La práctica acabó después de unas horas, poco antes del mediodía. JYP los llamó al centro de la cancha, con una hoja en la mano y el rostro endurecido.
— ¿Sucedió algo malo? — preguntó el capitán.
Park asintió llevándose una mano a la frente.
— La final será mañana.
Las quejas unísonas de los jugadores no tardaron en llegar, entre empujones trataban de acercarse al manager del equipo para decir una explicación.
JB dio varios aplausos para hacerlos callar y volver a sus posiciones. — ¿Pueden calmarse? JYP no tiene la culpa aquí. — sentenció con el ceño fruncido. Volvió su vista al mayor. — ¿Hay alguna razón en específico?
— El tiempo que se utilizaría el viernes para las finales consecutivas de baloncesto, fútbol y voleibol serán utilizadas para una ceremonia de premiación mas en forma. Así que el tiempo donde, supuestamente, jugarían la semifinal fue asignado para jugar la final.
— ¿Qué demonios les pasa este año? Están haciendo un desastre con la competencia. — dijo ChanYeol, con su cabeza sobresaliendo entre los demás jugadores.
— Al parecer hubo un cambio en los directivos, por lo que la manera de llevarse a cabo a cambiado bastante.
Los miembros del club resoplaban y murmuraban entre sí.
Su primer intercolegial y todo era una tan agobiante.
Aún les quedaban varios días para practicar y a JaeBum más días para sanar.
Porque sí, el dolor en su espalda no desaparecía. No completamente.
— Eso es todo por hoy, chicos. — dijo Park. — Los veo mañana en el gimnasio 3 de la institución, a las 7:30 pm. Un minuto de retraso y se quedan en la banca ¿escucharon?
— ¡Si! — exclamaron al unísono.
El equipo se fue separando conforme salían del gimnasio que les fue asignado para practicar, unos hacia distintos hoteles y otros a casa de familiares, como era el caso de JB y Jackson.
— Estamos en casa. — anunció Jackson a su madre, quien salió a recibirlos con un delantal puesto y una espátula en la mano.
— Bienvenidos, mis niños. — les sonrió la mujer, besando la frente de cada uno, sin importarle lo sudoroso de éstas. — La comida estará en unos minutos así que vayan a ducharse para que vengan a comer.
Ambos asintieron dirigiéndose a sus respectivas habitaciones para tomar el baño que les había sido ordenado.
JB se desplomó con cuidado en la cama, jadeando ligeramente ante el punzante dolor en su espina dorsal.
— Por favor, vete ... por favor. — habló JB al aire, como si su dolor pudiera escucharlo.
El momento más importante de toda su trayectoria como jugador sería en tan poco tiempo y no estaba en condición, ni siquiera una mitad de lo ordinario. Cualquier movimiento brusco le provocaba unos insoportables calambres, los cuales le hacían sentir como si estuviese siendo quemado por dentro.
Como pudo se puso de pie de nuevo, acercándose al armario que le había sido prestado para sacar un cambio nuevo de ropa. Al hacerlo se dirigió a uno de los dos baños del pasillo, el cual no estaba siendo ocupado por un Jackson.
Se sentó en la tapa del retrete y marcó el número de quien, seguramente, lo haría olvidar de sus pesares.
— Bumie~ justo estaba por llamarte ¿cómo estás? — dijo YoungJae al contestar, haciendo sonreír a JB.
— Extrañándote.
— Pero si me viste ayer ... — YoungJae rió con timidez.
— Y hoy ya te quiero ver ¿estoy loco?
— Bumie es lindo. — respondió. — Yo también ya te extraño, entonces seamos locos juntitos.
— Me agrada la idea. — JB rió junto al menor. — Por cierto ¿por qué no estás en clase?
— Mi profesora no vino así que estoy en el estudio con JinYoungie hyung, estamos practicando la presentación del domingo.
— Dile a JinYoung que digo yo que coma tierra.
YoungJae soltó una satisfactoria carcajada. — JinYoungie hyung, Bumie dice que comas tierra. — se escuchó la voz del menor un poco lejana, unos segundos de silencio después YoungJae volvió a reír. — JinYoungie dice que te vayas a la mierda.
JB se ahogó en su propia saliva al oír a YoungJae decir aquella palabra.
— Dile a JinYoung que la mierda es lo que le voy a sacar por hacerte decir esa palabra, anda.
— Dice JinYoungie que eres un idiota, ya que tú también acabas de hacer que la dijera.
— Mierda, es cierto.
— Bumie, no digas eso.
— ¿Qué cosa? ¿Mierda?
— ¡Bumie!
JB rió.
— ¿Entonces cómo digo?
— Mmm ... ¿popis?
— No sonaría tan adorable como en ti, eres jodidamente adorable ¿lo sabías?
— N-no cambies el tema, Bu-Bumie. — JaeBum sonrió ante la vergüenza en el menor.
— Lo siento, bebé. Pero tengo algo que contarte.
— ¿Qué sucede, Bumie?
JaeBum se quedó en silencio unos segundos, buscando la forma de decírselo.
La noche anterior en la que le había contado a su pequeño novio sobre su pase a la final, éste se había alegrado tanto bajo al lente de la videocámara de su computadora que ahora no sabía como decirle que sería en un día laboral como lo era mañana, en donde tendría que asistir a la escuela al día siguiente.
Por lo que no podría estar con él, como a ambos tanto les entusiasmaba.
— ¿Bumie? — habló Jae, ya que el mayor se había quedado en silencio.
— Bebé, la final fue re-programada para mañana.
Esta vez quien se quedó en silencio fue YoungJae.
— ¿Ma-mañana? Pero Bumie, mañana yo ... yo no puedo ... — dijo bajando cada vez mas el tono de su voz.
— Lo sé, bebé. Y lo entiendo, no tienes que preocupa-
— No me pidas que no me preocupe, hyung. — lo interrumpió el menor. — Te hice una promesa y no la podré cumplir.
— Si, mi cielo. Sé que la hiciste, pero también sé que no es tu intención no poder venir, así que tranquilo ¿sí?
— No.
— Bebé ...
— ¿A qué hora es?
— Jae.
— Bum.
JB sonrió.
— A las 7:30 pm. — respondió.
— Si salgo a las 3 pm de la escuela y me voy directamente al aeropuerto y corro con la suerte de que haya un vuelo para antes de las 5 pm llegaría justo a tiempo ¡agh! Pero no conté el tiempo que tardaré en llegar a Incheon y el tráfico a esa hora es horrible y-
— Te amo, Jae. Y no dejaré de hacerlo porque no vengas a un simple partido.
— No es un simple partido, y lo sabes.
— Quizá ...
— Quisiera verte ganar, Bumie. Porque sé que lo harás.
— Ya he ganado en el momento que te conocí, mi cielo.
YoungJae sollozó. — Bu-Bumie ...
— No te lamentes ¿sí?
— Está bien ...
JaeBum sonrió débilmente.
— Bebé, tengo que colgar ¿está bien? Debo ducharme para bajar a comer, ya sabes que a la madre de Jackson no le gusta que la hagamos esperar. — YoungJae asintió con un leve sonido. — Te amo.
— Yo también te amo, Bumie. Y lo siento ...
— No tienes que disculparte, YoungJae. No estoy molesto.
— Está bien, hyung. — respondió. — ¿Podemos hacer vídeollamada antes de ir a dormir?
— Claro que sí, bebé. A las 8 pm de Seúl ¿te parece?
— Me parece.
— Entonces hasta al rato, bebé.
— Hasta al rato, Bumie. — dicho esto colgó, alargando un suspiro.
JinYoung se alejó del piano para ver a su dongsaeng.
— ¿Sucedió algo, Jae?
— La final será mañana.
— ¿Final de qué? ¿Del juego de los chicos?
— Si ...
JinYoung se quedó en silencio viendo al menor recostar su cabeza en la mesa, escondiendo su rostro entre sus brazos.
El mayor se llevó ambas manos al rostro antes de alargar un pesado suspiro.
"JinYoung-ah, voy a dedicarte todas mis anotaciones. Así que ven ¿sí?" le había dicho Jackson al atardecer del día anterior, después de contarle con gran entusiasmo su lugar en la final de intercolegial.
¿Cómo podría fallarle a quién había estado de pie junto a él en todo momento? Importante o no importante, Jackson siempre estaba ahí. Sin necesidad de tener que pedírselo él estaba a su lado, sin condiciones.
JinYoung no podía negarlo, estaba emocionado de estar en la tribuna de aquel partido tan importante, gritando con todas sus fuerzas el nombre de su amado para darle la fuerza que en algún momento necesitaría, poder decir con orgullo que aquel pequeño y talentoso rubio era su novio, quien levantaría con alegría el trofeo por el cual tanto ha luchado junto a sus compañeros.
Pero todo estaba truncado.
— Chicos, que sorpresa verlos aquí. — dijo JongHyun entrando a la sala de práctica junto a un desconocido chico más alto que él.
— Sunbaenim, buenas tardes. — lo saludó JinYoung con una reverencia, al igual que YoungJae.
— Él es Taemin; Taemin ellos son JinYoung-ah y YoungJae-ah, mis dongsaengs del club. — los presentó el mayor.
— Mucho gusto. — dijeron al unísono los tres chicos antes de sonreír e inclinarse.
— ¿Qué lo trae por aquí, sunbae? Creí que iría a una audición súper importante del mejor bailarín que sus ojos hayan visto jamás. — recitó JinYoung las palabras que JongHyun les había dicho días antes.
— ¿Sigues con eso, hyung? Basta.
— Soy tu fan #1 ¿por qué no puedes aceptarme? — reprochó el peliblanco a Taemin, quien lo veía con los ojos entrecerrados. — Se supone que nos iríamos hoy, pero alguien — miro al azabache, quien rodó los ojos. — olvidó comprar los boletos de avión.
— ¿Y qué harán?
— Tendremos que ir en carro.
— Pero es un viaje de días, hyung.
— Demonios, llama a Onew.
— ¿Por qué?
— Él tiene un Jet ¿no?
— Es de legos, JongHyun hyung.
— ¿No puedes hacer la audición por FaceTime o algo?
— ¿Podrías tomártelo en serio?
— Lo dice quien se olvida de comprar los boletos.
YoungJae y JinYoung se miraban entre sí mientras los mayores discutían entre sí.
— Ehm ... sunbae.— lo llamó JinYoung.— Si compra los boletos hoy es seguro que consiga uno a una buena hora y buen precio, ya que a Hong Kong salen vuelos cada 4 o 5 horas.
— ¿En serio?
— Sí, hyung. Lo sé porque Jackson ha comprado boletos de un día para otro para visitar a sus padres.
— Ah, qué alivio. — suspiró JongHyun. — Gracias, JinYoung-ah. Iré a checar. — le sonrió el mayor.— Nos vemos después, chicos.— se despidió saliendo de la sala seguido de Taemin, quien se despidió con una leve sonrisa y un movimiento de manos.
— ¿No deberíamos hacer lo mismo?
— ¿De qué hablas?
— Comprar boletos, Hyung.
JinYoung suspiró.
— Escucha, Jae. Yo también quisiera ir, no olvides que Jackson también forma parte del equipo y Jackson es ... Jackson es mi novio.
YoungJae sonrió enternecido ante el sonrojo en su mayor.
— Pero tenemos responsabilidades, Jae. Mañana es el último ensayo del recital ¿lo olvidas? — YoungJae negó con la cabeza. — JB estará triste si sabe que tú también lo estás, así que tranquilo ¿sí?
YoungJae suspiró resignado dejándose caer en la silla.
Perdóname, Bumie ...
☀️
— ¿Qué tal está el niño más lindo del planeta esta noche, mh?
YoungJae rió tímidamente.
— No lo sé ... ¿cómo estás, Bumie? — dijo YoungJae sonriendo mientras sostenía su celular con una mano y con la otra terminaba de secar su cabello después de una ducha.
— Y-yo, bien ... muy bien, bebé ... eso es trampa.
— ¡Bumie es tan tierno! — exclamó YoungJae enternecido ante la timidez de JB.
— No soy tierno ...
— ¿Guapo?
— No, soy sexy.
YoungJae rió acostándose en su cama.
— Chic and sexy!
— No deberías juntarte tanto con Jackson. — YoungJae volvió a reír.
— Estaba pensando teñirme el cabello, Jackson hyung me lo recomendó.
— ¿Ah sí? ¿Y de que color?
— ¿Qué tal pelirrojo como Markie hyung? Quizá me vea ardiente.
— No necesitas verte ardiente, basta.
— Pero Bumie ~ me gustaría verme más ... maduro.
— BamBam se tiñó el pelo y sigue viéndose como un bebé.
— Creí que era el único bebé en tus ojos.
JB rió enternecido.
— Lo eres, bebé. El más hermoso de todos.
— Yei. — YoungJae sonrió.
— Jae, por cierto ... ¿en dónde estás? Esa no es tu habitación.
— Ah, es la de Bamie. La calefacción de mi habitación de averió y BamBam me ofreció dormir en la suya.
— ¿Y BamBam dónde duerme?
— Con YuGy.
JB y Jackson, quien se encontraba recostado en el sofá frente a él, compartieron miradas.
— ¿Ah sí?
— ¿Te dejan dormir YoungJae-ssi?— dijo Jackson haciendo reír a JB.
— Uhm ... sí ¿por qué?
— Verás, Jae.— Jackson se puso de pie y se sentó junto a JB para poder ver al menor y que éste lo viera a él.— Cuando nos personas se gustan mucho y comparten una habitación, generalmente no dejan dormir cómodamente a los demás.
YoungJae ladeó la cabeza sin entender.— Pero ... Bumie me gusta mucho y cuando compartimos habitación no molestamos a nadie.
La carcajada de Jackson resonó en la sala de estar.
— Uf, entonces JaeBumie necesita mejorar.— se burló ganándose un pellizco en el muslo.
— Mejorar ¿en qué, hyung?
— Ignóralo, Jae. No se ha tomado sus medicamentos.
Esta vez el pellizcado fue JB.
— ¿Quieres pelear, chino?
— ¡Mamá! JB me quiere pegar.
— Llorón.
YoungJae reía divertido al ver a sus mayores juguetear entre ellos hasta que la madre de Jackson llegó a calmarlos.
— Ahora sí, estamos solos.— dijo JB dejándose caer en la frazada de su cama temporal.— ¿Jae?— llamó a su novio al notar que la cámara de éste apuntaba hacia el techo.
— ¡Aquí estoy!
— Mi cielo ¿a dónde te fuiste?
— Corrí a abrirle la puerta a Markie hyung, se quedará esta noche con nosotros.
— ¿Y eso a qué se debe?
— Perdió las llaves de su departamento y hasta mañana podrá ir un cerrajero a abrir y cambiar las cerraduras.
JB rió.
— ¿Quién pierde las llaves de su casa? Dios.— continuó riendo.
— Tú perderás la vida si te sigues riendo.— dijo Mark entrando a la habitación, desplomándose junto a YoungJae.
— Que miedo.— respondió JB fingiendo temblar.
— ¿Estás retándome? No estarás en China por siempre.
— Rayos, es cierto.— los tres rieron.
— Que miedo, se movieron al mismo tiempo.
— Es porque YoungJae está conectado a mí ¿coincidencia? No lo creo ¿Me quiere más que a ti? Efectivamente.
— A ti te quiere, a mí me ama.
— Ahora dilo sin llorar.
JaeBum bufó.
Mark era el único que lograba molestarlo.
— Ya, ya. Para que JB deje de llorar me retiro.
— Sí, tienes a dos niños precoces que monitorear.
— Más bien a uno; BamBam es una bestia cazando a su presa.
— YuGyeom.
— Exacto, pero ni se inmuta.
— Pobre Bam.
— Sí, dormiré en medio de ellos. — JB rió. — Buenas noches, JaeBum. Buenas noches, Jae. — se despidió el mayor antes de ponerse de pie de la cama y salir de la habitación.
YoungJae destendió su cama, metiéndose entre las cobijas acomodándose para dormir.
— Bumie ~
— Eres tan lindo, joder.
YoungJae rió cubriendo por completo su rostro.
— Quisiera que estuvieras aquí, hace mucho frío.
— Abraza mi almohada. — el menor lo hizo. — Cierra tus ojitos. — YoungJae obedeció. — Estoy ahí, bebé.
— Cántame para confirmar.
— Excelente jugada, Choi. — el menor rió sin abrir sus ojos.
Cumpliendo el deseo de su pequeño novio, con una voz suave y baja comenzó a cantar una de las canciones favoritas del menor.
Soportándolo hasta ahora pensando en ti
quien estará esperando afuera incluso si la temperatura exterior es demasiado fría por la noche.
Continuó cantando unos versos más hasta que el menor cayó dormido frente a sus ojos.
— Buenas noches, bebé.— susurró JB viendo a YoungJae dormir frente a la cámara de su celular.
Pasaron varios minutos y JaeBum seguía con la vídeollamada encendida.
Si algo el azabache adoraba era ver a YoungJae dormir; su apacible rostro y su suave respiración lograban relajarlo, como ver un amanecer frente al mar con su canción favorita de fondo.
Pero mil veces mejor.
— JaeBum, levántate.
— ¿Quién dice?
— Mi madre, te llevará a un lado.
— Qué.
— Levántate y ya.
JB confundido su puso de pie y antes de colgar la llamada tomó unas cuantas capturas y con todo el dolor de su alma cortó la comunicación.
Se colocó sus tenis y salió de la habitación.
— Tía, disculpe pero ¿a dónde me llevará?
— Lo sabrás cuando lleguemos, vamos.
Jackson estaba por meterse a su habitación cuando JB lo detuvo.
— Ven conmigo.
— Que pereza.
— Que buen amigo, eh.
— Ya, ya. Déjame ponerme un suéter.
A los pocos minutos los tres se encontraban en el coche de la madre del extranjero, hacia un rumbo desconocido para JB.
Al llegar JaeBum comenzó a tener un mal presentimiento; una cabaña oscura a las afueras de una carretera, un fuerte olor a incienso fue lo primero que pudo detectar.
— Eh, tía ...
— ¿Creíste que podrías engarme, JaeBum-ah? A mí quien te cuidaba desde que eras niño cuando tu madre no podía regresar temprano del trabajo.
JaeBum miró a la mujer a los ojos, notando la preocupación en ellos.
— Mucho menos a mí, Jota Be.— intervino Jackson.— Tú espalda está hecha una mierda.
— Vocabulario, Wang.
— Lo siento, mami.
JB no sabía qué decir o qué hacer. Creyó ser lo suficiente discreto pero al parecer nunca podría engañar a Jackson.
— Lo siento ...
— Pídete perdón a ti mismo, joven. Que vas a sufrir como nunca ahí adentro, te habla alguien con experiencia.— dijo Jackson sacándolo del auto.
Los Wang tomaron de los brazos a JaeBum, encaminándolo dentro de aquel lugar.
Un curandero de unos 100 años (según JB) les abrió la puerta, dándoles paso a los nuevos clientes.
JaeBum miraba todo alrededor, sintiendo los nervios aumentándole poco a poco al escuchar la voz de la madre de Jackson hablar con el anciano cosas que no entendía.
— Tranquilo, Jota Be. Es por tu bien.
— Te he dicho que no me gusta que te metas en-
— Muy tarde, ahora a la cama.
El anciano lo examinó con la mirada antes de hacerlo acostarse boca arriba en una camilla.
Murmuró algo que JB no pudo entender.
— Dice que desnudes tu torso.
JaeBum obedeció para volver a acostarse.
Las duras manos de aquel hombre se pasaron con suavidad por su espalda, tanteando poco a poco su esqueleto.
— ¡Ah!— exclamó de dolor cuando el anciano presionó las alas de su espalda.
— Dice que probablemente dolerá, pero que para mañana estarás como nuevo.— dijo Jackson.
— ¿Qué es esto? ¿Un dorama?— ironizó JB.— ¿Cómo carajo estaré bien de un día para otro?
— Ha curado muchos de los huesos que me fracturé durante mis años en esgrima. Duele como el infierno, pero ... situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas, Jota Be. Te necesitamos mañana.
JaeBum suspiró.
— No estás solo, JB.— Jackson se acercó a la camilla, tomando la mano de su mejor amigo.— Puedes apretarla tanto como quieras.
El azabache miró a los ojos a Jackson, notando la preocupación también en ellos.
— Está bien ...
Jackson le dio la autorización al anciano, quien asintió para después mojar la espalda de JaeBum con un aceite casi hirviendo de colocó.
— ¡Mierda!
JaeBum encorvó la espalda al sentir el caliente líquido quemar su piel, pero eso no era nada comparado a lo que vino después.
— ¡No, no! Ja-Jackson, haz que pare por fav- ¡¡Ah!!
JB podía escuchar el sonido de sus huesos crujir a cada segundo, sintiendo un indescriptible dolor recorrer toda su espalda hasta sus caderas. Cerró con fuerza sus ojos dejando que las lágrimas de dolor mojaran su rostro.
— Aguanta, JaeBum. Tú puedes.
La pesada respiración de JB fue lo único que se escuchó por unos segundos en la calurosa habitación. El anciano volvió a mojar su cuerpo, esta vez con un líquido sumamente frío.
— ¡Puta mierda!— maldijo cuando un robusto objeto comenzó a hacer círculos en las alas; JaeBum sentía como si se colara entre sus huesos, perforando sin piedad.— Jackson ... Jackson es suficiente, por favor ...
El rubio se mordió los temblorosos labios, arrepintiéndose de acompañarlo. Él más que nadie sabía lo doloroso que era someterse al tratamiento de aquel curandero.
Ver a su mejor amigo aferrarse a la camilla al igual que a su mano, con el rostro enrojecido y empapado de sudor y lágrimas estaba por hacerlo ceder. Pero no podía, no si quería lo mejor para JaeBum.
Un rato más pasó en el que JaeBum poco a poco fue perdiendo las fuerzas, dejando caer sus brazos a los lados de la camilla y su cabeza hundida en el pequeño cojín. Mientras sentía las huesudas manos del anciano molerle los huesos se le vino a la mente lo último que vio antes de venir a su tortura.
YoungJae.
La apacible y tierna imagen de YoungJae al dormir.
¿Qué haría YoungJae si lo viera en esta situación? Lloraría, de seguro. El sensible corazón del menor no soportaría los gritos desgarradores de dolor de JB, ni tampoco las lágrimas que corrían por sus mejillas sin parar ante el insoportable dolor.
JB se quedó pensando en lo preocupado que su bebé estaría si algo malo le sucediera, si su espalda empeoraba y terminaba en algún hospital. No soportaría ser la causa de su angustia, de su llanto de impotencia o la preocupación que acaparara sus pensamientos antes de ir a dormir.
Debía ser fuerte. Levantarse como el hombre que era y darlo todo por su equipo, por todos aquellos que esperan por él.
Por YoungJae.
Por YoungJae haría hasta lo imposible.
☀️
— ¿Sunbae?
— ¡JinYoung-ah! Gracias al cielo me respondes.— dijo JongHyun al otro lado de la línea. Ti
— Tiene suerte, estaba por ir a dormir.— rió el menor.— ¿Qué se le ofrece?
— JongDae-ah no me responde, así que supuse que tú si lo harías.— explicó.— Avisa por favor a los chicos del club que mañana sí estaré presente en el ensayo, por lo que lo haremos en mi estudio de Yongsan ¿lo recuerdas?
— Sí, hyung.
— Los llevaré allá después de clases, así que estén listos.
— De acuerdo, pero ... ¿qué hay de su viaje?
— Ah, eso.— JongHyun bufó haciendo reír levemente al menor.— La audición fue re-programada para otro día, nos avisaron 30 minutos después de comprar los benditos boletos.
Algo en la mente de JinYoung hizo "click".
Miró junto a la cama de su novio en la que se encontraba recostado, mordiéndose con inquietud el labio inferior viendo la foto que el ausente chico colocó en su mesita de noche.
Ah ... ¿a quién engaño?
— Sunbae ... ¿puedo pedirle un favor?
☀️
JaeBum abrió los ojos a causa de los rayos de Sol que lograban colarse por la persiana mal cerrada.
Ni siquiera recordaba haber llegado a la habitación, lo último que tenía presente de la noche anterior era la silueta de su mejor amigo arrodillado junto a él, sosteniéndole la mano.
Grande fue su sorpresa al ver al mismo chico sentado en el sofá individual junto a la cama, durmiendo.
— Jackson ... Jackson ... ¡Jackson!
— ¡¿Qu-qué?!— exclamó asustado, reincorporándose en el sofá.
— ¿Por qué estás ahí dormido?
— Anoche estabas muy adolorido así que me quedé por si algo pasaba.
— Joder, Jackson ¿y por qué no te acostaste aquí? Se ve muy incómodo ahí.
— ¿Qué pensaría JinYoungie de que dormí contigo? No me puedo arriesgar.
JB rió con fuerza.
— Bromeo.— dijo Jackson.— Si dormí en la cama, me recosté aquí hace como hora y media después de ir al baño.— explicó.— ¿Cómo te sientes?
— Me da miedo moverme.
— Siéntate.
JaeBum movió lentamente los brazos, sorprendiéndose al no sentir esos molestos tirones en los hombres que llegaban con cualquier movimiento.
— Santa mierda.— musitó JaeBum al sentarse completamente en la cama.— ¿Por qué no duele nada? ¿Qué diablos?
— "Shàngdì de shǒu".— dijo Jackson acercándose a su mejor amigo.— Significa "La mano de Dios", así llaman al abuelo que vimos ayer. Quizá te lastimes al intentar tomarla, pero al alcanzarla llegarás a la gloria. — añadió.— Se escucha mejor en chino pero no lo entenderías.— ambos rieron.
— No sé que está pasando aquí, pero me agrada.— dijo JB levantándose de la cama, estirando su cuerpo de un lado a otro, sorprendiéndose cada vez más al no sentir ningún dolor.— ¿Qué me hizo?
— Masaje y remedio chino, doloroso pero eficaz.
— Sentía que se me saldrían las tripas.
— Drama Queen, presente.— se burló Jackson.
— Por cierto ... ¿qué hora es?
— Las cinco.
— ¡¿Qué?!
— De qué.
— Me perdí el desayuno, el almuerzo y horas de mi vida durmiendo.
— Aún no almorzamos así que no lo haz perdido y esas horas durmiendo las necesitabas, tu cuerpo también para poder sanar.— explicó Jackson.— Dúchate para que bajes a comer, después de eso debemos irnos.
JaeBum asintió viendo a su mejor amigo salir de la habitación.
Al poder moverse libremente sintió un enorme peso de encima removerse.
Tomó su celular para revisar sus mensajes, abriendo automáticamente los de su novio.
Bebé
(
Activo por última vez hoy a las 3:47 pm)
¡Bumie, fighting!
2
:12 pm
Bebé te ama mucho ❤️
2:13 pm
Y lo hará por siempre, pase lo que pase.
2:13 pm
¡Tú puedes!
2:13 pm
¡Bebé ❤️ ha enviado una foto!
JaeBum sonrió en grande, sintiendo su corazón revolotear como un loco.
YoungJae estaría en su cabeza en cada segundo de juego, en cada punto, en cada anotación.
YoungJae sería su fuerza para continuar cuando el aire le falte, su motivación para seguir peleando.
Volvería a casa con un trofeo.
Con un sueño hecho realidad.
☀️
Hola, bellezas 💖 ¿Qué tal están?
LAS EXTRAÑABA DEMASIADO LPTM
Iba a hacer este capítulo bien largo pero no me aguanté las ganas de publicar y lo corté :( si lo hubiera extendido quién sabe hasta cuándo lo publicaría por el tiempo limitado que tengo para escribir.
Perdonen por ausentarme, pero he tenido unos problemas sumados con la escuela y simplemente no pude escribir nada.
Espero que se mantengan aquí aún cuando falte, porque no desapareceré. No definitivamente, lo puedo jurar.
Lxs amo con mi vida, gracias por las 36K lecturas y los hermosos puestos que le han dado al Fic en el Top 1000 en FANFIC, llegamos hasta #143 OhmaigASHHH.
Gracias por seguir aquí, me dan muchísima fuerza sus mensajes y comentarios.
☀️ Gracias por leer ☀️