preservar a la humanidad. —la muchacha, tomó lo que quedaba de su cerveza y dejó la botella vacía en la barra. El bar- tender no tardó en recogerla.
Ambrose se encogió de hombros y pidió otro vaso de la misma bebida.
—Sabes que nos preservan sólo como estudio, Star —uno de los rizos rebeldes del muchacho, se asentó en su rostro. Ambrose terminó su cigarrillo y dejó la colilla en el cenicero —se desharían de nosotros así —un chasquido de dedos, acompañó esta última frase.
—Pero no lo han hecho —debatió Star, con ese tono de vaga importancia.
—Star ¿por qué vienes aquí todos los días? —preguntó Ambrose, después de dar un sorbo a su nueva bebida.
—El bar de Varity es tranquilo —se limitó a responder —además, me gusta la cerveza.
—Te das cuenta de que tienes el potencial para estar en la armada ¿verdad? —Ambrose, no le quitaba la vista de encima a Star. Una sonrisa sarcástica, atravesó el rostro de la chica.
—Y ¿morir allá afuera?, no gracias —sin decir nada más, Star le quitó el vaso a Ambrose y dio un buen trago a la bebida. Una sensación de ardor le recorrió la garganta, cuando el líquido tocó su interior. Haciendo una mueca de desagrado, le devolvió el vaso —es asqueroso.
—¿Prefieres morir aquí entonces? ¿desperdiciar tu vida? —insistió Ambrose.
—Quizás ese es mi objetivo... desperdiciarla —La muchacha, reposó su cabeza en una de sus manos, mirando a Ambrose —Hax, dame... —la frase quedó interrumpida por el bar tender.
—Sí, si otra cerveza —su brazo biónica hizo un gesto indicándole que ya sabía lo que quería.
—No estarás mucho tiempo aquí, Star —la voz de Ambrose, sonó segura. Star resopló.
—¿Acaso te mandó Dev a reclutarme? —Star era demasiado inteligente y sabía que había algo más detrás del hecho de que alguien del rango de Ambrose, se pasara por mera casualidad al bar de Varity. El muchacho no respondió —Me lo imaginaba, se lo dije a él y te lo diré a ti, no me interesa la armada, no me interesa nada. Después de todo, cuando la guerra termine (si es que termina) todos nos convertiremos en polvo y sólo esas viejas chatarras... —su cabeza señaló al robot mesero que iba pasando por detrás de ellos —sobrevivirán.
—Más respeto —soltó el robot, mirándola y cambiando el color de lo que eran sus ojos.
—Sigue tu camino TNP —el camarero se fue sin dejar de soltar improperios en su lengua robótica.
—Dev y los otros están en la armada por razones que ni te imaginas, Star —la voz de Ambrose se volvió grave. Una de sus gruesas cejas, volvió a enarcarse —¿quién sabe? Tal vez están preparando una conspiración.
—¡Ja! —con tono burlón, Hax se acercó a recoger el vaso vacío de Ambrose —una conspiración humana, me gustaría ver eso.
Star también rio, le parecía inconcebible, si no ridícula, la idea de siquiera pensar en eso, cuando las maquinas les habían dado la oportunidad de al menos, defenderse de los invasores.
—Eres demasiado gracioso, Ambrose, además si en verdad hay una "conspiración" ¿por qué Dev y los demás estarían interesados en que estos montones de tuercas...?
—Cuida tus modales, Star —le advirtió Hax desde el otro lado de la barra. La chica lo ignoró.
—Como sea, ¿Por qué querría Dev que los robots, tuvieran conocimiento de la conspiración?
Ambrose sacó un par de piedras de distintos colores que despedían un brillo intenso, las colocó sobre la barra antes de responder:
—Quizás sólo se estén preparando —Star frunció el entrecejo. Una cierta piza de curiosidad la invadió.
—¿Para qué?
—La fiesta del fin del mundo —susurró Ambrose al oído de Star, antes de caminar hacia la salida del bar, ante la atónita mirada de la chica.
—¡Oye, soldado!, tu cambio —gritó Hax, sosteniendo un par de piedras de diferente color.
—Quédatelo —dijo y salió del lugar.
Hacía mucho tiempo que Star, no escuchaba aquellas palabras y supo en ese momento que el día que tanto había estado evitando, la había alcanzado...
Hi!
¡Gracias por haber leído! Esta historia me gustó mucho :3 al igual que la portada, estoy muy orgullosa de lo que logré (aún con el dolor de manos que no me deja xD) espero les haya gustado, ya saben que pueden comentar y dejar sus estrellitas, igual que compartir, me ayudarían mucho. Igual se aceptan los comentarios constructivos, todo con respeto muchachos :D
Les dejo mis redes sociales (instagram es el que uso más xD) para que me sigan se den una vueltecilla por si les interesa ver spoilers de las historias que trato de subir cada semana.
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Gracias por leer estas líneas también.
Hasta la próxima
PD: la canción que inspiró esta historia "I see Stars, The end of the wordl party" del álbum del mismo título :3
~Alei