—¿Justin? ¿estas ahí? —pregunta Jeremy desde fuera.
—Eh... Si...perdón, estaba durmiendo.
—¿Puedo pasar?
—Si —ontesté nerviosamente. La puerta se abre despacio.
¡Joder! ¡Estoy desnudo!
Miré para el suelo, donde se encontraba toda la ropa de Miley, Me lleva el..., corrí, agarrando la ropa a mi paso y cerré la puerta del baño con rapidez.
—¿Justin?
—Estoy en el baño. Estaba a punto de bañarme.
—¿Que no estabas durmiendo?
—Si. No, bueno si, pero estaba a punto de...
—Justin ¿estubiste bebiendo? No etás siendo muy claro.
—Papá —dije sacando la cabeza por la puerta— estoy bien ¿qué quieres?
El me mira extraño por unos segundos.
—Miley ¿dónde está?¿sabes algo de ella?
—Ah Miley. Sí, me llamó anoche y dijo que...
—No me digas que se quedó cin Nick!
—No. Claro que no —contesté algo molesto— se quedó en casa de una amiga. Papá te veo en —antes de que pudiera terminar la frase, Miley empezó a hacerme caricias— en...el...desayuno —logré decir, mientras batallaba los gemidos y las manos de Miley.
—¿Estás bien?
Respiré hondo.
—Si...Estoy bi..en —solté un fuerte gemido al sentir los cálidos labios de Miley, tomando el lugar de mis manos.
—¡Justin! ¿qué te sucede? —cerré la puerta. Mi respiración estaba bastante agitada y estaba a punto de gritar por el placer increíble que me producían sus labios— ¡Justin! ¡contéstame! —exige golpeando la puerta.
Miley POV
Despegué los labios y subí lentamente, rozando mi cuerpo desnudo contra el de Justin.
—Contesta -Susurré pasando rozando sus labios.
—¡Justin!
El suspira y toma mi rostro entre sus manos, plantándome un beso apasionado.
—¡Papá! Estoy perfectamente bien. Te veo en la mesa —dice mirándome fijamente. Jeremy no decía nada, así que supuse que se había ido— ¿cómo haces eso? —pregunta besando con pasión mi cuello.
—Quería divertirme un poco.
—¿Ah si? —dice entre besos- entonces ahora me toca a mi.
Me guía hasta la ducha, pero sin despegar sus labios de mi cuello.
—Eres un enfermo sexual ¿sabes?
—Solo contigo preciosa...solo contigo.
—Justin por favor yo...
—No digas nada —roza los labios contra los mios— solo déjame amarte.
Acorrala mi cuerpo. El agua caía sobre nuestros cuerpos y rápidamente inundo el ambiente de vapor.
—Me encanta que... —murmuré entre gemidos. El abrazó mi cuerpo con una mano, y con la otra acariciaba mi rostro mientras pegaba su cuerpo y su miembro duro contra mi.
—¿Te encanta, qué? —pregunta besando mis labios con pasión.
—Todo tu Justin —solté un leve grito de placer, al sentir con el me penetraba.
—¿Te encanta esto? —pregunta deslizándose despacio una y otra vez dentro de mi.
—Si —susurré entre jadeos. Lo beso con desesperación intentando ahogar los gritos.
Veo a Justin en el pasillo, hablando por su móvil. Cuando se da cuenta de que le estoy mirando, me mira y cuelga rápidamente.
—¿Con quién hablabas? —elsonríe y me abraza por la cintura.
—No seas tan curiosa.
—Ah ¿entonces no me vas a decir? —besa mis labios tiernamente.
—No
—Como tu quieras Biebs —dije empujándolo— ¿ya desayunaste?
—Si —me toma nuevamente de la cintura— pero no se...Me quedé con hambre —me susurra al oído. Sonreí divertida.
—¿Tienes hambre? —pregunté con voz seductora y rozando su entrepierna. El asiente con la cabeza, por su expresión supe que lo traía loco.
—Entonces déjame —murmuré rozando sus labios y tomando su miembro. Gimió, mientras que su respiración se agitaba— déjame... —lo empujé— prepararte algo de comer Biebs —dije sonríendo y bajando por las escaleras.
Lo escuché decir "Malvada espera", para despues seguirme. Pero al bajar nos econtramos con Jeremy.
—Miley, por Dios. La próxima vez que te quedes fuera de la casa, nos avisas por lo menos. Tu madre tenía el alma en un hilo, pensando lo peor.
—Creo que estoy bastante grandecita para que tenga que estar pidiendo permiso ¿no crees?
—No te estoy diciendo que tengas que pedir permiso, si no que nos avises, para saber si estás bien.
—Pues aquí estoy ¿no? —caminé hacia el comedor, dejando a Jeremy con la palabra en la boca. El mira a su hijo y niega con la cabeza.
—¿Qué vamos hacer con esta niña?
Justin se encoge de hombros y sonríe.
Tish asiente la taza de su café y me mira seriamente.
—Oh Dios!...No me vengas con lo mismo por favor.
—No pienso decirte nada. Solo espero que no vuelvas a lo mismo con Nick.
—¿A qué te refieres?
—Creo que sabes muy bien de lo que estoy hablando —se acerca— yo sé que erais amantes y no creo que esté correcto.
Reí sínicamente.
—Hay mami por Dios. Tú no eres la más indicada para aconsejarme sobre eso.
—Esto es diferente.
—Si. Tienes razón. Es bastante diferente. Al menos Nick no es casado.
Ella niega con la cabeza y sin decir media palabra se retira. Cubrí mi rostro con las manos, sintiendome culpable. En ese momento suena el timbre.
«—Para la señorita Cyrus —dice una voz en el pasillo. Fruncí el seño.
—¿Para mi? —dije para dirigirme hacia el pasillo.
—Te llegó esto —dice Jeremy.
Mi rostro se ilumina al ver el grandioso arreglo de flores.
—Está hermoso —corrí hacia las flores y aspiré su rico olor.
¿Te las mandó Nick? —pregunta cerrando la puerta, pero el hombre detiene la puerta.
«—¡Hay más!
Abrí los ojos con asombro, abservando cómo los trabajadores entraban con ramo tras ramo de diferentes arreglos. Tantos que poco a poco se iba llenando la sala.
—Esto es absurdo ¿para qué tantas? —la sala parecía un hermoso vivero de flores y rosas— a Nick se le ha pasado la mano.
Miré hacia Justin, quien me miraba sonriente.
—Si —sonreí. De pronto suena el timbre de nuevo. En lo que Jeremy camina hacia la puerta, Justin aprovecha para acercarce a mi.
—¿Te gustó?
—Todo está.. —sonreí sintiendo un cosquilleo en el estomago y como mi corazón parecía saltar— gracias.
El sonríe y me roba un beso.
—Buenos Días —saluda George.
—¡Vaya! ¿y todas estas flores? —pregunta una voz chillona. No tenía que girarme para reconocer a la emitente de esa voz, Caitlin.
—Se las mandó Nick a Miley.
—Se nota que la quiere ese muchacho. Esto es increíble.
—Todo está tan bello —dice y dirige su mirada hacia Justin— ¡Justin! —se acerca y lo abraza, besándole la mejilla exageradamente. Maldita— Vaya Miley. Un hombre que haga esto por una mujer es único. Se ve que está enamorado.
Sonreí.
—Si, ¿no?
—Cómo quisiera algo parecido —dice mirando finalmente a Justin— Justin acuérdate en lo que quedamos. Me ibas a mostrar la ciudad —el suspira.
—Se me había olvidaddo
—Ah. Pero no las pasamos de maravilla ayer ¿verdad?. No sabes Miley, Biebs es todo un caballero. Es tan amable. Me hizo sentir tan... bien —dice mirando sonriente a Justin y dejando a entender algo más.
—Tenía planeado otra cosa —dice y me mira, pero depejé la mirada.
—Ah.. entonces seria para otro día.
—¿No me dijiste que tenías la tarde libre Biebs? Ve acompáñala. Ya que eres tan amable y no sé qué. ¿cómo la dejas plantada?
El niega con la cabeza, mirándome seriamente.
—Claro ¿en que estaría pensando?
—Gracias —toma con fuerzas el brazo de Justin— ¿y tu Miley? ¿tienes planes para hoy?
Miré fijamente a Justin.
—De hecho si. Tengo que agradecerle a Nick su regalo —mentí.
—¡Suerte! Pero cuidadito contigo ¡eh! —jala a Justin- vamonos, tengo tantas cosas —ella le sonríe y lo mira como intentando seducirlo— tantas cosas que quiero conocer...