Cristal Adams, habladora, carismática, bromista, inteligente y algo alocada, debuta en sociedad a sus dieciocho años recién cumplidos con expectativas de encontrar un hombre bueno con el que poder congeniar, al que le tenga aprecio y que le haga olvidar... lo que a ella le parece totalmente inolvidable.
Y lo encuentra.
Pero de un momento a otro su dote se esfuma al igual que todo el dinero de la familia.
Su padre es mayor y sus hermanas son lo que más ama en el mundo.
No puede permitir que nada les pase, de ninguna manera. Y parece que Dios está de su parte porque le manda la solución.
Situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas.
¿Pero estará ella dispuesta a llevarlas a cabo sabiendo que hacerlo significaría acabar unida a aquel que tanto daño le hizo?