Esa noche YoonGi estaba, para variar, estudiando. Tenía que entregar una maqueta y un informe bastante importantes la próxima semana y a pesar de tener tiempo el fin de semana suficiente como para no tener que desvelarse luego de llegar del trabajo, él muy bien sabía, que apenas su turno del viernes terminara, cada segundo de su tiempo sería dedicado a cierto chico mimado que amaba revolotear a su alrededor pidiéndole mimos e insistiendo por jugar con él.
Sonrió como tonto frente a la computadora por visualizar esa imagen y suspiró, ah, estaba realmente loco por ese chico.
Llevaba un avance considerable en su informe cuando decidió que tal vez un pequeño respiro para preparar café no sería algo malo, después de todo, mañana su primera clase era pasadas las once de la mañana, por lo que esa noche podría ir a dormir más tarde de lo usual sin que eso significara estar demasiado somnoliento como para prestar atención en clases al día siguiente. Se levantó de su sitio en el piso, frente a una pequeña mesita de centro y el televisor de la sala y sintió sus huesos tronar al haber estado tanto tiempo en la misma posición. Echó un vistazo rápido al corto pasillo donde estaba la habitación que compartía con JiMin por mera curiosidad para saber si el moreno seguía dormido o ya había notado su ausencia en la cama. Al notar que no se escuchaba ruido desde el cuarto, siguió su camino a la cocina, donde puso la tetera eléctrica y se dedicó a esperar. Suspiró cuando notó el clima que hacía afuera, había llovido todo el día y al parecer la lluvia en vez de parar en la noche, se había intensificado, tanto así, que parecía que una tormenta se avecinaba.
No eran buenas noticias para YoonGi, eso significaba que tendría que salir con lluvia o con un frío temible al otro día, y que salir de la cama, sería algo que le tomaría bastante, bastante tiempo.
Cuando el agua estuvo lista preparó su café y volvió a la sala preparándose para seguir con sus obligaciones escolares, se sentía satisfecho con su avance, obviamente aún le faltaba y faltaban las correcciones que solía hacer al final, pero había avanzado más de lo que esperaba y eso le ponía feliz. Ya se había acomodado, tenía su café listo, la frase con la que seguiría el párrafo que escribía lista en su mente, y estuvo a punto de comenzar a teclear cuando, como si hubiera sido una predicción, un fuerte estruendo azotó el departamento. Un trueno acababa de confirmarle sus suposiciones, sería una larga noche de tormenta, café y tarea para él. Yupi.
— ¿PinkyPoo?
O bueno, tal vez no tan así.
— ¿Minnie?, ¿Qué pasa? —Preguntó con preocupación cuando vio la figura del menor asomándose por el pasillo, con un puchero lastimero en los labios y el cuerpo envuelto en una manta color azul cielo.
—Te fuiste mientras dormía —Recriminó el menor arropándose con fuerza, intentando mantener un poco más del calor de las gruesas mantas de su cama, en su pequeño cuerpecito.
—Te comenté que tenía tarea que hacer, Mochi, no pensé que fueras a despertarte —Se justificó el mayor encogiéndose de hombros con una sonrisa culpable, en verdad, sí había esperado a que JiMin se durmiera para luego, sin que este se diera cuenta, levantarse, pero en su defensa, si se lo decía a JiMin el menor iba a querer desvelarse con él, y YoonGi no quería eso.
—Eres un PinkyPoo Hyung muy ma... —La frase de JiMin fue cortada por otro trueno, el segundo de la noche.
El menor, completamente asustado y perturbado, corrió a los brazos de su mayor presurosamente, buscando un refugio donde pudiera sentirse a salvo de todos esos ruidos que le hacían temer tanto. Para cuando llegó a la altura en la que el mayor se encontraba, YoonGi ya tenía sus brazos abiertos y extendidos para él, esperándole preparado para llenarle de mimos y que así, su miedo pasara.
—Shh, ya bebé, está bien —Le consoló el mayor meciéndolo rítmicamente a la vez que acariciaba su espalda— no pasa nada, no pasa nada, mi amor, son sólo truenos.
—S-sé... sé que sólo son truenos —Respondió JiMin hundido en su sweater— p-pero de todas maneras me asustan.
YoonGi soltó una pequeña risita enternecida, la vocecita amortiguada de JiMin le hacía derretir de ternura, aun cuando el menor estaba que temblaba del miedo— Lo sé, lo sé —Asintió con calma.
Unos segundos más de abrazo y JiMin ya se sentía lo suficientemente tranquilo como para separase del pelinegro. Miró a su mayor de forma completamente adorable a través de sus pestañas y le hizo ojitos casi inconscientemente.
— ¿Puedo quedarme aquí? —Preguntó apresando el sweater de YoonGi en sus pequeños y regordetes puños— ¿Por favo~r?
— ¿No prefieres volver a la cama, bebé? —Preguntó el mayor preocupado— Hace frío aquí, y es tarde.
—Es que... —JiMin jugueteo nerviosamente con sus manitas y vaciló— No quiero estar solo pero... no quiero interrumpirte tampoco, PinkyPoo —Explicó con timidez— ¿Puedo?
YoonGi suspiró, después de todo, nunca podría vencerlo— Sabes que sí.
— ¡No le molestaré en nada, PinkyPoo Hyung! —Prometió el menor entusiasmado para, seguido de eso, acomodarse entre las piernas de YoonGi, colgándose de su cuello como un bebé a la vez que escondía su rostro en el hombro del mayor, soltando bajos suspiros de satisfacción y arropándose fuertemente con su manta— ¿PinkyPoo no tiene frío? —Preguntó con los ojos casi cerrados por el sueño.
—No Minnie, estoy bien, gracias.
La siguiente media hora transcurrió de esa manera, el mayor estaba concentrado en escribiendo en su trabajo, y como el menor prometió, no molestó para nada –aunque en realidad nada, nada de lo que JiMin hiciera molestaba a YoonGi, así que técnicamente, nunca molestaba-, apenas soltaba pequeños suspiritos asustados cuando un trueno sonaba, pero luego de eso volvía a acurrucarse abrazando más fuertemente a YoonGi y se quedaba en silencio de nuevo.
— ¿Estás despierto, pequeño? —Preguntó el de piel pálida cuando consideró que ya había adelantado suficiente trabajo por esa noche. JiMin le respondió con un ruido que indicaba que estaba más dormido que despierto, pero al menos una parte de él estaba aún consiente— Vamos a la cama, cariño —Indicó cerrando la laptop para luego, con un movimiento increíblemente flexible y que necesitaba bastante fuerza y resistencia, pudiera levantarse del piso sin tener que hacer al menor levantarse por su propia cuenta.
Caminó hasta la habitación con cuidado de no remover mucho a JiMin y cuando llegó, con el pequeño sano y salvo, lo dejó en la mullida cama para luego arroparlo con cariño. Seguido de eso vio vuelta a cama quitándose las pantuflas de dos cortos y rápidos movimientos y se sumergió entre las sábanas con JiMin. Antes siquiera de terminar de taparse, ya tenía al menor firmemente afianzado contra su cuerpo de nuevo, a la vez que él le rodeaba con sus brazos y lo acercaba aún más a su cuerpo.
— ¿No te irás otra vez, PinkyPoo? —Preguntó JiMin con los ojos aún cerrados y la voz pastosa y somnolienta.
—No Minnie, tranquilo —Aseguró YoonGi hundiendo su nariz en los rosados cabellos del menor, los cuales olían a fresas y vainilla, haciéndole suspirar de placer y la sensación hogareña que le producía.
—No te vayas nunca, ¿sí? No me dejes —Pidió el menor tristemente en un tono tan bajo que si no fuera por su cercanía, no lo hubiera escuchado.
—Nunca —Prometió el mayor comprendiendo que ya no se referían a esa noche, si no a algo mucho más grande— Siempre voy a estar aquí, Minnie, no me iré jamás.
— ¿Aunque todos traten de separarnos? —Probó una vez más JiMin, enserio quería estar muy seguro de la respuesta de YoonGi— ¿Estás seguro, segurísimo?
—Aunque Dios mismo venga a intentarlo —Declaró YoonGi con confianza— Ahora duerme, es tarde —Recomendó el mayor.
—Sí... sí, te amo, PinkyPoo.
—Y yo te amo a ti, JiMinniePoo.
¿Cómo no hacerlo?
🌸
PinkyPoo actualizaciones locas me llaman😄😂
Yo en realidad no iba a actualizar hoy pero resulta que mañana no iré a la escuela así que tenía un tiempo libre y dije "¿Por qué no?" y aquí me tienen💕
No tengo mucho que decir en esta nota la verdad, probablemente hayan muchos errores, escribí bastante rápido, pero ya cuando acabe toda la novela me dedicaré a editar para que así quede definitivo.
Estas semanas intentaré escribir lo más posible, no sólo en esta historia si no en todas, incluso en mis proyectos que aún no han sido revelados, porque probablemente me operen pronto y ahí ya no podré escribirles tanto, así que me esforzaré para poder tener material que publicar en ese periodo💕💕💞
Por lo demás, creo que eso es todo.
Como siempre les digo, recuerden cuidarse, comer bien, dormir bien, tomar mucha agua porque es bueno para la salud y no se sobreexigan, nadie puede hacerlo todo, y un fracaso no significa nada entre todos los logros que trae la vida💕 no sean como JiMin y como la escritora, cuiden su salud y cuiden su cuerpo porque sólo tienen uno🌸
¡PinkyPoo!💗
-Nico
#CajitadeLeche.