El sol se asomaba por el horizonte, la mayoría de las personas dormían mientras el sol apenas salía, pero una joven amazona de apenas 12 años miraba el escenario desde el techo del gran templo de escorpio, sus ojos contaban las pocas estrellas que se encontraban decorando el cielo; sus pensamientos hacían preguntas algo tontas, pero eso la entretenida
??? ^como se vera el santuario desde el cielo?^
???: Sage!! baja de ahí quieres
Sage *baja la mirada* ya voy Kardia, no te alteres, bajo dentro de poco
La recién llamada sonreía, le divertida la sobreprotección de su maestro, ella se podía cuidar sola y el lo sabia
Kardia: Sage!!!
Sage: ya voy, ya voy!!!
Sage baja con gracia del techo y entro al templo
Kardia: cuantas veces te he dicho de-
Sage: no subir al techo del templo. Deja los sermones tuyos, se cuidarme sola
Kardia: eres muy joven para estar sola por ahí
Sage: oh vamos!! Regulus es un año menor que yo y es un caballero dorado, si el es un caballero dorado a esta edad, yo puedo cuidarme sola, no lo puedes negar
Kardia: no, no puedo, pero sigues siendo joven y no tienes ni una armadura para protegerte, entiende que me preocupas mucho pequeña
Sage *hace un puchero* no me digas pequeña, soy casi de tu tamaño y de seguro soy mas fuerte que tu o que cualquier caballero
Kardia: como digas, pequeña *le acaricia la cabeza* vamos a comer algo
Sage: si, vamos
Los dos se trataban así, eran como hermanos, Sage admiraba Kardia desde el primer día que se encontraron y el caballero amaba a la joven por su forma de actuar, por su determinación para convertirse en la mas fuerte, el encantaba eso de ella y estaba seguro que eso la llevaría a ser la mejor
Ahora los dos se encontraban a las afueras de unos de los pueblos que están cerca del Santuario con un montón de manzanas y dulces
Sage *le da un mordisco a una manzana* tienes que ir a ver al patriarca?
Kardia: si, tienes el día libre
Sage: genial, podre terminar mi libro, Degel esta algo molesto porque no se lo he devuelto
Kardia: sabes, vi una biblioteca aquí cerca
Sage: si, es nueva, vere que encuentro hoy allí, tal vez alla un libro sobre mitos o sobre las estrellas
Kardia: tienes algo con las estrellas
Sage: ya te dije, se como leer las estrellas, me da intriga lo de hace unas semanas
Kardia: lo del mensaje?
Sage: si, algo oscuro esta en el Santuario y no puedo identificar a la persona o la cosa
Kardia: no debe ser nada
Sage: si *se termina la fruta* mejor vete, yo llevare las cosas al templo
Kardia: ten cuidado, si
Sage: lo vuelvo a decir, se cuidarme sola Kardia, tu mantente tranquilo
Sin decir nada mas los dos se fueron por dos caminos diferentes, Sage se fue al templo de su maestro y Kardia se fue directamente a donde el patriarca. Una vez que Sage hizo lo que tenía que hacer, se dedico a leer a las afueras del templo, ya la mayoría de los caballeros estarían entrenando así que no la molestarían mientras terminaba el libro prestado
Sage *leyendo*
???: Hey!!
Sage: eh? *para de leer y levanta la mirada* Señor Sisifo, pasa algo?
Sisifo *frio* y Kardia?
Sage: esta con el patriarca
Sisifo: gracias Sage *se va*
Sage ^al fin, se fue, que frialdad, pensé que Sisifo era la persona mas buena en el Santuario. Ja!! puras mentiras^ *sigue leyendo*
La peli-azul siguió en su lectura hasta terminarla, se paro de donde estaba y se fue hacia el templo del amigo de su maestro, Degel de acuario
Sage *llega a la casa de acuario* Degel
Degel: que quieres?
Sage: termine el libro que me prestaste, te doy la gracias *le entrega el libro
Degel: no importa, ya puedes irte
Sage: adios *se va* ^ahh! por que todos son así conmigo? apenas me dirigen la palabra o son fríos conmigo, por que? por que?^ *llega al templo de escorpio*
Sage suspira y entra, pasa por todo el lugar, hasta llegar a su habitación
Sage:...... se tarda demasiado *mira la ventana* por que todos son así? *se quita su mascara* ni Albafica le tratan mal, pero a mi, parezco un pedazo de carne podrida, me dejan botada y me pisan hasta ser nada *suelta unas lagrimas* haría lo que fuera para que ellos sientan lo que yo siento
Sin poder evitarlo, la joven amazona comienza a llorar, ahogando sus ganas de gritar a los cuatro vientos su dolor
Sage ^ya no quiero sufrir mas, por favor, no quiero, no quiero, quisiera que todos entendieran mi dolor, que dejaran de ser tan fríos conmigo^
Siguió llorando, hasta que no le alcanzaron mas las lagrimas; sus ojos se encontraban casi al borde de arder, sus mejillas estaban mojadas y su respiración era entre cortada
Sage ^quisiera que alguien me apoyara y así no estar sola, tener a un amigo, sería bueno^
Ese fue el capitulo de hoy. Perdonen si me tarde, es que los problemas aquí en Venezuela son mas grandes cada vez, ademas de que reescribir las partes es complicado, espero que les halla gustado
Sayonara!~