Últimamente, Hal ha estado saliendo mucho con Barry. Bueno, más de lo normal de todos modos.
Pero no están "saliendo".
Barry le compra la cena, como siempre. Y sí, ahora salen a lugares con más frecuencia de la que se quedan en casa, pero no son lugares iluminados con velas o esplendidos sitios de lujo. Y si, acostumbran largas caminatas después - a lo largo del río que separa Central y Keystone, o en el malecón de la costa - pero no es como si fueran tomados de la mano o mirándose profundamente a los ojos mientras lo hacen. Hal todavía no siente ese tipo de atracción romántica por los hombres. A él simplemente le gusta besarse con su mejor amigo algunas veces. Y dormir en la misma cama para poder despertarlo con algo de sexo oral o algún "trabajo manual" por la mañana.
Y sí, a veces se acurruca al lado de Barry mientras ven la televisión. O siembra besos a lo largo de su cuello o de sus hombros cuando lo encuentra cocinando la cena. Hal siempre ha sido una persona táctil, y le gusta la forma en que Barry es más receptivo ahora que se tocan las pollas mutuamente.
Sus mejores amigos, Oliver y Dinah, tenían argumentos al respecto de lo que estaba pasando entre él y el velocista.
El hecho de que seas un hombre no significa que no puedas apreciar el afecto, Oliver.
Y solo porque pasas el ochenta por ciento de su tiempo con él no significa que sean novios, Dinah.
No, no significa nada. Hal está seguro de eso, porque si todo aquello significara algo más que sexo, ya habrían hablado de eso. O Barry habría dicho algo al menos. Él siempre ha sido el que quiere sentarse y tener esas conversaciones importantes. Pero Barry no ha dicho una palabra. No es que Hal realmente quiera que Barry diga algo; ese tipo de cosas solo terminaría envolviéndolos en otras veinte situaciones de tipo incómodo. Él está contento con lo que tienen, y si Barry también lo está, entonces no hay razón para hacer cosas raras o complicar demasiado los sentimientos.
No es que Hal esté experimentando ningún sentimiento. Ese es el punto. Hal está seguro de no estar experimentando nada más que sexo.
¿Cómo podría complicarse pensando en emociones, cuando hay cosas mucho más importantes en las que pensar acerca de su nueva amistad con beneficios? Cosas como: ¿Cuáles son las mejores maneras de mejorar su reflejo nauseoso? O, cuando se ejercite, ¿debería centrarse más en su brazo izquierdo, ya que su brazo derecho ha estado teniendo una mayor cantidad de ejercicio en estos días?
O su más nueva preocupación, ¿Cuándo van a llegar a la última base?
Lo ha estado pensando mucho. Cuando Barry se masajea los hombros después de una patrulla o entrenamiento. Cuando están jugueteando y él desliza sus manos bajo el culo de Hal para levantarlo a la superficie más cercana. O cuando está haciendo cosas extrañamente calientes con sus dedos. Como volver a colocar un libro en su lugar en el estante o sacar cosas de un tarro con una abertura muy pequeña. O esa vez cuando estaba haciendo un asado y metiendo ajo en las pequeñas ranuras que hacía en él, y Hal tuvo que excusarse antes de que las cosas se tornaran realmente incómodas.
Está listo para hacerlo, no tiene ninguna duda sobre su meta. Pero simplemente no tiene idea de si Barry también lo sigue en aquella idea. No han hablado al respecto desde la primera noche y Hal considera que ha sido lo suficientemente amable como para esperar hasta que Barry dijera algo, ha dejado que el rubio se mueva y avance a su propio ritmo, pero se está impacientando.
Entonces, cuando se baña ese día, se asegura de hacerse una limpieza a fondo, por las dudas. Y cuando Barry entra a la cocina esa noche, con algunas bolsas de comida colgando alrededor de esos dedos, Hal decide que esta noche es la noche.
— ¡Oye! —, Le grita Barry, sonriendo cuando ve el libro que pretende fingir leer: — ¿Qué tal está? No he tenido tiempo de leerlo todavía.
—Uh —, dice Hal, mirando las palabras y encogiéndose de hombros, — Está... ¿bien?
—Bien, ¿eh? —Barry repite mientras deshace su corbata de moño. Hay una sonrisa en sus labios que dice que sabe que Hal ni siquiera puede decirle cuál es la primera palabra, y mucho menos podría hacer una crítica.
—No lo sé, amigo —. Admite Hal, volteándose a arrojar el libro sobre la mesa de café frente a él. Oye a Barry reírse detrás de él y sonríe cuando lo mira de nuevo. Él observa, o trata al menos trata de seguir los movimientos del rubio, mientras Barry acelera en la cocina para guardar los alimentos. Tarda aproximadamente un segundo antes de terminar, y sentarse en el cojín junto a él. Hal se acomoda en su asiento y, casi automáticamente, le pasa el brazo por los hombros.
— ¿Cómo estuvo tu día? —, Pregunta Barry, acomodándose en medio de aquel abrazo.
Hal se encoge de hombros, —Un poco aburrido.
— ¿Todavía no encuentras algún lugar en Coast City, que te interese? —, Pregunta Barry a la ligera. Hal parpadea y la televisión se enciende, aunque Barry nunca pareció apartarse de su lado. Hal ya no presta atención a ese tipo de cosas. Lo atribuye al viaje interestelar: ve hasta la mierda más extraña de forma regular y está acostumbrado a que algunas veces, Barry se mueva mucho más rápido de lo que él puede percibir.
— No —, responde, sacando el control remoto de los cojines. Barry levanta una ceja hacia él.
— ¿Haz buscado? —, Pregunta.
— No.
Hal está ocupado desplazándose a través de los canales, pero sabe que está en el extremo receptor de la mirada azul. Siente que Barry se acerca más hacia él con un desplazamiento que pretende ser sutil, y retiene una sonrisa.
— ¿Qué haces todo el día? —, Pregunta Barry, casi con cariño. Hal se conforma con repetir un episodio de Los Simpsons antes de volverse a contestar.
"Paso la mayor parte del día masturbándome", dice, encogiéndose de hombros. Barry sonríe ampliamente y niega con la cabeza.
— No me sorprende —, dice, —pero aparte de eso.
Hal hace un gesto de fingir pensar en ello. Barry lo sonríe juguetonamente, y siente su corazón saltar inexorablemente en su pecho. Lo ha estado haciendo muchísimo últimamente, tal vez debería hacerse revisar por un cardiólogo.
— A veces veo televisión —. Finalmente responde, y no le sorprende recibir como respuesta un suspiro de exasperación.
— Wow —, dice Barry, antes de dejar caer la cabeza hacia atrás para descansar en el brazo de Hal. Estira su cuello hacia atrás, exponiendo la piel pálida de esa tierna zona. Hal no se resiste a recorrer con la mirada la línea de la manzana de Adán, hasta el cuello desabrochado de su camisa. Así que tampoco se resiste al impulso de inclinarse y colocar un beso suave justo debajo de la mandíbula de Barry.
Oye a Barry emitir un pequeño murmullo de aliento, y sigue el primer beso con un segundo y un tercero, arrastrándolos sobre la sensible piel debajo de la oreja de Barry.
Cuando retrocede, el velocista gira la cabeza para mirarlo con una sonrisa perezosa en su rostro, ojos medio cerrados y ligeramente nublados por las sensaciones. Hal se muerde el labio inferior, tirando suavemente de él antes de besarlo, profundo y con la boca abierta. Aquel beso continúa por solo un momento antes de que Hal retroceda, y Barry que no quiere parar lo sigue y suspira.
— ¿Qué pasa, Hal? —Barry pregunta en voz baja, su nariz roza suavemente sobre la de Hal.
Hal necesita mucho esfuerzo para no volver hacia atrás y besar a Barry otra vez.
— He estado pensando —. Él dice.
— Esto debe ser serio entonces —, Barry bromea, inclinándose hacia atrás lo suficiente para que Hal vea su sonrisa descarada.
— Ja. — Hal se ríe sarcásticamente, —No. He estado pensando en que, quiero que tú me folles con el dedo.
Él piensa que Barry se está acostumbrando a sus contundentes avances desde la primera vez en que pensó que bromeaba. Porque todo lo que hace esta vez, es pensar mientras aprieta los labios, como si Hal solo estuviera lanzando sugerencias para la cena.
—Yo... —Barry comienza, luego hace una pausa, la articulación de su respuesta se lleva la peor parte de su sorpresa, — Ya veo.
Hal lo observa, ve el leve comienzo de un rubor que se extiende por sus mejillas. Levanta su mano libre para deslizar un dedo por el brazo de Barry hasta su mano, arrastrándolo por la parte posterior antes de trazar los dedos de Barry.
—Sí —, dice casualmente, — ¿Qué piensas?
— Um —Barry tartamudea. Hay un pequeño momento en el que Hal piensa que tal vez se haya excedido. Y se convierte en una breve sacudida de preocupación cuando se pregunta si Barry finalmente tendrá su momento de lucidez y detendrá todo lo que están haciendo. Tal vez termine, luego gradualmente exilie a Hal de su vida porque lo mirará y recordará lo que hicieron, y tal vez lo resentirá por haber empezado todo en primer lugar.
Pero luego están los dedos de Barry que se levantan y juegan con los suyos. Y ese sonrojo aún le cubre las mejillas, pero se está mordiendo el labio, y ese nervioso revoloteo de sus ojos ha sido reemplazado por una mirada más firme.
Hal conoce esa mirada. Él realmente, realmente ama esa mirada.
Así que envuelve la mano de Barry en la suya y la levanta para trazar con sus dedos unidos, una caricia sobre su mejilla, luego la guía hacia su boca, antes de rodear el dedo índice de Barry con los labios y chuparlo suavemente. El rubor de Barry se intensifica, su aliento se engancha en su garganta. Desliza su dedo hacia afuera y hacia atrás una vez más antes de soltarlo del todo. Entonces Barry se inclina para besarlo de nuevo, lamiendo lentamente la boca de Hal, sujetando con firmeza la parte posterior de aquella cabeza de cabellos castaños. Cuando se separan, Barry arrastra su mejilla sobre la de Hal para susurrarle al oído.
— ¿Qué tal si llevamos esto a la habitación? —, Dice en voz baja, casi sin aliento. Los ojos de Hal se cierran y él sonríe ampliamente, mordiéndose el labio.
— Diablos, sí. — Gime. Luego, después de besar a Barry con un beso rápido y sucio, se levanta y se precipita hacia la habitación. Se quita la camisa en el camino y comienza a desabrochar sus jeans, pero de repente se da vuelta y se tira a la cama.
En un abrir y cerrar de ojos, sus jeans y boxers están fuera del juego. Luego hay un rubio sin camisa que se arrastra por su cuerpo, colocando besos en su pecho hasta su boca. Hal gime en el beso, levantando sus manos para seguir el duro músculo de sus brazos y hombros. Siente las manos de Barry sobre sus piernas, empujándolos suavemente y colocándose entre ellos. Hal levanta sus caderas, se encuentra con Barry, y se pregunta por qué carajo todavía tiene los pantalones puestos.
— Quítatelos —, respira, rompiendo el beso. Avanza más por la mandíbula de Barry, — Ahora.
Él puede sentir a Barry sonreír contra su mejilla.
— Mis manos están un poco ocupadas —, dice, arrastrándolas sobre los muslos de Hal en busca de poder tocar su trasero, —Sé un amigo y hazlo por mí.
Hal pone los ojos en blanco, pero presiona su trasero en el agarre de Barry y se mueve para desabrocharle el cinturón. Por mucho que quiera apresurar esto y llegar a lo bueno, sabe cuánto le gusta a su amigo tomarlo un poco más lento.
A Barry le gusta cuando Hal se toma su tiempo para desvestirlo, arrastrando sus dedos sobre la piel, y los sigue con besos calientes y húmedos. Así que Hal lo complace, porque disfruta de los suaves sonidos que escucha cuando hace las cosas bien, y de la mirada cálida y reverente que sigue cada uno de sus movimientos.
Él desabrocha el cinturón y la cremallera del pantalón de Barry, metiendo los dedos dentro por un momento solo para rozar contra la dura longitud allí. Barry jadea, sus caderas se mueven hacia delante, y Hal sonríe a su cara enrojecida. Lentamente empuja los pantalones hacia abajo, justo más allá del culo de Barry, lo suficiente para liberar su miembro, antes de agarrar sus caderas y tirar de él para hacer que ese pene se presione contra el de Hal.
Ambos gimen, Barry aumenta la presión en aquella zona. Se agarra con más fuerza al trasero de Hal, usando ambas manos y empuja sus caderas hacia él otra vez. Hal levanta los brazos para envolver el pecho y la cintura de Barry. Lo aprieta, agarrándose fuerte, y entierra su rostro en la unión del hombro y el cuello del velocista.
A Barry le encanta que lo tengan cerca mientras juegan. Hal aprendió aquello bastante rápido, con la forma en que su amigo lo atrae durante un beso, con los brazos extendidos para agarrarse a su espalda. Por la forma en que se ondula contra él para unir sus pechos y empujarlo hacia la superficie más cercana, acorralándolo. Y por la forma en que sus ruidos se hacen más fuertes, más desvergonzados, cada vez que Hal se abalanza sobre él, usando sus hombros para presionarlo y abrazarlo mientras se mueven juntos. A Hal le gusta, también. La sensación tenerlo cerca de él, sus pechos apretados con tanta fuerza que cree que podría sentir un latido del otro corazón.
En general, le gustan los ruidos que recibe al hacerlo y la manera en que el rubio se los gimen directamente en los oídos. Maldición, él ama eso; La voz de Barry.
Se mueve más rápido contra Barry, intentando obtener más fricción, más de esos ruidos absolutamente sorprendentes. Él sabe que está perdiendo de vista su objetivo principal, pero parece que no puede detenerse. Él no puede alejarse.
Está bien, piensa para sí mismo, puedo correrme ahora y tener una segunda ronda más tarde.
Pero entonces Barry está calmando sus caderas, moviéndolas hacia atrás cuando Hal intenta resistirlas y mantenerlas ahí en aquella fricción caliente. Pero Barry siempre ha sido partidario de seguir el plan original. Estúpido.
—Esto terminará muy rápido si no te detienes—. Habla entre dientes a la oreja de Hal.
—No representa un problema para mí, hombre —. Hal responde. Siente que Barry lanza una pequeña carcajada contra su mejilla antes de retirarse para mirarlo.
— Pensé que querías que yo...
Él se detiene, sus dedos están bailando sobre las nalgas de Hal para encontrarse justo sobre su agujero. Uno de aquellos dedos lo toca suavemente, y el corazón de Hal salta y él jadea, alejándose. Las manos vuelven repentinamente a su posición anterior.
—Lo siento —, Barry respira, la preocupación característica le invade el gesto, — ¿Estás bien?
Hal siente un pequeño pinchazo de vergüenza extendiéndose en su pecho. No debería estar nervioso. Esto no es lo más perverso que ha intentado en la cama, ni mucho menos. Lo frustra, el hecho de haber sido tomado por sorpresa de esa manera y parecer como una virgen sonrojada por Barry. Dios, por Barry, de entre todas las personas.
— Estoy bien —. Afirma, frunciendo el ceño, — Mira, solo... me sorprendiste.
Él lamenta su tono casi de inmediato. Barry parece casi culpable, con la boca estirada en una delgada línea, las cejas ligeramente alzadas. Hal mueve una mano para descansarla en la mejilla de Barry sin pensar. Le pasa el pulgar por el pómulo, luego se mueve hacía él y lo besa suavemente. El gesto suaviza la preocupación de Barry. Un calor familiar inunda el cuerpo de Hal cuando Barry le lanza una de sus pequeñas y suaves sonrisas que reserva solo para él y se disculpa de nuevo. El momento es tranquilo y demasiado íntimo, y está haciendo que Hal se sienta incómodo.
Entonces agarra el cabello rubio y tira de la cabeza de Barry para obligarlo a un beso feroz. Levanta las caderas para contrarlas con las de Barry y volver a frotar sus miemrbos, tratando de aumentar esa excitación de nuevo. Parece que funciona, Barry está gimiendo en su boca y mueve sus manos a sus caderas para acercarlo.
— Está bien —, Barry dice contra sus labios, antes de alejarse nuevamente, — Está bien. Déjame solamente...
Se fue y retrocedió en un instante, desapareciendo solo durante "un flash", Hal apenas siente la ausencia. Cuando el velocista está de vuelta, una botella de lubricante está en su mano y mira a Hal expectante.
Los ojos de Hal descienden hacia la botella, luego se levantan para encontrarse con la mirada azul. El policía espacial traga duro y asiente.
Barry se inclina para besarlo, el gesto es solo una presión suave de labios, antes de abrir la botella y extender una cantidad generosa de lubricante en sus dedos. Hal siente la necesidad de ajustar sus piernas a la nueva situación, levanta una para apoyarla en el hombro de Barry y extiende la otra. Se tensa un poco cuando Barry mueve su mano para rozar su trasero y Barry lo calla.
— Necesitas relajarte un poco —. Dice, inclinándose para besarlo, —Dime cuando estés listo.
Hal asiente en comprensión. Levanta las manos para jalar a Barry. Sus labios se encuentran de nuevo, y Hal se concentra en eso en lugar de como su pierna está siendo empujada contra su pecho, abriéndose más. Él suspira contra la boca de Barry.
—Solo hazlo.
No puede evitar tensarse un poco de nuevo cuando siente un dedo rodear su entrada. Barry lo frota suavemente, probablemente tratando de acostumbrar a Hal a la idea. No funciona. Hal solo necesita que lo haga antes de replantearse todo, e intenta convencer a Barry para que lo haga.
Pero luego el dedo empuja hacia adentro. Él se tensa automáticamente, sus labios tiemblan en el beso y sus dedos se cierran sobre la piel del cuello y el hombro de Barry. Barry hace una pausa, lo vuelve a callar y pasa su mano libre sobre el brazo de Hal con dulzura. Hal exhala, se permite relajarse a pesar de la sensación extraña e incómoda. Él asiente de nuevo y Barry empuja más profundo. No duele, el lubricante alivia el deslizamiento, pero es extraño, y no se parece en nada a lo que imaginaba. Sin embargo puede sentir algo. El borde de algo placentero, pero no es suficiente.
Barry lo está mirando de cerca, sus cejas fruncidas de una manera inquisitiva.
— ¿Todo bien? —, Pregunta. Hal tiene que pensar en eso por un segundo. Siente que está muy bien para ser un tipo que tiene el dedo de su mejor amigo en el culo.
— Sí, solo tal vez —, se desplaza solo un poco, con cuidado de no mover las caderas, — ¿Quizás deberías comenzar a moverlo?
Sus ojos se encuentran en un momento de silencio, y de repente Barry se ríe en su rostro. Hal está confundido, pero él sonríe de todos modos.
— Barry, ¿qué diablos te pasa?
Barry se tranquiliza rápidamente y se apoya sobre su codo. Todavía está sonriendo cuando se disculpa.
— Lo siento —, respira, —lo siento —. Esto es, esto es así...
— ¿Extraño? —, Intenta Hal. Barry asiente, sonriendo tímidamente.
— Sí —, él está de acuerdo. Sus dientes muerden su labio inferior por un momento antes de agregar, —Pero raro... de una forma buena.
Hal no puede evitar soltar una pequeña carcajada.
—Para ti, sí —, dice, bromeando, —No tienes un dedo en el culo.
—No, eso es verdad —. Barry se burla, luego le da una mirada reflexiva, — ¿Seguro que esto no se siente bien?
Agita su dedo cuando lo dice, y aprieta algo lo suficiente como para disparar una oleada de placer por la columna vertebral de Hal. Él castaño jadea, sus ojos se abren y Barry se detiene, tomándose un momento para evaluar la reacción.
— ¿Ese se siente b...?
—Sí —, interrumpe Hal, moviendo las caderas para repetir la sensación, —Sí, hazlo.
La frase se convierte en un gemido bajo y largo cuando Barry obedece, doblando su dedo y presionando con más fuerza en ese punto. Lo hace una y otra vez, tirando y empujando su dedo en la entrada de Hal, masajeando. Los ojos de Hal se cierran, y no puede controlar los sonidos que provienen de él. Tampoco desea hacerlo. Se siente muy bien. Se siente-se siente-
— ¡Oh mierda, Barry! —. Grita extasiado. La única respuesta que recibe es un pequeño gemido y cuando abre los ojos otra vez, Barry lo mira con asombro. Sus labios están separados, la lengua se asoma entre ellos para humedecerlos cuando Hal se encuentra con sus ojos. Aprieta un poco más el dedo, y los ojos de Hal vuelven a cerrarse, echó la cabeza hacia atrás. Gimió humildemente y sintió que los dedos se le apretaban más fuerte en el muslo. Se siente increíble, pero aún no es suficiente.
—Más —, suplica, deslizando las manos para agarrar los brazos de Barry. Barry aprieta con más fuerza su dedo, y lo mantiene allí, una constante presión y roce contra el lugar. Hal grita, sus muslos y sus abdominales se tensan para poder mover sus caderas contra la sensación.
—No —, se queja en un largo y prolongado camino que es casi embarazoso, —Más dedos.
Y sacude sus caderas de nuevo, incapaz de evitarlo. Necesita más. Esto es mucho mejor de lo que él pensó que sería, oleadas de placer fluyendo a través de su cuerpo, enviando escalofríos por su espina dorsal. Inmediatamente se arrepiente por cada vez que se negó a hacer esto antes.
Cuando aquel dedo abandona su interior, gime. Barry se sienta y Hal levanta la cabeza para ver cómo vierte más lubricante. Realmente no le estaba prestando mucha atención a Barry en los últimos minutos, pero lo mira bien ahora y se da cuenta de que probablemente no importó si lo hacía o no. Está sonrojado, respirando pesadamente con una mirada casi salvaje en sus ojos. Por un momento, Hal no puede creer que sea Barry. Que viste corbata de moño, el nerd de la ciencia Barry Allen quien lo está follando con los dedos.
Se sobresaltó cuando el frasco de lubricante fue arrojado sobre la almohada cerca de su cabeza. Entonces Barry le agarra la pierna extendida sobre la cama y la empuja más lejos para abrirlo más. Se ve bien, arrodillado entre las piernas de Hal, besando suavemente su muslo y su rodilla mientras desliza ambos dedos.
Hal sisea esta vez ante la intrusión, el tramo es más doloroso esta vez. Barry intenta calmarlo de nuevo, haciendo una pausa en sus movimientos para permitir el ajuste. Coloca pequeños besos a lo largo de la pierna de Hal una vez más, usando su mano libre para frotar suavemente sobre su muslo al mismo tiempo. Eso es de ayuda, Hal es capaz de exhalar lentamente y relajarse alrededor de los dedos, lo que les permite deslizarse más. Exhala un largo suspiro, y afloja su agarre sobre las sábanas una vez que se da cuenta de que las está sosteniendo.
Cuando Barry aprieta los dedos nuevamente, se siente casi igual que la primera vez, excepto que ahora hay un estiramiento adicional donde sus dedos lo llenan. Y cuando el ardor de ese estiramiento disminuye, se siente extrañamente bien, y su entrada se ajusta alrededor de aquellos dedos. No puede evitar preguntarse cómo se sentiría lleno de otra cosa. Es decir, lleno del miembro de Barry.
Y ahora que tiene una idea de cómo es esto, tener algo dentro de él, la idea de ser follado lo emociona. Barry vuelve a curvar sus dedos en ese momento y él grita, tensándose a su alrededor, aumentando esa sensación de plenitud. Hunde la cabeza en la almohada, moviendo las caderas hacia arriba y hacia abajo para obtener algo de movimiento, un deslizamiento de dedos dentro y fuera de él.
Siente que Barry se acomoda y se acerca lo suficiente para que su pene roce el pliegue donde la pierna se junta con la cadera, justo al lado de su propio miembro, pero no lo suficientemente cerca. La mano del rubio todavía está sujetando los movimientos del muslo de Hal, empujando su pierna hacia arriba y afuera, y abriéndole aún más. Hal se agarra al antebrazo de Barry cuando mueve el pulgar para amasar gentilmente sus bolas, presionando en ese punto.
Juntos, construyen un poco de ritmo, las caderas de Hal se mueven sensualmente mientras los dedos de Barry lo hacen. Es lento, pero Dios, cada movimiento es bueno. Hal no puede hacer otra cosa que no sea gemir y jadear, y aferrarse a Barry como si quisiera salvar su vida mientras el rubio exprime cada onza de placer en su cuerpo. Cuando Barry hace una pausa por un breve momento para agregar más lubricante a sus dedos, Hal quiere increparlo brevemente por detenerse, pero lo piensa mejor. Suelta los brazos del rubio, las medialunas rojas que deja sobre aquella piel, el agarre férreo de sus dedos aparecen por solo unos segundos antes de que se curen, y Hal aprovecha el respiro para secarse el sudor de la frente.
Barry todavía está sonrojado, y Hal puede decir que está tratando de controlar su respiración. O mejor dicho, de controlar todo su cuerpo, pues ha comenzado a vibrar de forma intermitente. También se está tomando un tiempo para preparar sus dedos otra vez y para dejar que Hal recupere su orientación, probablemente.
O tal vez para dibujarlo en su memoria de tal manera que prevalezca para siempre en sus recuerdos. Barry está tomando todo lo que puede de Hal. Llevándolo hasta el borde, hasta el punto de desmoronarse, y luego se detiene una y otra vez hasta que Hal le ruegue que lo joda.
— Date prisa, carajo —. El castaño se queja, sin aliento ante sus propios pensamientos. Él quiere esos dedos de vuelta. Quiere una mano en su miembro, o una boca. O los dos al mismo tiempo. Ésta tan caliente que solo quiere que Barry lo folle.
Barry, parece sorprendido por su contundente exigencia.
Y es el rubio quien se está asegurando de que la botella de lubricante esté cerrada porque no quiere ensuciar. Quien probablemente investigó sobre esto, porque es sorprendentemente bueno para ello. Quien probablemente lea artículos o libros sobre el tema, porque no hay manera de que lo haya visto en una peli porno.
Barry, quien lo reprende por la actitud y luego le pregunta muy fresco si todavía está bien con dos dedos, o ¿quiere tres?
Jesús, Hal se pregunta cómo es posible que encuentre a este idiota tan caliente. Es algo que simplemente esta fuera de su comprensión.
Así que Hal respira profundamente, —Tres. Mete tres.
Barry asiente, frota el lubricante entre sus dedos mientras los coloca en la entrada de Hal.
— Dime si duele —. El velocista le pide, luego está presionando en su entrada, y el estiramiento vuelve a arder, pero Hal sabe que va a estar bien, mejor que antes. Puede sentirlo, la plenitud, y él querer estar más lleno, quiere el pene de Barry dentro de él, lo desea tanto.
— Barry —, gime, —Dios, quiero que me folles.
— ¿Estás... seguro? —, Pregunta Barry. Hal no hace más que asentir, luego grita cuando Barry comienza a mover los dedos.
No es a lo que se refería, Barry entendió mal lo que quería decir, pero no se está quejando necesariamente. Sus dedos se mueven rápidamente, entrando y saliendo y presionando en ese punto. Y esa quemadura ligera del estiramiento sigue ahí, desvaneciéndose lentamente, pero está bien. El leve ardor aumenta lo que siente.
Cierra los ojos y agarra a la cabecera, usándola como palanca para moverse al mismo tiempo con los dedos de Barry. Su miembro se balancea con el movimiento, puede sentirlo golpeando contra su estómago con cada movimiento de sus caderas. Y puede sentir la presión de Barry contra su muslo mientras intenta friccionarse. Entre sus propios fuertes gemidos y su respiración, oye un pequeño "Mierda, Hal" gimoteado. Le encanta cuando Barry se excita tanto que jura. Hal solo puede imaginarse lo jodidamente caliente que se ve ahora, retorciéndose en los dedos de Barry, y sonríe.
Y eso podría impulsar algo en Barry. Qué, no está realmente seguro, pero de repente los dedos del otro hombre se detienen, presionados contra ese punto, y luego comienzan a vibrar.
Él ni siquiera puede hacer un sonido, en lugar de sofocar un pequeño jadeo mientras su espalda se arquea hacía arriba con tanta fuerza que deja de sentir el soporte de la cama. Después de un momento, Hal encuentra su voz y puede gritar. Cada músculo de su cuerpo está tenso y se siente tan malditamente bien, y está tan listo para correrse.
—Barry —, jadea, luego repite su nombre unas cuantas veces más hasta que la vibración se detiene. Se relaja y abre los ojos para ver a Barry detenerse contra él. Está preocupado porque lo ha visto morderse el labio hasta hacerlo sangrar.
— ¿Demasiado? —, Pregunta en voz baja. Hal nota la sombra vergonzosa en sus ojos, y durante un momento no tiene idea de lo que Barry está preguntando. Cuando finalmente las palabras del rubio alcanzan su comprensión. sonríe de nuevo, y pasa una mano por el pecho y el estómago de Barry.
—No. No, dios, está bien. —Responde, luego envuelve su mano alrededor de la base del miembro de Barry. El otro hombre cierra los ojos, y deja escapar un suspiro superficial.
— Ven aquí —Hal murmura, luego lo conduce hasta que sus penes se presionan juntos. Es un ángulo incómodo con los dedos de Barry todavía dentro de él, pero lo hacen funcionar. Y pronto ya tiene a Barry moviéndose dentro de él otra vez, haciendo vibrar sus dedos en ondas contra su próstata. Y él los está masturbando a los dos juntos, y sabe está muy cerca de un orgasmo delicioso.
Puede sentir que se está acumulando e intenta mantener los ojos abiertos para mirar, pero no puede. Su mano se queda quieta mientras grita, la cabeza echada hacia atrás y el cuerpo sacudiéndose con su orgasmo. El placer lo golpea fuerte, y se pierde por un momento. Él sabe que está diciendo algo, pero no está seguro de qué. Barry sigue moviendo sus dedos dentro y fuera y no está seguro de si todavía está moviendo su propia mano sobre ambas durezas, pero puede sentir un segundo golpe de éxtasis en el pecho antes de que todo se detenga y empiece a caer en el más absoluto abismo de placer.
Cuando vuelve a abrir los ojos, Barry todavía está sobre él. Tiene la cabeza inclinada y se apoya en un brazo, recuperando el aliento. Las vibraciones lo atraviesan, su cuerpo aun vibra y está caliente, casi quema al tacto. Hal puede sentir un pequeño revoloteo de preocupación en su pecho a través de su neblina post-orgasmo. Desaparece una vez que Barry encuentra sus ojos y ve una pequeña sonrisa en sus labios.
Los dedos en él se deslizan lentamente hacia afuera, la sensación ahora es extrañamente pegajosa. Él se mueve para apartarse, y Barry se mueve para dejarlo bajar la pierna. Ha se estira con satisfacción, relajándose en las sábanas mientras Barry se acuesta a su lado.
— ¿Te gustó? —, Pregunta sin aliento cuando se acomoda en la cama. Hal cierra los ojos ante el sonido, y deja que su boca se estire en una amplia sonrisa.
—Oh, sí —, gime en respuesta. Estirándose nuevamente, se extiende y mueve los dedos de sus pies. Está cubierto de esperma, pero realmente no le importa. Nada de eso está goteando en la cama, así que lo deja por ahora. No es que quiera moverse de todos modos. Nunca sintió un orgasmo tan bueno. Uno que pudiera provocar una avalancha que recorriera todo su cuerpo de esa manera.
Barry dice: —Bien.
Hal vuelve su mirada hacia él, sonriendo cuando ve un ligero rubor todavía pintando sus mejillas.
— Parece que tú también te divertiste—. Se burla, recordando vagamente lo absolutamente encendido que Barry parecía y sonaba mientras lo follaba, incluso antes de que Hal dejara caer sus caricias sobre su dureza.
— Sí, yo-yo —, Barry tartamudea. Hal piensa que si no estuviera rojo ya, se estaría sonrojando.—Me gusta verte —, admite.
— ¿Sí?
Barry asiente. Desliza sus ojos por el cuerpo de Hal, mordiéndose el labio, antes de levantar la vista para mirarlo a la cara. Ese gesto da un buen impulso al ego del castaño, y sonríe por la admiración que ve en los ojos de su amigo.
— Eres hermoso —, dice Barry, luego se inclina y lo besa, boquiabierto y descuidado.
No es la primera vez que Hal escucha eso, ni mucho menos. Pero hay algo en la mirada de Barry cuando lo dice. La forma en que la palabra se extendió por su lengua, casi como una oración religiosa. Envía una punta de algo a través de su pecho, a través de su corazón, y le produce una sensación de vacío en el estomago.
Hal rompe el beso, rodando sobre su espalda otra vez, y cierra los ojos. Barry pone un beso en su cuello, y se toma el tiempo de acariciar el lugar también antes de que refleje la pose de Hal a su lado. Esa intimidad está de vuelta otra vez, en el aire, y su mente estaba demasiado llena de sexo para darse cuenta, y Hal vuelve a sentir esa sensación en el estómago. Necesita irse, aunque no está seguro de qué hace que esta noche sea diferente a las demás, necesita salir antes de que se deje atrapar por el romanticismo y la noche se convierta en otra mañana.
Y está a punto de hacerlo, está tan cerca, pero escucha a Barry bostezando a su lado. Lo mira y lo ve estirado y sonriendo con satisfacción, levantando su brazo para frotarse la cara antes de abrir los ojos y mirar a Hal, con esos ojos claros soñolientos y tan azules.
El pecho de Hal se tensa y no puede irse. Él no puede hacerle eso a Barry. Incluso si no están saliendo, todavía son mejores amigos.
Así que se acuesta en la cama de nuevo, para tomar un momento antes de que limpien y cenen. Sin embargo, debe parecer angustiado, porque tan pronto como vuelve a recostarse, Barry se apoya en su brazo y le pregunta:
—¿Estás bien?
Hal siempre está un poco obligado a decir la verdad cuando Barry hace esa pregunta. Hay algo sobre la forma en que lo pregunta, la sinceridad en su tono y su mirada que le impiden mentir. Pero esta vez Hal piensa que la verdad, que era que él iba a salir corriendo, sería mejor no contarla.
—Dinah piensa que estamos saliendo —.Hal responde en lugar de sus verdaderas intenciones.
Hay un ligero cambio en la expresión de Barry. Todavía tiene esa sonrisa amable en sus labios, pero sus cejas se fruncen, y su cabeza se inclina ligeramente hacia un lado. Se ve como un perrito confundido, y Hal no puede evitar una pequeña sonrisa.
—Ella sigue refiriéndose a ti como mi novio, pero no como una broma —. Explica, encogiéndose de hombros, — Es raro.
La sonrisa de Barry se desvanece un poco, y su mirada se desliza de Hal a un punto justo detrás de su cabeza antes de volver a acostarse. Cuando habla, su voz suena delgada, aireada y se nota que intenta demasiado sonar casual.
— ¿Lo es? —, Pregunta.
—Uh, sí, amigo —. Hal responde, pero ahora con menos confianza. Algo en él le está diciendo que no continúe, pero lo hace de todos modos. —Es solo sexo.
No está mirando a Barry, pero puede decir que algo está mal. Esto no es de ninguna manera como sus conversaciones normales después del sexo, que consisten principalmente en burlas lúdicas y muchos besos. El silencio entre ellos es ensordecedor, y Hal puede sentir un pequeño tintineo, una vibración casi imperceptible que recorre la cama.
Cuando finalmente mira a su compañero, puede decirlo de inmediato, Barry está en medio de un momento muy tenso. Si Hal no lo conociera tan bien, probablemente pensaría que Barry simplemente esta acostado, callado, con los ojos muy abiertos mirando al vacío. Pero hay un signo, si lo buscas. Una señal que muestra que la speed force está trabajando a través de él.
Su cuerpo se vuelve borroso, las líneas se suavizan, como si lo estuvieras mirando a través de una bruma, o en un sueño. Hal siempre pensó que era hermoso así (aunque nunca lo admitiría, ni siquiera a sí mismo). Pero ahora es solo preocupante, teniendo en cuenta que Barry es muy cuidadoso de no usar demasiado este poder cuando no está en el traje o cuando está trabajando en un caso. Muchas veces, la poderosa speed force lo dejó demasiado vulnerable.
— ¿Bar? —, Intenta, extendiendo la mano para tocar su brazo. Cuando su mano hace contacto, Barry se sobresalta, y de repente se sienta y Hal mira una almohada vacía.
—Yo solo —Barry comienza, luego se acerca rápidamente a la puerta del dormitorio, —solo voy a limpiarme.
Entonces la puerta está vacía, salvo por unos breves crujidos de energía y una imagen secundaria, y Hal está solo. Y se queda solo más tiempo de lo habitual, las pocas veces que limpian por separado. Barry usualmente lo acelera, corriendo a toda velocidad para que puedan aprovechar el resto de la noche. Pero cuando Hal finalmente decide levantarse y dirigirse al baño, puede oír el agua todavía en funcionamiento. La puerta está cerrada, y es la confirmación final de que todo estaba jodido y mal.
Duda antes de golpear la puerta, preguntándose si debería irse, pero al final decide que al menos debería lavarse primero el semen seco.
No hay respuesta durante mucho tiempo, así que toca de nuevo.
— ¿Bar? — Grita, —Tengo que limpiarme también, amigo.
Oye que el agua se apaga. Se aleja un poco, y él cree haber escuchado a Barry suspirar, pero luego la puerta se abre y el rubio lo pasa de largo. Hal se da vuelta, abre la boca para decirle algo a su espalda que se retira, pero Barry ya se ha ido. Está en la cocina, a juzgar por el ruido de las cacerolas y de los cajones abriendose.
Hal se mete al baño y hace un trabajo rápido de limpieza sobre sí mismo y se arrepiente tan pronto como se seca. Ahora tiene que enfrentar a Barry, y él no sabe qué decir o hacer. Para ser honesto, a pesar de que sabe que lo jodió todo, no sabe exactamente cómo. Y no quiere preguntar.
Y después de ver la expresión de Barry cuando salió del baño, realmente no quiere verlo. Se le revuelve el estómago ante la idea de ser quien puso esa expresión en el bonito rostro del rubio.
Así que regresa al dormitorio y limpia rápidamente, luego se dirige a la entrada. Cuando pasa por la cocina, se detiene brevemente para observar a Barry amasando un poco de masa. Puede ver contenedores de fresas y arándanos en el mostrador, y frunce el ceño ante la idea de perderse uno de los pasteles de Barry.
Casi entra a la cocina antes de recordar lo que pasó. Antes de que recuerde que Barry solo hornea así cuando está molesto y que está molesto por su culpa.
Luego se aleja, se dirige a la puerta y quita su chaqueta del perchero mientras se calza los zapatos.
—Voy a... —hace una pausa. No sabe por qué, —me voy, Bar.
Los sonidos en la cocina no se detienen. Barry no viene a despedirlo.
—Está bien, Hal.
Él no pregunta a dónde va ni cuándo volverá.
Hal siente una fosa profunda en el estómago.
— ¿Nos vemos luego? —, Lo intenta.
—Por supuesto.
Se queda parado un minuto que le parece eterno. Por qué, no está seguro, pero por algo que no va a conseguir porque es un imbécil y un cobarde.
La puerta se abrió de golpe y se cerró de golpe detrás de él. Hal encuentra un callejón privado cuando abandona el edificio y entra en él, furioso consigo mismo golpea el ladrillo de la pared antes de encenderse en un vibrante color verde y salir volando, perdiéndose en la noche.
Continuará.
Notas : ¡Hola de nuevo! Ya estamos en el capítulo dos de esta historia que consta de 3 en total, así que estamos muy cerca del episodio final. Espero tener lista la traducción para la siguiente semana <3
En esta ocasión, ya comprendí un poco mejor la línea que se debe respetar en la corrección de estilo para una traducción. Aun me queda aprender un montón de como hacer un buen trabajo en cuanto a traducir, pero lo hago como un pasatiempo y solo con el afán de hacer crecer el amor por la ship HalBarry GreenFlash que son mi OTP de DC. Y de que ustedes puedan disfrutar de este maravilloso fic.
Por favor, recompensen mi trabajo con un comentario o un voto para que las estadísticas de esta historia suban y pueda llegar a más personas que se enamoren de Hal y Barry <3
Les recuerdo que el titulo original de este fic es: Brojobs are a Guy's Best Friend.
Y que es propiedad de : Magnetocent ~