Si llegamos a 1K, haré maratón de tres capítulos
El ambiente en el coche se fue haciendo más callado e incómodo a medida que se acercaban a Holmes Chapel.
-Nunca he hablado con tu madre demasiado, y nunca he venido...
-Ahora sí –Harry giró en la última intersección antes de la casa de su madre. – por favor, tranquilos los dos.
Niall y Kate se miraron. Tranquilos aún.
-¿Cuánto nos vamos a quedar? –preguntó Niall.
-Una semana. La semana próxima Kate tiene que hacer el Test de dom o sum y empieza la escuela.
Niall no dijo nada. El coche entró en el terreno de la mansión y Harry suspiró.
-Vamos allá.
-¿Dónde está Louis? –preguntó Liam nada más despertar – mierda, mi puta cabeza. Ese amigo tuyo nos dio veneno. Joder.
-Se fue a su cuarto y tiene toda la razón –Zayn le miró acostado bocabajo – creo que voy a morirme.
-Iré a hablar con él...
Louis estaba acostado viendo la televisión. Liam golpeó la puerta.
-Louis...
-Rojo.
-Sólo quiero entrar en tu cuarto y hablar contigo.
-Rojo. Es el segundo aviso.
-Estaré esperando a que quieras hablar conmigo...
-Puedes esperar. No voy a volver a mi cuarto de momento ni a mantener relaciones sexuales contigo ni con Zayn. Estoy embarazado y puedo negarme.
-Está bien. Louis... perdón.
Louis devolvió la mirada al televisor.
-Claro. Déjame descansar. He estado vomitando.
Liam cerró la puerta y volvió al cuarto principal.
-Está muy enfadado.
-Hemos sido unos malditos hijos de puta. –Zayn apretó la cara contra la almohada. -¿qué ha dicho?
-Acaba de acogerse a su derecho de sum gestante para irse a su cuarto de manera indefinida y no aceptar relaciones sexuales.
-Dios mío, Louis es caliente de nacimiento... eso y las hormonas le pondrán de peor humor.
-¿Y qué hacemos?
-De momento, yo voy a trasladarme a mi cuarto. No puede ser él el único de los dos.
-No me jodas... quiero dormir con los dos.
-Liam, sólo lo empeoraría. Démosle unos días.
Anne salió a la puerta y recibió a su hijo abriendo los brazos.
-Al fin vienes... Niall.
Niall se acercó y Anne le abrazó. Luego se giró para mirar a Kate.
-Hola... tú eres Kate.
-Hola... Harry y Niall me han acogido.
-Vamos a adoptarte, Kate. En cuanto pase el tiempo establecido para hacerlo.
-Pasad...
Niall entró en la casa. Estaba acostumbrado al lujo por Harry, pero aquella casa era increíblemente enorme y recargada.
Subieron al primer piso.
-Niall, ése es tu cuarto.
-Niall duerme conmigo –dijo Harry a la defensiva.
-Tu cuarto está justo enfrente por si...
-Niall duerme conmigo.
-Bueno, entonces ese es el cuarto de los dos. Pero no es normal en los sum que...
-Es que ellos están muy enamorados -dijo Kate entonces. –no son como esos dom y sum que sólo están juntos por aparentar o una buena alianza.
Niall contuvo la sonrisa que le estaba naciendo. Adoraba a esa niña.
-Kate, te mostraré tu cuarto. –dijo Anne tragándose las palabras.
Niall abrió el cuarto de Harry y éste le abrazó. Empezó a besarle la nuca.
-Te dije que iba a cuidar de ti. Como un buen dom.
-La semana que viene tiene que venirme la menstruación. Quiero estar ya en casa... por favor.
-Nos iremos el domingo. Cinco días.
-Está bien.
-Harry –Anne abrió la puerta – voy a mostrarle a Kate los caballos de tu hermana.
-Está bien, mamá.
Anne cerró la puerta y Harry sopló en la nuca de Niall.
-Quiero a mi sum. Ahora.
Apretó la polla contra el trasero de Niall, que gimió.
-¿Caballos?
-Gemma monta profesionalmente. Tiene unos establos alquilados a como media hora de aquí.
-Eso nos da al menos una hora...
-Y puedes gritar.
Niall gimió. Literalmente notó como los músculos de su ano vibraban de expectación.
-Duro y muy fuerte, señor.
Harry gimió empujándole sobre la cama. Niall quedó de rodillas sobre el colchón y sacó el culo. Harry agarró la tela leve y blanca de sus pantalones y tiró, rasgándolos por completo.
-¡Harry! Te costaron carísimos.
-Siempre quise hacer eso. Espera... el lubricante...
Niall suspiró, impaciente. Harry volvió hacia él y comenzó a masajearle las nalgas.
-Sabes... luego quiero que nos tomemos un baño en la piscina. Tu bañador es pequeño. Sería una lástima que tus nalgas estuvieran completamente blancas... sin marcas de posesividad.
Niall gimió cuando Harry le dio una nalgada. Su cuerpo se sacudió de placer.
-Pero tampoco muchas. Porque tú eres un buen sum... sólo un poco de marcas de que tu dom te da lo que quieres... -Harry mordisqueó la nalga suave, pero entonces empezó a chupar. Le mordió y le chupó ambas nalgas. Niall empezó a chillar de placer y comprendió que Harry le estaba marcando absolutamente.
Entonces Harry aplicó un generoso chorro de lubricante entre ambas nalgas. Harry le dio la vuelta, le quitó los pantalones y se bajó los suyos.
Empezó a besar su cuello y clavícula, le levantó las piernas y le clavó hasta el fondo el pene. Niall gritó fuerte y Harry siguió besando y lamiendo, empujando fuerte y sin gentileza, provocando que el cabecero de la cama golpeara la pared. Los gritos, jadeos y suspiros de ambos se mezclaron y Harry notó con satisfacción que su pecho se humedecía con la corrida de su sum.
Le clavó la polla una última vez, corriéndose tras él.
-Ahora todos verán que eres mío y que estás bien atendido.
-Harry...
-Tenemos que vestirnos pero no cambiaré las sábanas. Quiero que la señora de la limpieza le explique a mi madre que follamos a mediodía.
Niall dejó salir un suspiro exhausto.
-Me parece perfecto.
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