El día había amanecido soleado, en realidad, nada especial para la época del año en la que se encontraban, no había pájaros "cantando" en su ventana ni un "agradable" rayo de sol dando sutilmente contra su rostro, ni tampoco aroma a hotcakes en el ambiente.
Sin embargo, era un día muy, muy especial.
—Minnie... Hey... —Podía escuchar a lo lejos entre dormido cómo alguien le hablaba, sin embargo, su sueño era más poderoso y no hizo más que removerse incómodo entre las mantas— Bebé... JiMinnie, despierta —Pero esa voz no se cansaba.
E iba a seguir ignorando por completo la presencia que no le dejaba dormir en paz, sin embargo, la sensación algo esponjosa y húmeda de algo presionando contra diversas partes de su rostro y cuello le hicieron reír suave aun cuando su subconsciente quería seguir en estado inerte.
—Ah, vamos, ya estás despierto —Se quejó risueña la misma voz, esta vez, JiMin no necesitó prácticamente nada de tiempo para reconocer quien era.
—PinkyPoo... —Su voz salió somnolienta por ser la primera palabra que emitía en el día, y por eso se ganó una risa por parte de YoonGi— PinkyPoo —Una vez sus ojos se dignaron a dejarle ver algo, el rostro de su mayor, demasiado cerca del suyo le hizo sonreír ampliamente.
—Feliz cumpleaños, pequeño Mochi —Felicitó Min una vez que vio que el menor había vuelto a ser humano.
JiMin parpadeo confundido dos veces y cuando su aturdido cerebro pudo procesar la información soltó un gritito agudo lleno de emoción, mientras que la sonrisa más grande que podía esbozar se hacía paso en sus labios haciendo sus ojos prácticamente desaparecer.
— ¡Es mi cumpleaños!
👦🌸🌈🌸👨
— ¿Minnie? —La entrada del mayor a la habitación fue cautelosa, no era obvio, pero JiMin lo conocía lo suficiente como para saber que YoonGi estaba nervioso, puesto que estaba recargando todo su peso en su pierna izquierda mientras que golpeaba rítmicamente el piso con el pie de ese lado, además, de que tenía las manos entrelazadas "casualmente" en su espalda. Y aunque JiMin estuviera muy, muy cansado, puesto que sus amigos acababan de irse luego de una divertidísima pero cansadora reunión para celebrar su cumpleaños, toda su atención fue centrada en su PinkyPoo Hyung— ¿Estás listo para dormir? —Preguntó a continuación cuando vio que JiMin lo miraba.
—Sípi— Asintió el menor sentándose con las piernas cruzadas en la cama a la vez que abrazaba una pequeña almohada de Rilakkuma en color rosado blancuzco que PinkyPoo Luhannie Hyung le había regalado. Esa tarde había recibido muchos lindos obsequios, PinkyPoo había llenado la sala de globos rellenos con helio de lindas formas y colores, PinkyPoo JungKookie Hyung le había regalado una caja musical colores pastel preciosas, PinkyPoo TaeTae Hyung, un sweater color crema tejido a mano con unos trenzados preciosos que le habían encantado. PinkyPoo Hobi Hyung le había regalado varias libretas y muchos diseños de lápices de colores, desde plumones, hasta lápices tipo acuarela y algunos marcadores con brillos. PinkyPoo Nammie y Jinnie Hyung le habían dado un obsequio en conjunto, el cual había consistido en un paquete con un enorme libro con consejos para dibujar y un parlante casi tan grande como él para que pudiera bailar sin tener que depender de su celular siempre, y por su lado, sus vecinos PinkyPoo Sehunnie Hyung y PinkyPoo Luhannie Hyung le habían dado un juego enorme de diferentes peluches de Rilakkuma en diferentes tamaños, colores y formas. Había sido un día maravilloso y aunque había agradecido muchas veces a cada uno de sus amigos por los regalos, sentía que no era suficiente— ¿Pasa algo? —Preguntó ladeando la cabeza con confusión a la vez que hacía un puchero.
YoonGi sonrió tímidamente y negó con la cabeza mientras que se acercaba al bordillo de la cama, para así sentarse al lado del bajito, PinkyPoo estaba actuando extrañamente tímido y JiMin no sabía si enternecerse por las mejillas levemente rosáceas del mayor o preocuparse— Quiero... quiero hablarte de algo —Explicó lentamente, como si estuviera escogiendo muy, muy bien las palabras que iba a pronunciar a continuación— Pero primero que todo, quiero que recuerdes que no estás obligado a nada, ¿sí? Jamás te obligaría a hacer nada que no quieras, y tampoco me enojaré si dices que no, ¿está bien? —Preguntó mirándole a los ojos de forma suplicante, como si realmente tuviera miedo de que JiMin se sintiera en la obligación de aceptar lo que fuera que YoonGi iba a proponerle.
Ahora sí que JiMin comenzaba a sentirse asustado, y lo demostró claro como el agua con la sonrisa medio forzada e inquieta que le dirigió al pelinegro.
—No te asustes, no es nada malo —Negó de inmediato YoonGi al ver la inquietud en Park— Sólo déjame decirlo todo y luego... luego me dices lo que piensas —Pidió, ganándose como respuesta un asentimiento— Está bien, verás... —Aunque para JiMin era un poco difícil mantenerse tranquilo si YoonGi se veía tan nervioso, como siempre, confió en la palabra del mayor sin siquiera dudarlo, y le dedicó una sonrisa de aliento— Yo... he notado, o sea, uh, es algo un poco obvio, pero, ah, acabas de cumplir 22, ¡Y no es crítica, para nada! Pero, ah, no haces nada fuera de estas cuatro paredes, ¡E insisto, no es crítica, si tú te sientes bien así está perfecto para mí también! Pero... te noto aburrido, y es normal, digo supongo que te gustaría salir más, ver más gente, no lo sé —Los ojos de JiMin se abrieron tan grandes que sintió que se saldrían— ¡No de esa manera! —Negó automáticamente YoonGi, produciendo un suspiro de completo alivio en el menor— Ah, estoy siendo demasiado torpe —Se quejó rascando su nuca nervioso— Lo diré rápido, ¿sí? Después de que no te resultara lo de trabajar, te noto uh, más aburrido de estar aquí todo el día, es obvio, estuviste tres semanas saliendo a diario y volver a pasar el día encerrado no debe ser divertido y... —JiMin soltó una risita divertida, YoonGi estaba dando demasiados rodeos— ¡No te burles! —Puchereó el menor.
—PinkyPoo —El pelirosado tomó las mejillas de YoonGi entre sus manos con ternura— Sólo dilo.
—Sí... sí, está bien —Asintió— Yo aún no te he dado tu regalo de cumpleaños y es porque verás... —YoonGi vio como JiMin abría la boca dispuesto a rebatir lo último y con rapidez le interrumpió— No, aún no te lo doy y es que... la... la universidad abrió un nuevo campus, está a... a dos cuadras del mío y es una facultad de artes —YoonGi tomó aire profundamente y de mentalizó para preguntar lo que venía a continuación— Ellos... ofrecen un programa. Es, uh, a crédito, tiene las clases, materiales, y si pasas la entrevista con sobresaliente puedes postular a muchas becas y... y... —YoonGi volvió a sonreír muerto de miedo mirando sus manos— Es una carrera de diseño gráfico, JiMin. Todo lo que necesitas saber, todas las especializaciones, los técnicos y los talleres que quieras. Yo... podría ajustar mi horario para ir a dejarte y a buscarte, podríamos almorzar juntos en alguno de los campus y... —YoonGi retiró con suavidad y vacilante lo que escondía tras su espalda, un sobre— Está pagada —Finalizó— Llevo pagando desde hace dos años, por... por eso a veces hacía cosas que no te gustaban para tener un dinero extra, además... yo... tomé algunos de tus dibujos y... estás aceptado, con una beca inicial, el primer semestre es gratis, y si tus notas son buenas, será el primer año completo. Yo sé que no tenía derecho de tomar tus trabajos y enviarlos, sé que debía preguntarte antes pero... pero sé lo mucho que quieres esto, JiMin, sé lo mucho que te encanta lo que haces y sé que siempre has soñado con un título universitario... y yo sólo quiero dártelo todo, Minnie. Quiero que no te falte nada, que estés siempre feliz, por eso... por eso lo hice. Lo siento —Y aunque no era el plan inicial y no era para nada lo que había practicado, lo había dicho todo, y se había terminado por disculpar.
Su mirada seguía en el blanco edredón de la cama y se sentía inquieto por levantar la vista. Él sabía el miedo que JiMin le tenía a las personas, más aún a las grandes masas de ellas, le aterraba ser juzgado y entre más personas hubiera en un espacio más posibilidad de rechazo tenía, sabía que esa había sido la razón por la que el menor había decidido hacer un curso por internet en vez de uno presencial. Sabía el miedo al fracaso que atormentaba al menor a la hora de tomar una decisión tan importante como invertir su tiempo, ganas, y el dinero que decía que no era suyo –aunque YoonGi le repitiera mil veces que lo que era de él era también de JiMin- en algo en lo que terminaría por "no ser lo suficientemente bueno". Y aun así YoonGi lo había hecho. Porque JiMin lo merecía.
—Si no quieres no importa Mochi, no pasa nada, puedo devolver esto y estará bien, no es nada sólo...
Su cuerpo rodó por la cama y si no fuera porque pudo ejercer la fuerza suficiente para detenerse hubiera caído de la misma al suelo dolorosamente. Los brazos de JiMin se ceñían a su cintura con fuerza y lo único que podía divisar entre la mata de cabellos rosa pastel, era el blanco techo de su habitación. Abrazó al chico entre sus brazos y cerró los ojos con fuerza, tomando una respiración profunda al sentir el calor indispensable en su vida que el menor le transmitía, por la forma particular en la que sus brazos lo hacían sentir en casa y por como la respiración acelerada del de cabellos teñidos le erizaba la piel de cuello de manera satisfactoria. Para cuando volvió a abrir los ojos, sentía sus mejillas húmedas de lágrimas, y se sorprendió al saber que no eran suyas, si no, de JiMin, quien lo miraba desde unos centímetros de distancia, con una sonrisa tan grande como era posible y sus pequeños ojitos rasgados llenos de lágrimas que no dejaban de rodar escasos milímetros por sus mejillas para luego caer con delicadeza sobre las de YoonGi.
—Te amo.
No supo en qué momento, pero de un segundo a otro, ya no eran sólo las lágrimas de JiMin las que mojaban sus mejillas con furia.
—Yo también te amo, bebé. No tienes idea de cuánto.
🌸
¡Hola!💕
¿Cómo han estado? Espero que bien, y que se estén cuidando mucho💪 no quiero que se enfermen😷
Desaparecí... Otra vez. En realidad hoy no me voy a gastar en explicar por qué ya que si me conocen mi escusa siempre es la misma, la escuela, el hospital, mis cosas locas, nada nuevo, así que no vale la pena. Sólo quería pedirles una disculpa por desaparecer y no avisar nada.
Esta parte fue un poco más larga, no sé si lo notaron, son 1.500 palabras si no mal recuerdo y en realidad no es mucho, pero es más que un capítulo normal de esta novela y es algo así como una mezcla entre disculpas por tardar y agradecimientos porque ¡Ya son 120K de lecturas!🎆 Wah, enserio no creí llegar nunca a tanto, está historia era sólo un pequeño proyecto para matar el tiempo pero con relativamente pocas partes (creo que van 30) ya tiene muchas visitas💕 muchísimas gracias por eso, por tomarse el tiempo de leer💞
Y otra cosita ¡¿Pueden creer que BDYH tiene 1M de visitas?! Yo aún no lo creo, es simplemente tan wow que no lo puedo explicar bien, no tengo palabras para decir lo agradecida que estoy porque al igual que este era un simple proyecto sin grandes expectativas y ahora tiene más de 1.000.000 de visitas y eso es simplemente increible.
También quería contarles que tengo un nuevo fic, por ahora sólo tiene el prólogo pero planeo comenzar mañana, es una obra fluff cómo está, por eso supuse que podría gustarles, y se llama "Tu nombre y el mío", pueden encontrarla en mi perfil💞
Muchas gracias por el apoyo, por los comentarios y las visitas, gracias por regalarme un poquitito de su tiempo y por aguantarme😄
Recuerden cuidarse, comer bien, hidratarse, dormir las horas correspondientes y no descuidar su salud. Nico les desea siempre lo mejor en sus metas y lo que estén haciendo en estas fechas.
Nos vemos espero que pronto💗 voy a empezar a usar corazones distintos porque siempre uso los mismos dos😓
¡PinkyPoo!💜
-Nico
#CajitadeLeche.