He vuelto!!!! Con nuevo capítulo.
Disfrútenlo. :)
-Que dices emm?
- que esperes a que sea él el que te demuestre- le dije
-soy muy impulsiva y pese a mi profesión, que es muy dura aveces soy ingenua e inmadura, por eso me aferro a robin.
- los hombres, Regina son egoístas y tu lo sabes, no puedes olvidar eso.
-no, pero es que robin nunca me ha demostrado su egoísmo.
-¡pues claro!- exclame sin poderlo remediar- te lo debe todo.
-EMMA!- la voz de Regina sonaba algo molesta- no vuelvas a decirme eso nunca, me lo dijisteis una ves y sabes cuanto me dolió.
-perdona, porfavor
- verás, emm, el hecho de que yo quise ayudar a robin a realizarse profecionalmente no significa que se convierta en un sumiso a mi, cuando amas una persona, lo más normal es que lo ayudes, que te afanes porque se acerque a ti en la ética en la personalidad e incluso en la profesión.
- si, todo eso lo se.
-entonces no vuelvas a decirlo.
- te aseguro que no lo haré, pero es la verdad Regina.
-mira emm, si yo supiera que robin pertenece a mi lado por lo que me debe, ahora mismo le diría adiós.
- tampoco es así gina.
-so lo es, no quiero que me amén por caridad, por agradecimiento o por compasión, yo quiero que me amén como mujer que soy. Ni siquiera cocinar, pero tampoco aprenderé, no me interesa ser la mujer de robin para ser su doncella o su cocinera. Quiero ser su mujer en el cuarto y que me desee tanto como me ame... Tengo que decirte que para que quede claro tpdo esto, que en mi despacho hay un arquitecto muy inteligente por cierto, que se que me desea y que me ama., que de buen grado me lo diría, pero el respeto que impongo yo en la oficina calla la boca de este compañero.
- quien es gina? Puedo saberlo?
- que más da nunca le voy a corresponder. El hombre de mi vida es robin y no habrá nunca otro.
- el amor no es eterno Regina.
-no? Y cómo tu amas a killian sabiendo además que no lo ves todos los días, porque aparece de tarde en tarde, cuando puede, debido a su trabajo?
- yo no soy tú. Tu tienes medios para vivir independiente te, para elegir quien te da la gana y además debes meterte esto en la cabeza: el amor nunca es eterno, ni el tuyo, ni el mío.
- es que yo no camino por ese sendero: a mi me motivo robin como hombre, como amigo y como amante.
No se que nos dijimos después, recuerdo que Regina, a última hora de la tarde, se vistió y de fue diciéndome desde el vestíbulo que llegaría tarde.
Me acosté después de cenar. Sentí a Regina regresaba cuando el reloj del vestíbulo daba las 12 campanadas. En cambio, no senté entrar a robin, lo cual me hizo pensar que se había quedado en casa de zelena.
Me pregunte que pretexto le pondría a su mujer al día siguiente.
No vi a robin hasta el mediodía y le dije a la doncella que serviría la mesa. Tampoco podía extrañarle a Regina, a fin de cuentas, servía la mesa más de una vez, y todo por como saber como iba aquella trama que yo conocía y Regina ignoraba.
- no te sentí llegar, robin- decía Regina con su habitual ternura.
Por encima de la mesa, el muy ladino le asió los dedos. Yo pensé que todavía no era el momento para que robin le pidiera la separación.
- de madrugada llego el jefe y tuve que ponerlo al tanto de los asuntos de la nueva reglamentación.
-¿y tu porque?
-son las cosas que suceden Regina.