Desorientado (RanmaxRyoga)

By AdeAbril

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Todo era normal ese día de invierno. Ryoga y Ranma luchaban en plena calle por lo usual: Akane, hasta que cie... More

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Inmensa Desdicha
Sorpresa Maldita
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No te Burles de Mí, Ranma
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La Katana de la Unión

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By AdeAbril

Finalmente había llegado el esperado domingo. Todos estaban nerviosos... La chica Ranma estaba con Ukyo y le había pedido prestado el vestido más bonito que tuviera. La castaña le dio el mismo vestido que la pelirroja había usado antes con Kuno... la verdad le quedaba bastante bien.

Por su parte, en la casa Tendo, Akane se había ido antes para poder arreglarse. Además, la mayoría de los novios no vivían juntos y por eso sería más normal que se encontraran en el parque y no que llegaran juntos. Ranma había accedido de mala gana... -como siempre- Todo por complacer a su chica.

Hibiki Ryoga ya estaba caminando hasta el parque. Finalmente había encontrado unas flores dignas para la ocasión y ahora solo debía concentrarse en encontrar el condenado parque que parecía esconderse de él. Aunque solo estaba a un par de calles...

Mousse ya se había enterado de ambas citas. Estaba furioso... su linda Shampoo había estado triste toda la semana por culpa del idiota de Ranma. No pudo contenerse y se fue. Estaba escondido, o mejor dicho camuflado entre los patos que nadaban en la laguna en el centro del parque. Sabía que tarde o temprano esos idiotas irían a las barcas así que, solo debía esperar la oportunidad perfecta para atacar a Ranma con su nueva arma. Era un plan brillante...

Ranma había llegado finalmente al parque. Akane no se veía por ningún lado, así que decidió esperarla cerca de unos cerezos. Se apoyó tranquilamente bajo la sombra del árbol y esperó. En eso, mientras miraba a la multitud vio a Ryoga avanzar a duras penas con su bastón.

- Ese idiota otra vez... parece que ha caminado mucho – se dijo a sí mismo el pelinegro. Ryoga aún no lo veía – Já, viene con flores. Sabía que tenía una cita. Solo espero que no se le ocurra interferir en MI cita con Akane – refunfuñó y se decidió a enfrentarlo. Si el Hibiki deseaba arruinar su único encuentro normal con Akane, se iba a arrepentir...

Por su lado el colmilludo miraba a todos lados tratando de determinar si estaba en el parque correcto. Ya había estado en otros diez... Necesitaba preguntarle a alguien si este era el parque más grande de Nerima.

- Ryoga... que casualidad verte aquí – soltó Ranma detrás de él con un tono entre burlón y sarcástico... el chico se erizó por completo.

- ARGHH POR QUÉ VINISTE DE ESE MODO – gruñó cerrando los ojos y lanzándole un golpe. Se suponía que Ranma iría a su encuentro como una chica... a él no le interesaba su forma masculina. Es decir, sabía que eran el mismo pero... si se veía así era mucho más extraño-

- OYE QUE TE PASA... ¡¡DIME POR QUÉ SIEMPRE ESTÁS TAN ENOJADO CONMIGO!! – gritó el pelinegro defendiéndose. En eso Ryoga lo miró con más cuidado... Ranma estaba vestido para una cita. Esta vez no ser burlaba... pero ¡¡ÉL QUERÍA A LA PELIRROJA!! En fin, tal vez solo estaba probándolo. No había otra alternativa...

- Perdóname, es solo que me sorprendió verte de ese modo... - respondió más calmado. ¿Se estaba sonrojando? Ranma sintió un escalofrío, Ryoga se estaba comportando muy raro... instintivamente retrocedió un par de pasos

- Ryoga... que te sucede – preguntó viendo la seria expresión en el colmilludo

- Te traje esto – respondió dándole las flores. Estaba demasiado nervioso y miraba para otro lado. Esta cita no era para nada como la había imaginado, pero esperaba pasar la prueba...

Ranma empezó a tener un aura maligna de batalla. Hizo sonar los nudillos con rabia...

- QUE FUE LO QUE DIJISTE IDIOTA PERVERTIDO – dijo y en eso comenzó a darle una paliza.

..................

Ranma-chan había llegado al parque por otra de las entradas. Se sentó en una de las bancas a esperar a Ryoga. Sabía perfectamente lo mucho que le costaba encontrar una dirección, así que llegó más tarde para darle algo de tiempo. En eso, su vista dio con Akane...

- ¿Qué estará haciendo ella aquí? – se preguntó ocultándose rápidamente - ¿Acaso querrá sabotear mi cita con Ryoga?... Es verdad, aún no le digo que ya no quiero casarme con ella. Que idiota fui... tal vez deba decírselo ahora – continuó y salió de su escondite... pero a lo lejos pudo ver que Ryoga avanzaba torpemente a una de las salidas. Se veía algo lastimado.

Saltó de dónde estaba y corrió hasta él sigilosamente. Akane pudo sentir una presencia conocida tras ella, pero cuando volteó no pudo ver a nadie. Se sintió algo nerviosa, pero trató de no darle mucha importancia al asunto...

Ranma le esperaba más allá. De inmediato se sonrojó...

- Que tal – saludó él tratando de disimular su nerviosismo

- Hola Ranma – en eso Akane notó lo agitado que estaba el pelinegro, como si hubiese estado hace poco en una pelea - ¿Te encuentras bien? ¿Estuviste peleando con alguien? – preguntó preocupada acercándose....

El pelinegro recordó la extraña escena que tuvo hace solo unos minutos con Ryoga y sintió que una nube negra lo aplastaba. No podía decirle a Akane la verdad... Además Ryoga no le perdonaría que lo dejara mal frente a ella. De seguro solo estaba molestándolo.

- Claro que no, que boberías dices... - dijo y se puso las manos tras la cabeza para intentar parecer despreocupado – Ya estamos aquí... ¿Ahora qué quieres hacer? – preguntó

- ¿Y si vamos a las barcas en la laguna?

- Mmm, parece buena idea... - en eso Ranma miró a su prometida. Se sonrojó al ver lo bonita que estaba – Oye Akane...

- ¿Eh? ¿Sucede algo? –

- No te ves tan mal con esa ropa – soltó de una vez y avanzó más rápido para que ella no pudiera verle. Akane sonrió dulcemente y le siguió...

................................

La chica Ranma llegó hasta dónde estaba Ryoga. El pobre Hibiki había caído desmayado por la golpiza que le había dado el pelinegro. Aún así, las flores que pensaba darle a "su chica" no habían sufrido daño. Se había esmerado mucho por eso y no iba a dejar que les pasara algo.

La pelirroja lo arrastró a una de las bancas y lo acomodó con cuidado. Estaba algo lastimado, pero lucía normal. No es que le hubiera dejado los ojos negros o tuviera algunos dientes menos. Solo estaba aturdido... La persona que lo atacó tuvo consideración, aunque era obvio que estaba muy enojado.

Ryoga comenzó a abrir lentamente los ojos... vio una figura borrosa y mucho rojo...

- ¿Ran...ma? – susurró y volvió a cerrar los ojos. La cabeza le dolía espantosamente

- Ryoga ¿quién te hizo eso? – preguntó ella. En eso el Hibiki se levantó enojado... pensaba gritarle que fue ella misma pero, cuando la vio claramente quedó embobado y solo pudo sonrojarse...

"Ranma actúa muy extraño pero... no puedo enojarme con él. Con ella..." – pensó viendo fijamente el suelo. Aún tenía las flores y estaba esperando el mejor momento para dárselas. Las malditas palabras no le salían, estaba seguro de que si se atrevía a hablar iba a tartamudear o simplemente no iba a salirle la voz. Ella lo miraba con ternura...

Su Ryoga era un encanto. Siempre lo había sido... y estaba feliz de que finalmente él actuara así con ella y no con Akane...

- ¿Esas flores son para mí? – Él se tensó de inmediato. Maldita sea... era un cobarde. Ella siempre tenía que tomar la iniciativa... no podía hacerse llamar un hombre si seguía así.

- Si yo... este... - "Por todos los cielos concéntrate Ryoga" pensaba y se regañaba. Nunca había estado tan nervioso en su vida. Ni siquiera al lado de Akane, o Akari... nadie le había provocado eso en su vida. Además, siempre que se atrevía a mirarla a la cara recordaba el intenso beso que se dieron en su tienda, y los colores se le subían al rostro. Se podría freír un huevo en su cara...

- Son tan hermosas... No parecen ser de Japón... - respondió ella y los ojos del Hibiki se ampliaron de emoción. Solo ella se había dado cuenta. Ninguna de las otras había notado el esfuerzo que él hacía al traer lo mejor...

- ... - él sonrió y se rascó la cabeza nervioso – Si, las compré en una tienda china en Hokkaido – contestó y se quedó otra vez en silencio. No quería que su primera cita fuera así... debía tener más confianza...

- ¿Quieres venir a las barcas de la laguna conmigo? – la pelirroja le miraba con ternura. Maldita sea... le estaba quitando las palabras de la boca. No quería parecer desinteresado... ella estaba haciendo todo para que la cita saliera bien...

- Yo... je je... iba a preguntarte lo mismo... - soltó torpemente. Maldecía su estúpida timidez. En eso, mientras ella le daba la espalda, la sujetó del brazo... la chica volteó confundida.

"Ay no... ¿la habré lastimado? ¿Estará molesta...? Que imbécil soy no debí..." – en eso vio que ella sonreía y respiró aliviado...

- Te ves hermosa – dijo sorprendido de decirlo de corrido, sin errores y sin un tono de voz idiota. La pelirroja abrió un poco los ojos y se sonrojó. Definitivamente Ryoga era la criatura más dulce en la tierra... él la sujetó de la cintura y le dio un besito. No era tan apasionado como el último que se habían dado, pero transmitía el mensaje.

Le dio la mano, y caminó con su chica hasta las barcas en la laguna.

..................

Ranma y Akane ya estaban en el lugar y habían remado hasta el centro de la laguna. En el medio había una enorme estatua de Cupido que no dejaba ver hacia el otro lado pero que tenía la mejor vista de los cerezos y los puentes del parque.

- Oye Akane, deberías entrenar más, tus brazos son muy débiles tardamos mucho para llegar hasta aquí – soltó el pelinegro sin pensar y recibió un zapato en la cara como respuesta. Para su mala suerte, ese día Akane traía tacones...

- ¡¡ERES UN GROSERO!! ¿NO PUEDES SER AMABLE CONMIGO SOLO UNA VEZ? – preguntó ella enojada, para luego ponerse triste...

Ranma se desenterró el zapato de la cara y la miró preocupado.

- Lo lamento yo... no quise decirlo de esa manera pero... arghh tú siempre te ofendes por lo que digo y no te das cuenta de que lo hago solo por tu bien... - gruñó dándole el zapato a la peliazul

- También lo siento – dijo ella... pero deberías ser como ese chico que rema él solo para que su chica vaya cómoda y tranquila y.... ¿Ese no es Ryoga? – preguntó parpadeando un par de veces....

Ranma puso una cara de fastidio. El Hibiki venía paralelo a ellos... cuando avanzara lo suficiente iba a quedar tras la estatua. No podían ver con quien venía porque la chica se cubría el sol con la sombrilla que él le había prestado...

- La novia de Ryoga debe ser muy fuerte para sujetar esa sombrilla... - soltó Akane observando a la inusual pareja.

Ryoga tenía una sonrisa estúpida en la cara y remaba con mucha fuerza. Parecía muy feliz con su cita...

- Ese idiota... está usando a alguien como pantalla para arruinar nuestra cita – pensó Ranma en voz alta...

- No digas eso, él no es así... además parece muy feliz con la compañía de esa chica. Debería ser más como él, Ryoga está remando solo y además le dio su sombrilla a la chica para que se cubriera el sol, tú jamás eres tan cariñoso conmigo – gruñó ella cruzándose de brazos...

- PUES SI TANTO TE AGRADA RYOGA DEBERÍAS HABER SALIDO CON ÉL – gritó Ranma tan fuerte que todas las parejas alrededor le escucharon...

- ARGHH ERES UN GROSERO Y YO QUE CREÍ QUE POR PRIMERA VEZ IBAS A SER UN BUEN NOVIO Y QUE NO IBAS A ACTUAR COMO CRETINO - gritó ella de vuelta...

Ryoga se detuvo. Él podía identificar esas voces. La pelirroja también...

- Esos no son... - balbuceó el Hibiki preocupado. En eso vio que uno de los patos le miraba fijamente... La pelirroja tuvo un mal presentimiento de inmediato.

- Quédate aquí, iré a ver lo que ocurre – le dijo a Ryoga y saltó de barca en barca para encontrar a los dueños de esas voces. No podía ser cierto... ¿Era su contraparte?

El Hibiki iba a ir tras ella, pero el pato Mousse voló a su barca y le arrojó un potente somnífero. De la nada sacó una tetera y se la echó encima. Ryoga dormía profundamente... Mousse tomó la pesada sombrilla de Ryoga y se la puso encima para protegerlo del sol. En el fondo era su amigo... y no quería que saliera tan lastimado de todo eso...

- Lo lamento Ryoga, pero si estás consciente vas a arruinar mi plan. Me da pena que te encariñaras con esa chica irreal pero, debo eliminarla de una vez. Lo haré por Shampoo – terminó de decir y se marchó saltando de barca en barca para no volver a mojarse. Shampoo no se había molestado en usar el mandoble con él... a veces podía ser muy mala.

Ranma-chan había avanzado por todas las barcas y no había encontrado a Ranma y Akane.

- Tal vez solo lo imaginé... que extraño es todo esto – se dijo ya en tierra firme. En eso, vio una solitaria barca en medio del lago. Antes no había podido verla por la enorme estatua que los cubría... - Ya veo... quizás están allí – continuó dispuesta a llegar al lugar para enfrentarse a su contraparte pero...

- Al fin te encuentro, Ranma Saotome – dijo una voz familiar tras ella...

- Mousse – respondió poniéndose en posición de batalla...

- No te preocupes, eso no es necesario – continuó sacando una enorme katana de su manga. Ella le miró molesta... dispuesta a darle una paliza... - Veo que ya te has dado cuenta de la verdad...

Ella endureció la mirada aún más...

- ¡¡DE QUÉ ESTÁS HABLANDO AHORA PATO ESTÚPIDO!! – gritó lanzándole una patada. Él la esquivó con facilidad... sonreía maliciosamente...

- Ya sabes, que tú no eres real... - soltó haciendo que la chica sintiera una puntada de dolor en el pecho... - Acabas de escuchar al Ranma real discutir con Akane. Tú eres una ilusión que salió de su cuerpo el día en que Shampoo te cortó con el mandoble...

- Así, pues a ver si esto te parece una ilusión – gruñó dándole un fuerte golpe en la cara...

- Si, tu cuerpo es real, pero... tú no eres Ranma... tú solo eres su maldición y... ahora deberás volver a su cuerpo... - respondió Mousse empuñando su arma

- No quiero hacerlo... al fin soy libre. No sé porqué te molestas en hacer esto... Ahora que Shampoo está libre deberías ir con ella y dejarme en paz – gruñó defendiéndose de los ataques controlados que le daba el cegatón

- Si eso habría sido lo ideal... pero por culpa de tu rechazo ella está triste y yo juré vengarme – continuaba diciendo Mousse tratando de alcanzarla para cortarle de una vez – Cuando vuelvas al cuerpo de Ranma él estará tan confundido que se quedará solo para siempre... no podrá casarse con Akane y no podrá estar con Ryoga porque estará dividido para siempre – terminó de decir a punto de tocarla...

- Eso es imposible... recuerdo que Shampoo dijo que el efecto del mandoble no se podía dividir... - respondió esquivando los ataques lo mejor que podía. Parecía que el idiota de Mousse había mejorado en su velocidad...

- Lo era... hasta que cree esta Katana de la unión... cuando te corte con ella, volverás al cuerpo de Ranma y nunca más saldrás de allí – y en eso, logró cortar ligeramente el vestido lila de la pelirroja.

Más allá Ranma y Akane seguían con su estúpida pelea infantil. En eso, la barca a la deriva de Ryoga apareció a su lado...

- ¿Ryoga? – preguntó Akane...

- Está sedado... alguien lo atacó – dijo Ranma mirando a todos lados y en eso vio que Mousse peleaba con alguien, pero no pudo determinar quien era...

La pelirroja abrió los ojos asustada... Mousse había logrado su plan...

- Despídete de este mundo... Ranma-chan –terminó de decir y en eso la chica desapareció frente a sus ojos. Ranma sintió que algo entraba a su cuerpo... y se sintió horrorosamente confundido...

Seguía en su forma masculina, pero ahora estaba realmente preocupado por Ryoga. Su lado de chica luchaba tenazmente contra él. Sentía deseos de lanzarse al agua pero... su lado masculino se lo impedía. Iban a estar luchando para siempre... era la peor de las torturas.

Mousse sonrió a lo lejos y se marchó. Ahora era el momento de marcharse para siempre a China... su venganza había sido consumada...

- ¿Ranma? ¿Ranma que te sucede? ¡¡RANMA POR FAVOR REACCIONA!! – decía Akane viendo que su prometido estaba petrificado mirando el horizonte...

- Llévate a Ryoga de aquí... - respondió cortante....

- Pero...

- ¡¡SOLO HAZLO!! – gruñó y en eso uno de los patos reales voló cerca de él salpicándole agua... frente a los ojos de Akane, Ranma volvió a ser una chica.

- .... Qué... ¿Qué sucedió? – preguntó ella sorprendida de lo que estaba pasando...

- SOLO ALEJA A RYOGA DE MI – gritó y salió corriendo. No quería que Akane la viera llorando... menos por ese tarado colmilludo.

Cuando estuvo lo suficientemente lejos. Subió a uno de los árboles y lloró... Al unir nuevamente sus cuerpos, sus memorias también se juntaron...

- No puede ser... le pedí matrimonio a Akane mientras era un chico – se dijo horrorizada...

"Y tú besaste a Ryoga" – le contestó una voz en su mente. Era su contraparte... ahora podía dialogar... era muy extraño

- Y ahora que vamos a hacer... no puedo, no quiero casarme con Akane – continuó y siguió llorando

"Tampoco puedes ir con Ryoga, no teniéndome a mí... lo mejor será..."

- QUE NO ESTEMOS CON NINGUNO – dijeron las dos partes a la vez. Aquello era horrible... no podían decir la verdad... Mousse no podía cooperar. ¿Qué iban a hacer?

Continuará.... 

¿Que tal les va? Espero que  bien n///n ojalá no se hayan olvidado de esta historia. La verdad le tengo mucho cariño, es la primera de esta pareja que escribi y no sé tengo la mania de imaginarmela como si estuviera animada... jaja, soy tan ilusa... en fin

Mil gracias por leer y saludos especiales a: user82839472, DeboraOrtubia, Bersek1995, y a lovecrema -ya voy por tu fic!! pasen y apoyenle jeje- ♥ Kisuuss 

pd: una pequeña encuesta... ¿quieren volver a ver a Ryoko 7w7? 
Ppd: por favor vean la imagen, la hice yo y me costó muchooo la hice para ustedes con amor 💖

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