Capítulo Veintiocho: Mujeres vs Hombres.
Bryanna, Darrell, Abigail y Lester ya se encontraban en el muelle de la vergüenza viendo a sus demás compañeros, ya tenían sus maletas en mano y se sentían triste de no haber podido completar aquel reto.
Bryanna jugó con su pequeño cabello y miró hacia sus amigas.
—Espero que en la siguiente eliminación la eliminada sea Megan.
—¡Ja! En tus sueños, pequeña.
La rubia viró los ojos y miró al castaño.
—Supongo que este es el adiós.
Darrell infló las mejillas y tomó a la chica de la cintura para besar su frente.
—Tomémoslo como un hasta pronto...
Bryanna iba a decir algo de no ser porque Lester la había interrumpido.
—¡Yo no me quiero ir! ¡Paige! ¿Por qué nunca me diste una oportunidad? Y si eres tan inteligente ¿¡Por qué siempre me llamaste Lucas!?
—Soy inteligente pero tengo mala memoria... Lucas.
—¡Ahhh! —el rojizo viró los ojos y se metió a la lancha seguido de Bryanna de Darrell.
Abigail apretó con fuerza la manija de su maleta y miró a Megan, al parecer hacer una alianza con ella no había sido la mejor opción.
—Pues... me alegra haberlos conocido a todo—rio un poco pero a los segundos esta cesó—. Yo...—cerró los ojos y miró a cierto castaño—. ¡Sh-Shane!
La chica hizo una mueca, no iba a hacer un drama de película, no iba a salir corriendo tras él y besarlo. Shane quería a otra chica, pero de alguna manera tenía que decirle lo que sentía.
—Tú...—la chica infló las mejillas—. Te quejabas en la competencia de que Channel te ignoraba, pero no te diste cuenta de que... tú hacías lo mismo con alguien más.
El chico frunció el ceño ¿Él ignorar a alguien más? ¡Imposible! Sabía lo terrible que se sentía ser invisible para la persona que le gustas, es por eso que él jamás haría lo mismo.
—No entiendo de lo que estás hablando.
La chica suspiró.
—Exacto... a eso me refería—y sin más que decir la chica subió a la lancha.
Esta arrancó y los concursantes empezaron a irse.
El castaño se había quedado con la duda ¿Qué era lo que Abigail había querido decir con eso?
Desesperado, corrió hasta el muelle y puso sus manos alrededor de sus labios.
—¡Abigail! —la chica volteó a verlo—. ¿¡A qué te refieres!?
—¡Me gustas, Shane! —y la lancha se dejó de ver.
El chico abrió mucho los ojos y volteó a ver a sus compañeros que tenían una mueca de tristeza.
—Díganme que oí mal, por favor.
Todos negaron y Shane solo optó por suspirar y ver por el lugar donde había ido esa preciosa surfista.
[...]
Al fin era hora de descanso, después de tantos retos los concursantes restantes ya no lo podían soportar. La mayoría ya sentía que estaba al borde del colapso, necesitaban un día entero de descanso.
Pero sabían que Cam no les iba a permitir eso.
—Cada vez quedamos menos—comentó Channel viendo sus manos entrelazadas.
Los amaneceres habían hecho una pequeña reunión antes de que el siguiente reto se pronunciara.
—Mejor—Bill colocó sus brazos atrás de su nuca y se recostó en el respaldar del sofá—. Ya no hay tanta bulla y tenemos más tranquilidad, preciosa.
—¿Qué pasara si nos eliminan? Ya no... ¿Volveremos a vernos?
Bill de inmediato abrió sus ojos y frunció el ceño viendo a la castaña que miraba algo triste sus manos.
—Vivimos en diferentes continentes...
—Ese no será proble...
—Dudo que mi padre te reciba con los brazos abiertos—la castaña notó como el peli azul también la miraba—. Dudo que nos dejen verlos de nuevo.
Will de inmediato se levantó, algo brusco, ya que hizo llamar la atención de todos.
—Perdón, yo... tengo algo que hacer—y sin decir más salió corriendo de la habitación.
Trent entró en escena y miró a sus compañeros.
—¿De qué me perdí? Me voy cinco minutos y ya están todos con cara de culo.
—Nada, hermano—contestó Logan—. Channel y Bill están tristes porque ya no se podrán ver.
—¡Logan! —espetaron los mencionados.
—Es lo mejor, papá no querrá que estés con un delincuente.
—Él no es un delincuente.
—¿Ah no? ¿Acaso sabes quién es realmente?
Bill abrió mucho los ojos y se levantó de inmediato ¿Acaso el pelirrojo lo sabía? No... era imposible ¡Él no podía saber nada!
—¡Sí lo sabe! ¡Ella me conoce más que nadie en esta isla!
Trent miró seriamente al rubio y sacó su celular para mostrar una foto. El rubio sintió como su piel palidecía y se intentó tirar encima de ese celular para quitárselo pero lo único que logró fue tropezarse y caer al suelo.
—Veo que conoces bien este lugar.
Bill gimió de dolor y apretó los puños, no quería que la chica pensara mal de él... ese era su pasado y ya estaba casi curado.
—¿Un reformatorio?
—No es cualquier reformatorio, hermanita—la castaña enarcó una ceja, al igual que todos los que se encontraban a su alrededor—. Es para gente adicta ¿No Bill?
El mencionado no respondió, solo se quedó viendo al suelo mientras sentía como todas las miradas se posaban en él.
—¿Gente adicta? ¿Gente adicta a qué?
—¿Por qué no se lo explicas, Bill?
Este se levantó lentamente y miró a la chica mientras su pecho subía y bajaba descontroladamente.
—T-Te juro que ya estoy curado... casi...—negó—. Yo... no hago ese desde hace mucho.
—¿Hacer qué? —preguntó la chica esperanzada de que la respuesta no sea la que estaba pensando.
—¡Drogarse! —la castaña palideció—. ¡No puedo creerlo, hermanita! ¡Te enamoraste de un drogadicto! —Chilló mientras reía con fuerza y todos jadeaban de sorpresa—. ¡No es quien dice ser! ¡Sus padres son dueños de una maldita compañía! ¡El idiota tiene más dinero del que crees! —espetó riendo—. Pero el idiota lo gastaba para comprarse esas malditas sustancias, y no contento con eso... ¡Les robo a sus padres! —Channel veía al chico más alto sin saber que decir—. Lo botaron de su casa y lo metieron a este internado, pero escapó y vino aquí ¡No está curado! ¡Quiere ganarse todo este dinero para seguir comprando toda su mierda!
—¡Eso no es cierto, maldita sea! —gritó el chico defendiéndose.
—¿¡Y qué si no lograba ganar!? Pues... decidió meterse con una chica rica que le pueda cumplir todos los caprichos ya que ella no sabe lo que es "vivir" —Trent rio con más fuerza—. ¡Demonios! ¿¡Por qué crees que no te cuenta nada!?
—Ch-Channel... ¿L-Le crees? —El rubio la tomó de los hombros—. ¿¡Le vas a creer a ese idiota que ha querido separarnos desde que llegó!?
—¿Separarlos? ¡Por favor! Solo quiero que mi hermana le sea fiel a su prometido.
—¿Prometido?
—¿Qué no te lo dijo? ¡Se va a casar!
—¡Ya es suficiente! —se metió Namie dándole una patada en la mandíbula al pelirrojo haciéndolo caer de espaldas—. ¡No has tenido por qué ser tan cruel, maldita sea!
Trent rio por lo bajo acomodándose en donde le habían golpeado.
—Solo hago lo que papá me encargó, pueden eliminarme.
Silencio...
Eso fue lo que se escuchaba por todo el lugar, nada. Alex sugirió que todos dejaran a la pareja sola y así lo hicieron.
Las cámaras habían captado todo y esto había sido transmitido por todos los lugares del mundo en donde se veía el programa.
—¿Te vas a casar?
—¿Te drogas?
Bill la miró fijamente, aquellos ojos cafés que ya estaban rojos por las ganas de llorar.
—Sí—respondió el rubio.
—Sí—respondió la castaña.
Will corrió con todas sus fuerzas hacia la playa en donde Paige le había dicho que iba a estar, estaba listo.
¡Le iba a pedir que sea su novia!
—¡Paige!
La chica volteó y al ver a su chico una gran sonrisa se formó es su rostro.
—¡Will! ¡Qué bueno que estas aquí! Justo íbamos a hacer una carrera de...
—¡Cállate!
La chica frunció el ceño.
—¡P-Perdón!
"Rayos. Ya empecé mal" pensó el chico.
—Eso ha sido muy grosero, William.
El peli azul hizo una mueca y mordió su labio mientras jugaba con sus dedos pulgares.
—P-Perdón, es que estoy algo nervioso...
—¿Nervioso? ¿Por qué?
Will infló las mejillas, era ahora o nunca.
Tomó ambas manos de la chica y las entrelazó con las de él.
—Paige... ¿Tienes idea de lo mucho que significas para mí? De lo genial que han sido estos días a tu lado. Nena, tenemos una gran química ¿Te has dado cuenta de eso? —la chica rio un poco y asintió—. Eres perfecta para mí y yo sé que soy perfecto para ti, así que...
—¡Por favor, todos los concursantes acérquense a la playa!
—Ugh... ¡Sabía que hoy iba a haber otro reto! —Chilló Paige—. Vamos...
—¡No, Paige, espera! Estoy intentando decirte algo.
—Pero si no vamos, Cam nos matará.
—Eso no importa ahora.
—¡Claro que importa! No quiero ser descali...
—¿¡Quieres ser mi enamorada!?
La chica abrió sus ojos de par en par mientras veía como el de Will empezaba a ponerse de color rojo. Infló las mejillas y miró hacia sus pies.
¿Acaso le estaba haciendo una broma?
—Si estás jugando...
—Jamás...
La chica lo miró a los ojos.
—¿Estás seguro?
—Completamente, quiero que seamos tú y yo lo que resta de la competencia y lo que resta de la vida—la castaña enarcó una ceja—. Sé que es cursi, pero es verdad.
Paige sonrió levemente y besó sus labios lenta y cortamente.
—Está bien, acepto ser tu novia.
—¿¡De verdad!? —Paige asintió—. Igual sabía que dirías que sí.
—Es que la verdad desde que llegué aquí... ya nada me importa, solo mi felicidad.
—¿Y yo soy tu felicidad? —Paige asintió—. Vaya, que linda~
Todos los concursantes llegaron a la playa y miraron que en el mar había dos gigantes postes, uno rosado y el otro azul.
—¿Qué nuestros colores no son el amarillo y el morado? —preguntó Charlie confundida.
—Me alegra de que te des cuenta de eso, Charlie—dijo Cam risueñamente—. El día de hoy las reglas cambiaron un poco, los equipos cambiaran.
—¿¡Qué!? —chillaron todos.
—Tranquilos, solo será el día de hoy. Ahora se dividirán entre hombres y mujeres a pedido del público—el conductor se acercó a una caja—. Chicas, esto es para ustedes—les tiro unos bikinis rosados—. Chicos, esto para ustedes—les tiro unos shorts azules—. Vayan a cambiarse, los espero en diez minutos.
Todos fueron a los baños y empezaron a cambiarse. Los chicos salieron antes que las chicas, una vez listos, ambos equipos caminaron hasta la playa.
El equipo de las chicas era conformado por: Megan, Charlie, Alex, Namie, Paige y Channel.
Y el de los chicos por: Trent, Shane, Thomas, Jacob, Logan, Will y Bill.
—El juego de hoy se llama: Túmbame. Ambos equipos tendrán palos los cuales tienen almohadillas adheridas a los extremos. Lo que tienen que hacer es...
—¿Tirar al oponente al agua? Este es un clásico de los reality show—viró los ojos Namie.
—¿Quieres ponerlo más interesante? —La japonesa alzó las cejas—. Por cada golpe tendrás que decirle algo lindo a tu oponente. Cada vez que lo hagas una campanita sonará.
—No haré eso.
—¿Acaso quieres ser eliminada?
Namie hizo una mueca, sabía que su oponente iba a ser Logan no era una idiota. Maldita la hora en la que abrió su bocota.
—¿Quieres empezar, Namie?
La chica viró los ojos y agarró su palo de color rosado para subir a la alta plataforma. Realmente este reto había sido el peor, ella odiaba los bikinis y estaba usando uno...
¡Maldito Cam!
—Déjame decirte que te ves hermosa en ese bikini.
—Púdrete, Logan.
—¡Y el juego empieza en: 3... 2... 1... ¡Ahora!
Y así lo hizo, Logan no quería golpear a Namie pero tampoco quería perder. El agua se veía muy profunda y la caída era muy alta.
"Tal vez debería..."
No pudo continuar pensando ya que la japonesa le había dado un golpe que lo había hecho tambalear.
—¡Oye!
—¡Ibas a tener una linda caída!
Namie sonrió, que bueno que los comentarios lindos no iban específicamente hacia Logan.
Le dio otro golpe.
—Te verías realmente lindo si es que los tiburones te comen.
—¿Tú lo crees? —Logan también la golpeó haciéndola soltar un pequeño gruñido—. Pues sería perfecto que me acompañaras.
Ambos entrecerraron los ojos y empezaron a golpearse con fuerza, ya a ninguno le importaba si es que hería física o emocionalmente al otro. Ambos daban comentarios sarcásticamente lindos y se golpeaban sin piedad.
—¡Ya cae de una vez! —gritó Logan haciendo que todos abran mucho los ojos.
Nadie podía creérselo ¿Acaso Logan había tirado la toalla por Namie?
Bueno... con la actitud que tenía la chica para con él cualquiera se daba por vencido.
—No puedo creerlo...—dijo Alex abriendo mucho los ojos al ver como la japonesa se tambaleaba.
—Namie va a...—susurró Charlie.
Y de repente la chica cayó al agua de espalda.
—¡Ja! ¡Lo hice! ¡Al fin te gane, bebé! —se regocijó Logan mientras la chica los veía desde el agua con el ceño fruncido.
Todos se habían quedado fríos ¿Desde cuándo Namie se dejaba ganar por un chico?
Porque... era obvio que se dejó ganar ¿No?
La chica salió del agua y fue recibida por sus dos amigas.
—¿Qué demonios te pasó? ¡Tú nunca pierdes!
La más seria de toda la isla miró a otro lado.
—Yo... me distraje ante la actitud de Logan, es todo—admitió—. El jamás había sido... grosero.
Sus amigas castañas se miraron mientras la japonesa se iba a sentar y secar su piel con aquella toalla.
—¡Siguiente pareja! —Gritó Cam—. Alex y Jacob.
Ambos chicos agarraron sus armas y subieron a la plataforma.
—Nena, no quiero hacerte daño así que...
La chica de inmediato lo golpeó haciéndolo caer para atrás hacia el agua.
Las chicas celebraron.
Los chicos se burlaron.
—¡Eso fue patético! ¿No crees, Bill? —el peli azul miró a su hermano que estaba mirando fijamente a la ondulada, no se había burlado ni había hecho ningún comentario sarcástico y eso le preocupada—. ¿Estás bien?
El rubio negó.
—No, algo pasó, después te cuento.
—¡Eso fue absurdo! —Rio con fuerza Cam—. Jacob, espero que no seas el eliminado de hoy—rio más—. ¡Siguiente pareja!
Paige y Will fueron los que subieron.
—Empiecen... ¡Ahora! —gritó Cam.
—Bueno hermosa... ¿Por qué no te tiras de una vez? No quiero ganarte.
—¿En serio crees que vas a ganar, bebé? —La chica tiró la cabeza hacia atrás y le dio un golpe—. Estás muy equivocado.
Y así siguieron, coqueteando y jugueteando como siempre lo hacían. Ambos estaban muy parejos por lo que Cam decidió tomar otras medidas.
Les había dado a todos pistolas de agua y con ellas empezaban a mojar a sus contrincantes.
—¡C-Cam! —chilló Paige.
—¡No dijiste nada de esto!
—Mi programa, mis reglas.
Paige movió su arma hacia Will y lo golpeó haciéndolo tambalear, pero desgraciadamente el agua la había hecho resbalar por lo que ambos cayeron al agua a la vez.
—Genial, un empate—bufó el conductor—. ¡Siguiente pareja!
Shane y Channel subieron, en esa ronda ganó Channel. En la siguiente subieron Charlie Thomas, gracias a las buenas matemáticas del castaño pudo calcular bien para hacer que Charlie cayera al agua de una manera muy cómica.
—¡Y los que vienen ahora son: Bill y Channel!
Ambis hicieron una mueca y subieron a la plataforma.
—Esto se va a poner denso—murmuró Charlie haciendo que Paige frunza el ceño.
—¿Por qué lo dices? —preguntó la gemela lacia confundida.
—¿Qué no te enteraste? Trent le contó a Channel que Bill se droga y también le contó a Bill que ella se iba a casar.
—¿¡Qué!? —chilló Paige espantada y vio hacia arriba preocupada.
La ondulada jugó con su palo de color rosa y alzó con fuerza para golpear con fuerza al rubio.
—¡Oye! —Gruñó el chico sobándose la cabeza—. ¡Se supone que debes tirarme no golpear...!—otro golpe lo hizo callar—. ¡Channel!
—¡Cállate! —Gruñó la chica mientras le pegaba cada vez más—. ¡Mentiroso!
—¿Mentiroso? ¡Oh no, nena! —y dicho esto la golpeó en la cara haciéndosela voltear—. ¡Yo jamás te mentí! Solo decidí no contarte de mí terrible pasado para que no te espantes.
La chica le devolvió el golpe.
—¡Igual debiste...!
—¡Entonces si yo soy un mentiroso tú también lo eres! —Espetó con rabia—. ¿¡Cuando ibas a decirme que tenías pareja!?
Y todos soltaron un suspiro ahogado.
—¡Mi rating! ¡Mi rating esta por la nubes! —chilló emocionado Cam.
La chica bajó el arma al y miró a otro lado con una mueca.
—Lo mismo que tú, no quería que te espantes...
Ambos volvieron a conectar sus miradas y con rabia empezaron a golpearse, por todas partes del cuerpo, solo quería descargar la ira que tenían ambos por la gran mentira que habían creado.
¿Con quién se iba a casar Channel?
¿Desde cuándo Bill consumía drogas?
¿Ella lo amaba?
¿Seguirá drogándose o ya es pasado?
Ambos sin poder contenerse gritaron y se tiraron uno encima del otro para caer al agua.
—¿¡Por qué!? —Gritó Cam—. ¿¡Por qué los gemelos hacen empate!? ¡No entiendo!
Ambos salieron del agua y tomaron una gran bocanada de aire.
—Bill...
—Channel...
Ambos tensaron la mandíbula y salieron del agua.
La siguiente y última pareja en subir fueron Megan y Trent.
—Vaya, vaya ¿Qué tenemos aquí? La perrita que quiso eliminar a mi hermana.
—¿Perrita? ¿Acaso no te ensañaron a respetar a las damas, tarado?
—A las damas sí, pero... la verdad es que no sé lo que eres tú.
La pelinegra frunció la nariz y le dio un golpe con fuerza que la hizo tambalear.
—No eres tan fuerte como crees ¿Verdad?
—La verdad que sí, vivo con dos mujeres—acto seguido golpeó a Megan en los pechos y esta chilló de dolor—. Pero igual quiero irme a casa...—y sin más saltó al agua.
Todos se quedaron con la boca abierta ante el repentino cambio de Trent.
¿Pero para que quedarse más? Las verdades se encargarían de arruinar todo.
[...]
La castaña miró hacia un lado y se abrazó a ella misma, cerró los ojos y se dejó llevar por la brisa del mar.
—MacGraw—la chica se sobresaltó—. Mi verdadero apellido es MacGraw. Sí, como la empresa de zapatos, mi padre es Willbur MacGraw y mi madre es Billie MacGraw, dueños de esa gran empresa. Es cierto lo del internado, pero no escapé... bueno, sí escapé—comentó riendo un poco—. Pero fue porque no era un lugar bonito, no me drogo desde hace meses y digo que estoy casi curado porque... a veces cuando peleo con mi papá me dan ganas de hacerlo.
La chica bajó la mirada.
—¿Lo has hecho aquí?
—¿Drogarme? No. No había necesidad, además... ya no pienso hacerlo, fue una mala época.
El rubio se sentó al lado de la castaña y miró hacia el horizonte.
—No me quiero casar...—admitió—. Nunca quise, es solo por conveniencia para que la empresa de mi padre crezca. Ese era del trato que hablaba Cam en toda la temporada—la chica infló las mejillas—. Debí decirte, pero...
—Entiendo porque no lo hiciste...—el rubio se quedó pensando—. ¿Casarte por conveniencia? En qué época vive tu padre ¿Medieval?
Channel rio con fuerza y negó varias veces.
—No lo sé, solo quiere asegurarse que seremos ricos por siempre.
"Ricos por siempre" pensó el rubio.
—Bueno... mi padre es rico, puedes casarte con él y serle infiel conmigo.
Y de nuevo la chica soltó una carcajada.
—O... casarte conmigo.
—...
La chica sonrió y miró al rubio que la veía con la misma sonrisa en los labios, ella viró los ojos y se acercó al chico para unir sus labios en un corto beso.
De lejos el mayor de los O'Brien veía la escena con el ceño fruncido.
No era posible...
¡NO ERA POSIBLE!
Apretó los puños y leyó el mensaje que le había mandado su padre.
—¡Mierda! —espetó.
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#RetoFienes2018
3363 palabras.
Daal♛