orbitae → kim taehyung

By amgabriell

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❝Algunas cosas están destinadas a ser y otras que no... ¿cuál crees que sea nuestro caso, Taehyung?❞ → Spin... More

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By amgabriell


6 meses atrás.

Babe.

Se puso un pantalón negro de tubo y una franela negra de algodón para luego cubrirse con una bomber jacket color verde oliva. Decidió estrenarse sus nuevas botas de Dr. Martens vino tinto y se alisó el cabello con las manos para ir al cumpleaños de Jimin.

— Creo que acabo de tener un infarto —Dijo Taehyung cuando la vio salir de su habitación. Se llevó una mano al pecho y frunció el ceño de dolor. 

El chico la estaba esperando abajo en la sala con el padre de Babe quien se llevaba bastante bien con el castaño desde que se había presentado en su casa con comida china y tres refrescos alegando que era el prometido de Babe. 

Todavía no eran novios oficiales pero Taehyung tenía ya el matrimonio armado en su cabeza, la ceremonia sería en la casa de sus abuelos. 

— ¿Te sientes mal, Tae? —Preguntó la chica preocupada acercándose a él.

— Es que eres tan bonita que mi corazón se acaba de morir, Bae noona —Soltó una gran sonrisa que hizo que el papá de Babe se riera con ganas causando un estruendo en la sala a causa de la carcajada. 

— ¡Dios, Tae! —Se quejó la castaña jalándole una oreja. 

— Este chico me va a matar de la risa un día —Dijo el señor limpiándose las lágrimas del rostro a causa de reírse —Bueno, los dejo solos para que vayan a la fiesta del cachetón.

— Se llama Jimin, papá —Contestó —Y no es tan cachetón.

— No me refería a sus mejillas —Bromeó el padre para luego despedirse e irse a su habitación —Si regresan tarde en el refrigerador hay una pizza que compré esta tarde —Dijo antes de desaparecer de la vista de ambos chicos. 

— Tu papá es genial, compró pizza e hizo a una hija muy bonita —Dijo tiernamente el chico picando la nariz de la castaña con los dedos.

— No hablemos de cómo me hizo mi papá —Dijo avergonzada —¿Ya todos están allá? 

— Sí, antes de venirme los demás ya estaban listos sólo faltaba hacer un playlist para toda la noche pero Hoseok dijo que se encargaría.

— Perfecto —Babe se acurrucó al brazo de Taehyung y este frotó su mejilla contra la cabeza de la chica cariñosamente.

— Casi lo olvidaba, te traje algo para que termines de completar tu vestuario —Dijo revisándose los bolsillos de su chaqueta de cuerpo marrón.

— ¿Qué es?

— Mira —Taehyung sacó unos lentes de marco redondo con cristales azules y se los puso en la cabeza a la chica —Yo tengo unos iguales pero con el vidrio rojo, ¿qué te parece? —Dijo señalando el par que le colgaba del cuello de la franela.

— Me parece que nos veremos muy bien —Le sonrió dulcemente colocándose los lentes —¿Listo?

Taehyung le sonrió y tomó su pequeña mano entre sus dedos con delicadeza.

— Siempre. 

***


La casa de Jimin se había convertido en el sueño de todo adolescente hormonal en busca de una poco de diversión. Música variada, luces de colores que parpadeaban en diferentes tiempos, guirnaldas en las paredes, comida y bebida que abundaba, juegos de mesas y hasta un micrófono para cantar karaoke cuando todos estuviesen tan ebrios para perder la dignidad.

— ¡Babe ~! —Saludó Hoseok cuando vio que la pareja entraba al recinto —¡Wow, wow esto es una fiesta humilde no una pasarela de moda! —Dijo refiriéndose a lo bien que se veían Babe y Taehyung juntos y por sus vestimentas. 

— Hacen que mis jeans se sientan avergonzados —Intervino Namjoon pasándole un vaso de jugo a Babe —Taehyung dice que sufres de gastritis y que no puedes beber.

— Eso es cierto. Gracias —Babe recibió el vaso y lo levantó levemente brindando junto al de Namjoon. 

— ¿Dónde está el cumpleañero? —Preguntó la castaña —Le hemos traído un regalo.

— Por favor que no sea como el de Yoongi. El pobre Jimin lo abrió delante de unas chicas y casi se muere de la vergüenza —Recordó Namjoon y Hoseok estalló en risas.

— ¿Qué era? —Preguntó inocentemente Taehyung —¿Un peluche?

Babe sonrió ante lo tierno que a veces podía sonar Tae.

— Un par de interiores que decían "cómeme" en la parte de atrás —Dijo Yoongi uniéndose a la conversación —¿Qué? No me digan que no fue genial.

Todos estallaron de risas y Jimin se acercó en ese momento porque había visto que Babe y su amigo habían llegado.

— Dime que no les contaron lo de mi regalo —Dijo haciendo puchero.

— No, sólo hablábamos de la energía cósmica y la masa del sol —Yoongi estaba divirtiéndose esa noche molestando al chico —Y de lo lindo que se te verían esos interiores.

— Maldita sea, Yoongi —Dijo Namjoon partiéndose de la risa mientras que Jimin se moría de la vergüenza otra vez.

— Nosotros te hemos traído algo también —Babe le ofreció una pequeña caja color negro al chico quien la miraba curioso por todos lados cuando la tuvo entre sus manos.

— ¿Qué es? —Taehyung sonrió porque sabía que le iba a gustar.

— Ábrelo —Alentó Hoseok.

— ¡Ya ~! ¡Gracias, gracias! —Jimin empezó a brincar de la emoción abrazando a los chicos cuando vio que su regalo era nada más y nada menos que un anillo de metal con inscripciones en negro. 

— Babe lo eligió —Comentó Tae —Pero yo fui quién le dijo tu talla, aunque fue difícil porque tus pequeños dedos... ¡Ouch! —Babe le dio un codazo en las costillas para que no dijera nada imprudente. 

— Esperamos que lo disfrutes, Jimin —Dijo la castaña y el nombrado sonrió ampliamente.

— Y yo espero que ustedes disfruten la fiesta.

***


La noche era divertida, cambiante, vibraba y se colaba entre las piernas de todos mientras bailaban canción tras canción de la playlist de Hoseok. No había nadie que pudiera decir que se estaba aburriendo o que no había encontrado su lugar.

— ¿Bailamos otra? —Le dijo Hoseok a Babe —Esta vez seré yo quien invente los pasos del coro. 

— ¿Vienes, Tae? —Le preguntó al castaño.

Los siete chicos y Babe estaban sentados en un mueble negro que habían reservado para ellos. Hoseok, Jimin y Babe iban a bailar de vez en cuando con pasos improvisados que cada uno inventaba mientras que los demás se quedaban sentados hablando, comiendo o bebiendo jugo de frutas en el caso de Jungkook.

— No, ve tú bebé —Le respondió este alentándola con la mano a que se fuera a divertir.

— Nos vemos al rato entonces.

— ¡Yo voy con ustedes! —Jin se animó a bailar luego de sentir que se le adormecía el trasero de estar tanto tiempo sentado.

A lo lejos Taehyung vio como el trío se sumió en una canción movida y sonrió al notar que Babe se la estaba pasando bien. Le encantaba verla feliz, la adoraba. 

— ¿Cuándo se lo vas a pedir? —Preguntó Namjoon poniéndose el trago entre las piernas —Digo, ya conoces incluso a su papá.

— Aún no lo sé, me da pena.

— Vamos, no es tan terrorífico —Le alentó Jimin —Sólo le haces la pregunta cuando lo veas conveniente.

— Yo creo que hoy sería un buen día —Dijo Yoongi.

Taehyung meditó y volteó a ver a su amigo Jungkook pidiéndole consejo.

— Yo pienso que... —Jungkook estaba cabizbajo. 

Babe era una pequeña espina que todavía dolía.

— Yo pienso que hoy no —Todos se giraron a verlo pero Tae asintió —Pídeselo en un lugar más bonito, hyung. 

— El chiquito tiene razón —Comentó Namjoon abrazando por el hombro a Jungkook —Mejor olvida nuestros consejos de segunda y hazle caso a Kookie. 

— Está bien, eso haré —Dijo Taehyung volviendo a clavar la mirada en su futura novia. 

Babe no sabía bailar nada bien pero se notaba que le gustaba intentarlo junto a Hoseok que también disfrutaba de la compañía de dos robots defectuosos como Babe y Jin a la hora de bailar.

— Se ve que te gusta mucho, ¿no es así? —Le susurró Jimin al oído.

— Sí... —Respondió embobado sin quitarle la mirada de encima a Babe.

— Bueno, cuando quieras tener un momento a solas con ella para hablar —Jimin lo decía sinceramente, sabía que Tae era de los que les gustaba hablar de cualquier cosa. Hasta de las manchas de las vacas, por ejemplo —Tienes la llave de mi habitación para eso —Dijo pasándole una pequeña llave plateada.

— ¿Lo dices en serio?

— En serio, Taetae. 

— Ya regreso —Dijo Jungkook levantándose de golpe del sofá con la cara enrojecida. Había escuchado parte de lo que Jimin le dijo a Taehyung.

— Yo regreso en unos minutos también —Comentó Tae —Babe no ha comido nada desde que llegó y puede que le duela el estómago de tanto jugo.

— Vale —Respondió Yoongi acomodándose en el sillón.

Cuando el resto de los chicos se quedaron sin Jungkook y Taehyung, Namjoon fue el primero en hacer el comentario.

— ¿No creen que Jungkook está siendo muy obvio?

— Un poco —Dijo Yoongi —Yo hablé con él antes de que Babe y Tae llegaran.

— Aún es algo difícil para él —Dijo Jimin preocupado —Pero poco a poco irá sanando.

— Sí... Es decir, estoy feliz por Tae pero también quisiera que Kookie estuviera bien —Namjoon no quería que ninguno de sus chicos la pasara mal.

Pero Jungkook aún quería a Babe y le era difícil alegrarse por completo cuando la veía junto a Tae. No era que les deseara mal o nada por el estilo pero era inevitable para él entristecerse o sentir celos. Lógico, le gustaba.

— Hay que ayudarlo en todo lo que podamos —Dijo Jimin —Nos haremos cargo de que Jungkookie olvide a Babe —Y todos se propusieron hacer caso al comentario del cumpleañero.

***


Taehyung.

— Un poquito de jamón, la la la ~ —Tae cantaba en la cocina mientras le hacía un sandwich  de tres pisos a Babe —Y el queso por aquí, la la la ~ queso, queso, señor queso... —Estaba de tan buen humor que no se había dado cuenta que ya llevaba casi cuarenta minutos en su labor de chef —¿Será que le pongo lechuga? ¿Jimin tendrá lechuga? —Se preguntó así mismo en voz alta —¿La lechuga es buena para el estómago? ¡Lechuga! —Empezó a llamar abriendo el refrigerador.

— ¡Tae ~! —Canturreó Jungkook entrando a la cocina y Taehyung escuchó un golpe seco cuando el menor se chocó contra la mesa.

— ¿Kookie? —Frunció el ceño —¿Kookie has bebido?

El menor no se parecía en nada al chico que hacía un rato estaba con ellos hablando tonterías y tomando jugo. Ahora tenía la mirada perdida, la postura torpe y las mejillas encendidas. Incluso estaba un poco sudoroso. 

— ¡Jungkook! —Una voz femenina se alzó tras el menor y Taehyung abrió los ojos sorprendido cuando vio de quién se trataba.

— ¡Sanha! —La nombrada se quedó estática cuando vio a Taehyung —¿Qué le pasó a Jungkook? —Frunció el ceño cuando el chico le cayó encima mientras hipaba.

— Tae hyung ~ ¿Sabes? Tae... ¡hyung! 

— Estaba en la parte de las bebidas hablando conmigo y de repente empezó a tomar vaso tras vaso —Dijo la chica rápidamente —Cuando me di cuenta ya estaba ebrio hablando incoherencias y buscándote por todas partes.

— Hyung ~ ¿dónde está la noona?

— ¿Y por qué lo dejaste beber así? ¡Jungkook es menor de edad aún!

— ¿Qué? —Sanha vio como el peso de Jungkook se hizo más fuerte sobre Tae y este tuvo que echarse hacia atrás y sentar al chico en la mesa.

— Dios mío, Kookie —Tae ignoró a la preocupada chica e intentaba llamar a Jungkook —Sanha, ve por Namjoon y Yoongi.

— En... enseguida —Sanha corrió hacia donde estaban los chicos y les pidió que la acompañaran hasta donde estaba el menor ebrio y Taehyung.

— Mierda, Kookie —Dijo Namjoon cargándolo en brazos con ayuda de Taehyung.

— Llevémoslo por la escalera de atrás para que las personas no se alarmen —Dijo Yoongi.

— En especial Jimin y Babe —Dijo Namjoon —Vamos, Taehyung. 

Cuando llegaron a una de las habitaciones principales dejaron a Jungkook sobre la cama, este hablaba incoherencias y no dejaba de llamar a sus amigos.

— Namjoon hyung ~ cárgame de nuevo.

— Esto no puede pasar otra vez —Regañó Namjoon a Taehyung —¿Dónde lo encontraste?

— Vino dando tumbos a la cocina, estuvo bebiendo con Sanha —Tae se sentía tan culpable que podía llorar. No quería ver a Kookie con resaca ni algún malestar.

— ¿Y esa niña es tonta? —Preguntó Yoongi —Todos saben que Jungkook es menor de edad.

— Bueno, quizás fue por el momento... —Meditó Namjoon —Bajemos a avisarle a Jimin.

— Por favor no seas tan alarmista para no preocuparlo, es su cumpleaños —Pidió Yoongi —Tae, quédate con Jungkook y cuídalo. Ponlo acostado de lado por si acaso se vomita encima para que no se ahogue.

— Está bien —Respondió el castaño —Si Babe pregunta por mí...

— Ya le digo que estás arriba, no te preocupes —Dijo Namjoon palmeándole el hombro —Pendiente de Kook.

Los mayores salieron para dejar a ambos chicos en la habitación para que el menor descansara. La música todavía se escuchaba fuertemente pero al cerrar la puerta el sonido se amortiguó un poco.

— Taehyung ~

— Kookie me estás tuteando —Dijo el otro en tono de broma para no sentirse tan culpable —Soy tu hyung.

— Tae, hyung, hyung ~ —Sonreía dentro de su borrachera y tenía los ojos cerrados —¿Dónde está la noona?

— Noona está abajo con Hoseok y Jin.

— Oh, noona ~ siempre tan bonita... —Se removió en la cama y se abrazó a la almohada —Noona me gustas tanto.

Taehyung abrió los ojos y entreabrió los labios sorprendido, la culpabilidad creció aún más en su corazón y se dio cuenta de que Jungkook había bebido seguramente por él y por Babe.

— Pero noona quiere a hyung y yo no puedo hacer nada —Siguió el menor sin tanta efusividad, parecía que iba a empezar la fase del llanto en cualquier momento —Y yo... —Jungkook hizo puchero y Tae se sintió realmente mal —Yo he hecho algo malo.

— ¿Qué dices Kookie? No has hecho nada —Jungkook empezó a llorar y Taehyung intentaba consolarlo mientras acariciaba su cabeza.

— Yo y—yo me he enamorado de noona —Lloraba abrazado a la almohada —Y yo he hecho algo muy malo.

— Eso no tiene nada de malo, Kookie —Consolaba el castaño mientras lo acobijaba.

— Malo... —Murmuró el pequeño antes de quedarse dormido.

Era cierto que no había nada malo en enamorarse. Lo realmente malo era herir el corazón de alguien más. 

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