En mis momentos de soledad
le platico a mi almohada,
y le comento de ti.
Le narro como eres,
y le pregunto si tengo alguna oportunidad.
Ella muy amablemente me dice:
¿Y todavía no le has dicho?
Y siempre le termino contestando,
"Tengo miedo que se vaya alejar."
Al verme tan desconsolado,
me abraza y me dice que lo tengo que superar,
¿Pero cómo retroceder si ni mi mente te deja de pensar?
Es tan absurdo el no poder dominar
un sentimiento que parece tan sencillo;
Sin embargo, mi amor está tan tapado como Lustitia,
y parece ser que mi alma esta obstinada con tenerte;
sí, tener una sonrisa de tus ojos que me corresponda
con tener una mirada tuya
que diga que sientes esto que siento por ti.