Capítulo Veintitrés: Genderbend.
Un nuevo día, un nuevo reto y eso le hacía sonreír a Cam y más si el reto era el que venía, le parecía terriblemente genial.
—Benditos sean productores—se mofó mientras caminaba con la carta en mano y su megáfono, lo agarró y caminó hacia la playa en donde estaban la mayoría de concursantes—. ¡Todos al muelle de la vergüenza ahora!
Los competidores miraron por detrás de su hombro, dejaron de hacer lo que estaban haciendo y corrieron hacia el muelle de la vergüenza.
—A ver Cam... ¿Cuál será el fantástico reto ahora? —pregunto con sarcasmo, Megan, mientras jugaba con las tiras de su bikini.
—Genderbend—contestó el pelinegro.
Todos hicieron una mueca de confusión, a excepción de Charlie, ella sabía perfectamente lo que eso significaba.
—¿Cómo? ¿Qué es eso? —preguntó Namie arqueando una ceja.
—Genderbend es cuando, en una situación equis, las personas se convierten en sus versiones masculinas o femeninas—todos lo miraron sin entender—. Como por ejemplo Alex, seria Alexander.
Y todos soltaron un sonido dando a saber que ya habían entendido.
—¿Y cómo haremos eso?
—Usaremos el método "Genderblug" que consiste que conectaremos a todos a unas máquinas y todos entraran a un mismo sueño viéndose en sus versiones alteradas.
—¿Y cómo se gana? —preguntó Namie.
—Sus pensamientos también serán alterados, para ganar tienen que recuperar los verdaderos. Lo que los hará despertar. El primer equipo que despierte por completo, gana ¿Están listos?
—¡Si! —gritaron todos.
—Genial.
Cam llevó a los concursantes a unas sillas las cuales tenían un casco de metal. Sentó a cada uno en ellas, separando los Amaneceres de los Anocheceres. Conecto el casco de metal a cada uno de los competidores y se paró detrás de un teclado con muchos botones.
—¡Ah! Olvide mencionarles que... sufrirán una carga eléctrica antes de empezar.
—¿¡Qué!? —gritaron todos.
Cam sonrió macabro y movió los dedos en forma de despedida antes de apretar el botón verde. Todos soltaron un gran grito de dolor y quedaron completamente dormidos.
—Hora del juego...—caminó hacia un cuarto con una gran pantalla en donde se veía a todos los personajes pero esta vez... eran algo diferentes.
[...]
Alexander se tapó el rostro con las manos.
—¿Me está mirando? ¿Jackie me está mirando?
Charlie viró los ojos.
—Sí te está mirando, esa rubia se muere por ti y tú te estas escondiendo como una nena ¿¡Acaso eres una nena!?
Alexander negó.
—¿¡Entonces!? ¡Sé hombre y ve a hablarle! —y lo empujó con fuerza.
Naeem negó un par de veces.
—No tienes que ser tan cruel con él, es demasiado tímido—viró los ojos y se acomodó los lentes.
Charlie tomó un sorbo de su soda, eructo y viró los ojos.
—Es hombre, tiene que comportarse como uno. Ahora si me disculpas, me daré un baño de espuma—se paró y se dirigió hacia el baño—. Es un idiota por comportarse así... solo es una chic...
—Hola Charlie.
El castaño soltó un gran grito y se quedó perplejo al ver a la chica que tenía parada al frente de él.
—T-Tambry... ¿Qué haces aquí?
—Me dirigía hacia la cafetería, amo tomar café mientras leo.
—¿E-En serio? —sonrió bobamente—. Qué bonita.
—¿Qué dijiste?
—¡Nada! V-Voy a bañarme, ya regresó—y se fue corriendo.
Tambry se encogió de hombros y siguió leyendo aquel interesante libro.
Por otro lado una pareja de una chica peli azul y un chico castaño empezaron a tomarse fotos, estos reían y disfrutaban del momento.
—No tomes mi lado malo, bebé.
—Tú no tienes lado malo, nena—y siguieron con las fotos.
Charles y Brie viraron los ojos al ver a sus hermanos de esa manera.
—Witt ¿Te apuras? —Se quejó la rubia—. No quiero estar al lado de este apestoso—señaló al castaño.
—¡Ah! ¿Apestoso? —El castaño se puso una mano en el pecho—. He usado un perfume Calvin Klein en la mañana ¿¡Y crees que apesto!? Es obvio que no conoces las buenas marcas—el castaño le dio la espalda a la chica—. ¡Apúrate Pain! No quiero estar más tiempo con los de... su clase.
—¿¡Mi clase dices!?
Pain viró los ojos y miró a su novia.
—Me tengo que ir, preciosa.
—¿Nos vemos más tarde?
—Claro, ahora... Dale un beso a Painsito Bubu Bonito.
—Solo si tú besas a tu bebé.
Y se besaron ganándose la mirada de desagrado de sus hermanos mayores.
—Qué asco.
—¡Horrible!
—¡Mis ojos!
—¡Todo duele!
—¡Mi bóxer!
—¡Mi bracier!
—¿Es amarillo?
—Sí ¿Cómo lo...?—y abrió la boca—. ¡Pervertido!
—Cierra la ventana al cambiarte, nena—se mofó el castaño y se fue corriendo del lugar.
Brie pisó el suelo con su zapatilla amarilla. Agarró una liga y se hizo una coleta, Pain ya se había ido y se había quedado sola con su gemela.
—Es tan atorrante—gruñó y Witt rio.
—Así te gusta ¿No?
Brie viró los ojos y empujó a su hermana con fuerza, causándole una queja. Si... no era muy femenina que digamos... y Charles no era muy masculino que digamos.
—¿El aire me despeinó?
—No, Charles. Te ves perfecto.
El chico sonrió de medio lado.
—Ya lo sé.
[...]
Mauricio gruñó a ver a Bryan y Shailenne haciendo las cosas completamente mal.
—¡Así no! —Gritó jalándose sus cabellos negros—. ¡Coño que por allá! ¡A la izquierda! ¡Bryan tu otra izquier...! Ugh... no tiene caso.
—¿Ya podemos descansar? —se quejó el rubio haciendo una pequeña rabieta—. He quedado con Darlene para vernos.
Mauricio golpeó su frente con la palma de su mano, y señaló la puerta de la casa.
—¡Te amo! —Chilló y caminó con los ojos cerrados hacia ella, pero por descuido chocó con ella dañando su frente—. Ugh, Mauricio... ¿Quién movió la puerta? —y entró en ella.
[...]
Lori bailó dando vueltas por todo el pasto, su vestido giraba al compás que ella lo hacía y la hacía ver muy bonita.
En realidad, era una pelinegra muy guapa. Era considerada una de las chicas más lindas de Drama en la Isla.
Pero a ella no le importaba eso, ella estaba enamorada de un chico.
Naeem.
Tan solo pensar en él hacía que una sonrisa boba aparezca en su rostro.
—¿Por qué no te gusto? —se preguntó mientras miraba hacia el cielo mientras seguía girando.
Una chica la miraba desde lejos con una sonrisa, le gustaba como se veía su vestido al girar.
—¡Bailas muy lindo Lori!
La chica se detuvo y frunció el ceño.
—¿Qué quieres Triny?
La pelirroja se encogió de hombros.
—¿No puedo alagarte?
—Si... pero.
—Entonces te ves horrible, y ese vestido no vale ni la uña de mi madre.
—¡TRINY!
—
Tú te lo buscaste—se encogió de hombros y se fue.
[...]
Y el juego ya había empezado de verdad, porque ya varios de los competidores habían recuperado su memoria real. Como Isabella que se llamaba Isaac, Lester que se llamaba Lenay o Abel que era Abigail.
Bryan caminaba lentamente por los pasillos hasta que sintió como su celular vibraba intensamente en su bolsillo. Viro los ojos y lo sacó mientras peinaba su cabello hacia atrás.
—¿Nueva tendencia de zapatos de MG & BW? —El chico arqueó una ceja y abrió el anuncio—. ¿¡Tacones!? ¡P-Pero! ¿¡Por qué yo tengo esto!? —preguntó confundido.
❝CONFESIONARIO DE BRYAN❞
—Solo tengo que aclarar, que yo nunca me subscribí a una página de tacones—se cruzó de brazos—. ¡Pero si a la de maquillaje para hombre! —dijo con una voz chillona—. ¡Nueva tendencia! ¡Genial!
❝FIN DELCONFESIONARIO❞
El chico deslizaba su dedo por toda la pantalla. No es que le gustara, solo que le resultaba una sensación familiar todo eso.
—Oh... lo recuerdo...
Cam desde el otro lado de la pantalla sonrió al ver la expresión del chico.
—¡Recuerdo que deje mis Nuggets afuera! —y corrió en busca de ella.
Cam frunció el ceño. El chico era igual de bruto que Bryanna. Bueno... eran la misma persona ¿Qué se podía esperar?
Mauricio logró a ver a cierta chica sexy, no era para nada femenina pero su actitud lo engatusaba.
—Hola nena ¿Cómo estás? ¿Me esperabas?
Brie sonrió de lado.
—Sí ¡Mira como me alegra tu presencia!
—Me encanta tu sarcasmo—se acercó a su oido—. Es sexy—y mordió este.
Brie rio roncamente y lo empujó.
—Aléjate si no quieres mi zapatilla en tu cara.
El pelinegro bajó la mirada a los pechos de la chica.
—Quisiera otra cosa en mi cara.
—Pendejo—se escuchó desde atrás—. No sabes cómo tratar a una chica.
Mauricio miró a Charles por atrás del hombro.
—¿Y tú sí?
—Mejor que tú sí. Brie, no vamos.
—Tú no puedes mandarme.
El castaño se encogió de hombros y se agachó para tomar a la chica de las piernas y cargarla como saco de papas. Brie empezó a patalear como loca, mientras Mauricio viraba los ojos y se iba del lugar.
—¡Bájame Charles!
—No.
—¡Ahora!
—No.
—O te pateo las bolas.
El chico abrió los ojos y la bajó de inmediato.
—Pude haberme defendido sola ¿Lo sabes?
—Sí pero quise hacerlo yo.
—¿¡Por qué!? Tú me odias y yo te odio.
—Sabes que no es cierto—viró los ojos el chico mientras caminaba hacia ella.
Brie tragó en seco y empezó a retroceder cada vez que el chico se acercaba más.
—¿Ch-Charles...?
—¿Hmm?
—Estás muy cerca.
Charles tomó a la chica de la cintura y la acercó a él.
—Lo sé.
Brie puso las manos en su pecho.
—Te detesto.
—Me adoras.
—¡Te detesto en serio!
—Me adoras—se burló.
Y sin más ambos chicos se besaron.
Cam soltó una carcajada. Channel había resultado ser más activa siendo hombre que Bill.
Ya tendría con que fastidiar al chica.
La parejita se seguía besando hasta que empezaron a sentir algo extraño, los papeles habían cambiado. La estatura de Charles había reducido y la de Brie aumentado.
Ambos fruncieron el ceño y se separaron.
—¿Bill?
—¿Channel?
Hicieron un gesto de horror y se separaron antes de despertar.
—¡Ew, ew, ew! —chilló la castaña quitándose el casco para irse corriendo.
—¡No mames, no mames! —dijo el rubio haciendo lo mismo que la chica con las mejillas rojas.
—Dos menos—dijo Cam con una sonrisa y siguió viendo la pantalla.
Pain y Witt se habían vuelto a encontrar.
Ambos estaban en el comedor, sentados frente a frente mientras tomaban sus manos.
—¿Qué has hecho en esta hora sin mí, nena?
Witt miró hacia arriba mientras recordaba.
—Pues... me bañé—dijo mientras tocaba su cabello—. He estado pensando en pintármelo de verde.
Y Pain empezó a reír de manera exagerada.
—Como un moco—Witt lo miró con el ceño fruncido—. Moquitos te diré ahora.
—¡Cállate imbécil!
—Cilliti imbicil.
—¡Pain!
—¡Witt!
La chica viró los ojos y sacó su celular.
—¿Ya has jugado Pokemon Go?
—Ew, eso es para chicos—viró los ojos Pain.
—Pero Pain... tú eres un chico.
El castaño parpadeó un par de veces.
—¿Lo soy?
Witt hizo una mueca mirando a ambos lados mientras trataba de buscar la cámara encondida del lugar.
—B-Bueno, pero eres una chica no deberías jugar Pokemon Go.
Witt sintió una tremenda indignación al escuchar eso.
—¡No soy una chica! —y despertó—. ¡Soy un chico! —gritó ya siendo Will.
Paige también despertó haciendo una mueca.
—Wow, eso fue raro—dijo quitándose el casco y miró a Will—. ¿Te gusta Pokemon Go? —Will asintió—. ¡Eres un perdedor!
—¿Perdedor? ¡Soy nivel setenta!
—¡Perdedor!
—¡No soy perdedor! —Se quitó el casco—. ¡Soy genial! ¿No quieres jugar?
Paige lo miró seria pero a los segundos sonrió.
—¡Ok! —y se fueron.
Cam sonrió de lado, de todas las parejas de Drama en la Isla, esa era una de sus favoritas. Amaba la conexión que ambos tenían. Aunque... a pesar de parecer despreocupado por sus participantes, no era así. Temía por Paige y lo que le vaya a decir su padre y temía por Will si es que su gran secreto se revelaba.
¡Aunque también le resultaba divertido! Más salseo para el programa.
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2010 palabras :3 me pasé awebo xd
#RetoFienes2017
Daal♛