-Harry -Anne habló despacio- Bueno, cuando nos fuimos de casa, tenías 3 años... -comenzó a hablar su mamá y se acercó a él- Tu padre, Des... Me hizo prometer que cuando tuvieras 18 años volverías a vivir con él.
-¡¿Y no me comentaste nada sobre eso?! ¡No puedo creerlo mamá!
-Pensé que tal vez lo recordarías.
-¡¿Oh en serio?! -gritó sarcástico, no podía contenerse- ¡Pues eso no parece ahora!
Fue interrumpido por el timbre de la casa, su madre se disculpó y bajo a abrir.
-¡Anne! -saludo Maura entrando a la propiedad.
-Hola. ¿Dónde está Harry? -preguntó un chico rubio detrás de ella.
-Está arriba Niall, sube a verlo.
Sin decir nada más subió corriendo las escaleras y entró en la habitación de su mejor amigo.
-¡Harry!
Gritó el chico entrando a su habitación rápidamente, se lanzó hacía su amigo y lo estrechó en un abrazo reconfortante.
-¡Niall! -sollozo el ruloso y lo abrazó.
-¡Oh por dios! ¡No puedes irte!
-Es muy tarde Niall, mi madre compró el voleto de avión, me iré en unos minutos más.
-Pero... ¿Y nosotros? ¿Que pasará cuando... Te vayas?
Los ojos del rubio estaban cristalinos y tenía las mejillas sonrosadas.
-Lo lamento Niall, de verdad.
Comenzó a llorar y el rubio lo abrazo más fuerte, pronto sus lágrimas cayeron sobre sus hombros y las suyas en los de él, su amistad había permanecido por 13 años y ahora simplemente era borrada.
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No se percató de cuánto tiempo había durado el viaje en avión, porque simplemente iba dormido.
Al llegar buscó por todos lados a su padre, aunque en realidad no sabía quién era o como era, hasta que a lo lejos vio a un hombre con un cartel de color blanco en dónde se leía; "Harry Styles" y después de bufar se acercó a él temeroso.
-¿Harry? -el hombre mostró una dentadura blanca y bien cuidada.
-Soy yo -no mostró ningún rastro de sorpresa o alegría- ¿Eres mi padre?
-El mismo.
El hombre volvió a sonreír y Harry hizo un esfuerzo por no lanzarsele encima y comenzar a gritarle un sinfín de palabrotas y malos tratos.
-Venga pequeño, dame un abrazo.
Dudó por un segundo y retrocedió un paso, el hombre cambió su rostro de felicidad a uno confundido y bajó los brazos.
-¿Harry? -murmuro.
-El mismo -habló desafiante.
-¿Sucede algo?
-No. ¿Podemos irnos ya?
El hombre asintió tranquilo y le ayudó a cargar algunas maletas.
El resto del camino, Harry ni siquiera se molestó en mirarlo.
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-Y... Llegamos -anunció su padre bajando del auto- Te ayudare de nuevo con tus maletas.
-¿Es en serio? -un rastro de asombro comenzaba a mostrarse en su cara.
-¿Que pasa? ¿No te gusta?
-No no, nada de eso... Es que es.. Wou.. ¿Aqui es? ¿En serio? -miró la casa con más atención.
La casa era muy bonita, y grande, de un lindo color blanco brillante.
-Si, siéntete cómodo, al fin de cuentas es tu nuevo hogar.
-Aún no lo creo -por primera vez desde que estaba ahí, sonrió- ¡Es asombrosa!
-Que bueno que te guste, ahora tienes que descansar, te diré cual es tu habitación, mañana tenemos que levantarnos muy temprano.
-¿Porque? -su sonrisa se borró.
El hombre no se molestó en contestar hasta que bajaron las maletas del auto y entraron a la casa.
-Porque vendrá alguien a quedarse con nosotros y... -lo interrumpió.
-¿En serio? ¿Es mujer? ¿Crees que sea guapa? ¿Cuanto tiempo se quedará?
-¿De que hablas? -su padre rió mientras negaba con la cabeza- Se quedara cerca de 1 año, viene de intercambio a la escuela en la que tu estudiaras, no había más cupo así que ofrecí nuestra casa para que se quedará aqui, es demasiado grande para nosotros dos, además, debo agregar que es un chico de tu edad.
-¿Un chico? ¡Pff! No te aseguro que me lleve bien con él, más le vale que no se acerque a mis cosas, odio que alguien más las toque.
-Solo ve a dormir -el hombre rió- sube por las escaleras y en la primera puerta de enfrente es tu habitación.
-Como sea, gracias... ¿Papá?
El hombre sonrió y está vez, antes de subir a su habitación Harry le dio un cálido abrazo.
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-¡Harry!
-¿Si? -contestó adormilado- ¿Que pasa?
-¡Vistete hijo! -su padre gritó desde abajo- ¡En 35 minutos nos vamos!
Diablos, se habia olvidado de que irían a recoger al tal chico de intercambio, abrió la primera maleta que encontró y sacó algo de ropa <<Unos jeans oscuros rotos, una camisa negra y calzado del mismo color>> después de vestirse, bajó a la cocina con su padre.
-Buenos días jovencito. Preparé el desayuno, come algo, iremos por el muchacho.
-Bien.
Después de servir su desayuno que consistía en huevos revueltos con tocino, se sentó enfrente de su padre.
-¿Y? -preguntó con el alimento en su boca, Des rió.
-¿Y, qué? ¿De que hablas?
-¿No me dirás como has estado? ¿Ni que ha sucedido en éstos 15 años?
-Nada nuevo -dijo despreocupado y dirigió la vista a su plato.
-¿Tienes novia? -le soltó de repente y Des se atragantó con el tocino.
-¿Que? -preguntó una vez que tosio.
-Que si tienes novia. -el chico insistió.
-No -lo miro serio- No después de tu madre, nunca salí con nadie más.
-Oh, creo... Creo que está bien.
-Si Harry, lo está. -sonrio amable.
-¿Que haremos después de ir por el muchacho? -cambio de tema.
-¡Oh no! -Des se paró sorprendido- ¡Lo olvide por completo!
-¿Que olvidaste? -preguntó tranquilo.
Des caminó por toda la casa, tomó una hoja de papel y un lapicero y comenzó a hacer garabatos.
-¿Papá? ¿Que olvidaste? -insistió.
-¡Olvide la reunión que organize por tu llegada y la del muchacho!
-¿En que puedo ayudarte?
-No lo se, tal vez tengamos que posponer la reunión hasta mañana.
-¿Porque?
-Hay muchas cosas por hacer, tengo que llamar a todas las personas de esta lista -le mostró el papel de los garabatos, que en realidad eran nombres de personas que él no conocía- Y mandar a hacer la tarta de cumpleaños para ti, ordenar la comida que se iba a servir y rentar algunas mesas ¡Rayos! ¡Que torpe!
-Tranquilizate papá -limpió su boca con la mano- Yo podría ayudarte.
-¿En serio? Son las 10:35, tenemos que ir por el chico en menos de 25 minutos, tardaremos mucho en llegar al aeropuerto.
-Papá, puedes ir tu por él, yo me quedaré aqui a organizar todo lo de la reunión, puedo hacerlo.
-¿Estás seguro? -preguntó más calmado.
-Claro, tengo 18 años después de todo -sonrió con aire de superioridad.
-Esta bien hijo, estás a cargo de esto.
Anotó algunos números de teléfono en la hoja de los garabatos.
-Gracias, puedes ir por el chico ese.
-Bien, volveré con él para cuando esté la reunión lista.
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Lo último en la lista era ordenar su tarta de cumpleaños.
Ya había llamado a las personas que su padre quería invitar, había rentado las mesas y ordenado la comida. Llamó al número de la repostería que Des había escrito junto a los otros números.
Al final se decidió por una tarta para 35 personas de color verde azulado con relleno de fresas y con un mensaje impreso: "Feliz cumpleaños Hazza".
Había terminado de hacer todo, las mesas ya las habían puesto los encargados, solo faltaba esperar a los invitados.
La comida ya estaba en la mesa en la que iba y había una mujer que se encargaría de servirla.
-¡Hola Harry!
Una mujer corrió hacia el chico con un regalo en la mano, detrás de ella venían más personas.
-Hola -contestó amable aunque no tenía ni la más remota idea de quién se trataba.
-Tal vez ya no me recuerdes -ella le sonrio- Soy tu tía Lacy, la última vez que te vi tenías 2 años y medio.
-Bueno ahora tengo 18 -rió algo irritado, no recordaba a su propio padre y ella esperaba que la recordara cuando la última vez que la vio fue a los 2 años.
-Oh sí, felicidades -le dio el regalo.
-Gracias, lo pondré por allá.
Tomaron asiento y poco a poco fueron llegando los demás invitados, hasta que vio el auto de su padre llegando por el frente de su casa.
-¡Harry! ¡Llegó Des! -lo llamó su tía Lacy- ¿El chico de intercambio viene con él?
-Sí -sonrió nervioso y caminó cerca de la entrada junto con los demás.
-¡Hola familia! -saludo su padre.
La puerta de atrás se abrió, lo primero que Harry vio fue una melena de color marrón oscuro.
Cuando el joven se dio la vuelta su mirada se clavo en la de él.
Lo miró, sonrio tímido y Harry le devolvió la sonrisa, sus ojos eran azules... Nunca había visto un azul parecido, los de él brillaban, su piel era de tez blanca e iba muy bien vestido.
-Hola a todos -dijo un poco tímido y luego sonrió.
Su sonrisa era jodidamente hermosa, y su voz completaba su personalidad para hacerlo completa y jodidamente perfecto.
Harry nunca había visto un ser humano como tal.
-Les presento al chico de intercambio. -habló su padre.
-Mi nombre es Louis Tomlinson -se presentó sonriendo.
A Harry le pareció que nunca había escuchado un nombre más hermoso.
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Esa es la casa de Harreh :'v Imaginenla en la noche y con el clima de Febrero xd
Ya saben como es esto xd
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