Peligroso Amor

By Juuuly

5.8K 61 17

Jessica Jones es una persona común y corriente, o eso cree ella, hasta que llega Jason, un guapísimo y oscuro... More

Capitulo 1 - Nuevo huesped
Capitulo 2 - ¿Enamorada?
Capitulo 3 - Conociéndonos un poco mas
Capitulo 4 - El nuevo
Capitulo 5 - La verdad sobre mi
Capitulo 7 - Venganza
Capitulo 8 - ¿Que me esta ocultando?

Capitulo 6 - Primera clase

671 8 4
By Juuuly

Después de que se fue Jason y se termino esa incomoda conversación me metí en una caliente y reconfortante ducha. El agua relajo cada musculo de mi cuerpo y el tiempo me sirvió para poder procesar todo lo que me paso en el día.

Mierda. Hubiera deseado mil veces ser una extraterrestre que ser una hechicera y tener toda la responsabilidad de salvar al mundo sobre mis hombros. Todo esto es una mierda, no soy de decir malas palabras, pero es lo que define perfectamente lo que está pasando. Además de que me siento una completa idiota por como trate a Nicolás cuando me largo la noticia y por haberle mentido a Jason.

¿Cómo voy a hacer todo esto? ¿No puedo renunciar? ¿Quiénes están atrás de todo esto? ¿Quién me eligió? ¿Cómo?

Agg, todo esto me está estresando. No quiero hacerlo, principalmente porque no sé cómo y porque soy capaz de meter bien la pata. Además, ¿Cómo es que sabe todas estas cosas Nicolás? ¿Será también hechicero? El me dijo que lo enviaron a ayudarme, asique debe de saber que está haciendo… ¿cierto?

Salí de la ducha sin muchas ganas y me metí a la cama. Tendría que consultar todo esto con la almohada. No tarde mucho en dejar de pensar en toda la bocha de noticias y sumergirme en mis sueños. Pero eso no fue mejor. Aparecí en el mismo campo del primer sueño. Pero todo estaba más claro, podía ver las flores blancas bajo mis pies y el largo césped que me llegaba casi hasta la rodilla, podría decir que estábamos en primavera, por el aroma a polen, pero todavía había una brisa fresca. Estaba rodeada de un bosque con abundantes arboles que su oscuridad me transmitían inseguridad y miedo. No debía permitirme entrar allí, aunque mis deseos me impulsaran a hacerlo. Pero algo o alguien llamaban a mi cuerpo para acercarse. Clave mis talones a la tierra, pero eso no fue un obstáculo, ya que algo me arrastraba sin dificultad alguna.

Gemía y hacia toda la fuerza posible, pero nada podía detener esa atracción, hasta que entre al bosque y se detuvo de la nada, lo que hizo que me cayera de culo. Asustada me levante rápidamente y estaba por salir corriendo cuando una sombra salió de entre los árboles.

-¿Qué quieres de mí?- grite, pero no reconocí mi voz.

-Nada-dijo una voz masculina.

-¿Entonces porque estoy aquí?- pregunte confundida-¿Por qué me trajiste?

-No todos están contándote la verdad Jessica-dijo negando con la cabeza.

-Mis padres ya me contaron todo-dije mas confundida-no hay nada mas oculto.

-No hablo de tus padres pequeña-me dijo con tono familiar.

-¿De quién?-pregunte-No lo entiendo.

-Sigue tus instintos-solo dijo.

-Tú eres el mismo del otro sueño, ¿verdad?

-Si

-¿Quién… quien eres?-tartamudee.

-Todo a su debido tiempo pequeña -dijo otra vez con el tono familiar- Ahora mismo no puedo decírtelo.

Dirigí mi mirada atrás del hombre y vi que otra sombra se movía.

-¿Hay alguien más aquí?-dije asustada abrazándome a mí misma.

El se percato de que había visto a su acompañante y se altero un poco.

-No, claro que no-mintió-Ya es tarde, deberías volver.

Quise responder, quería preguntarle quien era, quería verle la cara. Pero mis labios estaban sellados, no podía omitir ningún sonido, como en las pesadillas cuando no puedes gritar para pedir ayuda.

Me senté en la cama jadeando, me faltaba el aire. Tarde unos minutos en recuperar mi respiración normal. Mire la hora.

-¿Las 5 de la mañana?-dije molesta- Mierda, es temprano todavía.

Me di media vuelta, me tape hasta al cuello y volví a retomar el sueño, pero esta vez sin nadie diciéndome que no confié en las personas a mi alrededor.

El sonido de pasos y el peso de alguien acostándose en mi cama me despertaron, pero mis ojos no querían abrirse.

-Levántate dormilona-dijo la voz de Jason en mi oído mientras me acariciaba la cintura.

Su caricia me hizo estremecer y sentir una electricidad que recorría todo mi cuerpo.

-No-me queje-quiero seguir durmiendo.

-Si sigues durmiendo tendré que optar por medidas extremas-dijo seguido con una risita.

Eso me causaba intriga y algo de miedo, pero igual no abrí los ojos.

-¿Te me haces la difícil?-dijo arrodillándose en la cama atrás mío y comenzando a hacerme cosquillas.

-¡No!-dije entre carcajadas-Detente, por favor.

Pero le parecía gustar y no quería parar.

-¡Ya, ya, ya!-dije casi sin aire-Me desperté, me desperté.

Me di vuelta y lo mire a sus oscuros y hermosos ojos. Él sonreía sexi y satisfactoriamente.

-Vale-dije levantándome de la cama-¿Para que querías levantarme?

-Para ver tu sexi ropa interior-dijo mordiéndose el labio inferior.

Entonces me percate que solo tenía una camiseta que me llegaba hasta la mitad del culo y que se podía ver perfectamente mi lencería.

-Mierda-murmure mientras trataba de bajar la remera lo suficiente para que no me vea el culo y me metía en el baño.

Escuchaba sus risitas en mi habitación.

-Ahora-dije asomando la cabeza por la puerta-¿Por qué me querías levantada?

-Jessi-dijo con una sonrisa-hoy es viernes, tienes instituto.

-Oh-dije sintiéndome una tonta-que estúpida soy.

-Tus padres me dijeron que te levante-dijo con ojos picarones-porque sino vas a llegar tarde.

-Jason-dije-¿puedes irte para que me pueda preparar?

Sin muchas ganas asintió y salió de mi cuarto. Por mi parte, busque el uniforme que tenia hecho un bollo en el sillón y me lo puse, me peine, cepille los dientes y salí para el instituto.

Mientras iba caminando vi a Nicolás a lo lejos caminando con la cabeza gacha y me acorde de cómo lo había tratado la otra vez, asique corrí para ponerme a su lado.

-Nicolás-dije jadeando por la corrida

-¿Si?-pregunto sorprendido.

-Quería disculparme-dije avergonzada-no quise tratarte de ese modo el otro día, es solo que creí que me estabas haciendo una broma como todos los del curso.

-Está bien-dijo con una sonrisa-ayer fui a tu casa para explicarme mejor, pero no estabas, después te vi en el parque con una muchacho.

-Ah, sí-dije mas avergonzada aun- Jason.

¡Oh dios! ¡Jason! Le había “prometido” que me alejaría de Nicolás, pero él no está aquí, asique no tendría porque enterarse, ¿no?

-Jason-dijo con enfado-no me fio de él, te recomendaría no pasar demasiado tiempo con él.

Refunfuñe por lo bajo. ¿Otro más que me decía con quien estar y con quien no?

-Pero…-dije.

-Pero es tu vida y puedes hacer lo que te plazca-dijo con una sonrisa.

Acá hay gato encerrado. Por la forma en que me habla y se comporta diría que esta escondiéndome algo, y algo grande. Pero como apenas lo conozco no voy a poner mis manos al fuego.

Llegamos al instituto, nos saludamos con un gesto de manos y nos dirigimos a nuestros respectivos salones.

Las clases pasaron lenta y aburridamente. No tuve ninguna clase con Nicolás y no lo vi en los recesos. Es alguien de perfil bajo, justo como yo. No le gusta llamar la atención y se ve que no es de tener muchos amigos.

Cuando terminaron las clases, estaba volviendo a casa cuando un brazo salió de la oscuridad y me arrastro a un callejón oscuro. Grite y trate de zafarme del brazo, pero se me hacía imposible.

-Shh-dijo Nicolás molesto-¿quieres bajar la voz?

-Lo… lo siento-me disculpe avergonzada-No sabía que eras tú.

 -Está bien-dijo otra vez agarrándome del brazo con fuerza-ahora vamos.

-¿Qué?-pregunte sorprendida-¿Donde vamos?

-Primer día de entrenamiento tonta-dijo con una sonrisa.

Lo seguí hasta una casa en mal estado, parecía abandonada y te hacía sentir escalofríos. Era de dos pisos, las maderas estaban comidas por las terminas, además de que tenían una fina capa de musgo. En el pasado estaba pintada de un lindo color azul, pero ahora parecía negro.

-¿Qué es este lugar?-pregunte asustada.

-No lo sé bien-dijo con mucha seguridad-pero está abandonado, nos va a servir para practicar.

Su seguridad me daba miedo. No creo que este bien estar en este lugar.

-Bien-dijo calentándose las manos-¿Con que quieres empezar?

-No lo sé-dije-¿con lo básico?

-Claro-dijo con una sonrisa-me parece bien. 

Continue Reading