¡Domando A La Fiera! ||Adrian...

By AshleWolf

54.2K 2.9K 807

"El destino la puso en mi camino." Prefiero decirlo así antes que pensar el verdadero motivo por el cual la c... More

Uno.
Tres.
Cuatro.
Aviso.
Cinco.
Importante.
Seis.
Siete.
Ocho. //Primera parte//

Dos.

7.7K 393 274
By AshleWolf

Salí del trabajo rumbo a casa, quería llegar a mi hogar luego de una semana agotadora.
Aún tenía trabajo; corregir exámenes para que luego del fin de semana pudiera sacarmelos de encima.

Salir del establecimiento Françoise-Dupont y mirar para la derecha, me da nostalgia. Eso se debe porque en esa esquina esta mi antiguo hogar junto con la panadería de mi madre, uno arriba del otro.
Recuerdo ese lugar alegre, lleno de aromas exisitos y muchas risas. No esta de más decir que todo eso cambio luego de la muerte de mi madre, quien murió después de ser atropellada por un maldito adolescente.
Eso trajo grandes problemas, cada vez teníamos menos gente y menos dinero, mi padre comenzó a tomar y apostar haciéndonos quedar en deuda y para sobrevivir, fuimos obligados a vender ese lugar...

- Se que algún día volveré aquí.-dije mientras tocaba la ventana tapada con madera, hace años que ese lugar había cerrado y los nuevos dueños desaparecidos.

Me fui de aquel sitio y luego de unos minutos llegue a mi casa, un complejo de apartamentos en donde vivo con mis hermanos que, para mi suerte son gemelos. Aún que es pequeño ese lugar, supimos acomodarnos bien para seguir con nuestras vidas... Pero, sin mi padre.

Saqué las llaves de mi bolso y me dispuse a abrir la puerta, pero en cuanto vi esta, estaba entre abierta.
Abrí de golpe y contemple la escena, toda la sala y las habitaciones echas un lío.. Me tranquilice al recordar que Bridgette y Bastian se quedarían en casa de unos amigos asi que sabía que no estaban en peligro.

-¿Qué demonios sucedió aquí?-me dije mientras cerraba la puerta. Comenze a caminar entre aquel desastre y justo en la puerta de mi habitación, estaba pegado con cinta un pedazo de papel arrugado. Sin dudar, lo tome y leí.

"Hija, perdón por el desorden. Tomé tus ahorros para irme de la ciudad, si me quedo, los Agreste me matarán por la deuda que a ti te ordenó a pagar...
Por favor, deposita dinero en tu cuenta para mi."

-¡Ese maldito hijo de la...!-me callé mientras respiraba profundo. Necesitaba tranquilizarme y pensar.- No lo creo, conformate con mis ahorros.-pensé.

Agarre mi móvil, necesitaba avisar al banco sobre esto y evitar que robe lo que con mucho esfuerzo consegui. Así, logre pasar todo lo que tenía en otra cuenta, no podía darle el lujo de gastar lo último que teníamos...
Feliz pero con enojo, comenze a limpiar el desorden hasta que el sonido del timbre hizo que parará. Abrí y me alarme al ver tres hombres de negro.

-¿Usted es Marinette Dupain-Cheng?- preguntó el que estaba en medio. Era el más bajito de los tres.

-Así es, ¿quienes son ustedes?-pregunte casi escondiendome detras de la puerta.

-Mi señor desea tener una reunión con usted con respecto a su padre.

- ¡No tengo nada que ver con ese hombre...!, ¡el acaba de robarme y destruyó toda mi casa!.-dije mientras cerraba de a poco la puerta- Asique por favor, retirense...

Traté de cerrar, pero uno de los gorilas sostuvo la puerta con fuerza para evitar que la cerrará.

-Por favor Señorita, nuestro señor fue muy insistente.-dijo. Me quedé pensando unos minutos, tal vez sea mejor acabar con todo esto ya y dejar en claro que no pagaré esa deuda.

-¡Esta bien!, pero dile a Mr. Musculo que deje mi puerta...-señale al hombre y el bajito hizo una seña con su mano para que dejara por fin mi puerta.

-Por favor, acompañenos.-extendió su mano apuntando a un auto estacionado, salí pero sin antes agarrar mi bolso con mis pertenencias.

-------------------

Había llegado a mi casa cansado, lo único que quería era darme una ducha y descansar, por ahora ese era mi plan hasta que Damien llamó.
No duro mucho aquella llamada, él me aviso que Marinette a duras penas había aceptado encontrarse conmigo, ahí supe que descansar ya no estaba en mis planes...

"Mierda que fue rapido"-pensé.

Necesitaba arreglarme, pero primero una ducha express para despejarme. Al terminar, me coloque uno de mis nuevos trajes pero esta vez quería que mi pecho se viera, mi objetivo era causar sensualidad ante sus ojos, cautivarla con mi mejor "pose".

Desabroche los tres primeros botones de mi camisa, cosa que no suelo hacer ya que siempre llevo corbata. Mi cabello desordenado, pero para que quede más esponjoso, debo secarme con un secador...
Así pasaron más o menos treinta minutos hasta que el momento llegó. Escuche como tocaban la puerta y sentí como mi corazón se aceleraba, estaba nervioso pero tenía que estar serio si quería que se tragara el cuento.

Yo vivo en el último piso de un edificio de lujo pero, a comparación de otros departamentos, el mío es el más grande de todos... Me coloque en frente al gran ventanal que dispone de una vista majestuosa de París, revolvi mi cabello para acto seguido colocar mis manos en los bolsillos mientras daba un gran suspiro. Una vez listo y dispuesto a todo, hice que entrarán...

-Disculpe, pero la invitada esta aquí.-dijo mientras le permitía el paso a la dama.

-Me alegra mucho que hayas aceptado venir señorita Dupain-Cheng.-dije mientras giraba para quedar de espaldas al ventanal.- Damien gracias por haberla traído, puedes irte.

Tras una ligera reverencia, Damien hizo lo ordenado. Estábamos solos, nadie podía abrir esa puerta ya que se abre desde adentro, o en otros casos, con un interruptor que sólo yo poseo. Tranquilamente podría haber tirado el plan al carajo, podría haberla agarrado de la cintura y atraerla a mis labios, ir más haya toda la noche... Pero como dije, podría... Aún que, si lo hiciera no pasaría nada malo.

-Me imagino que ya sabes porque estas aquí...

-No pretendo pagar nada.-se cruza de brazos.

-Eso es un problema... Yo quiero todo mi dinero de vuelta pero tú padre escapó.

- Lo se, entró a mi departamento y destruyó todo sólo para encontrar mis ahorros.

-Vaya, que buen padre tienes.-dije mientras me acercaba al sofá.

-Como sea... Como dije antes, no pienso pagar nada de lo que el causó.-rodé los ojos- No tengo nada que ver en todo esto, asi que si me disculpa, vuelvo a ordenar el desastre que el causó en mi casa...-se da la media vuelta.

-Como te dije preciosa, yo de alguna forma conseguiré lo que es mío, y eso te incluye...-dije mirándola de reojo.

-¿Eso que significa?- se paró en seco para poder verme.

-Significa que tu amado papi te entrego a mi como pago antes de que desapareciera... Lo tengo escrito.-sacó una hoja.

-¡Eso es una mentira!, ¡él no tiene derecho sobre mi porque soy mayor de edad!-dijo tratando de arrebatarme la hoja pero la esquive.

-Eso es cierto... Pero sería una lástima que todo lo que lograste hasta ahora sea destruido... ¿Verdad?- me encorbe para estar a la altura de su cara.

- Tu estas totalmente loco...

- Puede ser... Pero sólo quiero una sola cosa.

- ¿Y que se supone que quieres?

- Tu cuerpo.

Se sorprendió, y más cuando la caze por la cintura. La atraje hacia mi para acortar más la distancia y así poder estampar mis labios con los suyos...
Al principio se resistió, peleó por liberarse pero sin dejar de besarnos; tal vez sea porque la sujetaba de la nuca también. Intentaba abrir su boca, quería y necesitaba demostrar quien mandaba en ese beso, asi que, ¿qué mejor manera de abrir su boca que mordiendo su labio?, les digo que funcionó a la perfección, sentí como cada vez ese beso se volvía más apasionado, mucho más ardiente con nuestras lenguas luchando por el dominio.

Sentía como la sangre no se me iba a la cabeza principal, sino a la "otra". Ese beso nos había encendido a ambos, ya que ella estaba aferrada a mi cuello y jalando de mis cabellos, me atraía más y más.

Quería llegar más lejos, porque después de todo, ella se creyó mi plan; pero de un momento deje de sentir todo contacto, al abrir mis ojos ella nos había separado...

-¿A caso no te gustó "bichito"?-dije seductor mientras limpiaba con el pulgar, mi comisura.

-¿Sabes que esto puedo jugarlo también?- paso su dedo índice por mi pecho casi al descubierto.- Además, creo que esto será muy divertido si lo subimos a otro nivel...

-Me está agradando lo que dices...-la agarre de la cintura para volver a besarla, pero ella me detuvo.

-Espera a que termine jodido pervertido...-se separa y se acomoda la ropa- Apostemos algo... El que gana se lleva todo.

-Me parece bien...

-Entonces, tu apuesta algo primero.

Tenía que pensarlo bien, no podía dejar pasar una oportunidad tan maravillosa como esta... Luego de unos segundos, ya tenía una idea, pero una muy brillante y excitante para mi, tanto que mi boca no tardó en hacer una pequeña risa de costado, la cual ella se dio cuenta al instante...

-Esa sonrisa me dice que algo se te ocurrió...-dijo dando una pequeña sonrisa mientras agachaba su cabeza.

-Pues así es.

-¿Y qué es?- alzo una ceja.

-Fácil, el primero que se enamoré del otro durante los próximos seis meses pierde...-dije mirándola de arriba.-Si yo llegó a perder, te daré el doble del dinero que tu padre me debe.

-No creo que sea conveniente desperdiciar tanto dinero así, pero como eres tú el que lo pierde no tengo problema...

-Bien, y espero que tampoco tengas problemas en darme tu cuerpo cuando gane.- me cruze de brazos.

-¿Disculpa?-levantó ambas cejas.

-Lo que escuchaste... Si pierdes me tendrás que dar tu cuerpo por el resto de tus días, o hasta que me cansé.-la miré de abajo hacia arriba hasta terminar viéndola nuevamente a los ojos.-Aún que dudo que eso pase bichito...

-Eres un infeliz...

-¿Acaso tienes miedo?.-me acerco más a ella- Prometo ser muy gentil.

-¿Sabes qué?, ¡¡aceptó a patearte el trasero!!-dijo acercando aún más nuestras caras.-Pero ahora, gracias por abrirme la puerta- se alejaba con el interruptor. Me di una bofetada mental por guardarlo en mi bolsillo.

-Si que eres rápida...-me cruzó de brazos.-Pero recuerda que en esta apuesta todo vale, podemos jugar sucio...

-Eso me gusta- me tira aquel pequeño aparato el cual atajo sin problemas- Gracias por su tiempo Sr. Agreste.-se va.

Sin duda, esta apuesta la ganare... ¡Tengo que hacerla mia!
Pero primero, si quiero ganar esto, necesitaré comenzar clases de yoga nuevamente...

-------------------

-"No sabe en lo que se mete"-pensé, ¿porqué tan obsesionado con mi cuerpo?, que yo sepa no tengo los "grandes atributos" que otras mujeres tienen...
Soy común y corriente, se puede decir que algo de pechos tengo pero nalgas, ¿¡acaso es una joda!?, ¡¡obviamente no tienen de donde apretar allí abajo!!.

Volví a mi hogar en transporte público, no quería pedir que su asistente me trajera porque a la ida casi me cuesta la puerta. Felizmente pude terminar de ordenar, así por lo menos podría preparar mi cena para luego bañarme e irme a dormir.

Casi eran las 11:30 pm, y estaba dispuesta a buscar mi sueño tan anhelado. Escuche como mi móvil sonaba, ¿quién es el desgraciado que interrumpe mi tan maravilloso sueño?. Agarre el aparato con el objetivo de ver quien era, y lo primero que grité...

-¿¡Cómo carajos tiene mi maldito número!?-grité mientras bloqueaba el móvil sonrojada. Mis ojos ya no eran puros, y menos después de ver aquella "aberrante" foto acompañado de la frase:

"Mira lo que te espera... ¿Acaso al ver esta foto no estas dudando en entregarte de una vez?"

"No se en que me metí"-pense, pero presiento que este no va a parar hasta dejarme sin fuerzas, literalmente... ¡Solo pienselo!, si es capas de mandarme una foto semidesnudo, no me quiero ni imaginar lo que será la proxima vez.

No se porque pero tenia la necesidad de volver a ver aquella foto, asique con bastante vergüenza la contemple. Una pequeña sonrisa se formó en mis labios, verlo así tirado en su cama mientras con su cámara apuntaba de su cuello para abajo, dejando mostrar su abdomen hasta un poco más abajo de sus boxers; hizo que una sensación extraña recorriera todo mi cuerpo...

¿Qué se sentiría perder la virginidad con un espécimen así?, sencillamente no lo se, pero de seguro lo experimentare con él; porque estoy segura de que logrará tener mi cuerpo, cueste lo que cueste.

-Maldito Agreste...-susurre mientras me sumergia en mis sueños, dejando a la vista aquella foto.


Continue Reading

You'll Also Like

95K 8.9K 29
Lara pensaba que Toni era el amor de su vida, pero dejó de serlo hace mucho, después del primer golpe que recibió por su parte cuando estaba embaraza...
264K 25.8K 67
Freen, una CEO de renombre, se ve atrapada en una red de decisiones impuestas por su familia. Obligada a casarse con Rebecca, una joven que llegó a s...
89.3K 11.8K 50
Elladora Black es la hija menor de Orion y Walburga criada para ser una sangre pura perfecta, sin embargo no es lo que planearon. Narcisista, egoíst...