¿Te burlas de mí?

Oleh mariia_mcfly

1.4M 77.8K 9.1K

Dafne comienza una nueva etapa en su vida dispuesta a convertirse en alguien con un gran futuro. Lo tiene tod... Lebih Banyak

¿Te burlas de mí?
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3 (Parte 1)
Capítulo 3 (Parte 2)
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Capítulo 46
Capítulo 47
Capítulo 48
Capítulo 49
Capítulo 50
Capítulo 51
Capítulo 52
Epílogo

Capítulo 42

17.2K 1K 59
Oleh mariia_mcfly

24 de febrero de 2016

Pi... Pi... Pi... Pi...

¡Qué alguien pare ese maldito ruido, me está dando dolor de cabeza! Es como si por cada pitido me dieran un martillazo en el cráneo. Quiero protestar, pero cuando intento abrir la boca es como si la tuviera pegada. Parpadeo sin cesar intentando adaptarme a la luz, pero parece algo imposible. ¿Es que han puesto un foco delante de mis ojos?

Hago el mayor esfuerzo de mi vida para mantener los ojos abiertos y aun así, apenas consigo ver. Alguien se pone delante de mí y en un principio solo veo una mancha borrosa, al cabo de unos segundos distingo un doctor.

―Hola Dafne, por fin despiertas ―dice con una media sonrisa―. Soy Víctor, ¿te acuerdas de mí?

Su nombre me suena, al igual que su cara, pero no consigo saber de qué. Frunzo mi ceño provocándome algo más de dolor de cabeza, pero finalmente logro saber de qué lo conozco. Es uno de los amigos de Daniel.

Quiero decirle qué sé quién es, pero cuando voy a hablar mi lengua está demasiado seca como para permitírmelo. Él se da cuenta de lo que me pasa y me acerca un vaso de agua, al final tiene que dármela porque mis brazos están demasiado débiles como para levantarse. Estoy bebiendo agua cuando me doy cuenta de que respiro gracias a unos tubitos que hay en mi nariz, ¿tan mal estoy?

―¿Ahora mejor?

―Sí... ―Susurro, mi boca sigue estando seca―. Yo... Sé quién eres.

―Me alegra oír eso. Te has dado un fuerte golpe en la cabeza y has perdido mucha sangre, no sabíamos cuando ibas a despertar ni cómo. ¿Qué es lo último que recuerdas?

―Recuerdo... Luces de policía y sirenas.

―¿Nada más?

Voy a decir que no cuando todo viene de golpe a mí. Yo hablando con mi padre, dándole el cheque que le robé a Daniel, peleando con él cuando vemos a la policía venir... De pronto estaba en el suelo con Nacho hablándome y un momento después ya no era nadie.

Recordar todo esto hace que me ponga nerviosa. Me cuesta respirar y mis pulsaciones aumentan. El pitido que oía antes, ahora es mucho más constante. Quiero arrancarme todos los cables que me tienen unida a este sitio y marcharme, pero Víctor me ha agarrado por los hombres y una enfermera se ha acercado a nosotros.

Los párpados me pesan y poco a poco mi respiración se va tranquilizando. Sigo teniendo esa sensación de pánico, pero lo único que quiero hacer es dormir.

―Tranquila Dafne, ahora estás a salvo.

(***)

Cuando vuelvo a despertar, el dolor de cabeza ha desaparecido por completo. Oigo murmullos a mi alrededor, pero me da miedo abrir los ojos no sea que vuelva a encontrarme mal. Una mano agarra la mía con fuerza y es ese simple gesto de cariño el que hace que quiera ver quien está conmigo.

Abro los ojos y encuentro a mi madre mirándome, inmediatamente una lágrima rueda por su mejilla. Quiero decirle que todo está bien, pero no me da tiempo a nada porque ya me está abrazando.

―Es mi culpa y solo mía. Casi te mata y es porque yo le he dejado.

―¿Qué... dices? ―digo con voz rasposa.

―Lo siento tanto. Él volvió y yo creía que había cambiado. Le conté de vosotras, eso era lo que él quería, saber a quién podía sacarle dinero. Le dije todo de ti y casi te mata.

En un principio no sé de qué habla, habla tan rápido y de algo de lo que no tengo ni idea, así que me cuesta comprenderla. Poco a poco todas las piezas van encajando y es cuando lo comprendo. Mi padre volvió a Sevilla, engañó a mi madre y le hizo creer que la quería, pero lo que en realidad buscaba era saber a cuál de sus hijas podía sacarle algo de dinero. Mi madre sigue enamorada de él y nunca podría pensar que haría algo por el estilo, así que le contó todo sobre nosotras.

―No es tu culpa, no lo es.

―Sí, sí que lo es. ―Se separa de mí y su llanto se intensifica al ver el mío―. No llores, aquí la única que puede hacerlo soy yo porque soy tonta.

―No eres tonta, te ha engañado.

Sé que quiere volver a llamarse tonta, pero se calla porque la puerta de la habitación se abre. Mi hermana y mi abuela entran y vienen directas a mí, mi madre se va a una esquina para poder llorar en silencio. Las dos hablan a la vez y no entiendo prácticamente nada, pero estoy tan feliz de verlas qué me da igual.

―¿Estás bien? ―pregunta Iris cuando las dos parecen haberse tranquilizado.

―Yo sí, pero tú estás gordísima.

―Vale, estás perfectamente. ―Cruza sus brazos sobre su pecho―. Y no estoy gorda, sino embarazada de siete meses.

Sonrío. En realidad no está para nada gorda, pero quería que no se preocupasen por mí y esa ha sido la mejor forma que se me ha ocurrido para hacerles ver que estoy bien. Antes de que pueda decir nada más, mi abuela se ha interpuesto entre ambas y se ha lanzado a darme un abrazo.

―Por fin abres esos ojos tan preciosos que tienes, los echaba de menos ya.

―No hace falta que me hagas tanto la pelota.

―Tendré que darte mimos mientras te recuperas, así lo harás más rápido.

―No sé si podré soportar tanto cariño.

―Sí que podrás. ―Su sonrisa se convierte en una mueca cuando empieza a llorar―. Casi me muero cuando nos han llamado para decirnos que estabas en el hospital, pero creo que he muerto cuando me han dicho que te había pasado.

―¿Cuántos tiempo llevo aquí?

―Dos días.

―Que esta sea la última vez que no nos cuentas que tienes un problema tan grave, somos una familia y estamos para apoyarnos y ayudarnos.

―Lo siento.

―A partir de ahora quiero que me cuentes hasta las veces que vas al baño.

―Está bien...

―Nada de está bien ―dice ahora Iris―. ¡No te haces una idea de lo mal que lo hemos pasado! Es que no comprendo cómo puedes ser tan kamikaze.

―Tú habrías hecho lo mismo si estuvieras en mi situación.

―No lo creo.

No sé cuánto saben sobre lo que en realidad ha ocurrido, ni si quiera sé dónde está mi padre (ese mismo que casi me mata). Solo sé que si de nuevo me hacen elegir entre el bienestar de mi familia o cualquier otra cosa en el mundo, siempre elegiría a mi familia.

Mi madre sigue llorando en una esquina, mi abuela amenazándome si no le cuento las cosas y mi hermana matándome con la mirada, pero todas parecen recomponerse cuando llaman a la puerta. Víctor entra y comprueba todos los aparatos que me rodean.

―¿Cómo te encuentras?

―Mejor que la última vez que desperté.

―Has tenido un ataque de pánico, es más común de lo que crees.

―¿Tú eres mi doctor?

―Te trajeron directamente aquí y yo te he atendido desde entonces, Daniel no ha dejado que me vaya muy lejos.

―¿Él está aquí?

―No se ha movido del hospital desde que tú llegaste. ―Se sienta en la silla que antes estaba ocupando mi madre―. ¿Te encuentras lo suficientemente fuerte como para responder algunas preguntas sobre lo ocurrido?

―Yo no sé qué decir.

―Será Nacho quien venga a hablar contigo, una cara conocida puede que no te de tanto miedo.

―Puedo intentarlo.

Sonríe y aprieta mi mano intentando darme ánimos. Más que hablar con Nacho quiero saber de Daniel, pero es probable que me odie por robarle dinero. Estoy segura de que mi padre, si lo han cogido, ha hecho todo lo posible por hacerme quedar como única culpable de lo ocurrido.

Todas se van de la habitación después de darme un beso y un abrazo, para que después entre Nacho. Él se queda a los pies de la cama y me mira con el ceño fruncido, esto no empieza demasiado bien.

―Hasta después de dos días inconsciente y casi haberte desangrado en mis brazos, estás guapa.

―¿Gracias?

―Y encima eres la tía con más suerte del mundo, te apuñalan y no te tocan ni un órgano.

―¡Nacho, cállate! ―dice Víctor―. ¿Quieres que le de otro ataque de pánico?

―Solo quiero que sepa cuanto la admiro.

―Bien, pues cierra ya la boca o te echo de aquí.

―Vale, ya paro. ―Me mira y me guiña un ojo―. Eres mi ídolo.

―Nada, que no tienes filtro.

―Sabes que no, ya me conoces.

―Empieza a hacerle preguntas o te echo de verdad.

―¡Vale! ―Rueda los ojos―. Dafne, voy a preguntarte unas cuantas cosas y te contaré todo lo que quieras saber solo si estás preparada.

―Lo estoy.

―Si en cualquier momento quieres parar, solo dímelo.

―Está bien.

―¿Puedes decirme desde cuando tienes contacto con tu padre?

Le cuento todo. Como me envió flores y notas diciendo que lo sabía todo sobre mí, como apareció un día amenazándome y agrediéndome. Cómo me pidió dinero, cómo me hizo un corte en forma de amenaza...

―¿Cómo conseguiste el dinero?

―Yo no quería robar a Daniel.

―Solo cuéntame lo que hiciste.

―Vi su talonario y escribí un cheque. Sabía que en cuento mi padre fuera a cobrarlo avisarían a Daniel y lo detendrían. Yo no tenía dinero para darle y quería que fuera a la cárcel, pero si yo se lo contaba a la policía él haría daño a mi familia. No quería robar a Daniel, lo prometo. De verdad que no quería. Él me odia por esto, lo sé.

He empezado a llorar y vuelve a faltarme el aire. La máquina de nuevo pita incesantemente. Víctor se pone de pie y toca un botón que hay detrás de mi cama, después se pone delante de mí y me mira directamente a los ojos.

―Cuenta y respira conmigo. Uno...

―Uno...

―Dos.

―Dos...

Llegamos hasta diez y ya estoy mucho más tranquila. Mi respiración va al ritmo de la suya y ya no tengo esa sensación horrible de que se me va a salir el corazón del pecho. Ahora hay varias enfermeras en la habitación, todas mirándonos sin saber qué hacer, y Nacho junto a ellas tiene la mayor cara de susto que jamás haya visto.

―Todo está bien, podéis iros.

―¿Estás bien? ―pregunta Nacho―. Siento haber hecho que te pongas así.

―Estoy bien.

―Creo que deberíamos dejarla sola ―dice Víctor―, tiene que descansar.

―No, antes quiero saber por qué la policía vino a por mi padre y a por mí.

―No fuimos a por ti, sino a por él.

―¿Por qué?

―Daniel se dio cuenta de lo que habías hecho y me lo contó. Vicky, Álex y él me ayudaron a investigar, te estuvimos observando durante un tiempo y vimos lo que pasaba.

―¿Por qué no me dijisteis nada?

―Era peligroso, tú tenías que actuar normal. Necesitábamos tener pruebas de lo que ocurría y por eso Vicky puso un micro en tu bolso. No se va a librar de unos cuantos años de cárcel y mucho menos después de lo que te ha hecho.

―Gracias.

―Debes agradecérselo a ellos, te quieren tanto que son capaces de hacer cualquier cosa por ti.

Con esto, Nacho se despide de mí y se va sin dejarme preguntarle nada más. Víctor comprueba de nuevo todos los aparatos y se despide de mí. Antes de que llegue a la puerta ya lo he llamado.

―¿Está todo bien?

―¿Daniel está muy enfadado?

―Está enfadado, pero no contigo.

―¿Podrías decirle que venga a verme?

―Lo haré.

Sonríe y me deja sola en la habitación. Así que todos sabían lo que me pasaba desde hacía tiempo, pero me han dejado seguir con mi plan kamikaze para poder atrapar a mi padre. Estoy tan agradecida con ellos que no sé qué podré hacer para recompensárselo. Aun así, sigo arrepentida de lo que le he hecho a Daniel... Por más que él me haya ayudado desde la sombra, no tiene que haberle gustado mucho que le haya robado.

Cuando pasan los minutos y mi habitación vuelve a llenarse de gente, pero Daniel no aparece, todas mis sospechas se confirman. Él está muy enfadado conmigo y no va a querer saber nada más de mí en la vida.


―.―.―

¡Y aquí dejo un nuevo capítulo! Espero que se hayan resuelto algunas dudas que en el anterior pudieron surgir, pero creo que aún tengo que explicar algunas cosas que no se quedan del todo claras.

¿Qué creéis que pasa con Daniel? ¿Y qué pasará después de todo esto?

¡Hasta la semana que viene!

Lanjutkan Membaca

Kamu Akan Menyukai Ini

5.8M 420K 120
Gracias, gracias :) #2 30/08/16 #1 10/09/16 #1 22-23/09/16 #1 25-27/09/16 #3 28/09/16 Código de r...
8.5K 323 8
Buena esta es mi vida siempre sufrí bullying y es momento de afrontarlo
1.4M 77.8K 55
Dafne comienza una nueva etapa en su vida dispuesta a convertirse en alguien con un gran futuro. Lo tiene todo: una vida feliz, una familia peculiar...
1.2M 82.1K 35
Aspen Young quebranto sus propias reglas al cometer el error de dormir con su jefe y las consecuencias de esa noche no solo despertarán los deseos es...