El lunes por la mañana, al abrir su casillero, Terra descubrió que estaba completamente lleno de rosas rojas. En medio de la pila de flores había una pequeña nota, un pedazo de papel blanco que solo contenía las siguientes palabras:
"Necesito un mapa, porque estoy perdido en tus ojos ;) –Matt"
Terra casi vomitó cuando lo leyó, queriendo azotar su casillero y tirar la nota a la basura. ¿Podría ser más cliché? Las rosas rojas era una clara señal de que no tenía imaginación ni creatividad, y lo cursi y torpe de la nota le asqueaba. Iba a hacerlo, pero sintió la mirada de alguien sobre ella. De reojo, observó a Isaac al final del pasillo, observándola fijamente.
Tres chicas se plantaron alrededor de Terra, llamadas únicamente por la oportunidad de buscar un buen chisme.
—Alguien tiene un admirador secreto —canturreó Britney, una de las chicas. Terra le sonrió engreídamente.
—Tengo más de un admirador secreto.
La pelirroja pareció sorprendida por su actitud, pero un tanto aturdida sonrió, recuperándose rápidamente de su sonrojo.
—¿Y quién es esta vez? —preguntó Gina, la chica más bajita del grupo.
—No dice de quién es —mintió Terra—. Podría ser cualquiera, la verdad.
—Podría ser Jace —opinó Fate.
—O Josh —sugirió Britney—. Sé que le gustas desde hace siglos y quiere bailar contigo en las sabanas, si sabes a lo que me refiero.
Terra parpadeó, no creyendo que gente que hablara así existiera en la vida real. Aun así, omitió sus comentarios.
—No lo sé, no lo sé... Fue un gesto lindo, ¿saben? Lo de las flores. Nadie regala flores ya. Creo que es clara señal de que esta persona quiere algo serio —dijo Terra, sonriendo ampliamente cuando vio a Isaac tensarse.
—Totalmente —asintió Gina.
—Bueno, quien quiera que fuese debería apresurarse conmigo —se encogió de hombros—. Me aburro bastante fácil.
Llegando a su casa, Terra consideró tirar las flores a la basura. Olían a perfume barato artificial en lugar de lo que se suponía debían oler las rosas. Aun así, se decidió en ponerlas en su ventana por si Isaac se decidía por pasar por ahí.
Una de las chicas de teatro la había invitado a ver vestidos para la fiesta a la cual la había invitado Matt, así que se decidió a ir, ignorando la puerta cerrada de la habitación de Jackson. Cuando regresó, todo estaba oscuro pues ya era de noche. Cansada y fastidiada por no haber encontrado nada lo suficientemente corto y espectacular, se quitó la ropa enfundándose en su camisón de seda preferido pero justo cuando se iba a acostar notó que algo estaba raro. Volteó a ver a su ventana, dándose cuenta de que las rosas ya no estaban. Desvió la mirada, y las encontró en su bote de basura.
Frunciendo el ceño, Terra se acercó a la ventana, dándose cuenta de que estaba cerrada. Sus ojos vagaron a una flor, una solitaria flor que estaba al otro lado de la ventana. Abrió la ventana, estremeciéndose cuando una ráfaga de viento se coló a su habitación. Tomó la flor y la hoja de papel doblada a su lado y cerró la ventana.
Se sentó en su cama, con las piernas cruzadas. Inconscientemente se llevó la flor a la nariz. Olía a campo, a naturaleza, a noche. Nunca había visto una flor similar.
Cuidadosamente, desdobló la carta. Estaba en blanco, a excepción de unas palabras descuidadas escritas en medio de la hoja.
"Terra Whittemore, no te imaginas cuanto te odio en estos momentos porque literalmente me perdí en el bosque intentando encontrar esta maldita flor. Como siempre, eres un dolor en el trasero aunque no te lo propongas. Solo bromeo, aunque hablando de traseros, el tuyo es bastante lindo. ¿Sabías que solo me uní al equipo de lacrosse para verlo? Oh, y para estar contigo, porque tú también eres bastante linda. Con o sin trasero. Ahora, probablemente estés sonriendo en este momento preguntándote cómo es que te gusta alguien tan tonto y bobo como yo. Honestamente yo me sigo preguntando lo mismo. No importa. Me gusta cuando sonríes. Cuando sonríes de verdad, no para nadie más. Esa sonrisa que das cuando crees que nadie más te ve. Siempre te ves hermosa, pero cuando sonríes... Mierda, Terra. Podrías terminar guerras con esa sonrisa.
Me voy, ya llegaste y tengo que irme para que no te des cuenta de que estoy aquí y esto sea más romántico.
-Isaac xx"
✖✖✖
El martes, Matt decidió mandarle el desayuno al salón de clases. Al parecer, no había podido ir a la escuela porque había tenido que ir al hospital a hacerse un chequeo pero no quería dejar a Terra sin una sorpresa ese día.
Terra intentó parecer halagada frente al resto de sus compañeros, consciente de que al fondo del salón Isaac estaba sentado viendo todo con brazos cruzados.
—¡Es mi desayuno favorito! —chilló Terra, ganándose que todas las chicas a su alrededor dijeran: "awww".
En realidad, Terra lo odiaba. Odiaba el tocino. Odiaba la cantidad de grasa contenida en el emparedado de cinco quesos. Odiaba la Coca Cola Regular. Odiaba todo lo que Matt le había mandado.
Así que a la hora del receso, antes de ir a la cafetería, lo tiró todo en el contenedor de basura detrás del edificio principal.
Se dirigió a la cafetería, observando qué más podía comer. De reojo, observó a Allison sentada sola en una mesa. Al parecer, Lydia aun no llegaba. Scott y Stiles estaban sentados en otra mesa, el moreno viendo embobado a la cazadora. Poniendo los ojos en blanco, Terra se dejó caer frente a Allison.
Comenzaron a hablar de temas de chicas, como Zac Efron, maquillaje y One Direction. Terra no era gran fan de ellos, pero debía admitir que el castaño de ojos azules era lindo. Allison, entusiasmada, comenzó a contarle todo sobre Louis Tomlinson. Terra se esforzó en parecer como si le importara.
En ese momento, Erica se plantó frente a ellas.
—¿Se te ofrece algo? —preguntó Terra, entrecerrando los ojos mientras miraba sospechosamente a la rubia. Soltando un gran suspiro, cansada, de detrás de ella sacó una bolsa de papel marrón.
Erica le dejó la bolsa y se fue, sin dar más explicaciones. Curiosa, Allison se inclinó para ver qué tenía adentro. Encogiéndose de hombros, Terra comenzó a sacar comida de la bolsa.
Sacó unos sándwiches de mantequilla de maní y jalea, un jugo verde y una ensalada de pollo.
Dentro, había una nota.
"Eres la única chica que conozco a la que realmente le gusta esta mierda. ¿Sabes que no puedes engordar, cierto? Podrías comerte una vaca entera si quisieras y aun así prefieres una ensalada. En ocasiones como esta, me cuestiono nuestra amistad. Estás loca. Por eso añadí un par de sándwiches de mantequilla de maní y jalea. ¿Recuerdas cuando ibas a mi casa a jugar a la enfermera, curándome las heridas y todo eso? Cuando te enteraste que la mayoría de las veces no cenaba, comenzaste a llevar sándwiches de mantequilla de maní y jalea cada noche.
Siempre supe que eras especial, pero no sabía cuánto hasta ese momento.
-Isaac xx"
—¿De quién es? —preguntó Allison, los ojos brillándole con curiosidad.
—Isaac —respondió Terra en un suspiro, apoyándose contra la mesa—. Dijo que estaba confundido pero me ha estado mandando cosas y ahora yo estoy más confundida.
—Los hombres son confusos —suspiró, mirando de reojo a Scott.
—Amén, hermana.
✖✖✖
Terra sonrió a Scott cuando tocó la bocina de su coche, haciéndole saber que ya había llegado. Hace unas horas le había mandado un mensaje, diciendo que iría con Derek a ver a Deaton. Le había preguntado que si quería acompañarlo y Terra le había dicho que sí sin dudarlo.
Bajó los escalones expertamente con sus tacones de aguja y se deslizó en el asiento del pasajero.
Cuando llegaron, lo primero que Terra notó fue la esencia de Isaac. Alterada, volteó a ver a Scott.
—No me dijiste que Isaac estaría aquí —siseó, frenéticamente viendo su reflejo en el espejo—. ¿Me veo bien? ¿En qué estoy pensando? Yo siempre me veo bien.
—Podrías sacarme los ojos con la punta de tus tacones y tus jeans no podrían ser más ajustados —musitó Scott, divertido ante la reacción de la chica—. Estarás bien.
—Bien —suspiró—. Hagamos esto. Oh, por cierto, ¿me dejas tomar tu mano?
—¿Por qué? —preguntó, entrecerrando los ojos, confundido.
—Porque va a hacer enojar a Isaac.
—Está bien —accedió, entrelazando sus dedos con los de Terra una vez que bajaron del auto.
—Oh, y dame tu chamarra.
—¿Qué?
—Tiene tu esencia —Terra soltó una risita traviesa—. Lo volverá loco.
Confundido pero sabiendo que era mejor no discutir con la chica, le pasó su chamarra sin decir más. Juntos, entraron a la veterinaria. Scott vio a lo que Terra se refería en cuanto entraron, Isaac tensándose, casi gruñendo. Scott casi se apartó de la chica, pero el agarre de Terra en él se incrementó.
—No confío en ti —siseó Terra, dejando ir a Scott solo para apuntar con el dedo a Derek.
—Yo tampoco confío en ti —replicó Derek de vuelta, mirando con desagrado a la castaña.
—Y es por eso que yo estoy aquí —intervino Isaac, interponiéndose entre ambos antes de que se sacaran los ojos.
—¿Dónde está el veterinario? —Preguntó Derek—. ¿Va a ayudarnos o no?
—Depende —dijo Deaton, apareciendo recargado en una esquina—. Jackson. ¿Estamos planeando en matarlo o en salvarlo?
—Salvarlo —dijo Scott, al mismo tiempo en que Derek decía:
—Matarlo.
Terra iba a darle un puñetazo al Alfa, pero Isaac la detuvo en cuanto vio sus intenciones.
—Hace unos días dijiste que querías matarlo —le recordó Derek.
—Sí, bueno, es mi hermano. Solo yo puedo decir que quiero matarlo.
—Vamos a salvarlo —musitó Isaac al oído de Terra, intentando tranquilizarla. Los ojos de Terra brillaban con furia—. ¿Cierto, Derek?
—Cierto —suspiró Derek, fulminando con la mirada a los adolescentes.
Se adentraron en la veterinaria, a donde Deaton tenía una camilla y un montón de sustancias medicas extrañas. Ahí, el veterinario sacó de un estante una serie de frascos y se los mostró, dejándolos en una mesa de metal frente a ellos.
—Cuidado con lo que tocas —regañó Derek a Isaac en cuanto el chico intentó agarrar uno de los frascos, apartando su mano. Isaac dio un salto casi imperceptible para todos, solo Terra se dio cuenta de que el agarre de Derek lo había sobresaltado, probablemente haciéndole recordar a su padre cuando lo golpeaba.
—Sí, Isaac —dijo Terra inmediatamente, tratando de distraerlo—. Pon tus manos en un lugar útil, como en mi trasero.
Funcionó. Isaac puso los ojos en blanco burlonamente, acostumbrado a la actitud de Terra y sonrió divertido. Terra le devolvió la sonrisa sin dudarlo.
—¿Y tú qué eres? —Preguntó Isaac, inclinándose hacia Deaton—. ¿Una especie de... brujo?
—No, soy un veterinario —lo corrigió tranquilamente—. Por desgracia, no veo nada aquí que sea una protección efectiva contra una toxina paralizante.
—Estamos abiertos a sugerencias —murmuró Derek, mirándolo fijamente.
—¿Qué tal una ofensiva efectiva? —inquirió Isaac.
—Ya lo intentamos. Casi le arranco la cabeza, le salvé la vida a Terra... Y Argent vació el cargador entero. Esa criatura se recupera.
—No me salvaste la vida —siseó la castaña.
—¿Captaron alguna debilidad? —preguntó Deaton.
—Una. No sabe nadar —respondió Terra.
—¿Eso aplica a Jackson?
—Jackson y yo nadamos desde que estábamos en pañales. Él es el capitán del equipo de la escuela.
—En esencia, estamos intentando atrapar a dos personas —explicó el veterinario—. Un títere. Y un titiritero. Uno mató al marido, pero se encargó de la mujer. ¿Sabemos por qué?
—La mujer estaba embarazada —explicó Terra quedamente—. Nuestra madre también lo estaba cuando murió asesinada. Embarazada de nosotros.
Por debajo de la mesa, la mano de Isaac tomó la de Terra suavemente.
—No podía dejar que le pasara lo mismo a otro —añadió Scott, dándole una mirada de simpatía a Terra. Sabía que le costaba hablar sobre eso.
—¿Cómo sabemos que eso no es parte de las reglas? —Preguntó Isaac, pensando en voz alta—. El kanima mata asesinos. Si Jackson mata a la esposa, el bebé también muere.
—¿Esto significa que tu padre era un asesino?
—No me sorprendería si lo fuera —ésta vez, Terra le dio un apretón a sus manos entrelazadas.
—Un momento —interrumpió Deaton—. El libro dice que están vinculados, ¿cierto? ¿Y si el miedo del agua no fuese de Jackson sino de la persona que lo está controlando? ¿Y si algo que afecta al kanima también afecta a su amo?
—¿Eso qué significa?
—Que podemos atraparlos —exclamó Scott—. A los dos.
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este ha sido de los capítulos más fáciles de escribir de la historia entera de ana escribiendo jajaja espero les haya gustado! comenten y voten, y esperen en el siguiente cap una parte de terra e isaac (;