(Penúltimo capítulo)
En un auto tres jóvenes iban platicando entre ellos.
Si creo que es buena idea, dijo Vegueta.
Entonces señor por favor déjenos en...., decía Gokú.
Mientras tanto:
En un modesto gimnasio un anciano dirigía el entrenamiento de un grupo de jóvenes.
Muy bien chicos así es la técnica, decía el anciano mientras caminaba supervisando el entrenamiento de sus discípulos.
Maestro, dénos un descansito, decía un calvo.
Krilín si quieres participar en un campeonato internacional como lo han hecho Gokú, Vegueta y Milk, tienes que entrenar muy duro, decía el anciano.
Pero maestro, los que van a ese campeonato son los jóvenes que están en esa "Casa Z", dijo Yamcha.
Pues eso ya no será así, dijeron Gokú y Vegueta mientras Milk sonreía.
¡Chicos¡ dijo el anciano maestro y sus amigos.
¿Los sorprendimos?, dijo Vegueta.
Claro, ¿qué hacen acá?, dijo Ten mientras miraba a los jovencitos que tenían sujetando con sus manos sus maletas.
¿Y esas maletas?, dijo Piccolo.
No es obvio, volvimos, dijo Gokú.
¿Qué?, pe...pero aún no cumplen los dos años, decía Krilín.
Renunciamos, dijo Milk con calma.
Quéeeeeeeeeeee, dijeron todos alarmados.
¡Renunciaron¡ dijo el anciano maestro sorprendido.
Así es maestro, es mas ustedes son los primeros en saberlo, dijo Goku sonriendo.
¿Y lo dicen así de tranquilos?, dijo Yamcha.
Si, porque volvimos a ser libres, pero el motivo por el que estamos acá es otro, ¿podemos hablar con usted maestro?, dijo Vegueta.
Claro hijos, dijo el anciano.
¿Volverán al gimnasio verdad?, dijo Krilín sonriendo.
Si el maestro lo permite por supuesto que sí, pero ese no es el motivo por lo cuál queremos hablar con el maestro, dijo Milk.
Claro que lo permito, ustedes siempre tendrán las puertas abiertas aquí, pero acompáñenme a mi oficina, ya me intrigaron muchachitos, dijo el anciano sonriendo.
Los tres jóvenes y el anciano entraron a su oficina mientras los demás jóvenes platicaban entre sí.
¿Qué será lo que quieren hablar con el maestro?, decía Yamcha.
No tengo la menor idea, lo que si me tomo por sorpresa fue su renuncia a esa famosa casa, decía Ten.
A mi también, dijo Krilín.
Pues su motivos abran tenido para renunciar y en parte es mejor ahora que tendremos a los ganadores del torneo internacional con nosotros y a un semifinalista el prestigio del gimnasio crecerá, decía Piccolo.
Es cierto, con la presencia de ellos todos nos beneficiamos, ya que de seguro muchos sponsor vendrán al gimnasio a verlos y de paso verán nuestros talentos, decía Ten.
Y con sponsor tendremos más trabajo y dinero, dijo Yamcha mientras los demás jóvenes asentían.
Oficina:
Los tres jovencitos le platicaban su proyecto a su anciano maestro.
La idea es muy buena, pero yo ya estoy muy viejo para hacer todos los trámites y estar de aquí para allá buscando nuevos talentos, además no cuento con el capital suficiente, hacer una casa como la "Casa Z", es un gasto millonario, dijo el anciano.
Pero podemos conseguir auspiciadores, dijo Vegueta.
Si eso haremos y en cuanto a buscar talentos y encargarse de los trámites déjelo a nosotros, usted será el dueño y presidente de esta nueva casa para los nuevos talentos de las artes marciales la modalidad de reclutarlos no será solo en los pueblos céntricos sino en todos los rincones de nuestro país, la idea es que todos tengan acceso a desarrollar su talento y más que un buen físico lo importante será el talento, dijo Gokú.
Además está nueva a casa a diferencia de la otra el internamiento solo será para los jóvenes de pueblos distantes los jóvenes que pueden ir y venir de sus casa los harán a diario, además no se les prohibirá la comunicación con sus familiares y mucho menos será un requerimiento para estar en ella ser soltero y no tener ningún tipo de compromiso mientras sea parte de la casa, dijo Milk.
No queremos repetir lo que hicieron con nosotros, dijo Gokú.
Pues es una idea muy buena, nunca me pareció correcto que solo hubiera una sola casa que preparara a los chicos para torneos internacionales al ver mas casas como la "Casa Z", dará más nivel a nuestros luchadores, pero el conseguir auspiciadores y el dinero para la remodelación del gimnasio nos tomara tiempo, dijo el anciano.
No tanto si los empezamos a buscar a partir de ahora, dijo Vegueta.
¿Qué dice maestro se une a este sueño?, dijo Milk.
Claro que me uno muchachos, dijo el anciano sonriendo.
Entonces abra que comunicárselo a los demás para que nos apoyen en la búsqueda de auspiciadores, aunque tal vez ya tengamos uno, dijo Gokú.
No Kakaroto dirás tres, dijo Vegueta.
¿Tres?, dijo el anciano.
Si supongo que Kakaroto está pensando en la constructora de su padre y yo pues estoy pensando en los negocios de mi padre y en Corporación Cápsula, aunque tal vez con tres auspiciadores es aún poco para iniciar nuestro sueño, al menos es un buen inicio, dijo Vegueta sonriendo.
Luego de algunos minutos los jóvenes y su maestro salieron a darles la noticia a sus demás amigos quienes recibieron felices la idea.
Es una gran idea, dijo Krilín.
Claro que la apoyamos, dijo Piccolo.
Desde ya empecemos a buscar auspiciadores por este maravilloso sueño, dijo Ten.
Pues cuente con el apoyo del negocio de mi padre, aunque tal vez no sea mucho en algo servirá para llegar a la meta, dijo Yamcha.
Luego de la plática con su maestro y amigos de gimnasio los jóvenes parieron a sus casas.
Casa de Vegueta:
Una jovencita peli azul se encontraba junto a la familia del joven cabello de flama esperando su llegada.
¡Hijo bienvenido, dijo su madre abrazándolo al verlo entrar con su maleta a la lujosa sala.
¡Gracias mamá¡ dijo Vegueta.
Me sorprendió tu llamada, pero me da alegría tener nuevamente en casa hijo, dijo el padre del joven cabello de flama.
A mi también me da gusto estar acá papá, dijo Vegueta recibiendo el abrazo de su padre.
Vegui, dijo la peli azul sonriendo.
Linda te extrañe tanto, dijo Vegueta ahora abrazando a su novia.
Luego de la calurosa bienvenida Vegueta le platico a su familia sus nuevos proyectos mientras estos escuchaban con atención todo.
Minutos después:
Pues nos parece una gran idea y claro que te apoyamos hijo, dijo el padre de Vegueta.
Y la corporación de mi padre también, eso es más que seguro, dijo la peli azul.
¡Gracias¡ dijo Vegueta.
Casa de Milk:
Hija bella me alegra tanto tenerte de regreso, decía el padre de la pelinegra.
Papito no te molesta que haya renunciado así a un compromiso, dijo Milk.
No hija, como bien dices en esa casa no eran felices ni tu ni tu novio, además yo siempre apoyare tus decisiones, ya sabes que lo único que quiero es tu felicidad, dijo el gigantesco hombre.
Lo se papito,....., decía Milk comentándole sus planes futuros.
Minutos después:
Pues es una gran idea hija, yo los apoyare en lo que se pueda para que su sueño se haga posible, lo que no me esperaba es que se quisieran casar tan jóvenes pero como te dije antes yo te apoyo y te apoyare siempre mi niña, se que solo con Gokú podrás ser feliz y yo les doy mi bendición a los dos, eso si, Gokú tiene que venir con sus padres para ponernos de acuerdo en lo de la boda, decía el padre de la pelinegra.
Así será papito, dijo Milk abrazándolo.
Casa de Gokú:
El joven de cabello alborotado se encontraba sentado con toda su familia en la sala.
Aunque me sorprendiste cuando me dijiste que renunciaste cuando me explicaste tus motivos comprendí todo, además tu madre te extrañaba mucho, decía Bardock.
Como no lo voy a extrañar, estuve tanto tiempo lejos de él que cuando vuelvo a su lado solo tengo unos meses conmigo y luego nuevamente se va, eso me lleno de tristeza a pesar de saber que el lo hacía por seguir su sueño, pero me da gusto tenerte de vuelta hijo y todos apoyaremos tu proyecto, dijo GIne.
Así es hijo, cuenta con la constructora para cumplir tu sueño, dijo Bardock.
Y también cuenta con nosotros hermano, dijeron Raditz y Túrles.
Pero hay algo más, ¿no hijo?, dijo el anciano.
¿Abuelo que bien me conoces?, decía Gokú sonriendo.
Viviste tanto tiempo conmigo que te conozco muy bien hijo y cuando tus ojitos tienen ese brillo tan especial es por algo muy importante, dijo el anciano.
¿Qué más nos tienes que comunicar hijo?, dijo Gine sonriendo.
Como les acabo de comentar Milk y yo decidimos renunciar porque nuestro amor estaba prohibido en la casa y no soportábamos estar escondiéndonos como si fuera un pecado amarse. Todo lo que pase con Milk desde que la conocí hasta lo que pasamos en la casa me hizo llegar a una conclusión, Milk es el amor de mi vida, se que estamos jóvenes y que tal vez piensen que es una locura, pero nos amamos y juntos se que todo podemos lograrlo. Papá, mamá, hermanos, abuelo, le pedí matrimonio a Milk y ella acepto, pensamos casarnos en un mes, dijo Gokú dejando sorprendidos a sus familiares.