CAPÍTULO QUINCE.
Había algo mal en él.
Pero también en mí.
Llegué a mi habitación y me tiré a llorar largo y tendido. No podía creer que se hubiera ido con ella, tan sólo imaginar lo que podrían estar haciendo en este momento, hacía que perdiera la cabeza. Lloré aún más cuando recordé el cuadro que ofrecían juntos. Él con su playera de tirantes pegada al torso y su holgado y enorme pantalón gastado; ella, con una mini falda más corta que la que le vi la primera vez y una blusa pequeña de red que dejaba ver su sostén. Ambos con el tipo de mirada y actitud que gritan “¡Problemas!”, ambos con la misma forma autoritaria de caminar, ambos eran completamente aterradores, obviamente, Justin más que Selena, pero estaban en la misma onda, en la misma estación, me reí del patético cuadro que Justin y yo ofreceríamos juntos, él, todo un delincuente y yo, todo lo contrario.
Era estúpido que llorara por verlo con otra, él y yo no éramos nada y lo conocí hace poco menos de un mes. No era razonable que me doliera tanto, tal vez no lloraba por él, tal vez lloraba por todo en realidad, todos los cambios que habían pasado en mi vida en tan corto periodo de tiempo.
Seguí llorando, sin saber muy bien por qué, o más bien, sin querer aceptar por qué. Estuve atenta, esperando escuchar el poderoso rugido de su motocicleta, pero el tiempo transcurría y no pasaba nada. Decidí hacer mis deberes y eso me distrajo un poco, al menos dejé de llorar, sin embargo, mis ojos seguían rojos e hinchados.
Estaba de espaldas al balcón, con los audífonos puestos a todo volumen y leyendo uno de mis libros preferidos. No quería saber nada, no quería verlo llegar después de haber estado con ella, moría al imaginar que tal vez podía traerla consigo. Había cerrado el balcón con seguro para evitar futuros dolores innecesarios, no quería estar cerca de él, no quería estar cerca de un chico que va de chica en chica, de cama en cama.
Las persianas estaban arrinconadas a los lados, así que en la pared frente a mí, podía ver el reflejo de algunas sombras que se colaban por el balcón. De pronto, mi respiración se detuvo, era la sombra de una persona fuera de mi balcón, y sabía bien quién era. Bajé el volumen de la música sin voltear y escuché golpes en el vidrio del balcón.
-¡Marissa, abre! –gritó enojado.
Yo volví a subir el volumen y fingí no saber nada. En algún momento tenía que rendirse e irse, sé que debería pagarlo después, pero ahora estaba muy lastimada como para lidiar con él.
Siguió insistiendo por un tiempo hasta que se rindió y se fue, me relajé por completo, pero no duró mucho, pues volvió a mi balcón, pero por lo poco que podía adivinar de su sombra, no estaba tocando, estaba haciendo algo raro con la manija del balcón.
Y de pronto, la puerta del balcón se abrió.
Resistí las ganas de llorar de nuevo y el grito de terror que amenazaba con salir de mi garganta y cerré fuertemente los ojos fingiendo que no estaba pasando nada.
De pronto sentí una brusca mano jalar mi cabello, grité fuertemente, pero nadie me ayudaría, Rosario había ido a comprar la despensa y mi padre estaba en el trabajo.
Justin me arrancó los audífonos de un jalón y pego su pecho a mi espalda. Su boca contra mi oreja.
-Vuelve a ignorarme y te golpearé tan brutalmente que no podrá reconocerte ni tu estúpido padre. –dijo furioso y con voz contenida.
Yo me estremecí y las lágrimas cedieron, rodando por mis mejillas.
-¿Por qué lloras, princesa? –preguntó con voz suave, inocentemente. Incluso parecía sorprendido de que estuviera llorando.
No contesté, no podía ni hablar.
-¡¿Por qué lloras?! –preguntó encolerizado.
-Me… me due… duele. Me duele. –tartamudeé aterrada.
Su mano seguía jalando mi cabello con crueldad, casi sadismo.
Él se acercó más a mí y susurró:
-Te soltaré, pero antes tienes que pedirme una disculpa, ¿entiendes? –dijo en voz baja.
Asentí como pude y susurré un torpe “lo siento”.
-¿Qué? No te escuché.
-Lo… si…ento, lo siento, Justin. No… no volverá a pasar –apenas logré decir.
-Bien. –fue todo lo que dijo y después me dio un beso casto en la mejilla. Soltó mi cabello y me giró, quedando frente a frente. Me miró unos segundos a los ojos y después me estrechó contra su pecho, rodeándome con sus fuertes brazos. Me estaba abrazando.
Esto estaba mal. Era algo enfermo, primero me agredía y ahora me abrazaba, no estaba bien. Había algo mal en él, pero también en mí, así que tal vez no éramos tan diferentes, tal vez no éramos tan incompatibles.
-¿Ves lo fácil que fue? –preguntó lentamente. –Si no fueras tan terca y tonta no la pasarías tan mal, Marissa.
Yo asentí contra su hombro. Las lágrimas volvieron a inundar mis ojos cuando distinguí un perfume barato en su playera, un perfume barato de mujer, de Selena.
Él noto mis lágrimas humedecer su hombro, pero no dijo nada, tan sólo siguió acariciando mi espalda y cintura. No le importaba.
Levantó mi rostro y me besó suavemente, pero yo no quería besarlo, no después de que él había besado a Selena. Así que giré el rostro y él se tensó, pero no hizo nada, tan sólo se puso de pie y salió de mi habitación hacía su balcón.
***
-¿Lloraste? ¿Por qué? -preguntó Gaby confundida desde California.
-Gaby... él en verdad me gusta.
Hubo un largo silencio en la línea. ¡Lo sabía! Ni siquiera Gaby sería capaz de entenderlo. Ahora la vergüenza llenaba mi cuerpo, mi mejor amiga sabía que me gustaba un vago.
Escuché una risita al otro lado de la línea. Frunci el ceño.
-Todo esto es muy cliché, Marissa. La chica buena, el chico malo. Se besan... Bueno, de acuerdo, tal vez no es tan cliché, recordando que Justin es en verdad malo. -se estremeció con sus propias palabras y después volvió a reír.
-¡Calla! No lo es. Sólo creció en el lugar equivocado, rodeado de la gente equivocada.
-Seguro...
Seguí hablando con Gaby un momento más y después me fui a dormir, dormí tranquila, sabía que Justin estaba en su habitación, lejos de ella, aunque también lejos de mí.
***
-Hola, Marissa. -me saludó Tom, un chico al que había conocido la semana pasada.
Había pasado una semana desde la última vez que Justin se me había acercado y mentiría si decía que no me dolía. Incluso preferiría que viniera a lastimarme a que me ignorara. Lo había visto esquivar a Selena en más de una ocasión y ella me odiaba más a cada segundo.
-Hola, Tom. -respondí con más ánimos de lo normal pues Justin acababa de entrar en el pasillo y su mirada había viajado rápidamente hacia nosotros. Era una actitud estúpida e inmadura, pero estaba desesperada.
Tom comenzó a hablar de algo, la verdad no sé que, pero yo no dejaba de sonreir como si fuera lo más interesante y divertido. Justin entrecerró los ojos.
De un momento a otro Justin estaba detrás de Tom.
-No, no quiere. -dijo con voz seria.
¿Qué? ¿Qué no quiero? ¿De que estaba hablando Tom?
Tom abrió mucho los ojos y se giró lentamente, cuando vio a Justin se puso pálido.
-Cobra... yo... yo creía que estaba libre. Lo siento. -tartamudeó.
-Pues no lo está. Ella está conmigo, ahora sal de mi vista o te mataré. -dijo decidido y ambos, Tom y yo, supimos que hablaba en serio.
Tom salió corriendo y sé que debí hacer lo mismo, pero estaba demasiado feliz porque al fin se me había acercado. Me aterró y me encantó lo mucho que me gusto como sonó ese "Ella está conmigo".
-Veo que no puedes controlarte, eres como una perra en celo. -dijo bruscamente en voz baja, aunque no importaba porque ya todos se habían ido.
Me hirió y me dieron ganas de patearlo, de gritarle, de llorar; pero no quería hacerlo enojar de nuevo, no quería que se volviera a alejar.
-Lo siento. -susurré.
Él sólo rodó los ojos, algo que nunca le había visto hacer. Parecía ansioso. Si no lo conociera diría que estaba nervioso. ¿Pero de qué podría ponerse nervioso él?
-Sí, bueno. Si tú no te controlas, lo haré yo. Hablaba en serio con Tom, Marissa. Ahora estás conmigo. -sentenció mirando a lo lejos.
Y después se marchó.
Y yo pude morir ahí mismo de la felicidad.
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Hey! Chicas siento la espera, sé que debía ponerlo ayer, pero WP no me dejaba hacer nada, ni votar, ni comentar, ni publicar://////////
En fin, aquí está el capítulo:3 Ojalá les guste, la trama comienza apenas, les advierto que Zayn saldrás en cualquier momento así que deben estar atentas:3
Ahora, El siguiente capitulo será Justin's POV, para que entiendan porqué le dijo eso a Marissa y así, no piensen que ya cambio, se volvió bueno y se enamoró y eso, no! Creo que es peor xD
En fin, gracias por lee.
En el próximo capítulo se decide algo importante:33
Estrellita si te gustó.
Comenta y dame tu opinión.
Recomiendame:33 Me gustaría tener más lectoras xD
Pasense por mi otra nove WILD:3
Graciass!
Love, Valeria.