➤ Capítulo 6: Día de hermanos.
Narra ______:
-Es una cita.
-Que no lo es -repliqué.
-Claro que si...
-¡Que no!
-Sí, lo es. Porque si dos personas van a un mismo lugar, juntos, para pasar un rato agradable... es porque están en una cita -insistió mi hermano-. No quiero que tengas una cita con Sasuke.
-¡Qué no voy a tener una cita con Sasuke! -chillé mientras sentía como mis mejillas comenzaban a sonrojarse.
-Te sonrojaste, eso significa que me estás mintiendo, no irás a esa cita y punto -dijo sobreprotectoramente mientras entrecerraba los ojos-. Por mucho que Sasuke me caiga bien... estás muy chiquita para tener citas y...
-¡Que no es una cita! Además, Itachi va a acompañarnos -dije tranquila para que dejara de decir puros disparates.
-¿¡Itachi irá a vuestra cita!? -exclamó sorprendido a lo que me golpeé la frente con la palma de mi mano, en señal de facepalm-. ¿¡Por qué él va y yo no? -dijo ahora cambiando su expresión por una de enfadado.
-¡Te digo que no es una cita! Solo iremos a entrenar un rato e Itachi nos ayudará, eso es todo -expliqué.
-¿Por qué entrenas con Itachi y no conmigo? Se supone que yo soy tu hermano y no él, eso es traición -me acusó con el dedo-, me hieres, _____, me hieres -dijo simulando estar "ofendido".
-¡Pues entonces ven con nosotros y listo! ¡Pero apresúrate y no molestes! -grité apartándolo de la puerta y saliendo hacia el lugar de encuentro.
-¡O-oye, espérame, enana! -dijo corriendo detrás mío.
-Entonces... ¿esto es una cita? -murmuró Shisui confundido, mientras caminábamos los cuatro juntos por las calles del distrito de los Uchiha.
-¡Que esto no es una cita! -le gritamos los tres al mismo tiempo.
-Ya basta de hablar, ¿por qué no hacemos lo que teníamos planeado? Entrenar -dijo Sasuke algo fastidiado, mirando a los otros dos.
-Ya vamos, pero no te enojes, porque te haces viejo, cuñadito... -dijo Shisui mientras le revolvía el cabello.
-¡Que ya te calles de una buena vez! -grité entre enojada y sonrojada.
-Pero...
-¡QUE YA BASTA!
En los campos de entrenamiento
-¿Qué nos vas a enseñar?
-Bien, según tengo entendido, ambos ya saben el Katon Gōkakyū no Jutsu a la perfección, ¿no?
-Sí -asentimos en dirección de Itachi.
-Bueno, lo siguiente es...
-¿Es...?
-...
Silencio. Itachi hizo silencio como si buscara las palabras correctas para decir algo.
-¿Es...? -volví a decir, incitándolo a seguir.
-Bueno, pues... no lo sé -dijo con simpleza mientras se encogía de hombros.
Una gotita al estilo anime se hizo presente en nosotros tres.
-¿A qué te refieres con qué no sabes? -le exigió su hermano.
-La verdad no se me ocurre que enseñarles, ¿y a ti Shisui?
-¿E-eh...? Pues, no sé. De hecho yo solo vine a acompañarlos -dijo sincero.
-Y yo a ayudarlos, por cierto ¿a qué venían ustedes dos? -interrogó Itachi.
-A entrenar, pero como venías tú, suponía que nos enseñarías algo nuevo y especial -dije dudosa.
-¿Entonces eso significa que no hay entrenamiento? -intuyó Sasuke.
-¡Ya se! -exclamó Shisui, captando nuestra atención-. ¿Por qué no pelean entre ustedes? Así podríamos decirles en que mejorar y esas cosas, ya saben -dijo restándole importancia.
-¿Pelear... contra ti? -murmuramos los dos mientras nos mirábamos.
-¿Y si nos lastimamos? -añadí yo.
-No creo que eso pase, además no saben muchos jutsus -dijo mi hermano-. ¿Qué esperan? ¡Empiecen de una vez!
-¡Sí!
Nuestros hermanos mayores se alejaron del campo de batalla mientras nos observaban fijamente. En ese instante, Sasuke y yo nos pusimos en posición de lucha, uno frente al otro.
-No quiero lastimarte... -murmuró Sasuke en mi dirección.
-Pues yo no me contendré -dije sonriendo en su dirección-. Aunque no lo creas, siempre esperé este momento, Sasuke.
-¿E-eh...?
-Sí, verás, como hijo del líder del Clan Uchiha y de la Policía Militar de Konoha, eres alguien importante, Sasuke. Quiero probar que tan fuerte soy contra uno de los hijos de Fugaku-Sama -dije halagándolo, se podría decir.
Él solo se quedó estático en su lugar, quizás analizando lo que acababa de decirle, así que continué:
-Si no empiezas tú, lo haré yo -y dicho eso corrí en su dirección, dispuesta a atacarlo.
La pelea había comenzado, ni bien llegué cerca suyo le di una patada que bloqueó fácilmente con su brazo izquierdo. Proseguí con darle un golpe en la cara pero también lo bloqueó agarrándome la mano, con mi otra mano hice un puño e intenté darle de lleno pero también lo bloqueó, tal y como lo hizo con mi otra mano. Y así nos quedamos por unos segundos, él agarrando mis puños en mis intentos fallidos de intentar golpearlo y yo, inmóvil en mi lugar.
Lo miré fijamente a los ojos y vi como parecía un tanto confundido, acerqué mi cara hacia la suya y pareció confundirse aún más de lo que ya estaba. Aprovechando su distracción, hice un ágil movimiento: puse mi pie derecho en medio de los suyos, para luego empujarlo, haciéndolo caer de un sentón en el suelo.
Sonreí algo burlona al verlo en el suelo, mientras que él solo me veía enojado por lo que había hecho.
-Eso fue trampa -exclamó levantándose.
-No es mi culpa que te distrajeras, Sasuke-Kun -dije burlonamente el apodo que le habían puesto sus "admiradoras".
-¡Eso, mi hermana es la mejor! -gritaba Shisui desde lo lejos, mientras que Itachi solo se mantenía serio.
Sonreí en su dirección y por el rabillo del ojo noté como Sasuke se acercaba corriendo hacia mi. Yo también hice lo mismo y le di un golpe en el estómago, o al menos eso intenté. De nuevo me había bloqueado, a lo cual fruncí el ceño. Patada, golpe, golpe, patada, codazo, golpe, patada, todo lo bloqueaba.
-¡Vamos, Sasuke! ¿Por qué no me atacas? -pregunté frunciendo el ceño al darme cuenta de que solo bloqueaba mis golpes, más no hacía ningún intento por atacarme.
-Ya te lo dije, no quiero lastimarte -dijo simplemente.
Eso solo me hizo enojar, así que intenté algo que había leído en uno de los libros de papá. Acumulé un poco de Chakra en mis pies y manos, solo un poco bastó para que mi velocidad aumentara aunque sea un poco más. Seguíamos en lo mismo, yo atacándolo con taijutsu y él bloqueando mis golpes, aunque pude notar como se le dificultaba más que hace unos instantes.
En un rápido movimiento logré golpearlo en el estómago, haciéndolo caer. Sonreí victoriosa de haberlo golpeado aunque sea una vez, después de todo, él era considerado un as en el taijutsu.
Pero lamentablemente la sonrisa me duró poco, pues en ese lugar ya no se encontraba Sasuke, sino un tronco.
-¿Sustitución...? -murmuré y me di vuelta en mi lugar para ver al azabache justo detrás de mí, sentado tranquilamente en una roca-. Tsk, creo que es obvio que me ganas en taijutsu -comenté-. Entonces me toca hacer algo diferente.
Di un salto hacia atrás e hice unas posiciones de manos que tanto como Sasuke y los otros Uchihas presentes, reconocieron a la perfección. Él me imitó lo más rápido que pudo y ambos nos preparamos para ejecutar aquel poderoso jutsu.
-¡Katon: Gōkakyū no jutsu!
Ambas bolas de fuego chocaron entre sí en el medio de nosotros, pero ninguna estaba dispuesta a ceder, ambas seguían ahí. Traté de mantenerlo lo más que pude y duró más que la vez anterior, cosa que me extraño un poco ya que había usado casi la misma cantidad de Chakra.
Después de un momento, sentí como un poco de polvo proveniente del suelo entraba en mis ojos, carajo... ¡Qué suerte la mía! Esto sí que era tener mala suerte.
Cerré los ojos con fuerza tratando de que no me doliera tanto pero lo único que logré fue desconcentrarme, perdiendo así el control del jutsu.
Mi bola de fuego se desintegró en el aire, mientras que la de Sasuke seguía avanzando hacia mí, limpié rápidamente mis ojos pero aún no podía ver a la perfección. Sentía como la bola de fuego venía en mi dirección y quise esquivarlo pero no sabía en qué dirección ir.
De pronto, sentí como me elevaba del suelo, esquivando así aquel jutsu. Luego sentí como caía poco a poco y derrapaba en el suelo, lastimándome el brazo en el que había "aterrizado".
Abrí los ojos un poco confundida, pues no sabía bien lo que había pasado. Todos estábamos en silencio, y ahí me di cuenta de que Itachi y Shisui estaban al lado nuestro, con cara de preocupados y sorprendidos.
Nadie de nosotros habló por un rato, lo que me dio tiempo a limpiarme bien los ojos. Ni bien pude ver, observé como los tres Uchiha me miraban cada uno a su manera.
Sasuke me miraba incrédulo, Itachi me miraba sorprendido, y mi hermano me miraba algo preocupado. Yo solo los observé curiosa, hasta que Sasuke rompió el silencio.
-______, ¿desde cuando tienes alas?
-¿¡E-eh!? -pregunté sorprendida, ¿a-alas...?
Como sabrán, no sé narrar peleas .-. pero hice mi mejor esfuerzo(¿
I am sorry ;-; perdón la tardanza xD pero se habrán dado cuenta de que... ¡Shisui aún no se despide de rayis!
Se que dije que se despedirían, pero, amo a Shisui como ustedes y aún no lo quiero matar xD
Ahora, la parte wtf... ¡ALAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS! LA RAYIS TIENE ALAS OMG!!!!!!!!
Adivinen porqué :v y dedicaré un cap uvu
¡Nos vemos! n.n
Bч: ᥒoᥣxᥒgᥱrhᥙmᥲᥒ 🌺