Pov Sam.
Aún recuerdo a mi fiel amigo, mi mejor amigo.
Éramos tan felices.
Las salidas a la playa, a fiestas, a casinos, al mall...
Todo eso murió cuando le confesé mi amor, y cuando él me rechazó con su sexualidad.
¿No pudo decírmelo antes?
Eso habría evitado mi humillación.
Y tal vez, hubiese ayudado con mi situación.
Es bastante extraño, la verdad, cuando le conocí no pensé que me empezaría a enamorar de él.
Al principio sólo le veía como un amigo, un buen amigo.
Pero con el tiempo, eso cambió.
Su forma de ser conmigo, sus gustos.
Sus estupideces, su personalidad, su atractivo físico.
¡Pero si esta realmente bueno!.
Me lo comería gustosa.
Pero él no a mí.
¿Y si sólo echamos un polvito?
Mi estúpidez no tiene límites.
Quiero echar un polvo con él y soy Virgen.
Vaya...
Que jodida vida.
A decir verdad, me he vuelto muy insolente.
¿Pero quién no en mi caso?
La vida ahora la veo fatal, como si en cualquier momento se fuera a acabar.
Y no está mal, esta bien, re bien.
Porque así vivo mis días al máximo, eso haré.
Disfrutar cada momento.
Olvidar a mi mejor amigo, y sólo dejarlo como eso.
Un mejor amigo.
Hay más chicos, eso lo sé, lamentablemente me enamoré de él.
Lo bueno de esta situación, es que ayudó a que mi locura no tuviera límites.
Y no los tendrá.
Volveré a ser feliz.
Como antes...
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¡Yolo!, eso es chica, disfruta la vida.
¿Les gustó?
;p a mi sí.