Believe

Per sel_gaytan

92.9K 4.6K 778

La vida le dio a ella una oportunidad más para comenzar de cero, el comienzo será difícil y tendrá muchos tro... Més

Prólogo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
¡¡Heeeey!!
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Epílogo
Capítulo extra: Stay strong
¿De nuevo yo?

Capítulo 4

2.7K 155 15
Per sel_gaytan

Brooklyn POV

Esto era más difícil de lo que pensaba.

Odiaba tener que usar el bastón, no podía moverme rápido hacia la otra habitación cuando los niños lloraban, aunque Tate me ayudaba mucho en eso cuando era de madrugada. No sé qué haría sin mi mejor amiga.

No podía evitar la tristeza que aún me embargaba cada vez que recordaba lo sucedido con mi hermana y Frank, y los recordaba cada vez que veía a Kim, si bien ella se parecía mucho a Frank, en momentos hacía gestos como Sydney. Aunque Tate me decía que se parecía más a Sydney y por ende también a mí.

Seguía sintiendo una extraña sensación en el pecho cuando Kim me llamaba mamá, yo sabía que no era su mamá pero no tenía corazón para contradecirla, al final de cuentas eso era lo que ella recordaba.

-Bueno nena, me voy antes de que mis padres se maten y tenga que ir por mamá a la procuraduría- dijo cansinamente, sus padres habían peleado una vez más y tenía que ir a su rescate.- Haré lo posible por regresar rápido.

-No te preocupes, Tate, Gael ya viene para acá.

-¿Ya se irá tan pronto?- asiento, mi hermano sólo venía a despedirse de mí.- Bien, le das mis saludos y dile que ya deje a Morticia.

Me río por su comentario.- Vale, yo le digo eso. Vete con cuidado por favor.

-Pierde cuidado- me abraza por unos instantes para luego irse.

Aprovecho que los niños están en sus siestas para ir por mi maletín y ver los pocos papeles que tengo en él. En realidad no hay mucho que ver, pareciera como si alguien hubiera sacado todo de ahí porque está hecho un desastre y yo soy demasiado ordenada como para dejar mi maletín así.

Decido marcarle a Jeff para preguntarle sobre mi trabajo, quizás ya lo perdí y no sé cómo le haré para sustentar a los niños. Necesitaría buscar uno pronto y que no sea tan pesado pero, ¿en dónde dejaría a los niños? No puedo dejarlos con mi madre, la cual por cierto no he visto desde aquella vez que fue al hospital.

Tomé mi celular y cuando estaba por marcar el número de Jeff sonó el timbre de la casa.

-Buenas tardes- saluda un hombre cuando abro la puerta.- ¿Usted es la señorita Brooklyn Adams?

-Buenas tardes, así es, ¿qué se le ofrece?- el hombre me mira de arriba abajo pero no de una forma coqueta, es como si estuviera buscando algo, comprobando mi estado.

-Hace un par de meses sucedió un robo en esta calle, seguimos haciendo averiguaciones sobre ello y queremos hacerle unas preguntas. Estamos pasando con cada vecino a realizar esas preguntas- entrecierro los ojos, no me da buena espina.

-¿Es detective? ¿Oficial de policía?

-Soy el detective Grayson.

-¿Su placa?- no pienso hablar si no veo su placa. Él me muestra su placa pero la quita en un dos por tres.- ¿Cuándo dice que sucedió el robo?

-Aproximadamente hace 4 meses.

-Miré detective, hace unos meses tuve un accidente, tengo amnesia y no recuerdo nada, así que lo lamento pero no podré serle de ayuda.

-¿Tiene amnesia?- ahora el que entrecierra los ojos es él viéndome dudoso como si no me creyera.

-Así es, ¿quiere que le muestre los análisis donde lo confirma?

-¿Cuánto es lo que no puede recordar?

-¿Qué tiene que ver mi amnesia con su investigación?- me estoy comenzando a enfadar, preguntas estúpidas hechas por un detective, ya veo que la ciudad necesita mejores detectives.

-Por el tiempo, quizás puede recordar algo.

-Detective, no recuerdo nada desde hace aproximadamente 1 año.

Creo ver una sonrisa que rápidamente disimula con una mueca.- Lamento oír eso, espero que se recupere pronto.

Ambos escuchamos un llanto ensordecedor, no sé si sea Allen o Andy pero yo tan sólo espero no despierte a todos.

-Como verá estoy ocupada, tengo que ir por mi hijo.

Él asiente.- Yo me retiro, perdón si le causé alguna molestia.

-No hay problema, que encuentren pronto al ladrón- le cierro la puerta en la cara antes de que él pueda decir algo más, que sepa que si me causó molestias y muchas.

Camino lo más de prisa que puedo al cuarto, voy rezándoles a todos los santos para que no se despierten los 3 pero mis súplicas al parecer no son suficientes ya que escucho que el otro bebé llora. Maldición. Dios mío, si me estás escuchando....que no se despierte Kim, por favor, apiádate de mí.

Llegué rápido a la cuna de los bebés y ambos estaban con su boca abierta llorando a grito abierto. Dejé mi bastón recargado en la cuna y tomé al que creo que es Andy y lo arrullé un poco para luego tomar a Allen. Era demasiado difícil hacer esto ¿y ahora cómo le haré para caminar? Tengo que salir de la habitación o despertaré a Kim.

Me quedé en donde mismo y arrullé a los niños, les trataba de hacer cariños pero me sentía impotente al saber que no podía moverme.

-¿Mami?- escuché la vocecita de Kim y me giré para verla sentada en su cuna, sus ojos entrecerrados.

-No pasa nada Kim, vuelve a dormir cariño.

Ella no se volvió a recostar y no la culpo, con estos llantos ni yo podría volver a conciliar el sueño, en su lugar se puso de pie tomándose de los barrotes de la cuna.

-Ción mami, ción- dice ella.

-¿Qué Kimmy? No te entiendo- mis ojos se empiezan a humedecer, así es, quiero llorar. Ella me mira por un momento y luego comienza a mover sus manos para que me acerque. Con todo el temor del mundo doy un paso, temo a caerme si no uso el bastón, yo como quiera pero no quiero que les pase nada a mis niños.

Muevo mi otro pie hacia adelante y me alegro al ver que no estoy ya tirada en el suelo, así le hago poco a poco hasta dar los 2 pasos que me faltan para llegar a la cuna de Kim, este cuarto se miraba mucho más chico ahora que puse las cosas de los niños.

-¿Qué es lo que querías, Kimmy?

-Ción.

-No entiendo- murmuro desesperada. Juro que Kim me ha puesto los ojos en blanco.

Y así ella comienza a tararear una canción, estira su brazo derecho hasta que su mano toca la mejilla de Allen, mueve sus deditos de arriba abajo acariciándolo, sólo soy capaz de observarla actuar como una niña grande, no sé de dónde aprendió eso pero lo tengo que averiguar. Cuando por fin capto que ella les canta una canción de cuna le sigo la corriente y arrullo a la vez a los niños, Andy ya no llora, ahora me mira con esos hermosos y gigantes ojos cafés que tiene.

El timbre de la casa suena una vez y el coraje me invade pensando que es de nuevo ese detective. No me creo capaz de caminar sin el bastón, el doctor me dijo que no le intentara, que mis músculos aún no estaban preparados para eso y si lo dijo es por algo así que mejor ni le muevo.

La persona que está fuera sigue insistiendo.

-¡¡Voy!!- grito para que me escuchen y al instante lo lamento ya que Andy comienza a hacer pucheros.- No pasa nada gordito, lamento haber gritado- le doy un beso en su pequeña cabecita y hago lo primero que se me viene a la mente, y digamos que no pienso mucho ya que Allen sigue llorando.

Con cuidado me agacho sobre la cuna de Kim y dejo a Andy ahí.

-Cuidas a tu hermanito, Kim, ahorita regreso ¿sí?- ella se pone a aplaudir y se sienta rápido para estar con su hermano. Tate me dijo que no podía decirle a Kim que ellos eran sus primos, para ella siempre serían sus hermanos porque crecerían juntos así que decidí hacerle caso a mi amiga.

Me agacho un poco más hacia la cuna de los niños para alcanzar el bastón y cuando lo cojo dejo salir un gran suspiro. Mientras voy caminando hacia la puerta intento cantarle a Allen y arrullarlo, eso pareció funcionar con Andy.

Abro la puerta y me encuentro con una agradable sorpresa.

-¿Todo bien?- pregunta Drake preocupado y niego con la cabeza. Sin querer mis lágrimas salen y mi amigo me abraza con cuidado de no aplastar al niño.- ¿Qué sucede?

-No puedo cuidar a los niños yo sola, soy una inútil, ¿qué clase de madre no puede cuidar a sus hijos? Me siento tan estúpida, Drake.

-Hey eso sí que no- dice molesto.- No eres ninguna inútil o una estúpida, eres una persona que tuvo un accidente y se está recuperando de eso, es normal que no puedas hacer las cosas como antes y que te sientas así, te lo digo por experiencia. ¿Y adivina quién me levantaba el ánimo? Tú. Ahora yo seré el que te dé ánimos y te ayude. Por cierto, pásame a Allen, yo lo calmo.

Le entrego al niño y limpio mis mejillas con mis dedos.- Pasa, iré por Andy y Kim que los dejé en la misma cuna.

-Yo quiero ver eso- dice emocionado y me acompaña a la habitación.

Nuestras risas no se hacen esperar al ver la escena de Kim metiendo su dedo en la nariz de su hermano. Ella nos mira y saca el dedo.

-¡Nino!- Kim sonríe de oreja a oreja y luego mira su dedo, su ceño se frunce y hace una mueca de asco.

-Ay Kimmy- me acerco y le limpio su dedo con la sábana. Luego tomo a Andy antes de que Kim le haga otra cosa.

-Vamos a la sala- me dice mi amigo mientras se acerca más a la cuna para cargar a Kim quien le extiende luego los brazos.

Me dejo caer en el sillón un poco cansada, Drake se sienta a mi lado pero no me pone atención, está más atento en calmar a Allen que poco a poco se tranquiliza. La escena es muy linda, nunca pude imaginarme a Drake con hijos propios, él es un mujeriego de primera clase así que nunca tuve la necesidad de imaginármelo así, pero ahora que lo veo haciéndole cariños a Allen y a la vez cuidando de Kim que gatea en el suelo, puedo imaginármelo perfectamente cómo sería con sus hijos.

-¿Qué tanto me miras?- dice tímidamente con una sonrisa.

-Te miras lindo con un niño en brazos- admito sonrojándome, nunca pensé decir eso en voz alta.

Eso parece divertirle ya que sonríe más.- Bueno, hay que admitir que sólo me miro bien con tus hijos en mis brazos. Nos parecemos ¿no?

-Drake, ¿tienes novia? ¿Estás saliendo con alguien?- pregunto abruptamente.

-Uh ninguna de las dos cosas, ¿por?

-No sé, quería saberlo, creo que hay muchas cosas en las que debemos ponernos al corriente ya que yo no las recuerdo.

-No salgo con nadie, aunque sí me gusta alguien.

-¿Sí?- digo emocionada.- Bueno a ti siempre te gustan todas- respondo casi inmediatamente.

-No, Brooks, ésta vez sí me enamoré.

No puedo ocultar la sorpresa en mi cara al escuchar sus palabras, suena tan sincero, pero él se suelta riendo así que supongo que me ha jugado bien la broma.

-Que bromista, ja ja.

-¿Por qué bromista? Te estoy diciendo la verdad mujer.

-¿Y por qué te estás riendo? No sabes mentir, eso si no lo he olvidado.

-No porque me ría quiera decir que estoy mintiendo.

-Tú si eres así.

-Lyn, de verdad estoy perdida y locamente enamorado de esa chica, me trae babeando- ahora si lo dice serio y termino por creerle.

-Vaya, me estás diciendo la verdad, ¿quién es la afortunada?

-No te diré.

-¿Por qué? Me siento bastante ofendida ahora mismo.

-No es el momento, luego te diré.

-¿Me lo juras?- entrecierro los ojos inspeccionándolo bien, esperando detectar cualquier rastro de mentira.

-Te lo juro, pequeña, quizás te lo diga pronto.

-Bueno.

*****

-¿Cómo se encuentra el pastelito más bello del planeta?- en lugar de responder me solté riendo.

-Tengo un amigo psicólogo yo que recuerde, si quieres puedo pedirle una consulta para ti y ver qué trauma tienes con los postres.

-Ja ja, qué graciosa me saliste.

-Lo sé, soy comiquísima- escucho su risa y una extraña sensación en mi pecho se hace presente. Quizás es la soledad de que Tate no está conmigo, no tengo con quien hablar y hoy Wyatt es la primera persona con la que hablo en lo que va del día.

-¿Estás en casa?- pregunta él.

-No, salí corriendo al súper.

-Pastelito, deja ese sarcasmo o no te doy pastelitos.

-¿Pastelitos? ¿De qué hablas?

-Abre la puerta sonsa, traje comida.

Camino rápido hacia la puerta con una sonrisa en los labios, pero al abrirla ésta se borra.

-Hola, pastelito- dice Wyatt pasando a mi casa para darme un abrazo y un beso en la mejilla, me quedo en mi lugar viendo hacia ese par de ojos cafés que no dejan de vernos a su hermano y a mí.

-¿Por qué no me dijiste que él también estaba aquí?- le susurro en su oído.

-¿Ibas a abrir si te decía que mi hermano estaba aquí?- niego.- ¿Ves? Por eso no te dije nada.

-Aún puedo cerrar la puerta.

-Que ruda, pastelito- dice con un mohín de diversión.- Me gusta.

Mis mejillas se calientan un poco más de lo normal pero al ver la expresión de enfado de William todo rastro de alegría en mí se borra.

-¿Piensas quedarte ahí parado todo el día o vas a pasar?

-¿Cómo estás?- pregunta en su lugar mientras entra a la casa.

-Bien.

-¿Y los niños?

-Están durmiendo la siesta.

-¿Puedo...?

-Sí, supongo que ya sabes cuál es su habitación- William asiente y se va directo a la habitación de los niños.

-Eres demasiado mala con él- refunfuña Wyatt.

-Lo siento pero tu hermano con sólo verlo me saca de quicio.

Parece hacerle gracia mi comentario porque niega lentamente pero a la vez sonríe.- Él y yo tenemos la misma cara y yo no te saco de quicio.

-Eso es lo que tú crees- bufo con diversión.

-Eso me dolió aquí- dice señalando sobre su pecho en el lado derecho.

-O tienes una dextrocardia o no sabes dónde queda el corazón.

-Reprobé anatomía- se excusa torpemente bromeando.- ¿Cómo te sientes?

-Sigo viva y es lo que cuenta ¿no?

-¿Y Tate?

-Sus papás tienen problemas, ayer se fue y todavía se encuentra allá.

-¿Te quedaste sola ayer?

Niego.- Papá se quedó conmigo, pero él no sabe que Tate aún sigue con sus padres, él piensa que llegará hoy, no puedo alejarlo tampoco de mamá- Wyatt hace una extraña mueca que no supe descifrar.

-¿Entonces no tienes con quién quedarte hoy?

-¡¡Papi!!- no alcanzo a responderle ya que escuchamos el grito efusivo de Kim de repente, aquél idiota ya despertó a la niña. Muy apenas escucho los susurros de William, quiero ir a decirle que se calle y de paso enterrarle un biberón en el ojo.

No pasan unos cuantos segundos cuando William regresa a la sala con Kimmy en brazos, la pequeña tiene recargada su cabeza en el hombro de William y toma con fuerza la camisa entre sus dedos.

-Hola, panquesito- le dice Wyatt y Kim le sonríe ampliamente pero luego es distraída cuando William comienza a darle besos por toda la cara y ella carcajea.

-Harás que se despierten los gemelos- murmuro con fastidio y él para.

-Lo lamento- y como si fuera una psíquica escucho un grito desde la habitación. William se pone completamente rojo de la cara y yo le lanzo una mirada de odio, es un maldito genio.

-Ya voy yo por él- dice Wyatt intentando calmar los ánimos que su estúpido hermano ha creado.

-Yo voy por él- dice William marcando un territorio que claramente no tiene.

-Creo que ya has hecho mucho, William- digo yo.

-Yo lo decía porque Wyatt batalla para cargar niños.

-Yo me las arreglo ¿sí?- replica Wyatt y se va sin más.

Poco después Wyatt regresó con Andy en brazos, a simple vista parecía no batallar mientras lo mecía en sus brazos, pero cuando le pedí que me lo pasara batalló tanto que estallé en risas, ahí supe que William no mentía.

Después de pasar un rato jugándole bromas a Wyatt sobre su pésima forma de pasar niños, de hablar un poco de cosas sobre mi pasado y además de lanzar comentarios sarcásticos hacia William, pasamos al comedor.

Wyatt me ayudo a poner la mesa, William intentó quitarme a Andy pero recibió un manotazo a cambio; nadie debe intentar quitarme a mis niños. Pero al final tuvo que ir por Allen que empezó a llorar.

-Escuché que no hay quién se quede contigo hoy- dijo William interrumpiendo la plática entre Wyatt y yo, la habitación se quedó en silencio.

-Que chismoso saliste- replico sin verlo a los ojos. No puedo quitarle la vista de encima a mí niño, le quiero tanto a pesar de que no recuerde cuando lo tenía en mi vientre.

-No soy chismoso pero es que se escuchó hasta la habitación y...

-O más bien te quedaste en el marco de la puerta escuchando- le interrumpo volteándolo a ver y cuando nuestros se unen él esquiva mi mirada, claramente le atiné.- Le pediré a Drake que venga.

-Él no se puede quedar aquí- espeta inmediatamente. Elevó una ceja dubitativamente.

-¿Y como por qué no puede quedarse en mi casa?- pregunto recalcando la palabra "mi".

-Es un hombre- me suelto riendo.

-Qué inteligente eres, gracias por ser tan observador.

-A él le gustas, Brooklyn- su respuesta no me toma por sorpresa, muchas personas me han dicho eso sobre Drake, pero es porque somos mejores amigos y malinterpretan las cosas, él no está enamorado de mí, es absurdo y más por qué él me dijo que le gustaba alguien más.

-¿Y si así fuera qué?

-Pues no está bien que se quede aquí contigo, a solas...

-Es mi jodida casa, William, que no se te olvide eso, si no te he echado a patadas de aquí es por Wyatt y por Kim que parece no despegarse de ti- siseo tomando con fuerza el tenedor intentando controlar mi ira.

-Pero...

-De acuerdo, Drake no se quedará, no puedo hacerlo venir hasta acá a éstas horas, ya es tarde- eso parece tranquilizarlo, aunque no lo hago por él, lo hago por mi amigo. Me giro hacia Wyatt.- Wyatt, ¿podrías hacerme el favor de quedarte conmigo ésta noche? Sólo será por hoy.

Estalla la bomba.

-¡No!- vocifera William arrastrando su silla hacia atrás cuando se levanta.- Él no se quedará aquí.

Con un poco de dificultad y haciendo malabares con Andy me levanto de mi silla también y aunque William es más alto que yo no me intimida.

-Tú no eres nadie para decidir quién puede o no quedarse en mi casa.

-¡¡Soy tu pareja!!- grita enojado haciendo que los niños se sobresalten, miro de reojo a Kim que hace pucheros viendo al estúpido de William y a mí.

-Pastelito, Will, cálmense por favor, están asustando a los niños- intercede Wyatt tomándome del brazo.

-Entonces dile al estúpido de tu hermano que deje de interponerse en mi vida, no es mi pareja.

-¡¡Pero lo era, Brooklyn!!- vuelve a decir William.

-Exacto, tú mismo lo has dicho, eras mi pareja, en tiempo pasado, no más.

-No vuelvas a decir eso- gruñe él acercándose en un paso hacia mí, no me retiro, sólo lo veo con más rabia.- Nos íbamos a casar.

Y eso basta para que yo me haga para atrás.- Estás mintiendo.

-Pregúntale a tu cuñado, Wyatt, si eso era verdad o mentira- miro rápido a Wyatt y él agacha la mirada.

-Wyatt....- coloca su mano sobre la mía.

-Will dice la verdad.

-Pe...pero, eso no quiere decir nada- digo menos segura. No me esperaba eso, para nada.

-Claro que dice algo, dice que me amas como yo te amo a ti- William intenta tocarme pero me alejo más.

-Ya cállate, William- espeta Wyatt fastidiado.- Pastelito, me encantaría quedarme contigo, pero hoy tengo que trabajar.

-¿Tendrás guardia en el hospital?

Niega.- Creo que no te había dicho que estoy en un grupo...hoy tocaremos en una fiesta.

-Oh, eres artista- murmuro distraída.

-Algo así.

-Me quedaré yo contigo- la tonta copia 2 vuelve a hablar.

-No.

-Brooklyn, deja de ser tan terca por una vez en tu vida.

Avanzo y le doy un golpe en el brazo, él ni se inmuta por ello. Volteo para tomar mi bastón y golpearlo pero Wyatt es más rápido y lo aleja de mi alcance.

-Wyatt, dame mi bastón.

-Aunque muero por ver cómo golpeas a mi hermano con tu bastón, si dejo que lo hagas mamá me mata.

-¿Le tienes miedo a tu madre?- bufo intentando no reírme, soy una máquina de constantes cambios de humor. Cada vez que estoy con Wyatt sólo quiero reír y todo parece más fácil, incluso mi amnesia la hace más llevadera; pero cuando estoy con su estúpido hermano mi instinto asesino se activa y sólo quiero golpearlo y encajarle un cuchillo varias veces en sus intestinos.

-Si la vieras cuando está enojada créeme que hasta tú le tendrías miedo.

-Mamá ama a Brooklyn, estoy seguro que la dejaría golpearme, es más, creo que la ayudaría- dice William.

-¿Ella me conoce?- le pregunto a Wyatt y éste asiente.- No la recuerdo.

-No te preocupes, luego la volverás a conocer, nuestros padres y hermana se mueren por venir a verte sólo que se los hemos impedido.

-Muy mal de tu parte, Wyatt- le reprendo y él sonríe.

-No nos desviemos del tema ¿sí? Me quedaré esta noche aquí- y luego él dice que yo soy la terca.

-Ya dije que no, prefiero quedarme sola.

-¿Vas a poder con los niños en la noche?

-Yo me las arreglaré.

-Pastelito, él también es su padre, entiende que necesitas ayuda por el momento- dice con voz aterciopelada Wyatt.- Por favor, deja que se quede sólo por hoy, mañana llega Tate y si no lo hace me quedo yo ¿vale? Estaré tranquilo si él se queda aquí a ayudarte.

Me quedo callada viéndolo directamente a los ojos, es cierto que batallaría con los niños pero puedo apañármelas sola, pero tengo miedo que por una torpeza mía ellos salgan lastimados. Maldición, esto es difícil de decidir, no quiero a ese idiota cerca de mí.

-Se quedará en el sillón- Wyatt me abraza.

-El sillón es incómodo- dice William y Wyatt le da un rápido bastonazo.

-No te quieras pasar de listo y cállate. Gracias, pastelito.

***********************

Y aquí tienen su capítulo!!!! ¿¿Qué les ha parecido? Espero que les haya gustado, perdón por no haber actualizado antes pero mis vacaciones empezaron literalmente del asco :'( 

En fin, nos seguimos leyendo pronto, gracias por leer <3

Continua llegint

You'll Also Like

3.9M 226K 105
Libro uno de la Duología [Dominantes] Damon. Un hombre frío, amante de los retos, calculador... decidido. Se adentra en un mundo desconocido, donde l...
383 84 17
¡¡¡SEGUNDO LIBRO!!! DE ✨No son raros, son especiales✨ Celia y Eder empiezan una vida más tranquila juntos cuando una llamada les sorprenden y vuelven...
4K 223 12
Quién diría que ella es la chica mas buscada del mundo. Desde pequeña ha sido entrenada por los mejores para algún día poder coger el mando de la ma...
33.7K 1.3K 23
¿Que pasaría si te sintieras completamente atraída por la prima de tu nueva compañera de trabajo? Descubre la historia de Chiara una artista emergent...