“Giro, movimiento de caderas, palmas a la izquierda, palmas a la derecha, palmas a la izquierda, pisad con el pie derecho dos veces, palmas abajo a la derecha, palmas abajo a la izquierda, las manos sobre la rodilla derecha y movimiento de caderas” las chicas me imitaron mientras yo decía, y hacía, los pasos y les di un descanso.
“Muy bien, chicas. Tomaros un descanso para cotillear o lo que queráis” les dije.
Estaba de mejor humor desde que salía con Harry, y eso mis animadoras lo notaban y agradecían.
Han pasado dos meses y creo que no me puedo enamorar más de Harry.
Él sigue siendo un come libros porque después de todo si que le gusta leer, pero es más bromista y menos formal desde que me prometió que me enseñaría al verdadero Harry.
Es coqueto, pero no llega a mujeriego, y solo conmigo.
Liam, Niall y Zayn dicen que preferían al Harry de antes porque ellos son victimas de las bromas de el de ahora y Louis.
Pero Louis prefiere mil veces el verdadero Harry porque es su cómplice.
Subí a las gradas y me senté al lado de Harry después de darle un corto beso en los labios.
“Esos movimientos de cadera me tientan, cariño” dijo guiñándome un ojo.
Solté una carcajada y él sonrió.
“Ahora enserio, a quien tientan es a Louis. Miralo, parece que va a devorar a Kathia” dijo señalando con la cabeza hacía donde la pareja prácticamente lo estaba haciendo.
Reí negando con la cabeza y apoye mi cabeza en su hombro mientras cerraba los ojos.
“¿Pasa algo?” pregunto acariciando mi brazo.
“Ya estamos en el segundo trimestre y mis notas no mejoran, es el último año. Tengo que tomármelo enserio” suspire.
“Pues tómatelo enserio” dijo él.
“Harry, el francés conseguí entenderlo gracias a ti. Pero me quedan Matemáticas y Química. Son mis dos puntos más débiles” dije.
“Bueno, a mi se me dan bien todas las asignaturas, si quieres puedo ayudarte. Ya lo hice con francés” dijo sonriendo con esa sonrisa que me haría tirarme de un puente si él así lo quisiera.
“No sonrías así” murmure mirando embobada sus labios.
“¿Por qué no?” pregunto haciendo aletear sus pestañas fingiendo ser una niñita inocente.
“Sabes que no me puedo negar a nada cuando pones esa sonrisa” dije quitando mi cabeza de su hombro.
“¿A nada?” susurro seductoramente en mi oído y yo reí.
“Eres de lo que no hay” dije riendo.
“Soy especial” dijo el sonriendo.
“Eh, mira. El equipo de fútbol americano esta haciendo las pruebas de admisión. Tu antes eras quarterback, ¿por qué no te apuntas?” dije.
Harry se encogió de hombros.
“Arruinaría mi reputación de come libros de por vida” dijo fingiendo horror.
Yo reí y la pelota de fútbol americano cayó entre los dos.
“¡Eh come libros! ¡Pásanos la pelota!” gritó Jude.
“¡Espera! ¡Mejor que la tire Daisy, seguro que la tira más lejos!” gritó Keith haciendo que todo el equipo, menos Liam, rieran.
Aprete los puños enfurecida y mire a Harry, el cual, los miraba con los ojos entrecerrados.
“Harry” el me miró “Enseñales de que estas hecho” dije sonriendo.
Harry me devolvió la sonrisa y cogió el balón levantándose.
“¡Vamos, Harry! ¡Haz un hotrang!” gritó Louis.
“¡Louis! ¡Eso es de beísbol!” rió Kathia.
“¿Ah sí?” pregunto Louis frunciendo el ceño confundido.
Harry y yo reímos, y yo baje de las gradas para animarlo.
“¡Tirala lejos, Harry!” grité.
Harry miró a Liam y este empezó a correr hacía atrás. El entrenador había dejado de mirar su carpeta y se fijo en lo que pasaba, miraba a Harry, a la pelota, y a Liam. El cual seguía retrocediendo.
Liam paro en la mitad del campo y le hizo una seña a Harry para que se la tirara.
Teniendo en cuenta que Harry estaba en las gradas, y que entre el campo de fútbol americano y las gradas había una bien gruesa pista de atletismo, no creo que llegara a Liam por muy buen quarterback que fuera.
Harry miró el balón y luego miró a Liam con una sonrisa sarcástica.
No se si fueran imaginaciones mías, pero parecía como si se sintiera insultado... porque Liam estaba muy cerca.
El brazo de Harry se echo hacía atrás y lazó el balón.
Todo pasó demasiado rápido para procesarlo.
El brazo de Harry echándose hacía delante con fuerza, el balón pasando a los que se burlaban de Harry, el balón pasando a Liam mientras Harry se sentaba tranquilamente, el balón aterrizando en las manos de un chico que estaba haciendo las pruebas de admisión en el otro lado del campo, el chico cayendo al suelo de culo, todos mirando a Harry con los ojos abiertos como platos y la mandíbula perdida en alguna parte del subsuelo mientras Harry abría su libro y empezaba a leer tranquilamente.
Mire al entrenador, el cual miraba interesado a Harry mientras se acercaba a las gradas.
“¡Eh, chico!” Harry levantó la mirada y la fijo en el entrenador “¿Haces deporte?”
“Si” respondió Harry simplemente.
“¿Fútbol americano?”
“No, eso ya no” dijo Harry volviendo a mirar el libro.
“¿Y ahora que haces?”
Harry bufó y levanto la mirada.
“Boxeo” respondió simple.
“¿Y antes jugabas al fútbol americano?” quiso saber el entrenador.
“Si”
“¿Qué posición?”
“Quarterback” respondió Harry arrancando un jadeo de sorpresa de todos.
Menos de nosotros, claro.
“Dime tu nombre, chico” dijo el entrenador mirándolo con los ojos entrecerrados.
“¿Para que quiere saberlo?” pregunto Harry imitando el gesto del entrenador.
“¿Styles? ¿No serás por casualidad Harry Styles?” pregunto el entrenador poniéndose una mano en la barbilla.
“¿Y qué si lo soy?” bufó Harry echándose hacía atrás en las gradas.
“Pues que querían darte una beca de fútbol en la universidad deportiva más importante de toda Norte América en New York, y tu, la rechazaste. ¿Sabes lo que darían estos chicos por la oportunidad que tuviste tu?”
Valeee, eso si fue una sorpresa.
Harru fulminó con la mirada al entrenador.
“¿A dónde quiere llegar, entrenador?” pregunto Harry entrecerrando los ojos desconfiado.
“Unete a mi equipo”
“No” respondió Harry tajante.
“Contigo podríamos ganar el campeonato interescolar” dijo el entrenador con desesperación en la voz.
Harry se levantó cogiendo su libro y empezó a bajar de las gradas.
“Dije que no”
“Harry, al menos piensatelo”
“No hay nada que pensar, mi respuesta seguirá siendo no” dijo pasando por delante del entrenador.
“Se acabo el entrenamiento por hoy, chicas” les dije a las animadoras y fui hacía donde estaba Harry.
“¿Qué te paso? Eras el mejor, estabas en la cima” dijo el entrenador.
“Me canse” dijo Harry.
“Alguien que tiene esa pasión por el fútbol no puede cansarse”
“Pues yo lo hice” dijo Harry apretando la mandíbula mientras llegaba a su lado.
“Harry...” dije apretando su hombro con una mano para calmarlo.
“¿Es tu chica? Pues mucho mejor, es la capitana de las animadoras, seríais la pareja perfecta” el entrenador recurrió al último recurso que le quedaba, la popularidad.
“No me interesa, no estoy con Daisy porque ella sea popular” dijo Harry dándose la vuelta y empezando a caminar.
“Por favor, Daisy. Convéncelo” me dijo el entrenador.
“Lo intentare, pero no mucho. Que él haga lo que quiera, yo respetare la decisión que tome” dije yendo detrás de Harry.
“¿Ahora intentaras convencerme?” pregunto Harry riendo amargamente cuando llegué a su lado.
“¿Te gusta el fútbol americano?” pregunté tomándolo por sorpresa.
Me miró de reojo y luego volvió a mirar al frente.
“Si” respondió.
“Entonces acepta, si no te gustara no te diría nada, pero ese no es el caso” dije.
“Tengo mis razones, tu no lo entiendes”
“Pues explicámelo” dije.
“No es fácil”
“Nada que sea fácil merece la pena”