ETHAN'S POV
Clara y Jeff abandonan la oficina y yo suelto un suspiro de alivio inconscientemente.
—¿Qué demonios fue todo eso? – pregunta Henry. Había olvidado que él estaba aquí, joder. Henry es como un imán para estas mierdas.
—¿Qué cosa? – finjo ignorar la pregunta
Él se lleva una mano a la cintura y pisotea con uno de sus pies el suelo.
—Dios, sí que eres marica – comento, mientras remuevo unos papeles en el escritorio—Ese gesto es bien de puto
—Ethan – me reprende—Ponte en cuatro y te enseño lo que es ser puto
Lo miro.
—No, gracias – respondo sonriente.
—¿Me vas a explicar qué fue todo ese ambiente chispeante de hace unos minutos? Joder, parecía que alguno de los dos iba a explotar en llamas
—Henry, no sé de qué hablas. A veces siento que vives en una telenovela erótica
—Ya quisiera – dice y de pronto abre sus ojos—Nah - dice—No, no – me mira—¿Qué?
—¿Qué te pasa? – le pregunto
—¡Ustedes dos follaron! – acusa, señalándome con el dedo—¡Joder! ¿Cómo no lo tuve en cuenta? ¡Dios! ¿En serio? Oh por dios, voy a morir de alegría
—Henry, por el amor de dios – murmuro apretando los dientes
—No me lo has negado – dice y aplaude.
—Cállate, joder – siseo
—Qué me lleve el diablo – dice y salta—¡Esto se pone bien divertido!
—Por favor Henry - suplico—¿Puedes hablar bajo y ahorrarte las palabras?
—Fue genial ¿no? Dime que sí. Clara tiene pinta de saber muy bien lo que hacer – comenta y lo miro asesinamente
—Henry – advierto
—Sé que fue genial. Ambos se ven - chasquea—Radiantes. Estoy seguro que fue un polvo para el recuerdo. ¡Qué pasada! – canturrea
Ruedo los ojos.
—Sé discreto, Henry - solicito—No es algo que queramos ventilar
Me mira seriamente.
—Sabes que no diré nada, imbécil – me palmea—Pero dime algo al menos, joder. Un dato, solo uno.
Lo miro. Sé que no parará hasta que le diga algo. Así funciona Henry, es odioso.
—¿Qué quieres saber?
—Todo – dice
—Ni en pedo. Sabes que no soy de esos
—Bueno – rueda los ojos—¿Lo disfrutaste? ¿Quieres más?
Miro a mi amigo. Niego con la cabeza.
—No sé cómo voy a poder parar – confieso y él, salta y aplaude
CLARA'S POV
Luego de terminar unos arreglos en la programación de los drones, me dirijo a la oficina de Emma. Toco un par de veces y cuando escucho el adelante, abro la puerta.
Sonrío cuando la veo, a pesar de que me cae fatal.
—Emma, me dijo Ethan que necesitabas hablar conmigo – exclamo
Ella me mira y asiente.
—Sí, es por el tema de la Gerencia de oficio. Necesito que firmes unos papeles ya que te corresponde cobrar más por estos diez días – dice
—Claro – respondo y me acerco al escritorio. Ella rebusca entre sus papeles y me tiende una carpeta.
La hojeo. Es una cláusula dentro de mi contrato que establece un incremento del 40% de mi sueldo durante los diez días de suplencia. Firmo sin chistar y se la entrego, quedándome con la copia.
—Gracias – responde
—A ti
Me paro para retirarme pero ella habla antes de que abandone la oficina.
—Espero que no creas que tienes el puesto de Dylan – zampa con veneno
Me giro de inmediato con el gesto confundido.
—¿Perdona? – pregunto
Ella sonríe, con malicia.
—No me trago el versito de la mosquita muerta - chilla—Sé lo que estás haciendo y no me gusta. Dylan es el mejor amigo de Ethan
Mi corazón se detiene un momento ante sus palabras.
—No sé de qué estás hablando – digo con firmeza—Sólo estoy haciendo mi trabajo
—Claro – ella responde, escéptica—Tú trabajo
Empiezo a tomar calor.
—Mira Emma - digo—Lo que tu mente de mierda esté calibrando ahora mismo, la verdad me tiene sin cuidado. Invéntate las historias que quieras, por mi parte sé perfectamente cuál es mi puesto aquí dentro
Mis palabras la sacan de balance.
—Respeta a quienes estamos aquí hace tiempo
—Tú respeta a tus jefes – le zampo sin piedad—No olvides que soy la subgerenta
Su boca se abre.
—¿Perdona? – pregunta
—¿Qué te pasa Emma? – cuestiono y me acerco—¿A qué le tienes miedo?
—Yo no tengo miedo – escupe con indignación—En todo caso, lo que tengo es asco
—¿Así que te doy asco? – le pregunto
—Bastante – me confiesa
—Bueno, por fin vamos en sintonía. Métete las palabras por el culo – ladro y salgo aporreando la puerta.
Maldita perra. ¿Quién demonios se cree que es? Dios, estoy tan furiosa ahora mismo. Necesito con urgencia mi saco de boxeo, para poder descargar toda esta frustración. De hecho, hasta tengo ganas de llorar de la bronca e impotencia.
¿De dónde ha salido eso? ¿Sabe algo? ¿Cómo podría saberlo siquiera?
Joder, mi cabeza es un lío. Necesito calmarme. Necesito de verdad calmarme o haré algo de lo que luego seguro me arrepentiré.
Necesito a Jean, pero como no la tengo, voy directamente hacia la oficina de Henry.
No golpeo al entrar y cuando mi presencia se hace evidente, los ojos azules de mi amigo se abren con sorpresa.
—¿Qué te pasa, cielo? – él pregunta y se para de inmediato, acercándose con preocupación.
Hago acopio de toda mi fuerza de voluntad para no llorar. No soy persona que llora, no lo he hecho en siglos.
—Emma – exclamo apretando los dientes—Es una perra
Henry me mira, esperando que hable.
—¿Qué te hizo? - pregunta—Sí, es una perra
Suspiro, aliviada. Por un momento no tuve en cuenta que tal vez él, tenga buenas migas con ella.
—Me ha dicho barbaridades ahí arriba. Cosas horribles, insinuó que quiero el puesto de Dylan y que estoy haciendo un trabajo fino en pro de ello – escupo con verborragia—Dios, ha puesto a Ethan en el medio
Henry sacude sus manos en señal de despreocupación.
—Que te valga mierda lo que diga esa chirusa - pide—Ella siempre quiso el puesto de subgerenta, pero no reúne los requisitos. Es envidia, miedo o lo que quieras ponerle de nombre
Lo miro. Tengo tantas ganas de contarle lo que sucedió, pero no me animo.
—Dios Henry, de verdad quiero golpearla – confieso y él sonríe, abrazándome. Me soba la espalda en un gesto que me hace sentir mejor.
—No te gastes en gente como ella, no vale la pena – exclama—Ni siquiera vale una gota de tu sudor
Me río.
—Me preocupa que piense de ese modo, ¿todos piensan de ese modo? – pregunto
Henry se separa y me mira.
—Yo no - asegura—Y puedo estar seguro que Jeff y Dylan tampoco. No les da para tanto – dice y suelto una carcajada—Eso son cosas de mujeres
Tiene un punto, pienso.
—Ya, pero ¿qué hay de todas las mujeres? ¿Lillian? ¿Jenniffer?
—No tengo puta idea, pero ¿importan? – se pregunta
—Sí, a mí me importa. Herny, hace apenas un mes que estoy aquí. No quiero ser tachada como la puta que consiguió la subgerencia por abrirse de piernas. Eso no es cierto
—Cálmate, cielo – pide, tomándome los hombros—Sé que no es cierto, a mí no me tienes que aclarar nada y al presidente, que en definitiva es a quien hay que rendirle las cuentas, menos
Me remuevo con incomodidad y le desvío la vista.
Henry chasquea.
Suspira.
—Sé lo que sucedió con ustedes – suelta de pronto y lo miro con sorpresa.
—¿Qué? ¿A qué te refieres? – me hago la idiota, pero intuyo a qué se debe todo esto y no me gusta nada.
—Cielo, soy un detector de sexo – dice—No es que fuesen obvios, pero...
—Oh, Dios – murmuro y me tapo los ojos—No puede ser
—Tranquilízate - pide—Nadie más lo sabe
—¿Hablaste con Ethan? – cuestiono
Me mira.
—Digamos que sonsaqué información – aclara
Lo miro con ojos entrecerrados.
—Henry, por dios, no digas nada - suplico—Por favor, no volverá a repetirse. Fue un desliz
Mi amigo suelta una profunda carcajada y se soba el abdomen.
—Ay mi santa – dice con dificultad—Eso no te lo cree ni un niño de tres años
Me muerdo los labios, en señal de descontento.
—¿Por qué todo es tan complicado? – me pregunto, y de inmediato la puerta de la oficina se abre dando paso a la figura de Ethan.
Ahora sí estamos todos, pienso.
—Lo siento - dice—No pensé que tuvieras compañía
Herny se ríe.
—Puedes pasar, cabrón – le dice—¿Qué pasa?
Ethan me estudia y arruga la expresión.
—¿Te encuentras bien? – me pregunta
—¡No! - chillo—¡No me encuentro jodidamente bien!
Mi arrebato le provoca un sobresalto, sin embargo Henry intenta disimular una carcajada.
—¿Qué demonios te ocurre, mujer? – me pregunta Ethan, desconcertado
Ugh.
—Nada – digo y me cruzo de brazos
Mira a Henry, esperando algún tipo de aclaración.
—Tuvo un intercambio con Emma – le dice
Lo miro a mi amigo como para matarlo. No tenía que hablar, se supone que era una confesión.
—¿Qué te dijo Emma? – cuestiona Ethan.
—Nada importante – miento
—Clara – advierte Henry
—Dios Henry, no soy una bocona – me ofusco y vuelvo a cruzarme de brazos
Ethan se coloca delante de mi humanidad y me observa con el semblante serio. Soy vagamente consciente de que Henry abandona su propia oficina segundos después.
Genial.
—Necesito que me informes lo que sucede – pide con cautela. No me puedo concentrar en el discurso que quiero dar, porque su presencia me embriaga de una forma que no puedo acreditar. Es tan jodidamente apuesto, tanto. Y lo tuve a mi merced hace apenas un rato.
Mis ojos se recrean admirando su perfecto rostro, con esa barba apenas afeitada que le da un toque serio y sexy.
—Clara – él pide—Estoy esperando
Me obligo a hablar.
—¿Tú piensas que lo que sucedió ayer fue para intentar conseguir algo? – pregunto
Me mira con confusión.
—¿Algo como qué? – se cuestiona
—Algo como un puesto en esta empresa – respondo y pisoteo con uno de mis pies.
—No - responde—No se me había cruzado por la cabeza
—¿Es en serio? – pregunto
—De verdad, Clara. Además si eso fuese cierto, conmigo no tienes chance. Soy bastante recto hasta para eso – dice
Que mencione su rectitud moral me deja bastante tranquila. Es cierto que Ethan no se dejaría embaucar por sexo cuando de su empresa se trata.
—Bien – exclamo
—¿Qué pasó con Emma? – incita
Lo miro.
Otra vez tengo que hacer fuerza de voluntad para no babear. Se ve tan apuesto, es tan bello y masculino.
—Tuvimos un intercambio poco feliz – me las arreglo para decir
Él rueda los ojos.
—¿Puedes ser un poco más específica? – pide impaciente
—Sólo si prometes que no tomarás ningún tipo de medidas al respecto
—No puedo prometer eso si ignoro de qué viene esto
—Promételo
—No, Clara. No puedo hacer promesas que no sé si podré cumplir
—¿Confías en mi criterio? – cuestiono y él me mira.
Me sostiene la vista por lo que me parecen incontables minutos.
—Sí, lo hago – responde luego
—Entonces promételo – pido
Rueda los ojos y se lleva los dedos al puente de la nariz, demostrándome fastidio o impotencia.
—Bueno, joder. Te lo prometo
Suspiro aliviada. Sé que una promesa de Ethan es algo que se cumplirá a rajatabla.
—Insinuó que quería quedarme con el puesto de Dylan - digo—Que estaba haciendo un numerito de - chasqueo—mosquita muerta para quedarme con la Gerencia. Le dije que se metiera las palabras por el culo y me pidió respeto por quienes están hace tiempo aquí, a lo que respondí que ella debería respetar a sus jefes – declaro
Mis palabras lo asombran.
—¿Te dijo eso? – pregunta
—Sí
—Es un atrevimiento. Ella no puede hablarte así – dice
—Lo sé
—Puedes tomar medidas disciplinarias - dice—Es tu potestad como subgerenta
—Lo sé también
—¿Entonces?
—No voy a darle el gusto, Ethan. Es lo que busca, una especie de guerra. Lo cierto es que, ya sé que al menos las mujeres de este sitio están convencidas de que consigo los puestos por vaya uno a saber qué actividades. Y eso - suspiro—Es justamente lo que no quiero que pase
Ethan me mira.
—Son habladurías, Clara. No le des importancia – pide
—Me afecta. Me afecta más de lo que me gustaría – confieso
Ethan se acerca, peligrosamente. Y yo me alejo.
Me mira, con cansancio.
—¿Te alejas de mí? – pregunta
—Ethan, no puedo hacer esto – le explico con tortura
Se acerca más.
—No - pide—No te alejes por estúpidos comentarios de pasillo, Clara. Aléjate porque no estás a gusto, pero no por otros – pide
Dios, tiene razón. Tiene tanta razón.
Cierro los ojos.
—Lo siento – murmuro y me acerco. Lo abrazo. Necesito abrazarlo, necesito que me diga que todo va a estar bien—Perdona mi histerismo
Se ríe. Apoya su mentón en mi cabeza.
—No es nada, preciosa. Todo estará bien, ya dejarán de hablar y entenderán que estás aquí por tu capacidad, no por otra cosa – dice
Sonrío en su pecho.
—Gracias – susurro y me separo—Necesitaba un abrazo
Sonríe dulcemente.
—No hay de qué - exclama—Ahora, voy a buscar a ese puto que se escabulle de todos lados – masculla entre enojado y divertido.
Le hago un gesto de afirmación y sintiéndome más aliviada, salgo de la oficina minutos después que él.
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Eso es todo por esta semana bellezas, espero comentarios!!!!
Besos
Vivi