JIMIN
Terminaron las clases. Sinceramente no puse atención a ninguna porque estaba perdido en mis pensamientos, fui a mi casillero a dejar mis cosas, mientras las dejaba sentí de nuevo ese olor que me atrae.
—¿Jimin? —dijo Jungkook —continuó— ¿Hoy no usas la colonia?
Volteé a verlo y me puse feliz con tan solo mirarlo.
—No... —respondí.
—¿Por qué? ¿Ya te cansaste de ella? —preguntó.
—No, no eso... Es solo que... —dije.
"Porque cada vez huelo ese olor de menta tuyo..." lo miré de nuevo y el me estaba sonriendo "...No puedo evitar ponerme..." pensé. De inmediato me sonrojé ante tales pensamientos que estaba teniendo.
De repente apareció otra persona interrumpiendo mis pensamientos para nada coherentes.
—¡Ah! Buenos días Jungkook —dijo Hoseok.
—Buenas... ¿Qué sucede? —preguntó Jungkook.
—¿Qué tal huelo? -dijo rascando su cabeza— continuó— Yo también compré la colonia que me dijiste.
De repente algo molesto sentí en mi interior.
—Huele muy bien ¿No?... Se siente muy fresco —preguntó Hoseok.
—¡Si! —respondió Jungkook.
Comencé apretar mis manos formando puños y sin querer solté estas palabras.
—Imitar a otras personas de esta forma... Realmente apestas ¡Tonto! —escupí esas palabras fríamente.
Jungkook volteó a verme con una cara de confusión.
—¡¿Qué?! -dijo Hoseok- continuó- Park Jimin ¿Qué demonios estás diciendo? ¿Quién te crees que eres?
—Cálmate Hoseok, mejor nos vamos —dijo Jungkook.
Yo salí de ahí con un sentimiento amargo e indescriptible, diciéndome por qué demonios dije todo eso. Pero escuchar todo eso de Hoseok y siendo alabado por Jungkook hace que algo dentro de mi duela.
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