STEPHEN STRANGE
❛ we lost ❜
Terror. Era la palabra más adecuada para describir la única emoción que consumía al hechicero en cuerpo y alma. Sus ojos no dejaban de mirar a la chica malherida sobre la tierra, y entonces su peor miedo se hizo real. El titán loco sostuvo el cuello de _____ con una sola mano para apartarla del suelo hasta que sus pies no pudieron tocar la tierra. Tony Stark y el equipo de los guardianes trataron de acercarse pero entonces el enemigo hizo más presión sobre el cuello de la heroína, dándoles así una advertencia. Acérquense y la mato de inmediato.
—Por favor, no —le pidió Stephen, era la primera vez que le rogaba a alguien.
—¿Acaso es amor, Strange? —rió Thanos, ganándose una mirada de muerte del hechicero supremo.
—Déjala ir... te lo ruego —repitió el doctor, era tan difícil suplicar, pero ella valía toda la pena.
—Hagamos un trato: la gema por la insignificante vida de la chica —negoció el hombre púrpura.
______ pudo mirar directo en los ojos de su amado doctor, negando tantas veces con la cabeza como fue posible. No quería morir, eso era obvio, pero su vida no valía la de todas las demás en el universo.
—No lo hagas, cariño —logró gimotear por la presión en su cuello—. Voy a estar bien... estoy lista.
—No, no —negó rápidamente el castaño al comprender sus palabras, estaba despidiéndose—. No puedo.
—Lo sé —sonrió la chica débilmente, las lágrimas bajaron por sus mejillas al momento—. Pero yo sí.
Las manos de la heroína se movieron hasta la pretina de su pantalón donde su blaster se encontraba guardado, sabía que aquello no podría matar a Thanos, ya que había podido detener el ataque de Loki anteriormente, así que optó por algo más efectivo. Lo llevó a su cabeza y no vaciló en apretar el gatillo, quitándole a Stephen cualquier oportunidad de darle la gema del tiempo a Thanos por su vida.
—¡NO! —el hechicero prorrumpió un potente grito agónico, al tiempo que sus ojos seguían el camino de su novia descendiendo hasta el suelo. Jamás había experimentado algo así, tanto dolor, tanta pena.
—Hey, Strange, ¿estás bien? —la voz de Tony Stark interrumpió de pronto su visión, regresandolo de golpe al tiempo real.
La respiración de Stephen estaba fuera de control, aquella premonición había parecido tan real que por un momento se había olvidado de que sólo era eso, un posible futuro. Con este simple recuerdo, el hechicero se prometió que no dejaría que ése futuro se hiciera realidad, incluso si llegaba a verse obligado a arriesgar su propia vida. Ella lo merecía.
Sonaba muy estúpido, pero el amor le provocaba hacer cualquier clase de cosas estúpidas. Así que, aunque le fallara a su trabajo, se dejó vencer ante Thanos cuando el plan que habían ingeniado de quitarle el guantelete lejos de su poder había resultado un rotundo fracaso. El titán sonrió con suficiencia mientras el castaño le entregó sin más rodeos la brillante gema esmeralda.
—¡No, Stephen! ¿Qué haces? —chilló la heroína desde el suelo antes de que Mantis la ayudara a ponerse de pie.
—Strange, no lo hagas —Stark negó con la cabeza, atónito.
—Perdón —fue la única oración del mencionado.
El doctor miró con pesar a su chica cuando finalmente soltó la gema del infinito para dejarla sobre la palma púrpura del titán loco.
—Buena decisión —asintió Thanos, colocando la penúltima piedra sobre su guantelete dorado.
El genocida desapareció con otro portal, dejando al equipo rotunda e irreparablemente derrotado en su intento por detenerlo. No podían dar crédito a lo que acababa de suceder... habían perdido, el universo estaba acabado. _____ se acercó al hechicero para proporcionarle una bofetada en la mejilla antes de desplomarse sobre sus brazos, rompiendo en llanto. Él la apretó con su cuerpo, depositando repetidos besos sobre su cabello y frente.
—¿Qué hiciste, Stephen? —sollozó la chica escondida en su pecho.
—Salvar mi universo —respondió el castaño, tomándola de las mejillas para besar delicadamente sus labios.
—Entonces hiciste algo muy estúpido —repuso ella.
—¡Algo está pasando! —exclamó de repente Mantis, terminando con el momento. Todos giraron sus rostros para mirarla.
La guardiana estaba, literalmente, desintegrándose en pequeñas partículas suspendidas en el aire, dejando sólo un montón de polvo al terminar de consumirse.
—¿Quill? —murmuró Drax, antes de desaparecer de la misma inusual manera.
—¿Perdimos? Oh, hombre... —se quejó el líder de los guardianes al mirar como su cuerpo también se esfumaba.
—¿Stephen, q-qué pasa? —farfulló la fémina, observando atónita el rastro de polvo que habían dejado los guardianes de la galaxia.
—Señor Stark, no me siento bien —anunció ahora Peter Parker, cayendo sobre el pecho de Tony.
—Ay no —chilló la chica al ver como el pobre joven se volvía nada cada segundo. Ambos se acercaron a los Vengadores para tratar de ayudar, pero no había nada por hacer. La muerte no es evitable.
—No me quiero ir, por favor, señor Stark —suplicó Peter, haciendo sentir muy mal al hechicero y a la chica al pensar que era culpa de ellos—. Lo siento —agregó el chico en un susurro, dejando de existir segundos después.
_____ volvió a lanzarse al pecho de Stephen para llorar amargamente, era demasiada destrucción por un día y ya no podía tolerarlo más. Entonces, al notar que él no decía ni una palabra o le devolvía el abrazo, levantó su rostro para mirarlo, presenciando el peor escenario.
—¿S-Stephen? —murmuró ella, tomándolo del rostro con sus manos temblorosas—. No, no, no... Tú no.
—No podemos evitarlo, cariño —replicó él.
—¿Por qué hiciste eso? ¡No debiste darle la gema! —exclamó ella toda sollozos.
—Lo siento... era la única manera —dijo el hechicero, dejándole un último beso en la frente con toda la fuerza que le restaba—. Peleé por ti hoy, sólo quiero que lo sepas. Todo lo que hice fue para protejerte.
—¡No, por favor, por favor! No te vayas -exclamó la chica cuando el comenzó a desvanecerse ante sus ojos lacrimosos—. Stephen...
—Te quiero —se despidió Stephen con una última media sonrisa.
—No quiero que te vayas —susurró la heroína.
Sus manos se llenaron de polvo y en un pestañeo, su querido hechicero había terminado de desvanecerse, dejando un terrible dolor en su pecho. ______ se dejó caer sobre sus rodillas en el suelo, rompiendo en un llanto mucho más devastador al tiempo que observaba como el viento se llevaba lejos el polvo en sus manos. De lo más profundo de su garganta salió un grito desgarrador, golpeando el suelo tantas veces hasta que sus puños se llenaron de sangre, gritando y gritando hasta que no quedó más fuerza en ella para hacerlo. Su cuerpo ya no podía más con todo el suplicio que la consumía, estaba abatida. Su mundo, su Stephen, todo lo había perdido en cuestión de segundos... ¿y para qué?
—Lo siento —lamentó Stark a su lado.
—Debí haber sido yo —musitó la heroína.
—Él se sacrificó —repuso el Vengador, tratando de reconfortarla.
—No valió nada.... hemos perdido, Stark. Hemos perdido todo lo que amábamos.
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Creo que iba a llorar unas tres veces mientras escribía esto :'v aún me dueles infinity war <\3
Roni_Phantom espero que estés feliz por hacerme escribir esto. (Es broma, te amo xd)
El próximo será divertido para reparar sus corazoncitos, lo prometo <33